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AÑO JUBILAR PAULINO

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<strong>AÑO</strong> LXVIII<br />

NUM. 3.420<br />

28 JUNIO 2008<br />

1,80 €<br />

<strong>AÑO</strong> <strong>JUBILAR</strong><br />

<strong>PAULINO</strong>


■ Número: 3.420<br />

■ 28 de junio de 2008<br />

■ Páginas de 949 a 988<br />

La sacristía mayor de la catedral de Toledo conserva el<br />

extraordinario lienzo de El Greco que, gracias a la gentileza del<br />

Cabildo primado y de nuestro corresponsal en esta ciudad, aparece<br />

como portada del presente número de ECCLESIA. Es una recreación<br />

de San Pablo, el apóstol de las gentes, maestro y pastor siempre<br />

extraordinario y actual. La conmemoración, desde hoy mismo,<br />

del segundo milenario de su nacimiento nos trae y regala,<br />

por iniciativa de Benedicto XVI, un Año Jubilar Paulino, que<br />

supondrá, sin duda, una bocanada de aire fresco, un soplo<br />

y «kairós» de Espíritu para toda nuestra Iglesia.<br />

DIRECTOR:<br />

Jesús DE LAS HERAS MUELA<br />

REDACTOR JEFE:<br />

Miguel DE SANTIAGO<br />

REDACTORES Y SECCIONES:<br />

Angel Arriví (España), José Ignacio Rivarés (Mundo y Latinoamérica),<br />

Miguel de Santiago (Cultura y Diagramación),<br />

Patricia Basterrechea (Secretaría de Dirección y Documentalista),<br />

Julio Rodríguez y Pablo Herrero (Traducciones y Documentación).<br />

ADMINISTRACION, PUBLICIDAD Y SUSCRIPCIONES:<br />

Antonio Cortés, José Díaz, María José Pariente y Valentín Sánchez.<br />

COLABORADORES Y CORRESPONSALES:<br />

M.A. Agea, J. Aymar, L. Azorín, A. Botías, Mª T. Compte, J.M. Coviella,<br />

J.E. Díaz, J. Díaz-Bernardo, J. Espeja, C. Fernández, G. Ferrer, P. Fuertes,<br />

M. García, A. Gil Moreno, E.T. Gil de Muro, J.Mª Gil Tamayo, A. Güemes,<br />

J.J. Iriarte, J.L. Larrabe, J.J. Montes, J. Moreno, M. Muñoz, J.R. Navarro,<br />

J.M. Pérez Charlín, R. Pestaña, J.F. Riaza, H. Riegas, J. Velasco, G. Vera.<br />

DOMICILIO: C/. Alfonso XI, 4, 4.º — 28014 Madrid<br />

TELEFONOS: Redacción: 91 531 54 07 y 91 531 54 08<br />

Administración, Publicidad y Suscripciones: 91 531 54 00<br />

y 91 531 54 09<br />

Telefax (todas las secciones): 91 522 55 61<br />

INTERNET: www.revistaecclesia.com<br />

CORREO ELECTRÓNICO:<br />

Redacción: ecclesia@planalfa.es<br />

Administración, Publicidad y Suscripciones:<br />

ecclesia_admon@planalfa.es<br />

IMPRIME: Gráficas Arias Montano, S. A. Móstoles (Madrid)<br />

ISSN 0012-9038 Depósito Legal: M-2.095-1958<br />

TARIFAS:<br />

España: 83,50 E al año.<br />

Europa: 113,50 E.<br />

Resto de países: 144 E.<br />

Número atrasado: 1,95 E (más gastos de envío).<br />

951<br />

Editorial<br />

La libertad religiosa no colisiona con otros derechos fundamentales,<br />

sino que los protege y potencia ....................................................... 5<br />

Opinión<br />

Pablo: apóstol, pastor y maestro, por Tomás Otero Lázaro ............... 6<br />

España<br />

Covadonga acoge el encuentro anual de los secretarios de<br />

episcopados europeos ......................................................................................................................... 8<br />

La nunciatura en España en el último medio siglo ......................................... 9<br />

Nota final de la CCIX reunión de la Comisión Permanente de la<br />

Conferencia Episcopal Española .......................................................................................... 10<br />

Miguel Simón Ferrandis, vicario general de Segorbe-Castellón 12<br />

Manifiesto de Profesionales Cristianos de Acción Católica en su<br />

Sesión de Estudios anual ................................................................................................................. 13<br />

Cultura<br />

Actividades para el verano (II) ............................................................................................................... 15<br />

Reseñas de novedades editoriales ................................................................................................. 16<br />

Mundo<br />

Nuevo patriarca latino en Jerusalén, por Javier Velasco Yeregui ......... 17<br />

Congreso en Kenia sobre diálogo interreligioso, por Juan Manuel<br />

Pérez Charlín ......................................................................................................................................... 18<br />

XIV Encuentro del Comité Islámico-Católico ............................................................... 18<br />

El Parlamento Europeo aprueba la directiva sobre Retorno de la<br />

U.E., por José Ignacio Rivarés ..................................................................................................... 19<br />

Salvatore Fisichella, presidente de la Academia Pontificia para la<br />

Vida ....................................................................................................................................................................................... 19<br />

Vaticano<br />

De Quebec 2008 a Berlín 2012, por Miguel Angel Agea ........................ 20<br />

Reportaje<br />

Pablo de Tarso: heraldo de Cristo, apóstol de los gentiles, por<br />

José Barros Guede .......................................................................................................................................... 22<br />

Documentación<br />

Decreto de la Penitenciaría Apostólica por el que se concede<br />

indulgencias especiales con ocasión del bimilenario del nacimiento<br />

de San Pablo .......................................................................................................................... 25<br />

Mensaje del Episcopado venezolano sobre el Año Paulino convocado<br />

por Benedicto XVI ............................................................................................................ 26<br />

Discurso de Benedicto XVI al nuevo embajador de Grecia ante<br />

la Santa Sede, en la presentación de Cartas credenciales ...... 28<br />

Discurso a los obispos de la Conferencisa Episcopal de Malasia-Singapur-Brunéi<br />

con ocasión de su visita «ad limina» .... 29<br />

Discurso a la Plenaria del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso<br />

................................................................................................................................................................ 31<br />

Discurso a los participantes en el VI Simposio Europeo de Docentes<br />

Universitarios ................................................................................................................................ 32<br />

Audiencia general del miércoles 18 de junio de 2008 ............................... 34<br />

Colaboración<br />

Pablo de Tarso: fuerza de Dios, por Manuel Pérez Tendero .............. 36<br />

El Domingo, Pan de la Palabra<br />

Una oración, por Jesús Francisco Riaza ................................................................................. 37<br />

La firma<br />

Las miembras y los miembros, por Lourdes Azorín Ortega .............. 38<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 3


editorial<br />

953<br />

Editorial<br />

La libertad religiosa no colisiona<br />

con otros derechos fundamentales,...<br />

En nuestro editorial del número 3.414, correspondiente al pasado 17 de mayo, manifestábamos nuestra<br />

sorpresa, cautela y oposición razonada ante el deseo del Gobierno español de reformar la vigente ley Orgánica<br />

de Libertad Religiosa. Cuarenta días después del anuncio de este proyecto, la vicepresidenta primera<br />

del Gobierno ha insistido en una comparecencia en el Senado en la voluntad gubernamental de llevar a<br />

cabo esta iniciativa. Sus nuevos y ambiguos argumentos siguen sin convencer y plantean la duda objetiva<br />

sobre sus intenciones reales. Hablaba la señora Fernández de la Vega de adaptar la ley de 1980 a la nueva<br />

realidad de la sociedad española a fin de incorporar a la normativa legal la jurisprudencia del Tribunal<br />

Constitucional sobre la libertad de conciencia. Asimismo la vicepresidenta deslizaba otras preocupantes<br />

afirmaciones a propósito de la posible colisión entre libertad religiosa y otros derechos fundamentales como<br />

los de la vida, la educación y el trabajo. Finalmente —y quizás en gratuito ejercicio de «inocencia» o, mejor<br />

dicho, de demagogia— añadía que esta reforma no pretende ir contra nadie y que reforzará el artículo 16<br />

de la Constitución, especialmente en su afirmación de que «ninguna confesión tendrá carácter estatal».<br />

Por supuesto, que también nosotros apoyamos el artículo 16 de la Constitución española, en su totalidad<br />

y en sus partes. Por supuesto, que la Iglesia católica no pretende privilegios ni busca la confesionalidad,<br />

formal o larvada. Pero lo que no entiende la Iglesia, lo que no entendemos millones de ciudadanos, lo<br />

que no se ajusta a la realidad es la afirmación de que la libertad religiosa puede entrar en conflicto con<br />

otros derechos fundamentales. Es al contrario: cuanto más se tutela y promociona la libertad religiosa, mejor<br />

se fundamentan y se desarrollan el resto de derechos. No puede existir contradicción entre estos derechos<br />

fundamentales porque todos ellos están inscritos en la naturaleza de la persona y porque son anteriores<br />

a cualquier configuración política y estatal. El Estado ha de estar al servicio de la persona y de su sagrada<br />

e inviolable dignidad, cuyo corazón lo constituye precisamente la libertad religiosa.<br />

...sino que los protege y potencia<br />

Así lo entendió la vigente Ley Orgánica de Libertad Religiosa de 5 de julio de 1980. Remitimos a su lectura<br />

completa, serena y sin prejuicios. Y emplazamos, por ello, a quienes piensen lo contrario a que demuestren,<br />

desde el texto legal y desde su aplicación en estas tres últimas décadas, dónde está su concepción<br />

timorata de la pluralidad religiosa, donde aparecen desdibujados los otros derechos en favor del derecho a<br />

la libertad religiosa, dónde está su implícito o fáctico confesionalismo católico, dónde está la necesidad de<br />

su reforma, máxime la necesidad de su reforma desde los presupuestos señalados por el Gobierno español<br />

y bien aireados por sus terminales mediáticas y por las bases más radicalizadas e ideologizadas del partido<br />

político que lo sustenta.<br />

Entendamos bien el derecho y los derechos. Y respetémoslos siempre. Los Estados democráticos se basan<br />

en los derechos humanos, en los derechos fundamentales. Y la libertad religiosa es derecho humano y derecho<br />

fundamental. Entendamos y leamos también correctamente la ley, en este caso la Ley Orgánica de Libertad<br />

Religiosa. Leamos, por ejemplo, su artículo segundo: «La libertad religiosa y de culto garantizada por<br />

la Constitución comprende, con la consiguiente inmunidad de coacción, el derecho de toda persona a profesar<br />

las creencias religiosas que libremente elija o no profesar ninguna; cambiar de confesión o abandonar<br />

la que tenía; manifestar libremente sus propias creencias religiosas o la ausencia de las mismas, o abstenerse<br />

de declarar sobre ellas».<br />

¿Dónde colisionan libertad religiosa y libertad de conciencia? ¿Dónde está el problema? Mucho nos tememos<br />

que el problema para nuestros gobernantes y otros líderes políticos —como ya apuntábamos en<br />

nuestro editorial del 17 de mayo— en su escaso aprecio y valoración a la libertad religiosa, en verla con recelo<br />

y bajo sospecha y, en definitiva, buscar la manera de limitarla, dificultarla y, en suma, de reducir al máximo<br />

su presencia pública. Si esto fuera así, entonces sí que podrían peligrar también los otros derechos fundamentales.<br />

Y en la tarea de oposición a estas pretensiones no solo la Iglesia católica sino todas las demás<br />

confesiones religiosas deberían ofrecer una respuesta y una oposición conjuntas. Ojalá, pues, que estemos<br />

todavía a tiempo para evitar la grave arbitrariedad y el error de imprevisibles consecuencias, que se derivarían<br />

de una reforma sectaria, innecesaria y restrictiva de la Ley de Libertad Religiosa. ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

5


Opinión<br />

Pablo: apóstol, pastor y maestro<br />

Tomás Otero Lázaro<br />

Profesor de Escritos Paulinos en la Facultad de Teología del Norte de España<br />

