14.05.2013 Views

Versión completa en pdf - IES La Arboleda

Versión completa en pdf - IES La Arboleda

Versión completa en pdf - IES La Arboleda

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

24<br />

OJAS PERENNES<br />

A esta lechuza no la ha desori<strong>en</strong>tado un inesperado<br />

eclipse de luna, tampoco se ha equivocado de rama... Habíamos<br />

quedado que se trataba de recordar hojas per<strong>en</strong>nes, por<br />

tanto brillantes y de pl<strong>en</strong>a actualidad ¿no? Pues reproducimos<br />

aquí fragm<strong>en</strong>tos de una obra que ha inspirado a los preclaros<br />

ejecutivos de una productora de televisión. Hablemos<br />

de Gran Hermano y las telepantallas.<br />

Por alguna razón la telepantalla del cuarto de<br />

estar se <strong>en</strong>contraba <strong>en</strong> una posición insólita. En vez de<br />

hallarse colocada, como era normal, <strong>en</strong> la pared del fondo,<br />

desde donde podría dominar toda la habitación, estaba<br />

<strong>en</strong> la pared más larga, fr<strong>en</strong>te a la v<strong>en</strong>tana. A un lado<br />

de ella había una alcoba que ap<strong>en</strong>as t<strong>en</strong>ía fondo, <strong>en</strong> la<br />

que se había instalado ahora Winston. Era un hueco que,<br />

al ser construido el edificio, habría sido calculado seguram<strong>en</strong>te<br />

para alac<strong>en</strong>a o biblioteca. S<strong>en</strong>tado <strong>en</strong> aquel hueco<br />

y situándose lo más d<strong>en</strong>tro posible, Winston podía mant<strong>en</strong>erse<br />

fuera del alcance de la telepantalla <strong>en</strong> cuanto a la<br />

visualidad, ya que no podía evitar que oyera sus ruidos.<br />

En parte, fue la misma distribución insólita del cuarto lo<br />

que le indujo a lo que ahora se disponía a hacer.<br />

[...]<br />

<strong>La</strong> telepantalla emitía <strong>en</strong> aquel instante un prolongado<br />

silbido que partía el tímpano y que continuaba<br />

<strong>en</strong> la misma nota treinta segundos. Eran las cero—<br />

siete—quince, la hora de levantarse para los oficinistas.<br />

Winston se echó abajo de la cama desnudo porque los<br />

miembros del Partido Exterior recibían sólo tres mil cupones<br />

para vestim<strong>en</strong>ta durante el año y un pijama necesitaba<br />

seisci<strong>en</strong>tos cupones— y se puso un sucio singlet y<br />

unos shorts que estaban sobre una silla. D<strong>en</strong>tro de tres<br />

minutos empezarían las Sacudidas Físicas. Inmediata-<br />

George Orwell, es el seudónimo<br />

de Eric Arthur Blair (1903-1950),<br />

escritor británico políticam<strong>en</strong>te comprometido<br />

que ofreció un brillante y<br />

apasionado retrato de su vida y su<br />

época. Su cond<strong>en</strong>a de la sociedad totalitaria<br />

queda brillantem<strong>en</strong>te plasmada<br />

<strong>en</strong> una ing<strong>en</strong>iosa fábula de carácter<br />

alegórico, Rebelión <strong>en</strong> la granja<br />

(1945), basada <strong>en</strong> la traición de Stalin<br />

a la Revolución Rusa, así como <strong>en</strong> la<br />

novela satírica 1984 (1949). Esta última<br />

ofrece una descripción aterradora<br />

de la vida bajo la vigilancia constante<br />

del “Gran Hermano”.<br />

GRAN HERMANO<br />

1984 sitúa su acción <strong>en</strong> un<br />

estado totalitario llamado Oceanía, el<br />

cual ha sido implantado tras una revolución<br />

de la población contra el sistema<br />

capitalista. Dicho estado es gobernado<br />

por un único partido, cuya ideología<br />

se d<strong>en</strong>o mina I NGSOC<br />

(Socialismo Inglés). Éste ejerce un<br />

control absoluto sobre sus súbditos a<br />

través de diversos instrum<strong>en</strong>tos de<br />

control y sobre los aspectos que conciern<strong>en</strong><br />

a las personas, tales como su<br />

pasado, pres<strong>en</strong>te y futuro. En consecu<strong>en</strong>cia,<br />