Se le conoce como Pablo de Tarso,<br />

pero bien podría ser llamado Pablo<br />

de Cristo. En su vida mucho<br />

más determinante que su lugar de nacimiento<br />

y, en general, su origen —<br />

judío nacido en una ciudad de cultura<br />

griega— fue su encuentro con<br />

Cristo resucitado en el camino de<br />

Damasco. La experiencia fue ciertamente<br />

como un nuevo nacimiento,<br />

de modo que, a partir de<br />

aquel momento ya no quiso vivir<br />

sino en Cristo y para Cristo. Cristo<br />

fue ya todo para Pablo y Pablo fue<br />

todo él para Cristo. Atrás quedó su<br />

pasado como judío del grupo de<br />

los fariseos que, movido por el<br />

celo de la Ley, había perseguido a<br />

los que confesaban que Jesús de<br />

Nazaret era el Mesías a quien Dios<br />

había resucitado de entre los<br />

muertos. Conocer a Cristo era conocerse<br />

a sí mismo y a los demás,<br />

a sus conciudadanos judíos y a los<br />

gentiles paganos, al mundo y a la<br />

historia y a Dios mismo de una<br />

manera nueva.<br />

Llamado por Dios<br />

En la experiencia en el camino<br />

de Damasco, a la que nos referimos<br />

habitualmente como «la conversión<br />

de Pablo», si bien él mismo<br />

la describe más bien en términos de<br />

vocación (cf. Gal 1, 15-16), recibió una<br />

misión específica: la de apóstol de las<br />

gentes. El judío celoso de la Ley, que<br />

perseguía a los primeros cristianos<br />

porque, acogiendo a los paganos, ponían<br />

en peligro la identidad y privilegios<br />

religiosos del pueblo de Israel, es<br />

elegido y enviado a anunciar a las naciones<br />

que Dios no hace distinciones<br />

entre judíos y gentiles y que a todos<br />

llama a la salvación en Cristo. Con to-<br />

das sus fuerzas, con todo su ser, el antiguo<br />

perseguidor de los cristianos se<br />

entregó al servicio de la misión recibida.<br />

En su desempeño podemos distin-<br />

«La conversión de San Pablo», de Caravaggio.<br />

guir tres facetas: la del apóstol que<br />

proclama el evangelio allí donde el<br />

nombre de Cristo todavía no había<br />

sido anunciado; la del pastor que cuida,<br />

dirige y anima la vida cristiana de<br />

las comunidades que ha fundado; la<br />

del maestro que, al hilo de su actividad<br />

misionera y pastoral, profundiza en el<br />

mensaje del evangelio.<br />

Apóstol de los gentiles, como misionero,<br />

la actividad desplegada por<br />

Pablo fue inmensa. Recorrió, en las<br />

6 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

condiciones de aquellos tiempos, miles<br />

de kilómetros por Palestina, Siria,<br />

Asia Menor, Macedonia, Grecia, Italia;<br />

probablemente llegó también a España.<br />

En el libro de los Hechos de<br />

los Apóstoles, ofrece Lucas una<br />

información bastante amplia de<br />

sus viajes misioneros. Pero incluso<br />

más interesante que el aspecto<br />

cuantitativo de su actividad es el<br />

cualitativo, la forma en que ejerce<br />

su apostolado. Y lo primero que<br />

llama la atención es la estrecha<br />

relación que existe entre el mensaje<br />

que anuncia y su propia persona<br />

y vida. El evangelio, que es<br />

fuerza de Dios para la salvación<br />

de todo el que cree (cf. Rom 1, 16),<br />

no sólo se manifiesta en su palabra,<br />

sino también en su vida. El<br />

evangelio se apodera del apóstol<br />

en tal medida y el apóstol se identifica<br />

de tal manera con el evangelio<br />

que la persona y la vida del<br />

mensajero se convierten en parte<br />

del mensaje.<br />

La identificación entre mensajero<br />

y mensaje es posible porque el<br />

contenido esencial del evangelio<br />

no es una doctrina teórica, sino<br />

una persona: Jesús, Hijo de Dios.<br />

Jesucristo muerto y resucitado es<br />

el evangelio que Pablo predica y<br />

vive, o, por mejor decir, por el que<br />

es vivido: «ya no vivo yo, sino que<br />

Cristo vive en mí» (Gal 2, 20). Porque es<br />

vivida por Cristo, la vida de Pablo es<br />

también evangelio; en ella se prolonga<br />

el misterio de la muerte y resurrección<br />

de Cristo y se manifiesta su eficacia<br />

salvadora. Sus sufrimientos por causa<br />

del evangelio son participación en la<br />

muerte de Cristo; el éxito de su ministerio<br />

—la salvación que por medio de<br />

su predicación alcanza a los que creen—<br />

manifiesta la victoria de la resurrección.<br />

954


Puesto que el evangelio es proclamación<br />

de la sabiduría y el poder de<br />

Dios que se han manifestado en la<br />

cruz de Cristo, escándalo y necedad a<br />

los ojos del mundo, también la persona<br />

y la vida del apóstol reflejan esta realidad.<br />

Él es débil y despreciable a los<br />

ojos de los hombres, pero en su ministerio<br />

actúa el poder de Dios. Y así queda<br />

patente que la salvación es obra de<br />

Dios por medio de Jesucristo y no se<br />

debe a las cualidades y méritos humanos,<br />

pues los apóstoles tan sólo son<br />

«vasijas de barro», instrumentos frágiles<br />

y llenos de deficiencias, para que se<br />

vea que «una fuerza tan extraordinaria<br />

es de Dios y no de nosotros» (2 Cor 4,<br />

7). Por eso Pablo, que poseía abundantes<br />

cualidades humanas de las que<br />

enorgullecerse, no presume de ellas,<br />

sino de sus debilidades y sufrimientos,<br />

porque en ellos se manifiestan la gracia<br />

y el poder de Dios.<br />

Otro rasgo característico de la manera<br />

en que Pablo ejerce la misión y<br />

que le distingue de otros evangelizadores<br />

de la primera hora es la renuncia<br />

al derecho de ser mantenido por los<br />

creyentes. Prefiere trabajar con sus<br />

propias manos para ganarse el sustento,<br />

manifestando así la gratuidad del<br />

evangelio y asegurando su libertad<br />

como apóstol: no dependiendo económicamente<br />

de nadie es libre de todos,<br />

y nadie, sino Cristo, tiene derechos sobre<br />

él. Libre de dependencias humanas,<br />

puede hacerse esclavo de todos<br />

«para salvar a toda costa a algunos» (1<br />

Cor 9, 22). La libertad no es un fin en sí<br />

misma, sino el medio para servir más<br />

plenamente al evangelio y mejor trabajar<br />

por la salvación de los hombres.<br />

Pastor de las comunidades<br />

cristianas<br />

Fruto de su actividad misionera es<br />

la fundación de iglesias en distintas<br />

ciudades, de las que Pablo se siente<br />

responsable. Cuando puede estar físicamente<br />

presente, ejerce su cuidado<br />

pastoral directamente. Pero el número<br />

de comunidades fundadas y el afán<br />

de predicar el evangelio en nuevos lugares<br />

hacen que eso no sea habitualmente<br />

posible. Recurre entonces a la<br />

comunicación por escrito. Para ejercer<br />

955<br />

su ministerio pastoral desde la distancia<br />

Pablo se hizo escritor. En el Nuevo<br />

Testamento se conservan trece cartas<br />

con su nombre, aunque los investigadores<br />

pongan en duda que algunas<br />

de ellas procedan directamente del<br />

apóstol y las atribuyen a discípulos<br />

suyos.<br />

Más que el anuncio primero que del<br />

evangelio hacía Pablo cuando predicaba<br />

a quienes no eran creyentes, en las<br />

cartas encontramos la enseñanza, catequesis<br />

e instrucción que dirige a los<br />

que ya han llegado a ser cristianos,<br />

forman parte de una comunidad eclesial,<br />

tienen un bagaje básico de conocimiento<br />

del mensaje evangélico y<br />

quieren progresar en una vida coherente<br />

con la fe y el amor cristianos<br />

dentro de la propia comunidad y con<br />

relación al mundo de fuera. Para fortalecer<br />

su fe, orientar sus pasos, corregir<br />

los errores, llamar la atención sobre<br />

conductas incoherentes, animar a perseverar<br />

en la verdad y el bien les escribe<br />

Pablo, teniendo muy en cuenta las<br />

circunstancias concretas de la comunidad<br />

a la que dirige cada una de las<br />

cartas. En este cuidado pastoral que<br />

ejerce a través de los escritos actúa<br />

como educador de la fe, como gobernante<br />

y guía de la comunidad y también,<br />

aunque sea un aspecto menos<br />

destacado, como animador y responsable<br />

de la actividad cultual.<br />

Maestro de la fe<br />

El ejercicio de la actividad apostólica<br />

y pastoral —las dificultades que surgen,<br />

las cuestiones que le plantean y se<br />

plantea, la oposición que encuentra—<br />

obligó a Pablo a reflexionar y profundizar<br />

en el mensaje cristiano. Aparece<br />

así el Pablo «teólogo», el maestro insigne<br />

que interpretó la fe. Como resultado<br />

de su reflexión encontramos en las<br />

cartas un cuerpo de doctrina que, en<br />

gran parte, es común con la de los<br />

otros escritos del Nuevo Testamento,<br />

pero que tiene también rasgos propios,<br />

desarrollos originales y acentos<br />

específicos que permiten hablar de una<br />

«teología paulina», si bien entre los especialistas<br />

sea hoy discutido si existe<br />

realmente una «teología de Pablo».<br />

En cualquier caso, las cartas revelan<br />

la comprensión del evangelio por par-<br />

Opinión<br />

te de Pablo. El centro y núcleo de este<br />

evangelio es la persona de Jesucristo,<br />

muerto y resucitado, en quien Dios ha<br />

cumplido las promesas hechas en el<br />

Antiguo Testamento y ha llevado a plenitud<br />

su designio de salvación. Con<br />

Cristo ha llegado el tiempo definitivo,<br />

el cumplimiento escatológico, la nueva<br />

creación, y los creyentes, por la acción<br />

del Espíritu Santo, participan ya del<br />

mundo nuevo, aunque vivan todavía<br />

en este tiempo y en este mundo. Están<br />

«salvados en esperanza» (Rom 8, 24),<br />

esperanza que se verá cumplida cuando<br />

el Señor vuelva y los muertos resuciten.<br />

Jesucristo, por su muerte en la cruz,<br />

es el único mediador de la salvación y<br />

el nuevo Adán que da origen a una<br />

humanidad renovada, libre de la esclavitud<br />

del pecado y de la muerte y destinada<br />

a participar en la gloria de Dios.<br />

Esta salvación —insiste San Pablo en<br />

polémica con los que quieren imponer<br />

la observancia de la Ley judía a los<br />

convertidos de la gentilidad— es pura<br />

gracia de Dios. No se debe al mérito de<br />

los hombres, que, a causa del pecado,<br />

sólo podían merecer la condena en el<br />

juicio de Dios. La salvación no puede<br />

ser ganada por el hombre, por su esfuerzo<br />

y sus méritos, cumpliendo «las<br />

obras de la Ley». La salvación ha de ser<br />

acogida como don gratuito. Esto significa<br />

la fe: acoger como don gratuito la<br />

salvación de Dios en Cristo, bien entendido<br />

que la fe es adhesión personal<br />

a Cristo, comunión con él, participación,<br />

por el don del Espíritu, en su condición<br />

de Hijo. Unido a Cristo, el creyente<br />

está unido a su Cuerpo, que es la<br />

Iglesia, pueblo de la nueva alianza y<br />

templo donde habita Dios, y está llamado<br />

a vivir de acuerdo con su nueva<br />

condición, imitando a Cristo y cumpliendo<br />

la voluntad del Padre, que se<br />

resume en el precepto del amor: «la caridad<br />

es la ley en su plenitud» (Rom 13,<br />

10).<br />

Como apóstol, como pastor, como<br />

maestro, Pablo de Tarso, Pablo de<br />

Cristo, sigue siendo una figura de plena<br />

actualidad y un luminoso punto de<br />

referencia para la Iglesia del siglo XXI.<br />

Así lo ha entendido Benedicto XVI al<br />

convocar el Año Santo Paulino, invitándonos<br />

a conocer mejor y aprovechar<br />

más el ejemplo y la enseñanza del<br />

gran apóstol de las gentes. ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 7


España<br />

Covadonga acoge el encuentro anual de<br />

los secretarios de los episcopados europeos<br />

Los participantes reflexionan sobre los retos de la actual situación religiosa en Europa<br />

Los secretarios generales de las Conferencias<br />

Episcopales de Europa se<br />

reúnen del 26 al 30 de junio en Covadonga<br />

para celebrar su encuentro<br />

anual. En él participan los secretarios de<br />

las siguientes Conferencias Episcopales:<br />

Albania, Bielorrusia, Bosnia y Herzegovina,<br />

Bulgaria, República Checa, Croacia,<br />

Francia, Alemania, Inglaterra y Gales, Italia,<br />

Lituania, Luxemburgo, Malta, Países<br />

Bajos, Polonia, Portugal, Rumanía, Rusia,<br />

Escandinavia, San Cirilo y San Metodio,<br />

Escocia, Eslovaquia, Eslovenia, Suiza, Turquía,<br />

Hungría, Ucrania (bizantinos) y<br />

Ucrania (latinos). Participa también el arzobispo<br />

de Oviedo, monseñor Carlos<br />

Osoro Sierra. El encuentro está promovido<br />

por el Consejo de las Conferencias<br />

Episcopales de Europa (CCEE) y se desarrolla<br />

por invitación de la Conferencia<br />

Episcopal Española y de su secretario general,<br />

monseñor Juan Antonio Martínez<br />

Camino, obispo auxiliar de Madrid.<br />

Basílica del Santuario de Covadonga.<br />

El tema principal que se aborda, y que<br />

da título al encuentro, es «La situación<br />

religiosa en Europa: entre la secularización<br />

y las preguntas sobre el sentido y la<br />

espiritualidad». Además, la agenda del<br />

encuentro incluye los siguientes temas<br />

de actualidad, particularmente urgentes:<br />

1. Bioética: legalización de la eutanasia<br />

e investigación con células madre<br />

embrionarias.<br />

2. La presencia del Islam en Europa:<br />

se presentará la próxima Conferencia<br />

europea cristiano-musulmana (Malines/Bruselas,<br />

Bélgica, 20-23 de octubre<br />

de 2008), organizada por el CCEE y por<br />

la Conferencia de la Iglesia Europea<br />

(KEK).<br />

3. El diaconado permanente: intercambio<br />

de experiencias.<br />

4. Enseñanza de la religión en Europa:<br />

se presentará la investigación europea<br />

del CCEE sobre la enseñanza de la<br />

religión.<br />

5. La próxima Jornada Mundial de la<br />

Juventud (Sídney, 15-20 de julio de 2008).<br />

6. El Año Paulino (2008-2009).<br />

7. La XII Asamblea General Ordinaria<br />

del Sínodo de los obispos (5-26 de octubre<br />

2008).<br />

Una parte del trabajo se dedica, además,<br />

al intercambio sobre cuestiones relacionadas<br />

con el ecumenismo. En particular,<br />

los participantes evaluarán el proceso<br />

de la Tercera Asamblea Ecuménica<br />

Europea (EEA3), que tuvo lugar el pasado<br />

mes de septiembre en la localidad rumana<br />

de Sibiu, y debatirán sobre sus implicaciones<br />

para el escenario ecuménico<br />

en Europa. Asimismo, se presentará el<br />

programa del primer Fórum Católico-ortodoxo,<br />

que se desarrollará en Trento<br />

(Italia), del 11 al 14 de diciembre de 2008<br />

bajo el título «La familia como bien para<br />

la humanidad».<br />

Al celebrarse el Encuentro en España,<br />

los participantes tienen la oportunidad<br />

de conocer de primera mano información<br />

sobre la situación de la Iglesia cató-<br />

8 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

lica en España y sobre el Año Jubilar de<br />

la Santa Cruz en Oviedo.<br />

El programa de cada día incluye también<br />

diversos momentos de oración y<br />

celebración eucarística, tanto en la basílica<br />

del santuario como en la gruta. El domingo<br />

29 de junio la jornada se desarrolla<br />

Oviedo, donde, junto a la visita a la<br />

ciudad antigua, catedral, Cámara Santa y<br />

monumentos pre-románicos, se celebra,<br />

junto a la comunidad local, la santa misa<br />

del peregrino en la catedral de Oviedo,<br />

con ocasión de la celebración del Año<br />

Jubilar de la Santa Cruz.<br />

«La familia, vida<br />

y esperanza de la humanidad»<br />

En su habitual alocución semanal en<br />

la cadena COPE, el arzobispo de Madrid<br />

y presidente de la Conferencia Episcopal<br />

Española, cardenal Antonio María<br />

Rouco, anunció que el Evangelio de la<br />

Familia y de la Vida van a ser el compromiso<br />

pastoral de la archidiócesis madrileña<br />

para los próximos tres años.<br />

Mientras que «el anuncio y la enseñanza<br />

del Plan de Dios sobre la Familia a<br />

lo largo del primer curso de nuestro Plan<br />

Pastoral» será el objetivo pastoral del primer<br />

curso, el segundo año estará dedicado<br />

«a comprender y a vivir la verdadera<br />

realidad de la familia cristiana en su<br />

ser primigenio y específico de Iglesia doméstica».<br />

El último curso del citado plan<br />

se centrará en la tarea de «ofrecer un testimonio<br />

misionero de la verdad plena y<br />

salvadora del matrimonio y de la familia<br />

cristiana para la sociedad».<br />

«Se trata —señaló Rouco en su alocución—<br />

de un compromiso de vida y acción<br />

pastorales, vinculante para todos<br />

los miembros de la Iglesia diocesana:<br />

sus pastores, sus consagrados, sus fieles<br />

laicos y, especialmente y sobre todo,<br />

para nuestros matrimonios y familias<br />

cristianas». ■<br />

956


La Nunciatura en España<br />

del último medio siglo<br />

Apuntes para la historia en las bodas de oro de la actual sede<br />

de la nunciatura apostólica en España en la avenida de Pío XII de Madrid<br />

La nunciatura apostólica en España<br />

celebra con distintos actos las bodas<br />

de su oro de su actual sede en<br />

la avenida de Pío XII de Madrid. ECCLE-<br />

SIA ha conversado a este propósito con<br />

el historiador Vicente Cárcel Ortí. Según<br />

él, las razones del traslado eran que<br />

el «edificio resultaba insuficiente para las<br />

necesidades de la nunciatura y era un<br />

viejo palacio en el antiguo Madrid. Se<br />

necesitaba un edificio más moderno en<br />

una zona del ensanche de Madrid», en<br />

una calle que fue entonces creada. En el<br />

contexto de su ochenta cumpleaños fue<br />

puesto bajo el nombre del Papa Pío XII.<br />

Hasta entonces y desde el establecimiento<br />

de la nunciatura en España en<br />

1492 con Francisco Desprats como legado<br />

papal, «hubo una sola sede anterior<br />

durante varios siglos en la calle del Nuncio,<br />

número 13. Junto a ella estaba la basílica<br />

pontificia de San Miguel, regentada<br />

por los Redentoristas, considerada la<br />

iglesia de la nunciatura. Tras el traslado,<br />

el viejo edificio de la calle del Nuncio se<br />

puso en venta y pasó a ser propiedad de<br />

la Jurisdicción Eclesiástica Castrense, representada<br />

entonces por el arzobispo titular<br />

de Sión y vicario general castrense,<br />

monseñor Luis Alonso Muñoyerro».<br />

Los nuncios<br />

de la avenida Pío XII<br />

A lo largo de este medio siglo ha habido<br />

siete nuncios apostólicos en la sede<br />

de Pío XII, incluido su actual inquilino,<br />

monseñor Manuel Monteiro de Castro,<br />

que llegó a España en marzo de<br />

2000. El nuncio que inauguró la sede de<br />

la avenida Pío XII fue Ildebrando Antoniutti.<br />

Cuatro años permaneció en esta<br />

sede, más tres previos en la calle Nuncio.<br />

El 19 de marzo de 1962 fue creado cardenal<br />

y dejó España. «Fue un nuncio<br />

—señala Cárcel— muy vinculado al Antiguo<br />

Régimen, admirador de la España<br />

957<br />

Imagen de monseñor Monteiro tomada a la<br />

entrada de la nunciatura.<br />

católica, pues había estado en la zona<br />

nacional como representante de Pío XI<br />

ante Franco entre 1937 y 1938. Fue el<br />

ejecutor fiel del Concordato de 1953: revisión<br />

de los límites diocesanos, cumplimiento<br />

de la disciplina eclesiástica —visita<br />

apostólica de 1956-1957 a los seminarios<br />

diocesanos—, la elección de<br />

obispos de corte tradicional».<br />

A Antoniutti le sucedió en los cinco<br />

años siguientes Antonio Riberi. «Aunque<br />

fue nombrado por Juan XXIII, era<br />

hombre de confianza de Pablo VI y con<br />

él comenzaron la renovación postconciliar<br />

del episcopado y, en 1966, las primeras<br />

jubilaciones de obispos: el cardenal<br />

Herrera, de Málaga y el arzobispo Olachea,<br />

de Valencia. Su brazo derecho en<br />

Madrid fue monseñor Benelli —futuro<br />

sustituto de la secretaría de Estado, cardenal<br />

arzobispo de Florencia y papable<br />

en 1978—, que tuvo problemas con el<br />

Régimen por su orientación democristiana.<br />

Riberi fue creado cardenal en 1967.<br />

Falleció prematuramente poco después,<br />

cuando se rumoreaba su nombramiento<br />

como secretario de Estado».<br />

Luigi Dadaglio es el tercer nuncio de<br />

la avenida Pío XII. «Tuvo una larga nunciatura<br />

desde 1967 hasta 1980; renovó<br />

profundamente el episcopado mediante<br />

España<br />

el nombramiento de numerosos obispos<br />

auxiliares, que no pasaban por el control<br />

previo del Gobierno, y contribuyó a la<br />

consolidación de la Conferencia Episcopal.<br />

Fue ejecutor fiel de la política vaticana<br />

en aras a la Transición y en la medida<br />

que el Régimen se iba extinguiendo. Tuvo<br />

serios conflictos con el Gobierno, en los<br />

años 1973-1975, por el caso Añoveros,<br />

homilías multadas, manifestaciones de<br />

sacerdotes y religiosos contra el Régimen.<br />

Negoció los acuerdos, que se firmaron<br />

en 1976 y 1979 y sustituyeron el<br />

Concordato de 1953».<br />

Antonio Innocenti, que todavía vive<br />

con 94 años, fue nuncio durante cinco<br />

años (1980-1985). «Fueron tiempos de relativa<br />

tranquilidad socio-política gracias a<br />

la primera fase de la Transición política y<br />

al estilo plenamente conciliar de los obispos.<br />

Recibió al Papa Juan Pablo II en su<br />

primera visita a España en 1982». Juan<br />

Pablo II se alojó en la sede de la nunciatura<br />

entonces y en sus otros dos viajes a<br />

Madrid: junio de 1993 y mayo de 2003.<br />

El quinto nuncio de este medio siglo<br />

fue Mario Tagliaferri. «Tuvo una nunciatura<br />

larga, desde 1985 hasta 1995; un<br />

decenio marcado por las primeras tensiones<br />

entre la Jerarquía y los primeros<br />

Gobiernos socialistas que intentaron minar<br />

las tradiciones religiosas de la España<br />

católica con una agresiva política laicista.<br />

Sus negociaciones con los nuevos<br />

gobernantes resultaron muy tensas en<br />

diversos momentos. Hombre austero y<br />

riguroso, fue trasladado a la nunciatura<br />

de París, donde murió en 1999».<br />

«De septiembre de 1995 a febrero de<br />

2000, el cargo fue ocupado por el húngaro<br />

Lajos Kada, el primer nuncio en<br />

España no italiano. Su gestión diplomática<br />

resultó menos conflictiva con las autoridades,<br />

debido al cambio político de<br />

los socialistas a los populares, aunque<br />

no faltaron fricciones por asuntos muy<br />

puntuales. Falleció un año después en su<br />

Hungría natal», ya jubilado. ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 9


España<br />

La Comisión Permanente reafirma<br />

la dimensión evangelizadora de la COPE<br />

Nota final de la CCIX reunión de la Comisión Permanente de la CEE (17-18 de junio de 2008)<br />

La Comisión Permanente de la<br />

Conferencia Episcopal Española<br />

(CEE) celebró su CCIX reunión, en<br />

la Casa de la Iglesia, en Madrid, durante<br />

los días 17 y 18 de junio.<br />

Como es habitual, las Comisiones<br />

Episcopales informaron sobre el cumplimiento<br />

del Plan Pastoral y los obispos<br />

han estudiado distintos asuntos<br />

de seguimiento y temas económicos.<br />

Entre ellos, se revisaron los balances y<br />

liquidación presupuestaria del año<br />

2007 del Fondo Común Interdiocesano,<br />

de la CEE y de sus organismos e<br />

instituciones, que se someterán para<br />

su aprobación a la Asamblea Plenaria<br />

del próximo mes de noviembre.<br />

La Cadena COPE<br />

En el momento previsto en el orden<br />

del día para los asuntos de seguimiento,<br />

los obispos de la Comisión Permanente<br />

recibieron amplia información<br />

sobre la situación actual y perspectivas<br />

de futuro de la Cadena COPE y mantuvieron<br />

un extenso y rico diálogo sobre<br />

el tema.<br />

Conscientes de su responsabilidad y<br />

convencidos de la necesidad y utilidad<br />

de este importante medio de comunicación<br />

social, los obispos se proponen<br />

intensificar la relación de la Conferencia<br />

Episcopal, a través de su Comité<br />

Ejecutivo, con la Dirección y el Consejo<br />

de Administración de la Cadena en orden<br />

a seguir velando por el respeto al<br />

Ideario de la COPE y a la exigencia de<br />

su cumplimiento. El Ideario señala<br />

como objetivos de este medio el servicio<br />

a la verdad, a la libertad y al bien<br />

común, y es para todos, norma de<br />

orientación obligada.<br />

Los obispos de la Comisión Permanente<br />

mantienen el compromiso de la<br />

Conferencia de que la COPE realice los<br />

objetivos de todo medio de comunicación<br />

social, además del específico, pre-<br />

visto en el Ideario, de ser «presencia<br />

evangelizadora en el ámbito de la opinión<br />

pública».<br />

Nota de la Comisión<br />

para la Doctrina de la Fe<br />

La Comisión Episcopal para la Doctrina<br />

de la Fe ha pedido a la Permanente<br />

autorización para publicar una Nota<br />

de clarificación sobre el libro de José<br />

Antonio Pagola, Jesús. Aproximación<br />

histórica (Madrid 2007). Tras una atenta<br />

lectura del texto presentado, se ha<br />

concedido la autorización solicitada. La<br />

Nota será publicada oportunamente.<br />

Documento sobre la<br />

actualidad de la Misión<br />

«Ad gentes» en España<br />

Monseñor Ramón del Hoyo López,<br />

obispo de Jaén y presidente<br />

de la Comisión Episcopal de Misiones,<br />

ha presentado para su estudio<br />

un documento sobre la actualidad<br />

de la Misión «Ad gentes» en España. Se<br />

trata de una propuesta que toma<br />

como base las conclusiones del Congreso<br />

Nacional de Misiones, celebrado<br />

en Burgos en 2003, y las<br />

intervenciones más destacadas y recientes<br />

del magisterio pontificio, incluida<br />

la reciente Nota doctrinal acerca de<br />

algunos aspectos de la evangelización<br />

de la Congregación para la Doctrina de<br />

la Fe, de 3 diciembre de 2007.<br />

La Comisión Permanente remitió el<br />

texto a la Asamblea Plenaria para su<br />

estudio y eventual aprobación.<br />

Congreso Eucarístico<br />

Nacional de 2010<br />

Se han iniciado las gestiones para<br />

determinar qué diócesis será la anfitriona<br />

del Congreso Eucarístico Nacio-<br />

10 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

nal, que se celebrará en 2010. Este<br />

Congreso reflejará y potenciará hacia<br />

el futuro las iniciativas y las acciones<br />

que las distintas Comisiones Episcopales<br />

y otros organismos están llevando<br />

a cabo como cumplimiento del Plan<br />

Pastoral de la CEE para el quinquenio<br />

2006-2010, «Yo soy el pan de vida (Jn<br />

6, 35). Vivir de la Eucaristía», aprobado<br />

por la Asamblea Plenaria el 30 de marzo<br />

de 2006.<br />

Jornada Mundial<br />

de la Juventud en Sídney<br />

La Comisión Episcopal de Apostolado<br />

Seglar informó a los obispos sobre<br />

los preparativos de la Jornada Mundial<br />

de la Juventud que se celebrará en Sídney<br />

del 15 al 20 de julio. En breve se<br />

darán a conocer a la opinión pública<br />

los detalles de la participación española<br />

en la Jornada.<br />

Calendario de reuniones<br />

de los órganos de la CEE<br />

para 2009<br />

La Comisión Permanente aprobó el<br />

calendario de reuniones de los órganos<br />

de la CEE para el año 2009. Las<br />

Asambleas Plenarias tendrán lugar del<br />

20 al 24 de abril y del 23 al 27 de noviembre<br />

y las reuniones de la Comisión<br />

Permanente, del 17 al 19 de febrero; del<br />

16 al 18 de junio y del 29 de septiembre<br />

al 1 de octubre.<br />

Nombramientos de<br />

directores de Secretariados<br />

de la CEE<br />

De acuerdo con el artículo 10,3 del<br />

Reglamento de las Comisiones Episcopales<br />

de la CEE, los directores de Se-<br />

958


cretariado son nombrados<br />

por un plazo de tres años, pasado<br />

el cual, dentro de los<br />

seis meses siguientes, se decidirá<br />

si se les renueva el nombramiento<br />

por otro plazo de<br />

la misma duración. El nombramiento<br />

corresponde a la<br />

Comisión Permanente a propuesta<br />

del presidente de la<br />

Comisión Episcopal interesada,<br />

después de haber oído al<br />

secretario general (Estatutos,<br />

art. 23, 14º).<br />

La Comisión Permanente,<br />

como es habitual tras la<br />

Asamblea de renovación de<br />

cargos, ha renovado a los directores<br />

de los siguientes Secretariados:<br />

Antonio Cartagena Ruiz,<br />

como director del Secretariado<br />

de la Comisión Episcopal<br />

de Apostolado Seglar.<br />

Javier Igea López-Fando,<br />

como director del Secretariado<br />

de la Comisión Episcopal<br />

del Clero.<br />

José Rico Pavés, como director<br />

del Secretariado de la<br />

Comisión Episcopal para la<br />

Doctrina de la Fe.<br />

Modesto Romero Cid,<br />

como director del Secretariado<br />

de la Comisión Episcopal<br />

de Enseñanza y Catequesis.<br />

Juan María Canals Casas,<br />

CMF, como director del Secretariado<br />

de la Comisión Episcopal<br />

de Liturgia.<br />

José María Gil Tamayo,<br />

como director del Secretariado<br />

de la Comisión Episcopal de Medios<br />

de Comunicación Social.<br />

Anastasio Gil García, como director<br />

del Secretariado de la Comisión<br />

Episcopal de Misiones y Cooperación<br />

entre las Iglesias.<br />

Sebastián Taltavull Anglada,<br />

como director del Secretariado de la<br />

Comisión Episcopal de Pastoral.<br />

Fernando Fuentes Alcántara,<br />

como director del Secretariado de la<br />

Comisión Episcopal de Pastoral Social.<br />

Manuel Iñiguez Ruiz de Clavijo,<br />

como director del Secretariado de la<br />

Comisión Episcopal de Patrimonio Cultural<br />

Carlos de Francisco Vega, como<br />

director del Secretariado de la Comi-<br />

959<br />

El secretario general de la CEE, monseñor Martínez Camino, y el<br />

responsabel de la Oficina de Información, Isidro Catela, durante su<br />

comparecencia ante los medios al término de la Permanente.<br />

sión Episcopal de Relaciones Interconfesionales.<br />

Lourdes Grosso García, M.Id.,<br />

como directora del Secretariado de la<br />

Comisión Episcopal para la Vida Consagrada.<br />

Otros nombramientos<br />

Rosario Vicente Durá, laica de la<br />

diócesis de Ciudad Real, como presidenta<br />

de la Confederación de Federaciones<br />

y Asociaciones de Viudas Hispania<br />

(C.O.N.F.A.V.).<br />

Esther Alvarez Prieto, laica de la<br />

diócesis de Bilbao, como presidenta<br />

de la Federación de Entidades Cristia-<br />

España<br />

nas de Tiempo Libre-DIDA-<br />

NIA.<br />

José Luis Guzón Nestar,<br />

SDB, sacerdote salesiano perteneciente<br />

a la Inspectoría Salesiana<br />

Santiago el Mayor de<br />

León, como asesor religioso<br />

de la Federación de Entidades<br />

Cristianas de Tiempo Libre-<br />

DIDANIA.<br />

Rodrigo Bello González,<br />

laico de la archidiócesis de<br />

Zaragoza, como coordinador<br />

nacional de la Asociación Renovación<br />

Carismática Católica<br />

de España (RCCE).<br />

Eduardo Toraño López,<br />

sacerdote de la archidiócesis<br />

de Madrid, como asesor espiritual<br />

nacional de la Asociación<br />

Renovación Carismática<br />

Católica de España (RCCE).<br />

Guillermo Aparicio García,<br />

laico de la archidiócesis<br />

de Madrid, como presidente<br />

general del Movimiento de<br />

Apostolado Seglar, Jubilados<br />

y Mayores «Vida Ascendente».<br />

Antonio Matilla Matilla,<br />

sacerdote de la diócesis de<br />

Salamanca, como consiliario<br />

general del Movimiento Scout<br />

Católico (MSC).<br />

José Ramón Peláez Sanz,<br />

sacerdote de la archidiócesis<br />

de Valladolid, como asesor<br />

espiritual del Movimiento<br />

Cultural Cristiano.<br />

Santiago Alvarez Cabezón,<br />

laico de la diócesis de<br />

Osma-Soria, como presidente<br />

general del Movimiento Rural<br />

Cristiano de Acción Católica.<br />

Enrique Gómez Rodríguez, sacerdote<br />

de la diócesis de Plasencia, como<br />

consiliario general del Movimiento Rural<br />

Cristiano de Acción Católica.<br />

María Dolores Ferrández Espinosa,<br />

laica de la diócesis de Orihuela-<br />

Alicante, como presidenta nacional del<br />

Movimiento de Acción Católica «Mujeres<br />

Trabajadoras Cristianas». (MTC). Se<br />

trata de una reelección.<br />

Además, la Comisión Permanente<br />

ha confirmado a Emilio Alberich<br />

Sotomayor, SDB, salesiano de la<br />

Inspectoría «María Auxiliadora», con<br />

sede en Sevilla, como presidente de<br />

la Asociación Española de Catequetas.<br />

■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 11


España<br />

Miguel Simón Ferrandis,<br />

vicario general de Segorbe-Castellón<br />

Los cardenales Agustín García-Gasco y Lluís Martínez Sistach,<br />

confirmados como miembros de distintos dicasterios de la Curia Romana<br />

Con fecha 13 de junio, el obispo de<br />

Segorbe-Castellón, monseñor Casimiro<br />

López Llorente, procedía al<br />

nombramiento de nuevos vicario general<br />

y vicario episcopal de Pastoral y renovaba<br />

la estructura de gobierno en esta diócesis,<br />

con la desaparición de las otras vicarías<br />

episcopales. El hasta ahora párroco<br />

y arcipreste Miguel Simón Ferrandis<br />

(1946) es el nuevo vicario general y moderador<br />

de Curia y el delegado de Pastoral<br />

Vocacional, Javier Aparici Renau<br />

(1969), el nuevo vicario episcopal de Pastoral.<br />

Elías Sanz Igual ha sido en los últimos<br />

años el vicario general.<br />

La Santa Sede informaba el 12 de junio<br />

de nombramientos para miembros<br />

de distintos dicasterios vaticanos de los<br />

últimos cardenales creados por Benedicto<br />

XVI. Como ya ha informado ECCLE-<br />

SIA, el cardenal Lluís Martínez Sistach,<br />

arzobispo de Barcelona, continúa como<br />

miembro del Tribunal Supremo de la Signatura<br />

Apostólica y del Consejo Pontificio<br />

para los Laicos, amén del también<br />

Consejo Pontificio para los Textos Legislativos<br />

de la Iglesia. Por su parte, el arzobispo<br />

de Valencia, cardenal Agustín García-Gasco<br />

Vicente, permanece como<br />

miembro de la Congregación para el<br />

Los nuevos vicarios de Segorbe-Castellón juran<br />

sus cargos ante monseñor Casimiro López.<br />

Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos<br />

y en el consejo de presidencia<br />

del Consejo Pontificio para la Familia.<br />

En Tenerife, Juan Pedro Rivero,<br />

doctor en historia de la iglesia, es el<br />

nuevo rector del seminario diocesano.<br />

En Palencia, Onésimo del Campo Mazuelas,<br />

sacerdote desde hace 30 años,<br />

es el nuevo rector del seminario. Sustituye<br />

a José María de Valles Antolín,<br />

nombrado párroco de San Telmo. En<br />

Orihuela-Alicante, los sacerdotes Pedro<br />

Luis Vives Pérez, Ricardo Juan García<br />

y Agustín Sánchez Manzanares han<br />

sido nombrados respectivamente rector<br />

del teologado diocesano de Alicante,<br />

rector del seminario de Orihuela y delegado<br />

diocesano del Clero. Asimismo el<br />

seglar Luis Soriano Ripoll ha sido designado<br />

viceecónomo diocesano.<br />

Los Hermanos Menores Capuchinos<br />

de la provincia Bética han celebrado capítulo<br />

provincial electivo. Mariano Ibáñez<br />

Velázquez continúa otros tres años<br />

como ministro provincial. Rafael Pozo<br />

Bascón ha sido elegido vicario provincial.<br />

El 16 de junio ingresaba en la Academia<br />

de Ciencias Médicas de Bilbao<br />

monseñor Mario Iceta, obispo auxiliar<br />

de esta diócesis desde el pasado abril,<br />

doctor en medicina y experto en bioética.<br />

Por otro lado, la diócesis de Lérida<br />

ha asistido a la muerte de quien<br />

fuera su vicario general Mario Rodrigo<br />

(1930), y a la imposición de la<br />

cruz Pro Ecclesia et Pontifice a la laica<br />

Julia Farreny (1908).<br />

Efemérides eclesiales<br />

La Adoración Nocturna de Molina<br />

de Aragón, en la diócesis de Sigüenza-<br />

Guadalajara, celebraba los cien años<br />

de su sección de hombres y las bodas<br />

de plata de su sección de mujeres. La<br />

efeméride se ha celebrado conjuntamente<br />

con un triduo previo del 11 al<br />

12 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

13 de junio y con la vigilia de espigas diocesana,<br />

en la noche del sábado día 14,<br />

presidida por el obispo local. También la<br />

localidad jienense de Arjornilla celebra el<br />

centenario de la Adoración Nocturna.<br />

El 19 de junio la Universidad CEU San<br />

Pablo de Madrid celebraba su 75 aniversario<br />

El cardenal Rouco Varela presidía<br />

una Eucaristía. Tras ella tenía tenía lugar<br />

un acto institucional, en cuyo trascurso se<br />

hizo entrega de la placa conmemorativa<br />

de este 75 aniversario al antiguo alumno<br />

más veterano. El colegio «Sagrada Familia»<br />

de Zaragoza ha cumplido asimismo<br />

75 años. En la actualidad es el único colegio<br />

concertado de Zaragoza que dispone<br />

de residencia para alumnos de Educación<br />

Secundaria. Los actos conmemorativos<br />

culminaban el pasado 7 de junio con una<br />

Eucaristía, presidida por el vicario general<br />

de la archidiócesis, Francisco Martínez.<br />

También se han celebrado las bodas de<br />

diamante de la fundación de las Misioneras<br />

Eucarísticas Seglares de Nazaret. La<br />

celebración tuvo lugar en Los Molinos<br />

(Madrid) del 6 al 8 de junio. El obispo beato<br />

Manuel González García fue su fundador,<br />

al igual que de la Unión Eucarística<br />

Reparadora y de la Congregación de<br />

Misioneras Eucarísticas de Nazaret.<br />

El 15 de junio se cumplían quince<br />

años de la consagración o dedicación litúrgica<br />

de la catedral de Santa María la<br />

Real de la Almudena. Fue el Papa Juan<br />

Pablo II, en el transcurso de su cuarta<br />

visita apostólica a España, quien consagró<br />

el templo. Con este motivo ha habido<br />

distintas conmemoraciones, como la<br />

inauguración de un legado del cardenal<br />

Angel Suquía, entonces arzobispo de<br />

Madrid y fallecido en 2006. Asimismo la<br />

misa de la 2 de TVE del domingo 15 de<br />

junio fue transmitida desde la Almudena<br />

y presidida por el cardenal Rouco.<br />

Por último, el semanario «Cataluña<br />

cristiana» alcanza su número 1.500. Con<br />

este motivo, digitaliza sus treinta años de<br />

historia. ■<br />

960


961<br />

España<br />

Ejercicio ético para<br />

humanizar la sociedad<br />

Manifiesto de Profesionales Cristianos<br />

de AC en su Sesion de Estudios anual<br />

En el manifiesto<br />

final de la Sesión<br />

de Estudios<br />

2008, celebrada<br />

del 30 de mayo<br />

al 1 de junio en la<br />

localidad madrileña<br />

de Las Matas bajo<br />

el lema «El bien interno<br />

de nuestra<br />

Los participantes en el encuentro.<br />

profesión», los ProfesionalesCristianos<br />

de Acción Católica<br />

han apostado por profundizar en «un ejercicio ético de<br />

nuestra profesión con el fin de humanizar nuestra sociedad». Pero<br />

a juicio de los participantes en esas jornadas, este ideal, según se<br />

recoge en el citado manifiesto, «entra en conflicto, ocasionalmente,<br />

con una serie de prácticas, afortunadamente minoritarias, que<br />

nos preocupan porque desvirtúan ese fin prioritario».<br />

Entre tales prácticas se señalan, en el ámbito de la educación,<br />

«la desvalorización social del servicio educativo, la apatía y fracaso»;<br />

en el de la empresa, «horarios inhumanos, mala calidad del<br />

servicio para maximizar beneficios y pagos de comisiones corruptas;<br />

en el de la sanidad, « el abuso ocasional y la mala gestión<br />

de los recursos públicos, por parte tanto de usuarios como de los<br />

propios profesionales sanitarios»; y en el de los medios de comunicación,<br />

«la falta de respeto a las personas e instituciones, la falta<br />

de pluralismo, y el culto a la imagen y la vanidad como valores<br />

dominantes».<br />

Ante este diagnóstico, los Profesionales Cristianos apuestan<br />

«por denunciar aspectos no éticos de la vida social y profesional<br />

y por colaborar en el desarrollo de estos valores básicos que hemos<br />

de compartir». «Como seguidores de Jesús —se afirma en el<br />

manifiesto—, creemos en la ética del amor y de la justicia, con<br />

prioridad por los más desfavorecidos». En ese sentido, los miembros<br />

de esta asociación de Acción Católica se comprometen a dar<br />

respuesta a los siguientes retos: en el mundo educativo, a colaborar<br />

con iniciativas que ayuden a responder a la realidad compleja<br />

y cambiante de la educación; en la empresa, a plantear el<br />

debate ético sobre las condiciones laborales y crear espacios de<br />

encuentro y de reconocimiento del trabajo que fortalezcan la motivación<br />

y la capacidad crítica; en la sanidad, a colaborar con el<br />

plan de humanización, implicando a los profesionales en el desarrollo<br />

de su labor desde planteamientos éticos; y en los medios<br />

de comunicación, a defender una información que respete el pluralismo<br />

y la imagen de personas e instituciones, que defienda los<br />

valores de esa ética cívica compartida y que fomente el diálogo<br />

frente a la agresión verbal. ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 13