dicho nivel de control ha acabado<br />

con asomo alguno de libertad y<br />

Por<br />

<strong>La</strong> lechuza de Minerva<br />

m<strong>en</strong>te le <strong>en</strong>tró el ataque de tos habitual <strong>en</strong> él <strong>en</strong> cuanto<br />

se despertaba. Vació tanto sus pulmones que, para volver<br />

a respirar, tuvo que t<strong>en</strong>derse de espaldas abri<strong>en</strong>do y<br />

cerrando la boca repetidas veces y <strong>en</strong> rápida sucesión.<br />

Con el esfuerzo de la tos se le hinchaban las v<strong>en</strong>as y sus<br />

varices le habían empezado a escocer.<br />

¡Grupo de treinta a cuar<strong>en</strong>ta! —ladró una p<strong>en</strong>etrante voz<br />

de mujer—.¡Grupo de treinta a cuar<strong>en</strong>ta! Ocupad vuestros<br />

sitios, por favor. Winston se colocó de un salto a la<br />

vista de la telepantalla, <strong>en</strong> la cual había aparecido ya la<br />

imag<strong>en</strong> de una mujer más bi<strong>en</strong> jov<strong>en</strong>, musculoso y de<br />

facciones duras, vestida con una túnica y calzando sandalias<br />

de gimnasia.<br />

—¡Doblad y ext<strong>en</strong>ded los brazos! —gritó—. ¡Contad a la<br />

vez que yo! ¡Uno, dos, tres, cuatro! ¡Uno, dos, tres, cuatro!<br />

¡Vamos, camaradas, un poco de vida <strong>en</strong> lo que<br />

hacéis! ¡Uno, dos, tres, cuatro! ¡Uno, dos, tres, cuatro! ...<br />

[...]<br />

Con este fondo se puede deducir la estructura<br />

g<strong>en</strong>eral de la sociedad de Oceanía. En el vértice de la<br />

pirámide está el Gran Hermano. Éste es infalible v todopoderoso.<br />

Todo triunfo, todo descubrimi<strong>en</strong>to ci<strong>en</strong>tífico,<br />

toda sabiduría, toda felicidad, toda virtud, se considera<br />

que procede directam<strong>en</strong>te de su inspiración y de su poder.<br />

Nadie ha visto nunca al Gran Hermano. Es una cara<br />

<strong>en</strong> los carteles, una voz <strong>en</strong> la telepantalla. Podemos estar<br />

seguros de que nunca morirá y no hay manera de saber<br />

cuándo nació. El Gran Hermano es la concreción con que<br />

el Partido se pres<strong>en</strong>ta al mundo. Su función es actuar<br />

como punto de mira para todo amor, miedo o respeto,<br />

emociones que se si<strong>en</strong>t<strong>en</strong> con mucha mayor facilidad<br />

hacia un individuo que hacia una organización.<br />

de verdadero afecto humano.<br />

Geroge Orwell, 1984<br />

Winston Smith, el personaje<br />

principal de la novela, a pesar de ser<br />

miembro del partido, es disid<strong>en</strong>te con<br />

la doctrina del partido, toma conci<strong>en</strong>cia<br />

sobre la manipulación de la cual es<br />

víctima. Esto provoca <strong>en</strong> él ansias de<br />

conocer el modo de vida exist<strong>en</strong>te antes<br />

de la revolución, mom<strong>en</strong>to tras el<br />

cual el “Gran Hermano” (concreción<br />

que el partido pres<strong>en</strong>ta al mundo)<br />

quiere mant<strong>en</strong>er el poder a cualquier<br />

precio. Éste sacrifica todo valor humano<br />

con el fin de poseer el poder absoluto.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!