España<br />

■ MONSEÑOR FRANCISCO PEREZ GONZALEZ, arzobispo<br />

de Pamplona desde el pasado 30 de septiembre, recibe el palio<br />

arzobispal de manos del<br />

Papa Benedicto XVI este<br />

domingo, 29 de junio,<br />

solemnidad de los santos<br />

apóstoles Pedro y Pablo.<br />

El palio arzobispal es una<br />

pequeña estola de lana<br />

de cordero, que significa<br />

la jurisdicción del arzobispo<br />

sobre su sede metropolitana<br />

y provincia<br />

eclesiástica. Monseñor<br />

Pérez González ha sido el<br />

único arzobispo metropolitano<br />

nombrado en<br />

España en el último año.<br />

■ LAS VI JORNADAS DE PROFESORES DE ECLESIOLO-<br />

GIA se han celebrado en Madrid los días 10 y 11 de junio. «La<br />

forma y las formas de la vida cristiana. Interrelación» ha sido su<br />

tema. Ha habido cuatro ponencias y una sesión informativa sobre<br />

bibliografía eclesiológica. Las Jornadas volverán a celebrarse<br />

en 2010, también en Madrid. Los profesores José Luis Cabria<br />

(Burgos), Joan Planelles (Gerona) y Juan Carlos Fernández<br />

Menes (León) son los encargados de su preparación.<br />

Este último ya formó parte de la comisión organizadora de las<br />

jornadas de 2008.<br />

■ LOS DELEGADOS DIOCESANOS DE MIGRACIONES y<br />

otros agentes de Pastoral Migratoria han celebrado sus XXVIII<br />

Jornadas. Han tenido lugar en Sigüenza del 25 al 27 de junio.<br />

Monseñor José Sánchez González, presidente de la Comisión<br />

Episcopal de Migraciones, es el obispo de Sigüenza-Guadalajara.<br />

El tema central de las jornadas ha sido el documento de la<br />

CEE «La Iglesia en España y los inmigrantes». El ponente de las<br />

jornadas ha sido el profesor de la Universidad Complutense de<br />

Madrid, Lorenzo Cachón.<br />

■ EL ENCUENTRO REGIONAL DE APOSTOLADO SE-<br />

GLAR de las diócesis de Castilla y León tenía lugar el pasado<br />

31 de mayo en el seminario de Valladolid. Participaban laicos<br />

de distintos Movimientos y Asociaciones. «Eclesialidad de comunión<br />

y corresponsabilidad» era su lema.<br />

■ UN CENTRO DE ATENCION A DISCAPACITADOS se levantará<br />

en la comarca de Guadalupe en terrenos cedidos al<br />

efecto por el arzobispado de Toledo a ADISVI (Asociación de<br />

Discapacitados de las Villuercas). Es el fruto y obra social del<br />

Año Jubilar Guadalupense, recientemente clausurado con motivo<br />

del primer centenario de la Declaración de Santa María de<br />

Guadalupe como patrona de Extremadura. Asimismo el mo-<br />

14 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

nasterio de Guadalupe se prepara ahora para otro centenario:<br />

los cien años de la Orden Franciscana al servicio del santuario<br />

(1908-2008).<br />

■ ALBERTO GARCÍA RUIZ, sacerdote y periodista alcarreño,<br />

desde hace varias décadas en Madrid, capellán del Aeropuerto<br />

Internacional de Barajas y editor de «Mensaje del Papa»,<br />

ha sacado una nueva edición de «Noticias de Jesús». Se trata de<br />

un texto que recoge los Evangelios salpicados de comentarios<br />

al respecto al hilo de la actualidad y de otros textos complementarios.<br />

La edición es además muy rica en fotografías e ilustraciones<br />

en blanco y negro, y muy oportuna ante el próximo<br />

Sínodo de los Obispos, dedicado a la Palabra de Dios.<br />

■ «OBISPOS Y RELIGIOSOS EN ESPAÑA, RETOS ACTUA-<br />

LES A LOS TREINTA <strong>AÑO</strong>S DEL MUTAE RELATIONES» era<br />

el título de un acto académico organizado por la Universidad<br />

Comillas el 19 de junio. Intervenían, junto al rector de la Universidad,<br />

el jesuita José Ramón Busto, el franciscano y obispo de<br />

Huesca y Jaca Jesús Sanz, la vicepresidenta de la Confer Cecilia<br />

Barreda y el profesor Teodoro Bahíllo, claretiano.<br />

■ EN UN 57% HA CRECIDO el número de peregrinos a Tierra<br />

Santa en el primer cuatrimestre de 2008, con un total de<br />

17.700 personas. Ya a lo largo de 2007 se experimentó un sensible<br />

incremento, un 54% más que en el año anterior. El número<br />

de peregrinos españoles a Tierra Santa fue en 2007 de<br />

47.065, una cifra que según previsiones será superada este año.<br />

■ SALVADOR PELLICER CASANOVA, sacerdote y religioso<br />

camilo, fallecía en Barcelona el 10 de junio, tras rápida y cruel<br />

enfermedad. Desde 2000<br />

era presidente de LARES,<br />

Federación de Residencias<br />

del Sector Solidario. De<br />

1995 a 2004 fue delegado<br />

episcopal de Cáritas Española.<br />

Había nacido en Benifairó<br />

(Valencia) en 1947.<br />

Fue también director del<br />

Centro San Camilo de Tres<br />

Cantos (Madrid) y consejero<br />

provincial de su congregación<br />

en España.<br />

■ LA FORMACION ETICA DEL COMUNICADOR ha sido<br />

el tema de estudio y reflexión del III Encuentro Obispos y Decanos<br />

de Facultades de Comunicación. Ha tenido lugar en Valencia<br />

del 20 al 21 de junio. Ha habido cuatro sesiones de trabajo.<br />

Monseñor Juan del Río Martín, presidente de la Comisión<br />

Episcopal de MCS, presidía el encuentro. ■<br />

962


Actividades para el verano (II)<br />

Cursos, cursillos y otras recomendaciones<br />

FACULTAD DE TEOLOGIA<br />

DE BURGOS. I Curso de Formación<br />

en Teología y Pedagogía<br />

(D.E.C.A.). Del 2 al 25 de<br />

julio. Destinatarios: maestros<br />

que no tengan los 18 créditos<br />

del curriculum de «Religión y<br />

Moral Católica», y deseen obtener<br />

la Declaración Eclesiástica<br />

de Idoneidad (D.E.I.). II<br />

Curso de Pedagogía y Didáctica<br />

de la Enseñanza Religiosa<br />

Escolar (D.E.I.). Del 2 al 25 de<br />

julio. Destinatarios: licenciados<br />

en Teología, licenciados<br />

en Estudios Eclesiásticos y licenciados<br />

Civiles con diplomatura<br />

en Ciencias Religiosas<br />

que no tengan 18 créditos y<br />

deseen obtener la Declaración<br />

Eclesiástica de Idoneidad<br />

(D.E.I.). Organizan: Facultad<br />

de Teología de Burgos junto<br />

con el Instituto Superior de<br />

Ciencias religiosas «San Jerónimo».<br />

Información: Tel. 947<br />

26 70 00. Fax 947 25 20 25.<br />

Correo electrónico: teologiaburgos@planalfa.esww.teologiaburgos.org<br />

XXI CURSO BASICO DE PE-<br />

RIODISMO SACRO-MON-<br />

TE. Del 7 al 12 de julio. Organizan:<br />

arzobispado de Granada<br />

y Centro Cultural Nuevo<br />

Inicio. Destinatarios: seminaristas,<br />

religiosos y religiosas<br />

en formación y seglares.<br />

Información: Tel. 958 21<br />

63 23. Correo electrónico:<br />

arzgranadasec@planalfa.es<br />

UNIVERSIDAD INTERNA-<br />

CIONAL MENENDEZ PELA-<br />

YO. Del 28 de julio al 1 de<br />

agosto. Jesús de Nazaret entre<br />

la crítica histórica y la confesión<br />

cristiana. Del 4 al 5 de<br />

agosto. La mística como fenómeno<br />

humano: el lenguaje, la<br />

historia y el pensamiento. Or-<br />

963<br />

ganizan: UIMP y la escuela de<br />

teología «Karl Rahner-Hans U.<br />

Balthasar». Lugar: Santander.<br />

Información: Tels. 942 29 87<br />

00, 942 29 88 00 y 91 592 06<br />

31. Correos electrónicos: informacion@sa.uimp.esalumnos@uimp.es<br />

www.uimp.es<br />

CAMPOS DE TRABAJO DE<br />

LAS HERMANAS HOSPITA-<br />

LARIAS DEL SAGRADO CO-<br />

RAZON. Del 2 al 6 de julio.<br />

Complejo asistencial Benito<br />

Menni. Lugar: Madrid. Información:<br />

Tel. 91 893 01 50.<br />

Correo electrónico: elisahosp72@yahoo.com.<br />

Del 7 al<br />

11 de julio. Fundación Purísima<br />

Concepción. Lugar: Granada.<br />

Información: Tel. 958 15 02<br />

11. Correo electrónico: carabanchelisa@yahoo.es.<br />

Del 13<br />

al 20 de julio. Centre Salut<br />

Mental Benito Menni. Lugar:<br />

Barcelona. Información: Tel.<br />

93 652 99 99. Correo electrónico:<br />

joveneshospitalarios<br />

@hsc-bmennibcn.org. Del 15<br />

al 24 de julio. Complejo Asistencia.l.<br />

Lugar: Málaga. Información:<br />

Tel. 952 25 69 40. Correo<br />

electrónico: palparcid@hotmail.com.<br />

Del 3 al 10 de agosto. Complejo<br />

Hospitalario San Luis.<br />

Cultura<br />

Lugar: Palencia. Información:<br />

Tel. 979 16 53 24. Correo electrónico:csantiago@sanluis.org<br />

UNIVERSIDAD DE BUR-<br />

GOS. Del 7 al 11 de julio. La<br />

vida y el vivir. Organiza: Facultad<br />

de Teología de Burgos.<br />

Lugar: Burgos. Información:<br />

Tels. 947 25 80 80, 947<br />

25 80 32 y 947 25 87 42.<br />

Fax: 947 25 87 54. Correo<br />

electrónico: cverano@ubu.es<br />

www.ubu.es.<br />

CURSOS DE TEOLOGIA<br />

PARA CONSAGRADOS. Del<br />

13 al 20 de julio. VIII Curso de<br />

Teología de la Vida Consagrada.<br />

La Palabra de Dios conduce<br />

la vida de los consagrados.<br />

Del 13 al 20 de julio. I Curso<br />

de Teología de la Vida Consagrada<br />

para Formadoras. El<br />

arte de educar: Pedagogía de<br />

la Vida Consagrada. Lugar:<br />

Avila. Organizan: Cátedra de<br />

Teología de la Vida Consagrada<br />

de la Facultad de Teología<br />

«San Dámaso» y Secretariado<br />

de la Comisión Episcopal para<br />

la Vida Consagrada de la CEE.<br />

Información:Tel. 91 343 96 52.<br />

Fax: 91 343 96 02. Correo<br />

electrónico: cevc.cee@planalfa.es<br />

■<br />

FE DE ERRATAS<br />

En la página 15 del n.º<br />

3.418 (14 de junio de<br />

2008), en el apartado de<br />

Misiones, dentro del informe<br />

titulado: «Actividades<br />

para ocupar el verano»,<br />

incluimos por inexplicable<br />

error informático<br />

un Congreso Nacional<br />

de Misiones, organizado<br />

por la Comisión<br />

Episcopal de Misiones<br />

de la CEE. Es una información<br />

equivocada. No<br />

existe tal convocatoria,<br />

que podría aludir a una<br />

celebrada en 2003. Rogamos<br />

disculpas.<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 15


16<br />

Cultura<br />

los libros<br />

En la colección Beber<br />

de la Roca Franco Brovelli<br />

publica En el corazón<br />

del apóstol (A la escucha<br />

de San Pablo) (Ed. San Pablo),<br />

un librito que recoge<br />

la transcripción de los<br />

ejercicios espirituales<br />

predicados a sacerdotes<br />

de la diócesis de Milán<br />

en 2001. En ellos el autor<br />

propone la experiencia<br />

apostólica, rica y compleja,<br />

del Apóstol de los<br />

gentiles para que sea tomada<br />

como referencia en<br />

el descubrimiento del<br />

propio camino, en la maduración<br />

aun en medio de la debilidad y<br />

en el compromiso que impulse a la fidelidad<br />

al Señor y a su llamada.<br />

La Editorial San Pablo reedita dos biografías<br />

de la Santa Madre Maravillas de<br />

Jesús: la que publicó en 2001 Antonio<br />

José González Chaves y otra mucho<br />

más breve, redactada en 1998 por Baldomero<br />

Jiménez Duque. También la<br />

misma Editorial San Pablo lanza la colección<br />

Conocer la Historia, diseñada con<br />

formato similar a las guías de bolsillo,<br />

que incluye los siguientes títulos: Jesús y<br />

su mundo, La expansión del cristianismo,<br />

El cristianismo y los celtas, La fe cristiana<br />

en el mundo bizantino, La fe cristiana en<br />

la Edad Media, La fe en la edad de la razón,<br />

Pablo y su mundo, Agustín y su<br />

mundo, Lutero y su mundo y Francisco de<br />

Asís y su mundo. Los libritos, redactados<br />

por expertos de diversas confesiones<br />

cristianas, han sido revisados por el profesor<br />

Fernando Rivas, de la Universidad<br />

Pontificia Comillas, y tienen un lenguaje<br />

sencillo y divulgativo y contienen multitud<br />

de ilustraciones a todo color.<br />

Cuando han sido publicadas por el<br />

Padre Brian Kolodiejchuk, postulador<br />

de la Causa de Canonización, las cartas<br />

privadas de la Madre Teresa de Calcuta<br />

con el título Ven, sé mi luz (Ed. Planeta<br />

Testimonio), no han faltado quienes se<br />

han escandalizado porque haya sido be-<br />

atificada, y tan rápidamente,<br />

una mujer que<br />

tuvo grandes crisis de fe,<br />

a pesar de que parecía vivir<br />

en íntima unión con<br />

Dios. Lo cierto y verdad<br />

es que estas cartas revelan<br />

su vida interior, con<br />

todo el dramatismo que<br />

supone la «noche oscura»<br />

para las almas de profunda<br />

espiritualidad. Bastaría<br />

recordar a los grandes<br />

autores de nuestros siglos<br />

de oro de la literatura,<br />

a los grandes ascetas<br />

y místicos, como Juan de<br />

la Cruz, Teresa de Jesús,<br />

Ignacio de Loyola, Luis de Granada, etc...<br />

Los santos son hombres, con sus dudas<br />

y con sus certezas, con sus noches oscuras<br />

del alma como participación en la<br />

pasión de Cristo y con su luz poderosa e<br />

invasora de la gracia de la íntima unión<br />

con Dios. La dolorosa experiencia interior<br />

es algo que une e identifica a los<br />

santos con el Hijo de Dios, que también<br />

se sintió abandonado en el Calvario. De<br />

estas cartas de Teresa de Calcuta se desprende<br />

que nunca se desanimó ante la<br />

intensa y prolongada agonía espiritual, y<br />

nos permiten comprender que la santidad<br />

está al alcance de todo hombre que<br />

se deja invadir por la luz de Dios. He ahí<br />

el ejemplo de los santos, que pone luz a<br />

quienes sufren la oscuridad. ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

noticias<br />

El convento de San Francisco, situado<br />

cerca de la abadía de Santo<br />

Domingo de Silos, en la provincia<br />

de Burgos, abrirá sus puertas, después<br />

de la restauración llevada a<br />

cabo por la Fundación Silos, el<br />

próximo mes de octubre como<br />

casa de espiritualidad y centro cultural<br />

abierto a la reflexión y al diálogo,<br />

con una exposición permanente<br />

sobre la historia del monacato.<br />

«Se quiere convertir el<br />

convento en un centro de pensamiento<br />

en el que se pueda reflexionar,<br />

proponer, dialogar desde el<br />

respeto recíproco al pensamiento<br />

de los demás, sin imposiciones, siguiendo<br />

la filosofía que siempre ha<br />

llevado el monacato benedictino<br />

sobre todos los rincones del mundo»,<br />

ha explicado Clemente Serna,<br />

abad del monasterio de Santo Domingo<br />

de Silos. Un grupo de religiosas<br />

se encargará de la acogida<br />

y de la hospedería.<br />

Asimismo, en la provincia de<br />

Burgos encontramos la exposición<br />

Luz y tinieblas en el claustro bajo<br />

de la catedral gótica de la ciudad<br />

castellana. Hasta el 7 de septiembre<br />

podrán contemplarse obras de<br />

los artistas Bernhard Roig, de Baleares,<br />

y de la palentina Marina<br />

Núñez, que muestran sus creaciones<br />

sobre el paraíso y el infierno,<br />

respectivamente. La exposición se<br />

enmarca dentro del programa iniciado<br />

hace cuatro años, «Siglo XXI:<br />

Arte en la catedral», promovido por<br />

el Cabildo catedral y Caja Burgos<br />

para profundizar en la relación<br />

histórica entre el arte, la religión y<br />

los artistas, según ha destacado el<br />

arzobispo de Burgos, monseñor<br />

Francisco Gil Hellín. La luz representa<br />

al paraíso por medio de figuras<br />

masculinas blancas envueltas<br />

en una luz excesiva y las tinieblas<br />

representan al infierno,<br />

ángeles caídos y sirenas mutantes,<br />

que dificultan el camino hacia el<br />

conocimiento. ■<br />

964


Nuevo patriarca latino en Jerusalén<br />

El sábado día 21, monseñor Michel<br />

Sabbah, hasta ese momento<br />

patriarca latino de Jerusalén,<br />

hacía entrega en la Basílica de Getsemaní<br />

del báculo pastoral al nuevo<br />

patriarca, monseñor Fouad Twal,<br />

quien fue nombrado arzobispo coadjutor<br />

de la diócesis hace dos años y<br />

medio. El nuevo patriarca tomó posesión<br />

de la sede canónica, el Santo Sepulcro,<br />

compartida con el patriarca<br />

griego ortodoxo y armenio, a primera<br />

hora de la tarde del domingo 22. Se<br />

cierra así una etapa en la historia de<br />

la diócesis latina de Tierra Santa, marcada<br />

por la diáfana personalidad de<br />

quien ha sido su pastor durante veintiún<br />

años. La trayectoria y el temple<br />

personal del nuevo pastor permiten augurar<br />

un no menos rico pontificado en<br />

la rica pero también compleja realidad<br />

de Tierra Santa.<br />

Voz del drama de Tierra Santa<br />

La iglesia de las Naciones apenas podía<br />

contener a tantos que querían agradecer<br />

el ministerio patriarcal de monseñor<br />

Sabbah. Su voz, físicamente débil,<br />

resonó potente y decidida en el agradecimiento,<br />

pero también en la petición de<br />

soluciones para el drama de la región.<br />

El itinerario personal del patriarca<br />

emérito de Jerusalén ha dejado una impronta<br />

bien perceptible en sus años al<br />

frente de la diócesis. Nacido en Nazaret<br />

en 1933, su infancia, juventud y formación<br />

transcurrieron a la sombra de los<br />

primeros enfrentamientos árabo-israelíes.<br />

Seminarista en Beit-Yala, junto a Belén,<br />

tareas pastorales en Jordania, universitario<br />

con los jesuitas en Beirut, vinculado<br />

a la gran obra educativa del Patriarcado,<br />

así como a la Universidad de<br />

Belén, hicieron de él un candidato inesperado<br />

cuando Juan Pablo II lo designó<br />

patriarca en 1987. Sus cartas pastorales,<br />

siempre gestadas junto a las Comisiones<br />

Teológicas y Pastorales de la<br />

diócesis, quedarán como señuelos en la<br />

historia de los católicos latinos de Tierra<br />

Santa. Su testamento espiritual, plasmado<br />

en una hermosa carta pastoral, insis-<br />

965<br />

Monseñor Sabbah (der.) entrega el báculo a su<br />

sucesor en Jerusalén, monseñor Twal, el 21 de junio.<br />

Foto: Custodia de Tierra Santa.<br />

te en la idea que nunca ha dejado de<br />

proclamar: La misión y vocación de los<br />

cristianos en Tierra Santa es provocar<br />

amor y vida digna para todos sus habitantes,<br />

judíos, musulmanes, cristianos y<br />

drusos. Quienes han juzgado su ministerio<br />

pastoral como demasiado atento al<br />

escenario político de la región no han<br />

advertido la lucidez con la que ha afrontado<br />

la realidad, ni su gran corazón y<br />

sentido de la justicia. Monseñor Sabbah<br />

ha sido una cualificada voz de los árabes<br />

cristianos en el mundo.<br />

«Corazón que ama»<br />

Monseñor Fouad Twal también representa,<br />

con no menor intensidad, la<br />

historia y las posibilidades de futuro de<br />

los árabes cristianos. Natural de Mábada<br />

(Jordania), su nombre de pila significa<br />

en árabe «corazón que ama». Su familia<br />

proviene de los clanes nómadas<br />

que abrazaron el rito latino hace poco<br />

más de un siglo y se asentaron después<br />

en la célebre ciudad jordana. Formaban<br />

parte de las tribus árabes del desierto<br />

que fueron evangelizadas por los monjes<br />

bizantinos en el siglo V, nunca islamizadas.<br />

Tras los estudios eclesiásticos en<br />

Beit-Yala y de derecho canónico e internacional<br />

en Roma, el joven sacerdote<br />

fue destinado al cuerpo diplomático de<br />

la Santa Sede, prestando servicio en<br />

América Central (Honduras, Perú), el Va-<br />

Mundo<br />

ticano (sección de Africa francófona),<br />

Alemania y El Cairo. En 1992 fue<br />

nombrado obispo de Túnez. De allí<br />

fue llamado a ocupar la sede jerosolimitana,<br />

en la que ha permanecido<br />

acompañando a monseñor Sabbah<br />

estos dos últimos años, caracterizados<br />

por su discreción y mirada atenta<br />

a la vida de la diócesis. Tras 18<br />

años de vida diplomática y pastoral<br />

en el extranjero, regresa a sus orígenes<br />

con una amplia visión de la Iglesia<br />

y del mundo en beneficio de Tierra<br />

Santa.<br />

El domingo tenía lugar el ritual solemne<br />

del ingreso en la Basílica del<br />

Santo Sepulcro. La ceremonia es una<br />

herencia de los tiempos del Imperio<br />

Otomano, cuando éste reconocía una<br />

cierta autoridad civil a los patriarcas<br />

cristianos: cortejo procesional desde la<br />

puerta de Jaffa, presencia de todas las<br />

comunidades religiosas, los Cónsules<br />

Generales de los países protectores de<br />

los Santos Lugares, entre ellos España,<br />

acogida en la Puerta, canto del Te Deum<br />

hasta llegar a la Tumba vacía, lectura de<br />

la Bula Pontificia... ¡el esplendor oriental!<br />

Junto al gesto, la palabra. Junto al Sepulcro<br />

de Cristo y a escasos metros del<br />

Gólgota, el nuevo arzobispo iniciaba así<br />

su pontificado: «Tan corta es la distancia<br />

entre el Calvario y la Tumba vacía, como<br />

entre la muerte y la vida... ¡no tengáis,<br />

por ello, miedo!».<br />

La diócesis patriarcal acoge a fieles<br />

de Jordania, Israel, Chipre y los Territorios<br />

Ocupados. Sus orígenes se remontan<br />

a la llegada de los Cruzados, en<br />

1099. Tras la caída del reino latino en<br />

1291, los franciscanos mantuvieron la<br />

existencia de la Iglesia latina en Tierra<br />

Santa, hasta que en 1847, Pío IX restableció<br />

la Sede Patriarcal, cuyo titular venía<br />

siendo un eclesiástico europeo. Con<br />

los nombramientos de los dos últimos<br />

patriarcas, árabes, se ha consolidado la<br />

madurez de la Iglesia latina que junto a<br />

otras quince diócesis de otros ritos, conforman<br />

el mosaico cristiano de Tierra<br />

Santa. ■<br />

Javier Velasco Yeregui<br />

Jerusalén<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 17


18<br />

Mundo<br />

Congreso en Kenia<br />

sobre diálogo interreligioso<br />

El Consejo Pontificio para el Diálogo<br />

Interreligioso celebró en abril un<br />

Congreso en Nairobi para reflexionar<br />

sobre «la formación al dialogo interreligioso».<br />

Asistieron al mismo los<br />

miembros y consultores del Consejo<br />

Pontificio del Africa subsahariana, así<br />

como los responsables de las Comisiones<br />

Episcopales encargadas del diálogo<br />

interreligioso. Por parte del dicasterio<br />

romano estuvieron presentes su presidente,<br />

el cardenal Jean-Louis Tauran,<br />

monseñor Chidi Denis Isizoh y el P.<br />

Marcus Solo, S.V.D. El tema del diálogo<br />

se abordó en el cuadro de la formación<br />

de sacerdotes, religiosos y laicos.<br />

Monseñor Tauran se declaró impresionado<br />

por la riqueza del catolicismo<br />

africano, así como por sus numerosas<br />

estructuras de diálogo. Para el purpurado<br />

francés, la identidad de los dialogantes<br />

es muy importante, hasta el<br />

punto de considerarla «la primera condición<br />

de un diálogo válido». También<br />

le pareció importante reconocer la alteridad.<br />

«En Africa —dijo— el diálogo interreligioso<br />

es, sobre todo, un diálogo de la<br />

vida, pero también un diálogo de las<br />

culturas, y la cultura une mucho más<br />

que divide».<br />

Entre las cuestiones tratadas por los<br />

participantes en el Congreso, estuvo la<br />

introducción en los seminarios de un<br />

curso obligatorio de teología del diálogo<br />

interreligioso, «porque, como ha señalado<br />

el Papa, el diálogo se ha convertido<br />

en una prioridad, no sólo en<br />

Africa, sino en el mundo entero». «Si<br />

queremos vivir en armonía con los demás,<br />

tenemos que aprender a respetarnos<br />

los unos a los otros, sobre todo en<br />

lo más sagrado que tenemos, la relación<br />

con Dios que es la religión».<br />

El cardenal, que dijo ignorar si el<br />

diálogo entre las religiones llegaría a<br />

frenar el ascenso del fundamentalismo<br />

islámico, está convencido sin embargo<br />

de que «seguramente ayudará a hacer<br />

comprender a unos y otros que la libertad<br />

religiosa es un derecho fundamental<br />

y que ninguna religión podrá<br />

imponerse, ni por la mentira ni por el<br />

proselitismo, a un individuo o a un<br />

grupo de individuos, sea el que sea». ■<br />

Juan Manuel Pérez Charlín<br />

Uagadugu (Burkina Faso)<br />

XIV Encuentro del Comité Islámico-Católico<br />

El Vaticano acogió del 11 al 13 de junio un nuevo encuentro –el decimocuarto–<br />

del Comité Islámico-Católico, que en esta ocasión ha tenido por tema<br />

«Cristianos y musulmanes testigos del Dios de la Justicia, de la Paz y de la Compasión<br />

en un mundo que sufre la violencia». Las delegaciones han estado encabezadas<br />

por el cardenal Tauran, presidente del Consejo Pontificio para el<br />

Diálogo Interreligioso, y el Dr. Hamid bin Hamad Al-Rifaie, presidente del Foro<br />

Islámico Internacional para el Diálogo.<br />

Según el comunicado difundido por el dicasterio romano, católicos y musulmanes<br />

han concordado, entre otros, sobre los siguientes puntos: «de la dignidad<br />

intrínseca de todo ser humano derivan derechos y deberes fundamentales;<br />

la justicia es una prioridad en nuestro mundo; (…) no puede existir paz auténtica<br />

ni duradera sin justicia; (…) cristianos y musulmanes creen que Dios es<br />

compasivo y por tanto, consideran su deber mostrar compasión hacia toda<br />

persona humana, en particular los pobres y débiles; si se practican las religiones<br />

de manera auténtica, contribuyen eficazmente a la promoción de la fraternidad<br />

y a la armonía en la familia humana». ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

966


El Parlamento Europeo aprueba<br />

la Directiva sobre Retorno de la U.E.<br />

Cáritas Española, Confer y Justicia y Paz han expresado<br />

su «rotunda oposición» a unas normas que criminalizan la inmigración<br />

El 18 de junio, el Parlamento Europeo<br />

aprobó por abrumadora mayoría<br />

(369 votos a favor, 197 en<br />

contra y 106 abstenciones) la Directiva<br />

sobre Retorno de la Unión Europea, en<br />

la cual se establecen los «procedimientos<br />

y normas comunes en los Estados<br />

miembros» para la repatriación de los<br />

inmigrantes «que se encuentren ilegalmente<br />

en su territorio». La norma, que<br />

había recibido el día 5 el visto bueno<br />

de los ministros de Interior<br />

de los Veintisiete, fue aprobada<br />

sin enmieda alguna, y<br />

ha recibido serias críticas por<br />

parte de instituciones de<br />

Iglesia y organizaciones humanitarias.<br />

Se calcula que<br />

puede ser aplicada a ocho<br />

millones de inmigrantes en<br />

situación irregular en la UE.<br />

La Directiva establece, por<br />

ejemplo, que los «sin papeles»<br />

podrán ser internados hasta<br />

dieciocho meses antes de su<br />

expulsión; que una vez expulsados<br />

no podrán volver a la UE<br />

en el plazo de cinco años; y<br />

que los menores podrán ser<br />

conducidos a terceros países<br />

sin su familia, así como entregados<br />

en sus lugares de procedencia<br />

a familiares no directos.<br />

«Rotunda oposición»<br />

Días antes del debate parlamentario,<br />

Cáritas Española,<br />

el área de Justicia y Solidaridad<br />

de la Confer y la Comisión<br />

General de Justicia y Paz<br />

de España expresaron en un<br />

manifiesto su «rotunda oposición»<br />

a la Directiva y pidieron<br />

a los eurodiputados que la<br />

967<br />

rechazasen, por considerar que recorta<br />

derechos fundamentales de los migrantes.<br />

Para las organizaciones católicas,<br />

esta directiva comunitaria criminaliza la<br />

inmigración y margina un aspecto<br />

esencial como es el establecimiento de<br />

cauces legales para la misma.<br />

«El alargamiento del internamiento<br />

de extranjeros en situación irregular<br />

hasta un máximo de 18 meses —afirman—<br />

no representa garantía alguna<br />

Salvatore Fisichella, presidente de<br />

la Academia Pontificia para la Vida<br />

B enedicto XVI nombró<br />

el 16 de junio al<br />

obispo auxiliar de Roma<br />

y rector magnífico de la<br />

Pontificia Universidad Lateranense,<br />

Salvatore Fisichella<br />

(en la foto), nuevo<br />

presidente de la Academia<br />

Pontificia para la<br />

Vida. Sustituye al arzobispo<br />

italiano Elio Sgreccia,<br />

cuya renuncia ha<br />

sido aceptada por razones<br />

de edad: acaba de<br />

cumplir ochenta años.<br />

Monseñor Fisichella,<br />

de 56, nació el 25 de<br />

agosto de 1951 en la localidad<br />

italiana de Codogno.<br />

Ordenado sacerdote en 1976, recibió la ordenación<br />

episcopal como obispo auxiliar de Roma en 1998. Ahora ha<br />

sido elevado a la dignidad arzobispal.<br />

La Academia Pontificia para la Vida consta de un máximo<br />

de setenta miembros –todos de nombramiento pontificio–<br />

que se encargan de estudiar e informar sobre los principales<br />

problemas de la biomedicina relacionados con la defensa<br />

de la vida, y de analizarlos según la moral cristiana y la<br />

orientaciones del Magisterio Pontificio. ■<br />

Mundo<br />

para el migrante ni una medida efectiva<br />

en la lucha contra la inmigración<br />

clandestina. Recordamos que el internamiento<br />

tiene como único objetivo la<br />

correcta identificación del extranjero<br />

como nacional de un tercer Estado de<br />

cara a su repatriación o expulsión».<br />

«El sistema planteado por la Directiva<br />

—prosiguen— además de caro e ineficaz,<br />

revela la intención de criminalizar –con<br />

la dureza de un internamiento de hasta<br />

un año y medio– a quien<br />

únicamente ha infringido una<br />

norma de carácter adminis-<br />

trativo. La inmigración no es<br />

un delito y los migrantes no<br />

pueden, en consecuencia, ser<br />

tratados como delincuentes».<br />

«La creación de centros de<br />

detención para menores extranjeros<br />

no acompañados —<br />

concluyen Cáritas, Confer y<br />

Justicia y Paz— supone una<br />

vulneración flagrante de la<br />

Convención de los Derechos<br />

del Niño. (…) En la Directiva<br />

sobre Retorno, los menores<br />

son tratados como extranjeros,<br />

no como niños».<br />

El secretario del Pontificio<br />

Consejo para la Pastoral de<br />

los Emigrantes e Itinerantes,<br />

arzobispo Agostino Marchetto,<br />

ha insistido también<br />

en que no se debe «criminalizar<br />

a los inmigrantes». «Los<br />

ciudadanos de terceros países,<br />

al igual que los ciudadanos<br />

comunitarios, no deberían<br />

ser privados de libertad<br />

personal o sujetos a penas<br />

de detención a causa de infracciones<br />

de tipo administrativo»,<br />

ha dicho. ■<br />

José Ignacio Rivarés<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 19


B enedicto<br />

Vaticano<br />

De Quebec 2008 a Dublín 2012<br />

El Papa clausura vía satélite el 49 Congreso Eucarístico Internacional<br />

y abre el Año Paulino con la presencia del patriarca ortodoxo Bartolomé I<br />

XVI ha anunciado<br />

que la capital de<br />

Irlanda, Dublín, acogerá<br />

en 2012 el próximo Congreso<br />

Eucarístico Internacional, que<br />

será el número cincuenta.<br />

Como ya informamos, el domingo<br />

22 de junio, el Santo<br />

Padre clausuraba el 49 Congreso<br />

Eucarístico de Quebec<br />

mediante una homilía transmitida<br />

vía satélite.<br />

Por otro lado, Africa ha<br />

tenido especial protagonismo<br />

en el Vaticano durante la<br />

pasada semana. El lunes 16<br />

de junio presentaba sus Cartas<br />

credenciales el nuevo<br />

embajador de Camerún, Antoine<br />

Zanga. El Papa aprovechó<br />

la ocasión para condenar<br />

una vez más el tráfico<br />

de armas, que tanto flagela a<br />

Camerún y a todo el continente<br />

africano. Tres días<br />

después era recibido en audiencia<br />

el presidente de la<br />

República Democrática del<br />

Congo, Joseph Kabila,<br />

quien invitó al Papa a visitar<br />

su país. En el comunicado<br />

oficial tras esta entrevista, la<br />

Santa Sede insistía en la necesidad<br />

de respetar y promover<br />

los derechos humanos<br />

como camino para solucionar<br />

los problemas de<br />

este país centroafricano.<br />

En sus palabras previas al<br />

Angelus del domingo 22 de<br />

junio, Benedicto XVI mostró<br />

su solidaridad y pidió oraciones<br />

por las víctimas del<br />

naufragio de un «ferry»<br />

arrollado en Filipinas por el<br />

tifón Fengshen. Al día siguiente<br />

se hacía público que<br />

la Santa Sede y la República<br />

de este país asiático habían<br />

Joseph Kabila, presidente de la República Democrática del Congo, fue<br />

recibido por el Papa Benedicto XVI.<br />

ratificado, con fecha 28 de<br />

mayo, un Acuerdo, firmado<br />

en abril de 2007, sobre los<br />

bienes culturales de la Iglesia<br />

filipina.<br />

Asimismo, el Papa recibía<br />

el viernes 20 de junio a los<br />

130 participantes en el I<br />

Congreso Mundial de Radios<br />

Católicas. Auspiciado<br />

por el Consejo Pontificio<br />

para las Comunicaciones<br />

Sociales, ha tenido lugar en<br />

la Pontificia Universidad Urbaniana<br />

de Roma. La representación<br />

española ha estado<br />

compuesta por los directores<br />

de Radio Santa María<br />

de Toledo y de Radio María<br />

y por el director del área socio-religiosa<br />

de la Cadena<br />

Cope.<br />

Año Paulino<br />

Con doce meses por delante,<br />

se abre, el sábado 28<br />

de junio, el Año Paulino, con<br />

20 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

la solemne celebración de las<br />

Primeras Vísperas, que preside<br />

el Papa Benedicto XVI, en<br />

compañía del Patriarca ecuménico<br />

Bartolomé I, y en la<br />

que participan también representantes<br />

de las demás<br />

Iglesias y comunidades cristianas.<br />

El marco es el más propicio:<br />

la basílica de San Pablo<br />

Extramuros, lugar con amplias<br />

resonancias ecuménicas,<br />

escogido por el beato<br />

Juan XXIII para anunciar la<br />

convocatoria del Concilio Vaticano<br />

II. El año conmemorativo<br />

del bimilenario del nacimiento<br />

de Pablo de Tarso se<br />

clausurará el 29 de junio de<br />

2009.<br />

En todo el mundo se están<br />

programando diversos actos<br />

conmemorativos. Por lo que<br />

respecta a Italia, destaca la<br />

Semana Bíblica interdisciplinar,<br />

que estará dedicada al<br />

tema Pablo: estrategia de un<br />

anuncio (del 6 al 11 de julio),<br />

y un ciclo de encuentros y<br />

manifestaciones artísticas que<br />

se celebrará en la basílica romana<br />

de San Pablo Extramuros,<br />

entre octubre de 2008 y<br />

abril de 2009.<br />

La fecha del bimilenario es<br />

convencional, y sólo aproximativa,<br />

pues no nos es conocida<br />

la fecha exacta del nacimiento,<br />

en Tarso, del «apóstol<br />

de los gentiles», para algunos<br />

teólogos el «segundo fundador<br />

del cristianismo», y que<br />

Nietzche, con malicia, llamó<br />

el «desangelista» (anunciador<br />

de malas noticias), y el filósofo<br />

marxista italiano Gramsci,<br />

con no poca desenvoltura,<br />

calificó como «el Lenin del<br />

cristianismo». Con más tino<br />

lo ha definido el biblista —y<br />

flamante presidente del Pontificio<br />

Consejo para la Cultura—<br />

Gianfranco Ravasi, al<br />

decir, simplemente, de Pablo,<br />

que es un «modelo de vida a<br />

imitar», y lamentar que sus<br />

escritos estén casi totalmente<br />

ausentes en la predicación de<br />

los sacerdotes y en el conocimiento<br />

de los seglares. Ravasi<br />

sospecha que son pocos<br />

los cristianos que han leído<br />

íntegramente, y con atención,<br />

la Carta a los Romanos.<br />

Ruini anuncia<br />

su jubilación<br />

«Mi servicio como cardenal<br />

vicario ha concluido». Con<br />

esta frase, el cardenal Camillo<br />

Ruini empieza a poner fin<br />

a un mandato, el de número<br />

dos en la diócesis de Roma,<br />

que dio comienzo el 17 de<br />

enero de 1991. Celebró una<br />

968


misa solemne en la basílica<br />

de San Juan de Letrán, la catedral<br />

de Roma, al cumplirse<br />

el 25 aniversario de su designación<br />

como obispo. El cardenal<br />

Ruini —que algunos<br />

consideraron «papable» en el<br />

último cónclave— ha calificado<br />

su cargo como «un don<br />

grandísimo» que le hicieron<br />

Juan Pablo II y luego Benedicto<br />

XVI, aunque para el<br />

purpurado, que cuenta 77<br />

años, un don igualmente<br />

grande lo ha recibido todos<br />

estos años «de Roma misma,<br />

Roma diócesis y Roma ciudad,<br />

un don que he comprendido<br />

poco a poco y cada<br />

vez más».<br />

El cardenal vicario ha declarado<br />

también que «si los<br />

obispos hubiesen estado<br />

más cercanos y compactos<br />

en torno al Pontífice, incluso<br />

cuando éste ha tenido que<br />

pronunciar palabras incómodas<br />

anunciando el Evangelio,<br />

tantos problemas de la Iglesia<br />

no se habrían producido».<br />

Pero, «este es el camino del<br />

futuro para superar las dificultades<br />

de la Iglesia».<br />

Benedicto XVI ha agradecido<br />

los servicios del cardenal<br />

Ruini «por su compromiso<br />

al servicio de la Iglesia de<br />

Roma». El Papa ha dicho<br />

también que cuando le eligió<br />

Juan Pablo II, «él supo<br />

encontrar en usted un colaborador<br />

experto, fiable, generoso,<br />

que ha sabido posponer<br />

cualquier otro interés<br />

al cuidado asiduo y afectuoso<br />

de la diócesis, la misma<br />

colaboración que me ha<br />

ofrecido estos años», añade<br />

el Papa, en su mensaje a<br />

Ruini.<br />

Como «pequeño testamento»<br />

a la diócesis de<br />

Roma, el cardenal Ruini ha<br />

invitado a los fieles a «mirar<br />

a los grandes retos que hoy<br />

debemos afrontar», mirándolos<br />

con ojos iluminados y<br />

penetrados por el ojo de la<br />

fe, más penetrante que el ojo<br />

969<br />

humano. En círculos perioísticos<br />

se da por seguro el<br />

nombramiento del cardenal<br />

Angelo Vallini, presidente<br />

del Tribunal Supremo de la<br />

Signatura Apostólica, como<br />

vicario del Papa para Roma.<br />

Iniciativas en el 50<br />

aniversario de la<br />

muerte de Pío XII<br />

Con ocasión del 50 aniversario<br />

de la muerte del<br />

Papa Pío XII (9 de octubre<br />

de 1958), la Santa Sede ha<br />

organizado una serie de<br />

actos, entre los que destacan<br />

un Congreso sobre su<br />

magisterio (6 al 8 de noviembre<br />

de 2008), y una exposición<br />

fotográfica (21 de<br />

octubre de 2008-6 enero<br />

de 2009).<br />

En una conferencia de<br />

prensa para la presentación<br />

de estos eventos, celebrada el<br />

pasado 17 de junio, el obispo<br />

Salvatore Fisichella, rector<br />

de la Pontificia Universidad<br />

Lateranense, destacó que en<br />

este Papa «confluyen diversas<br />

situaciones históricas relevantes:<br />

las dos guerras mundiales,<br />

el genocidio de los judíos,<br />

la ocupación comunista<br />

de varias naciones cristianas,<br />

la “guerra fría”, las nuevas<br />

conquistas de la ciencia, las<br />

innovaciones de algunas escuelas<br />

teólogicas».<br />

Para el obispo auxiliar de<br />

Roma, Pío XII «sigue siendo<br />

en gran parte desconocido»,<br />

como en el caso del «influjo<br />

que tuvo sobre el Concilio<br />

Vaticano II». En este contexto,<br />

Fisichella recordó las 43 encíclicas<br />

«que marcaron su pon-<br />

Vaticano<br />

tificado y los numerosísimos<br />

discursos con los que afrontó<br />

los temas más controvertidos<br />

de la época».<br />

El Congreso tratará de la<br />

visión general de Pio XII, el<br />

contexto histórico y cultural<br />

en el que elaboró su magisterio,<br />

así como su enseñanza<br />

en los campos de la<br />

eclesiología, la liturgia, el<br />

papel del laicado y su visión<br />

sobre las relaciones<br />

Iglesia-mundo, mariología,<br />

y temas concernientes a la<br />

medicina, la moral y el derecho<br />

canónico.<br />

La exposición fotográfica,<br />

titulada Pío XII, el hombre y el<br />

pontificado, contará con fotografías<br />

que cubrirán todo el<br />

arco vital de este Papa, desde<br />

su juventud hasta su pontificado,<br />

con fotos, en algunos<br />

casos, inéditas, aportadas por<br />

«L’Osservatore Romano» y por<br />

la familia de los príncipes Pacelli,<br />

además de documentos<br />

y objetos personales.<br />

La exposición sigue los<br />

acontecimientos que van<br />

desde el nacimiento de Pío<br />

XII (Roma, 2 marzo 1876), las<br />

etapas de su formación juvenil,<br />

hasta llegar a su ordenación<br />

sacerdotal (2 abril 1899),<br />

su consagración como obispo,<br />

de manos de Benedicto<br />

XV, en la Capilla Sixtina (13<br />

mayo 1917) y su designación<br />

como nuncio en Baviera<br />

(1917-1919) y luego en Berlín<br />

(1925-1929). Sigue su período<br />

como secretario de Estado,<br />

como estrecho colaborador<br />

de Pío XI, como lo atestiguan<br />

«las correcciones y<br />

notas de Pacelli en la preparación<br />

de los documentos<br />

más importantes, como la<br />

encíclica Mit brenneder Sorge<br />

(condena del nazismo)», asegura<br />

Giovanni Morillo, presidente<br />

de la Fundación para<br />

los Bienes y las Actividades<br />

Artísticas de la Iglesia. ■<br />

Miguel Angel Agea<br />

Ciudad del Vaticano<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 21


Reportaje<br />

PABLO DE TARSO<br />

HERALDO DE CRISTO<br />

APOSTOL DE LOS GENTILES<br />

Miguel de Cervantes escribe:<br />

«Don Quijote de la Mancha viendo<br />

un retrato en lienzo de San<br />

Pablo exclama: fue el mayor enemigo<br />

que tuvo la Iglesia de Dios nuestro Señor<br />

en su tiempo, el mayor defensor suyo<br />

que tendrá jamás, caballero andante por<br />

la vida y santo a pie por la muerte, trabajador<br />

incansable de la viña del Señor,<br />

doctor de las gentes a quien sirvieron<br />

de escuela los cielos, y de catedrático y<br />

maestro el mismo Jesucristo». Hermosas<br />

y bellas palabras que perfectamente sintetizan<br />

su personalidad, vida, historia y<br />

su pensamiento cristiano.<br />

Ciertamente, «Pablo fue el mayor<br />

enemigo que tuvo la Iglesia de Dios<br />

nuestro Señor en su tiempo». Nace entre<br />

el año 7 al año 10 de la Era cristiana,<br />

en Tarso, entonces una hermosa, culta y<br />

próspera colonia griega. Sus padres<br />

eran ricos comerciantes judíos de la<br />

secta farisea, de habla y ascendencia<br />

aramea, quienes le imponen el nombre<br />

hebreo de Saúl, en griego Saulo. Le<br />

educan en su religión judía farisea y en<br />

la cultura helenista. Obtiene el oficio de<br />

tejedor de telas y consigue el «jus civitatis»<br />

(derecho de ciudadanía romana).<br />

De Saulo a Pablo<br />

A los quince años, sus padres le envían<br />

a Jerusalén para que estudie la religión<br />

judía en la escuela del sabio rabí<br />

Gamaliel. En ella, amplía y perfecciona<br />

las enseñanzas mosaicas, proféticas,<br />

22 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

históricas y sapienciales del Antiguo<br />

Testamento y aprende la prodigiosa y<br />

sutil dialéctica de su maestro. Se convierte<br />

en un fanático activista judío persiguiendo<br />

a los discípulos y seguidores<br />

de Jesús, llamados hermanos o nazarenos.<br />

Presencia y participa en la muerte a<br />

pedradas del primer mártir cristiano, el<br />

diácono Esteban, por hablar contra el<br />

Templo judío y contra la Ley mosaica y<br />

por recriminar a los judíos, que sus padres<br />

mataron a los que anunciaron de<br />

antemano la venida del Justo, a quien<br />

ahora ellos han traicionado y asesinado.<br />

Pablo enfurecido e irritado, pide cartas<br />

de recomendación al sumo sacerdote<br />

judío para las sinagogas de Damasco<br />

con el fin de llevar atados a Jerusalén a<br />

todos los cristianos de esta ciudad. De<br />

970


camino hacia ella, «rodeado de una luz<br />

celeste, cae al suelo, y oye una voz que<br />

le dice : «Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?».<br />

Le pregunta: «¿Quién eres, señor?»<br />

Le contesta: «Yo soy a quien tú<br />

persigues, levántate, entra en la ciudad y<br />

te dirán lo que tienes que hacer» (Hch 9,<br />

4-6). Atónito, se levanta del suelo con<br />

ojos abiertos, pero sin poder ver. Le llevan<br />

de la mano a Damasco, donde estuvo<br />

tres días sin ver, ni comer ni beber.<br />

Por mandato divino, el discípulo cristiano,<br />

Ananías, le visita en la casa donde<br />

se hospeda, y le dice: «Hermano Saulo,<br />

el Señor que se te apareció en el camino<br />

que traías, me ha enviado para<br />

que recobres la vista y seas lleno del Espíritu<br />

Santo» (Hch 9, 17). Recobra inmediatamente<br />

la vista, se convierte al Cristianismo,<br />

y es bautizado, hecho que<br />

tuvo lugar el año 36 de la Era Cristiana.<br />

Desde entonces, ciertamente, Pablo<br />

será «el mayor defensor de Jesús que<br />

tendrá jamás». Empieza a enseñar y predicar<br />

en las sinagogas de Damasco, que<br />

Jesús Nazareno es el Hijo de Dios, el<br />

Mesías o Cristo, a quien los judíos esperan.<br />

Ello provoca sus iras incontenibles<br />

intentando matarlo. Regresa a Jerusalén,<br />

donde Bernabé lo presenta a<br />

los apóstoles. En esta ciudad, predica<br />

con valor y audacia el Cristianismo entre<br />

los judíos helenistas,<br />

quienes, también, intentan<br />

quitarle la vida.<br />

Vuelve a Tarso, a casa de<br />

sus padres, quienes no le<br />

reciben bien por su conversión<br />

cristiana. Regresa en<br />

compañía de Bernabé a Antioquia,<br />

ciudad donde, por<br />

primera vez, los discípulos<br />

de Jesús, son llamados<br />

«cristianos». Hasta entonces<br />

eran conocidos como «hermanos<br />

o nazarenos». En<br />

esta ciudad, durante dos<br />

años se prepara a fondo<br />

para su misión apostólica<br />

entre los gentiles.<br />

Estando en esta metrópoli,<br />

llegaron unos discípulos<br />

procedentes de Judea<br />

diciendo a los hermanos «si no os circuncidáis<br />

según la costumbre mosaica<br />

no podéis salvaros». Ello dio motivo a<br />

una gran discusión entre Pablo y Bernabé<br />

y ellos, y deciden ir a Jerusalén para<br />

resolver esta cuestión con los apóstoles<br />

y presbíteros. Reunidos los apóstoles y<br />

los presbíteros, habla Pedro y la asamblea<br />

calla; a continuación escuchan a<br />

Bernabé y a Pablo, que defienden la no<br />

circuncisión de los gentiles. Entonces, la<br />

asamblea por boca de Santiago, el hermano<br />

del Señor, acuerda no imponerles<br />

la circuncisión judía.<br />

Caballero andante, santo<br />

a pie<br />

En adelante, Pablo será, ciertamente,<br />

«el caballero andante por la vida y santo<br />

a pie por la muerte, y un trabajador incansable<br />

de la viña del Señor». Inicia sus<br />

tres viajes apostólicos de misionero trepidante,<br />

el año 45, partiendo de Jerusalén;<br />

ganándose la vida trabajando de telonero<br />

para obtener los recursos materiales<br />

para afrontar sus gastos y sacando<br />

tiempo suficiente para escribir su famosas<br />

Cartas a los Gálatas, Corintios (1.º y<br />

2.ª), Romanos y Tesalonienses (1.º y 2.º).<br />

En su primer viaje misionero, que<br />

dura del año 45 al 49, recorre Chipre<br />

—donde cambia su nombre griego de<br />

Saulo por el latino de Paulo, en castellano<br />

Pablo—. Asia Menor, Panfilia, Pisidia<br />

Licoania, Derbe, Antioquia de Pisidia,<br />

Iconio, Listres y Antioquia, regresando a<br />

Jerusalén. En su segundo viaje misionero,<br />

que dura del año 50 al 53, visita las<br />

comunidades cristianas creadas por él<br />

en Asia Menor y Galacia, recorre Filipo<br />

de Macedonia, Tesalónica, Atenas y Corinto,<br />

Efeso y Antioquia, regresando a<br />

971 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

Reportaje<br />

Jerusalén. En su tercer viaje misionero,<br />

que dura desde el año 53 al 58, vuelve a<br />

Efeso, Grecia, Corinto, llega a las orillas<br />

del Adriático, retrocede a las islas de<br />

Mitilene, Chíos, Samos y Rodas y Siria,<br />

regresando a Jerusalén.<br />

En Jersulén le acusan de introducir<br />

en el atrio del Templo a un incircunciso,<br />

lo que da lugar a un tumulto violento,<br />

teniendo que intervenir el tribuno romano<br />

Lisias para evitar su linchamiento.<br />

Al pretender flagelarlo, le manifiesta<br />

que es ciudadano romano. Entonces, lo<br />

envía al procurador Félix con residencia<br />

en Cesarea, quien le retiene en prisión.<br />

En septiembre del año 60, acompañado<br />

del centurión Julio, de una escolta<br />

de legionarios y de Lucas y Aristarco,<br />

emprende un largo y penoso viaje<br />

marítimo, lleno de aventuras y peripecias,<br />

desde Cesarea a Roma, arribando a<br />

las orillas de una playa italiana, en Puzol,<br />

y andando por la vía Apia, llega a<br />

Roma en la primavera del año 61.<br />

Pablo, entregado a la fuerza pretoriana<br />

y puesto bajo custodia militar, es autorizado<br />

a vivir en una casa alquilada, en la<br />

cual podía recibir visitas. En esta situación,<br />

permaneció dos años, recibiendo<br />

numerosas y diversas personas, ansiosas<br />

de verle y conocerle; entre ellas.<br />

En torno a Pablo, se agrupan una serie<br />

de fieles cristianos, entre<br />

los cuales están Lucas, autor<br />

del tercer evangelio y del<br />

libro de los Hechos de los<br />

Apóstoles; Marcos, autor<br />

del segundo evangelio; Timoteo,<br />

Aristarco, Epatras,<br />

Tíquico y otros más. Pablo,<br />

prisionero, irradiaba en sus<br />

conversaciones una fuerte<br />

personalidad y un poder<br />

enorme espiritual de hermandad<br />

cristiana.<br />

En esta situación de prisionero,<br />

escribe las Cartas,<br />

llamadas de la Cautividad, a<br />

los Efesios, Colosenses, Filipenses<br />

y Filemón. Absuelto<br />

y liberado, en el año 63,<br />

viaja a Grecia, Creta y Corinto.<br />

Ciertos autores entienden<br />

que, tal vez, pudo haber venido,<br />

en esa ocasión, a Tarraco, en la Hispania<br />

romana, dado su deseo. Detenido<br />

en Tróade, de nuevo, regresa a Roma.<br />

Escribe sus tres Cartas pastorales a Timoteo<br />

y Tito y la Carta a los Hebreos.<br />

23


Reportaje<br />

En el día 29 del año 67,<br />

según una antigua tradición<br />

afirma, Pablo fue ejecutado a<br />

espada según un privilegio<br />

que se concedía a los ciudadanos<br />

romanos, en el camino<br />

de Ostia, ordenado por el<br />

loco emperador Nerón en su<br />

persecución contra los cristianos,<br />

a quienes culpó maliciosamente<br />

del incendio de<br />

Roma. Pedro fue crucificado,<br />

el mismo día o un día después,<br />

con la cabeza hacia<br />

abajo, que había pedido a sus verdugos,<br />

recordando humildemente a Jesús,<br />

su divino Maestro. Tácito escribe en<br />

sus Anales: «Según un rumor siniestro,<br />

el emperador Nerón había incendiado<br />

la ciudad de Roma y para disipar esta<br />

creencia y culpar a otros, martirizándolos,<br />

acusó a los cristianos».<br />

Pablo, personalmente, era de pequeña<br />

estatura y de salud débil. Sufría una<br />

enfermedad dolorosa, humillante y crónica,<br />

como confirma en Gal 4, 13-15; sin<br />

embargo, era todo un hombre de acción.<br />

Poseía un temperamento de jefe,<br />

una voluntad de hierro, una constancia<br />

inquebrantable, un gran sentido de iniciativa,<br />

una capacidad extraordinaria<br />

para el trabajo y un carácter apasionado,<br />

impetuoso y conquistador, que movía<br />

al amor o al odio; junto con un alma<br />

de fina sensibilidad y condescendencia<br />

y un corazón lleno de ternura, que despertaba<br />

fuerte simpatía y atraía profundamente<br />

a los demás. Era un gran líder.<br />

Pablo, además, era un gran psicólogo<br />

introspectivo, un gran dialéctico exegético<br />

bíblico y un ingenioso escritor<br />

con un vocabulario griego extenso,<br />

propio de las gentes cultas de su tiempo.<br />

Utilizaba la diatriba griega, hacía interpelaciones<br />

a sus lectores preguntándoles<br />

y poniéndoles objeciones, amaba<br />

la antítesis Dios-mundo, justicia-pecado,<br />

espíritu-carne, espíritu-letra, hombre<br />

viejo-hombre nuevo, y sus conclusiones<br />

van de menor a mayor.<br />

El doctor de las gentes<br />

Pablo es, sin duda, «el doctor de las<br />

gentes, a quienes les sirvieron las escuelas<br />

de los cielos, y de catedrático el<br />

mismo Jesucristo». Sus fuentes de inspiración<br />

son su fe judía farisaica en Dios,<br />

creador y Señor del cielo y de la tierra,<br />

que aparecerá al final de los tiempos<br />

como juez y rey de todos los hombres<br />

para premiarlos o castigarlos según sus<br />

merecimientos.<br />

Pablo funda las primeras comunidades<br />

cristianas en el mundo greco-romano,<br />

se preocupa de la unidad de la<br />

Iglesia como cuerpo místico de Cristo y<br />

de su igualdad entre todos sus fieles.<br />

Da valor al trabajo al escribir «el que no<br />

quiera trabajar que no coma» (2 Tes 2,<br />

10), fija los principios y la esencia del<br />

matrimonio cristiano y las relaciones<br />

entre padres e hijos, y afirma la inmortalidad<br />

del ser humano al escribir<br />

«cuando esta carne se revista de incorruptibilidad<br />

y este cuerpo de inmortalidad,<br />

la muerte será vencida por la victoria»<br />

(1 Cor 15, 51-55)<br />

Sus catorce Cartas tienen un mismo<br />

objetivo, predicar la divinidad de Jesucristo<br />

crucificado y resucitado, «escándalo<br />

para los judíos, necedad para los<br />

griegos, pero salvación para todos los<br />

hombres». Las inicia con un saludo, le<br />

sigue un introducción de alabanza o de<br />

acción de gracias, a continuación expone<br />

la doctrina evangélica y una exhortación<br />

para su práctica, y termina con saludos<br />

y recomendaciones.<br />

En la Carta a los Romanos, la más<br />

larga y densa doctrinal, expone su famosa<br />

doctrina cristiana. «el hombre se<br />

justifica y se salva por la fe en Jesucristo,<br />

y no por la Ley mosaica», basado en<br />

el principio «justus ex fide vivet». En la<br />

Carta a los Gálatas, insiste en la suficiencia<br />

de la sola fe cristiana para la salvación<br />

del ser humano, y en la inutilidad<br />

de la Ley mosaica y su circuncisión.<br />

En la Carta primera a los Corintios, corrige<br />

los defectos y pecados de esta comunidad<br />

cristiana, entre ellos, a los que<br />

niegan la resurrección de los muertos; y<br />

los exhorta a vivir «en caridad, que es lon-<br />

24 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

gámine, benigna, no envidiosa<br />

ni jactanciosa ni descortés,<br />

no busca lo suyo ni<br />

se irrita ni piensa mal, no se<br />

alegra de la injusticia, se<br />

complace de la verdad,<br />

todo lo excusa, todo lo<br />

cree, todo lo espera y todo<br />

lo tolera». (1 Cor 13, 4-6). En<br />

la segunda Carta a los Corintios,<br />

comunidad por la<br />

que Pablo sintió gran afecto,<br />

les explica su relación y<br />

comportamiento con ellos.<br />

En la Carta a los Efesios, expone el<br />

misterio de Iglesia y los exhorta a su<br />

unidad. En la Carta a los Filipenses, les<br />

habla del misterio de Cristo y les exhorta<br />

a imitarle. En la Carta a los Colosenses,<br />

insiste en el misterio de Cristo, del<br />

que se considera su heraldo para proclamarlo,<br />

y les advierte de los falsos<br />

profetas. En las Cartas primera y segunda<br />

a los Tesalonicenses, les manifiesta<br />

las fatigas que padeció en su predicación<br />

evangélica, los exhorta a la caridad<br />

y al trabajo, y les recuerda que la resurrección<br />

de Jesucristo es la garantía de<br />

nuestra resurrección.<br />

En la Carta primera a Timoteo, le instruye<br />

en las condiciones que han de tener<br />

los presbíteros y diáconos, sobre los<br />

falsos profetas, como ha de tratar a las<br />

personas de la Iglesia y gobernarse a si<br />

mismo. En la segunda Carta a Timoteo,<br />

como inmediata despedida de esta vida,<br />

le conjura: «Predica la Palabra, insiste a<br />

tiempo y a destiempo, reprende, amenaza,<br />

exhorta con paciencia y doctrina».<br />

En su Carta a Tito, le da unas instrucciones<br />

sobre las condiciones que han<br />

de tener los presbíteros, y como ha de<br />

tratar a los ancianos, jóvenes y siervos<br />

en la Iglesia y respetar a la autoridad.<br />

En su Carta a Filemón, le pide, por caridad,<br />

trate al siervo Enésimo no como<br />

tal, sino como hermano. En su Carta a<br />

los Hebreos, de distinto estilo, expone<br />

la importancia del sacerdocio de Jesucristo<br />

y de Aarón, como expiación de<br />

los pecados, siendo el sacerdocio de<br />

Cristo el que realiza la eficaz expiación.<br />

Ciertamente, San Pablo fue el heraldo<br />

de Jesucristo y el apóstol de los gentiles,<br />

prototipo del misionero cristiano.<br />

¡Don Quijote de la Mancha tenía razón<br />

al hablar de este modo de San Pablo! ■<br />

José Barros Guede<br />

972


Cuando ya se aproxima la solemnidad<br />

litúrgica de los Príncipes de<br />

los Apóstoles, el Sumo Pontífice,<br />

movido por pastoral desvelo, desea<br />

proceder oportunamente a abrir los tesoros<br />

espirituales con vistas a la santificación<br />

de los fieles, de forma que éstos<br />

puedan renovar y reforzar, con aún<br />

mayor fervor en tan piadosa y feliz<br />

ocasión, sus propósitos de salvación<br />

sobrenatural ya desde las Primeras Vísperas<br />

de dicha solemnidad, principalmente<br />

en honor del Apóstol de las<br />

Gentes, de cuyo nacimiento terrenal<br />

pronto se cumplirá el bimilenario.<br />

En efecto, el don de las indulgencias<br />

que el Romano Pontífice ofrece a la<br />

Iglesia universal abre el camino para alcanzar<br />

en máximo grado esa purificación<br />

interior que, al tiempo que honra<br />

al bienaventurado apóstol Pablo, exalta<br />

la vida sobrenatural en el corazón de<br />

los fieles y los estimula suavemente a<br />

producir frutos de obras buenas.<br />

Por ello esta Penitenciaría Apostólica, a<br />

la que el Santo Padre ha encomendado la<br />

tarea de preparar y redactar el Decreto<br />

de concesión y obtención de las indulgencias<br />

valederas durante todo el Año<br />

Paulino, mediante el presente Decreto,<br />

emitido según la voluntad del Augusto<br />

Pontífice, benignamente concede las mercedes<br />

que seguidamente se indican:<br />

I.—A cada fiel cristiano realmente<br />

arrepentido que, debidamente purificado<br />

mediante el sacramento de la Penitencia<br />

y fortalecido con la Sagrada Comunión,<br />

piadosamente visite en peregrinación<br />

la basílica papal de San Pablo en<br />

la Vía Ostiense y rece según las intenciones<br />

del Sumo Pontífice, se le concede<br />

e imparte misericordiosamente en el Señor<br />

la indulgencia plenaria de la pena<br />

temporal que debiera expiar por sus pecados,<br />

una vez obtenidos la absolución<br />

sacramental y el perdón de sus faltas.<br />

Los fieles cristianos podrán lucrar esta<br />

indulgencia plenaria tanto para sí como<br />

para los fieles difuntos, y tantas veces<br />

973<br />

cuantas cumplan las<br />

obras ordenadas, sin<br />

perjuicio de la norma<br />

según la cual sólo se<br />

puede obtener la indulgencia<br />

plenaria<br />

una vez al día.<br />

Además, y con el<br />

fin de que las oraciones<br />

que se elevan con<br />

ocasión de tales sagradas<br />

visitas dirijan e<br />

impulsen con mayor<br />

intensidad a los ánimos<br />

de los fieles a<br />

venerar la memoria<br />

de San Pablo, se establece<br />

y dispone lo siguiente:<br />

los fieles,<br />

además de elevar sus<br />

súplicas a Dios ante<br />

el altar del Santísimo<br />

Sacramento, cada<br />

uno conforme a su<br />

propia piedad, deberán<br />

rezar la Oración<br />

Dominical y el Símbolo de los Apóstoles<br />

ante el altar de la Confesión, añadiendo<br />

invocaciones piadosas en honor de la<br />

Bienaventurada Virgen María y de San<br />

Pablo. Dicha devoción deberá ir siempre<br />

asociada a la memoria de San Pedro,<br />

Príncipe de los Apóstoles.<br />

II.—Los fieles cristianos de las diferentes<br />

Iglesias locales, una vez cumplidas<br />

las condiciones habituales (confesión<br />

sacramental, comunión eucarística<br />

y oración según las intenciones del<br />

Sumo Pontífice) y desterrado todo apego<br />

al pecado, podrán lucrar la indulgencia<br />

plenaria participando con devoción<br />

en una acción sagrada o en un<br />

ejercicio piadoso celebrados públicamente<br />

en honor del Apóstol de las<br />

Gentes: los días de la solemne apertura<br />

y clausura del Año Paulino, en todo lugar<br />

sagrado; en otros días que determine<br />

el ordinario del lugar, en los lugares<br />

sagrados dedicados a San Pablo y,<br />

Documentación<br />

Indulgencia plenaria para el Año Paulino<br />

Decreto de la Penitenciaría Apostólica por el que se conceden indulgencias especiales con<br />

ocasión del bimilenario del nacimiento de San Pablo (10-5-2008)<br />

La abundante iconografía<br />

escultórica del apóstol San Pablo lo<br />

acredita como uno de los quicios de<br />

la fe cristiana.<br />

en beneficio de los fieles,<br />

en otros que designe<br />

el propio ordinario.<br />

III.—Por último, los<br />

fieles incapacitados por<br />

enfermedad o por otra<br />

causa legítima y relevante,<br />

igualmente con el<br />

ánimo alejado de todo<br />

pecado y con el propósito<br />

de cumplir las condiciones<br />

habituales en<br />

cuanto les resulte posible,<br />

podrán también obtener<br />

la indulgencia plenaria,<br />

siempre y cuando<br />

se unan espiritualmente<br />

a una celebración jubilar<br />

en honor de San Pablo,<br />

ofreciendo a Dios sus<br />

oraciones y sufrimientos<br />

por la unidad de los<br />

cristianos.<br />

Para que los fieles<br />

puedan participar con mayor facilidad<br />

de tan celestiales favores, los sacerdotes<br />

facultados para escuchar las<br />

confesiones por la autoridad eclesiástica<br />

competente deberán prestarse a<br />

recibirlas con ánimo dispuesto y generoso.<br />

El presente Decreto sólo será valedero<br />

durante el Año Paulino. No obstante<br />

cualquier disposición contraria.<br />

Dado en Roma, en la sede de la Penitenciaría<br />

Apostólica, el 10 de mayo<br />

del año 2008 de la Encarnación del Señor,<br />

víspera de Pentecostés. ■<br />

Card. James Francis Stafford<br />

Penitenciario Mayor<br />

† Gianfranco Girotti, OFM Conv.<br />

Obispo titular de Meta, Regente<br />

(Original latino procedente del archivo<br />

informático de la Santa Sede; traducción<br />

de ECCLESIA)<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 25


Documentación<br />

San Pablo, servidor de Jesucristo<br />

y predicador del Evangelio (Rom 1, 1)<br />

Mensaje del Episcopado venezolano sobre el Año Paulino convocado por Benedicto XVI<br />

Al Pueblo de Dios que peregrina en<br />

Venezuela, salud y paz en el Señor Jesús.<br />

1<br />

Por feliz iniciativa del Santo Padre<br />

Benedicto XVI, a partir del 29<br />

de junio del presente año, se celebrará<br />

en toda la Iglesia Universal el <strong>AÑO</strong> PAU-<br />

LINO, cuyo objetivo, además de dar a<br />

conocer la figura y obra del Apóstol de<br />

las Naciones, es invitar a todos los creyentes<br />

y hombres de buena voluntad a<br />

profundizar en el mensaje que, por inspiración<br />

del Espíritu Santo, dejó a la Iglesia.<br />

San Pablo escribió algunas cartas a<br />

diversas comunidades cristianas y a algunos<br />

de sus cooperadores más cercanos,<br />

lo cual constituye su principal patrimonio<br />

así como un tesoro inconmensurable,<br />

a partir del cual la teología, la<br />

liturgia, la catequesis y, en general, la acción<br />

evangelizadora de la Iglesia se han<br />

nutrido en el correr de los siglos.<br />

Apóstol de Jesucristo<br />

2<br />

Pablo se distinguió en su juventud<br />

por ser un fogoso y fiel hebreo.<br />

Animado por su vivencia religiosa<br />

y considerando que actuaba de acuerdo<br />

a la Ley del Antiguo Testamento en<br />

una oportunidad solicitó licencias para<br />

ir en búsqueda de los seguidores de<br />

Cristo en Damasco y apresarlos (cf.<br />

Hech 9, 2). En el camino, por la acción<br />

del Espíritu Santo, experimentó un decisivo<br />

encuentro con Cristo, quien de<br />

perseguidor lo convirtió en un Apóstol<br />

para propagar, en medio de los gentiles<br />

el evangelio de Jesucristo (cf. Hech 9,<br />

3ss). Su conversión marcó su vida: luego<br />

de la misma, tuvo un tiempo de discernimiento,<br />

interiorización y oración<br />

para así profundizar en el misterio de<br />

Cristo. Desde su conversión y bautismo,<br />

superando miles de dificultades,<br />

se convirtió en un decidido Apóstol del<br />

Señor, Pastor de comunidades y Testigo<br />

del Resucitado. Pablo también se destacó<br />

como un misionero que supo vencer<br />

cualquier tipo de obstáculo, desde<br />

prisiones y naufragios, hasta incomprensiones<br />

y críticas, con el objetivo de<br />

llevar el anuncio del evangelio por todas<br />

partes.<br />

26 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

3<br />

Pablo tomó conciencia de ser<br />

APOSTOL DE JESUCRISTO,<br />

como lo refleja en algunas de sus Cartas<br />

(Rom 1, 1). No se trataba sólo de un<br />

título, sino de un llamado que definió<br />

para siempre su existencia. Como<br />

Apóstol, se presentó cual elegido por<br />

Dios a quien le había dado una respuesta.<br />

Desde esa realidad, asumió dos<br />

actitudes importantes e irrenunciables:<br />

el compromiso de anunciar el evangelio<br />

del Señor, pero también, y era lo más<br />

importante, manifestar que la razón de<br />

ser de su vida, desde el momento de su<br />

conversión, era Jesucristo el Señor.<br />

Todo lo que Pablo hizo y escribió, lo<br />

centró en el Señor Jesús, que inspiró su<br />

acción, y con el cual logró tener una comunión<br />

de vida de manera radical y<br />

permanente. Por otra parte, a sus discípulos,<br />

así como a los nuevos creyentes<br />

que iba consiguiendo para la Iglesia, los<br />

invitaba a que imitaran su ejemplo,<br />

pues haciéndolo, imitarían a Jesús.<br />

4<br />

No dejó pasar ninguna ocasión<br />

para anunciar el evangelio de<br />

Jesucristo. Lo hacía precisamente desde<br />

su propia experiencia. Así nos lo expresa<br />

en la carta a los Gálatas: «No soy<br />

yo quien vive, es Cristo quien vive en<br />

mí» (2, 20). Para él, Cristo era la fuente<br />

de su vida, de su acción apostólica y de<br />

la Iglesia a la que supo servir y amar<br />

con toda su fuerza. A todos pedía actuar<br />

en nombre del Señor, ya que en El<br />

hay que poner toda la esperanza y<br />

confianza como creyentes. Anunció<br />

con valentía, sin temor a las incomprensiones<br />

y rechazos, que la cruz de<br />

Cristo es la que nos da la salvación, y<br />

que su resurrección es la que nos introduce<br />

en el camino de la novedad de<br />

vida (cf. Rom 6, 4). El Cristo que predicó<br />

es el Señor vivo que derriba todo<br />

muro de división y convierte a los seres<br />

humanos en hombres nuevos (cf. Ef 2,<br />

14) Los liberó (cf. Gal 5, 1), para que vivan<br />

en libertad y dejando las tinieblas<br />

llegaran a ser luz en el Señor (cf. Ef 5,<br />

8). El centro del mensaje de Pablo es el<br />

misterio de Cristo, que ilumina la existencia<br />

del cristiano. Sin El no se puede<br />

hacer nada, El es quien salva a la humanidad<br />

y quien nos introduce en la<br />

familia de los hijos de Dios.<br />

Ay de mí si no evangelizara<br />

5<br />

Pablo, asumiendo a todo riesgo<br />

su condición de Apóstol de Jesucristo,<br />

no dudó en ningún momento<br />

en evangelizar. Esa fue su vida, como<br />

974


exclama en la carta primera a los Corintios:<br />

«Ay de mí si no evangelizara» (1<br />

Cor 9, 16). Pero evangelizar no se reducía<br />

sólo a un anuncio teórico de la Palabra<br />

de Dios. Pablo asumió muy bien<br />

lo que Jesús dejó como testamento a<br />

sus discípulos: ir a hacer discípulos a<br />

otros, para consagrarlos con el bautismo<br />

e introducirlos en el conocimiento<br />

y vivencia de la Palabra de Dios. (cf. Mt<br />

28, 19-20).<br />

6<br />

Tres son las características de la<br />

acción evangelizadora de Pablo:<br />

La primera de ellas es el anuncio explícito<br />

del evangelio de Jesucristo el cual<br />

realizó con mucho convencimiento. No<br />

predica por mero oficio, sino por convicción<br />

y desde la vivencia personal del<br />

misterio de Cristo. En esta línea es necesario<br />

tener presente que Pablo tuvo<br />

una especial dedicación por formar a<br />

sus discípulos y cooperadores, para<br />

que fueran también fieles discípulos del<br />

Señor y misioneros en las diversas comunidades<br />

de la Iglesia naciente y se<br />

encargaran de su pastoreo.<br />

7<br />

Una segunda característica es<br />

su compromiso por edificar la<br />

Iglesia, al crear y consolidar las comunidades<br />

eclesiales que estaban a su<br />

cargo (cf. 1 Tes 1, 2ss). Para ello, presentaba<br />

a la Iglesia como el Cuerpo de<br />

Cristo (Cf. Ef 4, 4), donde todos los<br />

miembros estaban unidos por la gracia<br />

del bautismo y animados por la fuerza<br />

del Espíritu Santo. Por eso, también exhorta<br />

a sus más cercanos cooperadores<br />

a que no sientan temor en cumplir<br />

con su ministerio eclesial, pues el Señor<br />

no nos ha dado espíritu de timidez (cf.<br />

2 Tim 1, 7), sino de fortaleza para cumplir<br />

con la misión de edificar el reino.<br />

8<br />

La tercera característica del servicio<br />

evangelizador de Pablo, es la<br />

insistencia en la conversión que implica<br />

la fe en Jesucristo. Creer en Jesús exige a<br />

los creyentes revestirse de Cristo, a actuar<br />

en su nombre y a caminar en la novedad<br />

de vida. Para ello, el creyente tiene<br />

una gracia particular: la vida en el Espíritu<br />

de la cual habla en la Carta a los Romanos<br />

(cap. 8). Ese Espíritu «nos identifica<br />

con Jesús-Camino, abriéndonos al<br />

misterio de salvación para que seamos<br />

hijos del Padre y hermanos unos de<br />

otros; nos identifica con Jesús-Verdad,<br />

enseñándonos a renunciar a nuestras<br />

975<br />

mentiras y propias ambiciones, y nos<br />

identifica con Jesús-Vida, permitiéndonos<br />

abrazar su plan de amor y entregarnos<br />

para que todos tengan vida en El».<br />

(Documento de Aparecida, 137).<br />

Reaviva la gracia recibida<br />

9<br />

A su discípulo Timoteo, Pablo le<br />

pide reavivar continuamente la<br />

gracia recibida por la imposición de las<br />

manos (cf. 2 Tim 1, 6). Si bien, Pablo se<br />

refiere al ministerio ejercido por su discípulo,<br />

esta invitación se nos hace de<br />

manera permanente a nosotros. La<br />

gracia del bautismo, vivida a través de<br />

los carismas y ministerios propios de<br />

cada bautizado, debe estar siempre<br />

presente y activa en cada uno de nosotros.<br />

Por eso, además de las variadas<br />

acciones evangelizadoras de la Iglesia,<br />

el Año Paulino nos sale al encuentro<br />

como un motivo para fortalecer la gracia<br />

recibida de parte de Dios.<br />

10<br />

En sintonía con lo que nos<br />

proponen la Iglesia Universal<br />

y, en nuestra nación, el Concilio Plenario<br />

de Venezuela, este tiempo es un momento<br />

oportuno para reafirmar nuestra<br />

pertenencia a la Iglesia, Cuerpo de Cristo.<br />

Para ello, hemos de reforzar nuestra<br />

opción de seguimiento a Jesucristo, el<br />

Señor. En este sentido, las palabras de<br />

Pablo a Timoteo son un indicativo de lo<br />

que hemos de hacer: Acuérdate de Jesucristo…<br />

resucitado de entre los muertos,<br />

si con El morimos, viviremos… y<br />

tendremos parte en su reino con El (2<br />

Tim 2, 8-11-12). Nuestra existencia cristiana<br />

debe ser un reflejo de la gloria de<br />

Dios; por tanto, la comunión con el Señor<br />

Jesús, se debe mantener y manifestar<br />

de manera continua.<br />

11<br />

El Año Paulino nos permitirá,<br />

a través de diversas actividades<br />

eclesiales, así como de iniciativas<br />

comunitarias y personales, conocer<br />

mejor la obra y enseñanza de San Pablo.<br />

Recomendamos vivamente a los<br />

agentes de pastoral, particularmente a<br />

los párrocos, catequistas y religiosos a<br />

promover la lectura y estudios de sus<br />

Cartas, que no sólo servirá para enriquecer<br />

nuestra fe, sino también para<br />

favorecer el testimonio de vida de hijos<br />

de la luz (cf. Ef. 5, 8), con el cual manifestamos<br />

a tiempo y destiempo el<br />

evangelio de Jesús y nuestra adhesión<br />

a su Persona.<br />

12<br />

Invitamos a los párrocos, a<br />

los responsables de los Seminarios,<br />

de las Universidades Católicas<br />

y de los Institutos Superiores de la<br />

Iglesia, a los directivos de los Movimientos<br />

de Apostolado Seglar y demás<br />

agentes de pastoral a organizar jornadas<br />

de estudio sobre la vida y obra de<br />

San Pablo, la lectura orante de sus Cartas<br />

y todas aquellas actividades que favorezcan<br />

la difusión y conocimiento de<br />

lo que Pablo nos ha dejado como herencia<br />

especial con sus escritos y testimonio.<br />

Animamos, de manera muy especial<br />

a todos los agentes de pastoral a<br />

imitar el ardor apostólico de Pablo y a<br />

contagiarlo en medio de todos los fieles<br />

y hombres de buena voluntad.<br />

13<br />

Anhelamos que este Año<br />

Paulino, sea un tiempo propicio<br />

para que las diversas comunidades,<br />

organismos e instancias eclesiales<br />

confirmen su fe, en el amor y en la esperanza<br />

que nos vienen del Señor Jesús.<br />

Es conveniente que en cada diócesis<br />

y en las diversas comunidades eclesiales<br />

se organice la apertura de este<br />

Año Paulino con una celebración eucarística<br />

en fecha cercana al 29 de junio.<br />

14<br />

Gracias a la enseñanza de<br />

Pablo, las primeras comunidades<br />

fueron creciendo en el amor de<br />

Dios. La Iglesia, a lo largo de los siglos<br />

de su historia, ha recibido y se ha enriquecido<br />

con la herencia del Apóstol<br />

Pablo. Hoy, con los desafíos de la Nueva<br />

Evangelización, el Apóstol de las Naciones<br />

nos vuelve a hacer la invitación<br />

que siempre hizo a sus comunidades:<br />

centrar nuestra fe en Jesús, actuar en<br />

su nombre, proclamar su evangelio,<br />

con la firme convicción que el mismo<br />

Pablo tenía cuando confesó por El, yo<br />

soy lo que soy (1 Cor 15, 10).<br />

15<br />

Documentación<br />

Saludamos con afecto a todos<br />

los miembros de la Iglesia, a<br />

los hombres de buena voluntad y a los<br />

Institutos religiosos de carisma paulino.<br />

Que la intercesión de Pablo, Apóstol de<br />

Jesucristo, la bendición de María, Madre<br />

de Dios y la gracia del Señor nos acompañen<br />

en todo momento. ■<br />

Caracas, 24 de abril del año 2008.<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 27


Documentación<br />

Papel de Grecia en el Año Paulino<br />

Discurso de Benedicto XVI en la presentación de Cartas credenciales<br />

del nuevo embajador de Grecia ante la Santa Sede, señor Miltiadis Hiskakis (15-3-2008)<br />

Excelencia: Es para mí un placer recibiros<br />

en el Vaticano y aceptar las<br />

Cartas que os acreditan como embajador<br />

extraordinario y plenipotenciario<br />

de la República Helénica ante la Santa<br />

Sede. Os doy las gracias por el amable<br />

saludo que me habéis transmitido<br />

de parte de Su Excelencia el señor Karolos<br />

Papoulias, a quien ruego aseguréis,<br />

así como a los dirigentes de vuestro<br />

país y al pueblo griego, mis mejores votos<br />

y oraciones por su bienestar y paz.<br />

En los últimos años, varios encuentros<br />

significativos han venido a reforzar<br />

los lazos de buena voluntad ya<br />

existentes entre Grecia y la Santa Sede.<br />

Con motivo del Jubileo del año 2000,<br />

mi venerado antecesor el Papa Juan<br />

Pablo II visitó vuestro país en el marco<br />

de su peregrinación tras las huellas de<br />

San Pablo. Ello estuvo en el origen de<br />

un intercambio de visitas de delegaciones<br />

ortodoxas y católicas a Roma y<br />

Atenas. En 2006 tuve la alegría de recibir<br />

aquí en el Vaticano a vuestro presidente<br />

y el honor de recibir una visita<br />

de Su Beatitud Cristodoulos, cuyo reciente<br />

fallecimiento siguen llorando los<br />

cristianos de vuestro país y del mundo<br />

entero. Pido al Señor que otorgue a<br />

tan abnegado pastor el descanso de<br />

sus fatigas y lo bendiga por sus valientes<br />

esfuerzos por reparar la división<br />

entre cristianos en Oriente y en Occidente.<br />

Aprovecho la ocasión para<br />

transmitir al nuevo arzobispo de Atenas<br />

y de toda Grecia, Su Beatitud Ieronymos,<br />

mi sincero y fraterno saludo<br />

de paz junto con la seguridad de mi<br />

oración constante por un ministerio<br />

provechoso, así como por su salud.<br />

Permitidme también aprovechar esta<br />

oportunidad para reiterar mi disposición<br />

a colaborar en el camino que lleva<br />

a la unidad cristiana. A este respecto,<br />

Vuestra Excelencia ha subrayado los<br />

signos de esperanza generados por los<br />

encuentros ecuménicos que han tenido<br />

Intercambio de obsequios entre el nuevo<br />

embajador de Grecia ante la Santa Sede y el<br />

Papa Benedicto XVI.<br />

lugar durante los últimos decenios.<br />

Unos encuentros que no sólo han reafirmado<br />

lo que católicos y ortodoxos<br />

ya compartimos, sino que han abierto<br />

ya la puerta a debates más profundos<br />

acerca del significado exacto de la unidad<br />

de la Iglesia. No hay duda de que<br />

todas las partes deberán dar muestras<br />

de honradez y confianza si se quiere<br />

seguir dando un tratamiento adecuado<br />

a las importantes cuestiones suscitadas<br />

por dicho diálogo. Nos anima ese<br />

«nuevo espíritu» de amistad que ha caracterizado<br />

nuestras conversaciones, e<br />

invitamos a todos los interlocutores a<br />

una conversión y a una oración permanentes,<br />

pues sólo éstas pueden asegurar<br />

que los cristianos alcancen un día<br />

esa unidad por la que Jesús rezó con<br />

tanto fervor (cf. Jn 17, 21).<br />

El inminente Jubileo dedicado al bimilenario<br />

del nacimiento de San Pablo<br />

constituirá una ocasión particularmente<br />

favorable para intensificar nuestros<br />

esfuerzos ecuménicos, ya que Pablo<br />

fue un hombre que «se prodigó completamente<br />

en la unidad y la concordia<br />

de todos los cristianos» (Homilía en las<br />

28 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

Primeras Vísperas de la solemnidad de<br />

los apóstoles San Pedro y San Pablo,<br />

28-6-07: ECCLESIA, núm. 3.371<br />

[2007/II], pág. 1097). El brillante «Apóstol<br />

de los Gentiles» dedicó sus energías<br />

a proclamar la sabiduría de la cruz de<br />

Cristo entre las gentes de Grecia, formadas<br />

en una cultura helenística de<br />

elevado nivel. Y como el recuerdo de<br />

Pablo permanece plantado para siempre<br />

en su suelo, Grecia desempeñará<br />

un importante papel en esa celebración.<br />

Estoy seguro de que los peregrinos<br />

que acudan allí con el fin de venerar<br />

los santos lugares relacionados con<br />

la vida y predicación del Apóstol se verán<br />

rodeados de ese cálido espíritu de<br />

hospitalidad por el que vuestra nación<br />

es justamente renombrada.<br />

El fecundo intercambio entre la cultura<br />

helenística y el cristianismo hizo<br />

posible que aquélla se viera transformada<br />

por la doctrina cristiana y éste<br />

enriquecido por la lengua y la filosofía<br />

griegas, lo que permitió a los cristianos<br />

comunicar el evangelio de manera más<br />

coherente y convincente en todo el<br />

mundo. Incluso hoy en día, quienes visitan<br />

Atenas pueden leer las palabras<br />

—actualmente grabadas en el monumento<br />

situado frente al Areópago—<br />

que Pablo proclamó a los cultos ciudadanos<br />

de aquella polis cuando les habló<br />

de ese único Dios en el que «vivimos,<br />

nos movemos y existimos» (cf.<br />

Hch 17, 16-34). El vibrante anuncio<br />

paulino del misterio de Cristo a los corintios,<br />

justamente orgullosos de su legado<br />

filosófico, abrió la cultura de éstos<br />

a la influencia saludable de la Palabra<br />

de Dios. Las palabras del Apóstol<br />

siguen resonando en el corazón de los<br />

hombres y las mujeres de hoy, y pueden<br />

ayudar a nuestros contemporáneos<br />

a apreciar con mayor hondura su<br />

dignidad humana y a promover, por<br />

consiguiente, el bien de toda la familia<br />

humana. Confío en que el Año Paulino<br />

976


contribuya a fomentar la reflexión sobre<br />

la historia de Europa y a estimular<br />

a sus habitantes para que redescubran<br />

el inestimable tesoro de valores que<br />

han heredado de la sabiduría propia<br />

de la cultura helenística y del evangelio.<br />

Señor embajador: Gracias por asegurar<br />

la determinación de vuestro Gobierno<br />

a resolver las cuestiones administrativas<br />

relacionadas con la Iglesia<br />

católica en vuestra nación, entre las<br />

cuales reviste especial significado la de<br />

su situación jurídica. Los fieles católicos,<br />

aun siendo poco numerosos, aguardan<br />

un resultado favorable de tales deliberaciones.<br />

Y es que cuando los líderes religiosos<br />

y las autoridades civiles colaboran<br />

en la formulación de una legislación<br />

recta que regule la vida de las comunidades<br />

eclesiales locales, el bienestar espiritual<br />

de los fieles y el bien de toda la<br />

sociedad se ven incrementados.<br />

En el ámbito internacional, son de<br />

alabar los esfuerzos de Grecia por promover<br />

la paz y la reconciliación, particularmente<br />

en el área de la cuenca mediterránea<br />

que la rodea. Sus esfuerzos<br />

por apaciguar las tensiones y por disipar<br />

las sospechas que durante tanto<br />

tiempo han estorbado el camino hacia<br />

una convivencia armónica en la región<br />

ayudarán a reavivar un espíritu de buena<br />

voluntad entre individuos y naciones.<br />

Por último, señor embajador, no<br />

puedo dejar de recordar los incendios<br />

que arrasaron Grecia durante el último<br />

verano. Sigo recordando en mis oraciones<br />

a las víctimas de aquella catástrofe<br />

y pido a Dios gracia y fortaleza<br />

para todas las personas involucradas<br />

en el proceso de reconstrucción. Al<br />

tiempo que asumís vuestras responsabilidades<br />

en el seno de la comunidad<br />

diplomática acreditada ante la Santa<br />

Sede, os expreso mis mejores deseos<br />

en la oración por el éxito de vuestra<br />

misión y os aseguro que los diferentes<br />

departamentos de la Curia Romana estarán<br />

siempre dispuestos a asistiros en<br />

el desempeño de vuestro cometido. Y<br />

ruego de todo corazón que desciendan<br />

copiosas sobre Vuestra Excelencia<br />

y sobre el amado pueblo griego las<br />

bendiciones de Dios todopoderoso. ■<br />

(Original inglés procedente del archivo<br />

informático de la Santa Sede;<br />

traducción de ECCLESIA)<br />

977<br />

Venerados hermanos en el episcopado:<br />

Me complace recibiros durante<br />

vuestra visita ad limina, con la<br />

que renováis los lazos de comunión<br />

en la fe y en el amor entre vosotros,<br />

pastores del Pueblo de Dios en<br />

Malasia, Brunéi y Singapur, y el Sucesor<br />

de Pedro en la sede de Roma. Os<br />

doy las gracias por las amables palabras<br />

que el arzobispo monseñor Pakiam<br />

me ha dirigido en vuestro nombre,<br />

y aseguro mis oraciones y mis<br />

mejores deseos para todos vosotros y<br />

para cuantos están encomendados a<br />

vuestro pastoral desvelo.<br />

Gracias a una feliz coincidencia,<br />

vuestra visita a la ciudad de los apóstoles<br />

Pedro y Pablo tiene lugar en un<br />

momento en el que la Iglesia del<br />

mundo entero se prepara para celebrar<br />

un año dedicado a San Pablo, el<br />

gran Apóstol de las Gentes, en el bimilenario<br />

de su nacimiento. Rezo por<br />

que os inspiréis en el ejemplo de tan<br />

ferviente apóstol, maestro excepcional<br />

y testigo valiente de la verdad del<br />

evangelio. Que por intercesión suya<br />

podáis experimentar un fervor renovado<br />

en la gran tarea misional con<br />

vistas a la cual, análogamente a San<br />

Pablo, habéis sido separados y llamados<br />

(cf. Ga 1, 15-16): la de anunciar el<br />

evangelio de Jesús en Malasia, Brunéi<br />

y Singapur. Haciéndome eco de las<br />

palabras que San Pablo dirigía a los<br />

presbíteros de Efeso, os insto a tener<br />

cuidado «de vosotros y de toda la<br />

Documentación<br />

El diálogo interreligioso,<br />

exigencia<br />

de un apostolado paulino<br />

Discurso de Benedicto XVI a los obispos de la Conferencia<br />

Episcopal de Malasia-Singapur-Brunéi con ocasión<br />

de su visita «ad limina Apostolorum» (6-6-2008)<br />

grey, en medio de la cual os ha puesto<br />

el Espíritu Santo como vigilantes<br />

para pastorear la Iglesia de Dios, que<br />

él consiguió con la sangre de su propio<br />

Hijo» (Hch 20, 28).<br />

«La fe de la Iglesia en Jesucristo es<br />

un don recibido y un don que ha de<br />

compartirse; es el don mayor que la<br />

Iglesia puede ofrecer a Asia» (Ecclesia<br />

in Asia, n.º 10: ECCLESIA, núm. 2.973<br />

[1999/II], pág. 1792). Afortunadamente,<br />

los pueblos de Asia muestran un intenso<br />

anhelo de Dios (cf. ibíd., n.º 9:<br />

ECCLESIA cit., pág. 1791). Al transmitirles<br />

el mensaje que en su día recibisteis<br />

(cf. 1 Cor 15, 3), vais sembrando las semillas<br />

de la evangelización en terreno<br />

fértil. Sin embargo, para florecer, la fe<br />

necesita enraizarse profundamente en<br />

Asia, de manera que no se la perciba<br />

como un producto de importación,<br />

ajeno a la cultura y a las tradiciones de<br />

vuestros pueblos. Teniendo presente la<br />

forma en que San Pablo anunció la<br />

Buena Nueva a los atenienses (cf. Hch<br />

17, 22-34), estáis llamados a presentar<br />

la fe cristiana bajo formas acordes con<br />

la «intuición espiritual innata» y la «sabiduría<br />

moral típica del alma asiática»<br />

(Ecclesia in Asia, n.º 6: ECCLESIA cit.,<br />

pág. 1789) para que las gentes la acojan<br />

y hagan propia.<br />

Más concretamente, debéis aseguraros<br />

que en su mente no se confunda<br />

el evangelio cristiano con los principios<br />

seculares asociados a la Ilustración;<br />

antes bien, «siendo sinceros en el<br />

amor» (Ef 4, 15), podéis ayudar a vuestros<br />

conciudadanos a distinguir el tri-<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 29


Documentación<br />

go del evangelio de la paja del<br />

materialismo y del relativismo.<br />

Podéis ayudarlos a responder a<br />

los urgentes retos planteados<br />

por la Ilustración, movimiento<br />

con el que el Occidente cristiano<br />

lleva más de dos siglos familiarizado,<br />

pero que sólo ahora<br />

empieza a ejercer un impacto<br />

significativo sobre otras regiones<br />

del mundo. Al tiempo que<br />

nos oponemos a la «dictadura<br />

de la razón positivista» que pretende<br />

excluir a Dios de la vida<br />

de la comunidad, debemos<br />

acoger «las conquistas reales de<br />

la Ilustración», particularmente<br />

su insistencia en los derechos<br />

humanos y sobre la libertad religiosa<br />

y su ejercicio (cf. Discurso<br />

a la Curia Romana ante la<br />

Navidad, 22-12-06: ECCLESIA,<br />

núms. 3.343-44 [2007/I], pág. 44). Al<br />

subrayar el carácter universal de los<br />

derechos humanos, basado en la dignidad<br />

del ser humano, creado a imagen<br />

de Dios, lleváis a cabo una importante<br />

tarea evangelizadora, ya que dicha<br />

enseñanza constituye un aspecto<br />

esencial del evangelio. Con ello seguís<br />

las huellas de San Pablo, que sabía<br />

cómo expresar los fundamentos de la<br />

fe y de la praxis cristianas de manera<br />

que las comunidades gentiles a las<br />

que era enviado pudieran asimilarlos.<br />

Este apostolado paulino exige un<br />

compromiso con el diálogo interreligioso,<br />

por lo que os animo a fomentar<br />

tan importante labor explorando<br />

todo camino que juzguéis viable. Soy<br />

consciente de que no todos los territorios<br />

a los que representáis ofrecen<br />

el mismo grado de libertad religiosa, y<br />

que muchos, por ejemplo, encontráis<br />

graves dificultades a la hora de promover<br />

la educación religiosa cristiana<br />

en la escuela. Lejos de desanimaros,<br />

seguid anunciando con convicción la<br />

«inescrutable riqueza de Cristo» (Ef 3,<br />

8), de manera que muchos acudan a<br />

oíros hablar del amor de Dios manifestado<br />

en Jesús. En el marco de un<br />

diálogo abierto y leal con musulmanes,<br />

budistas, hinduistas y con los seguidores<br />

de otras religiones presentes<br />

en vuestros respectivos países, ayudáis<br />

a vuestros compatriotas a reco-<br />

Benedicto XVI durante el encuentro con los obipos de<br />

Malasia-Singapur-Brunéi en visita «ad limina».<br />

nocer y observar la ley «escrita en su<br />

corazón» (Rm 2, 15) explicando con<br />

claridad la verdad del evangelio. De<br />

esta manera, vuestra enseñanza podrá<br />

alcanzar a una mayor audiencia y<br />

ayudar a promover una visión unificada<br />

del bien común. Ello debería a su<br />

vez contribuir a fomentar una mayor<br />

libertad religiosa y una cohesión social<br />

más fuerte entre los miembros de<br />

diferentes grupos étnicos, lo cual sólo<br />

podrá traer paz y bienestar para toda<br />

la comunidad.<br />

Respecto a la atención pastoral que<br />

prestáis a vuestro pueblo, quisiera animaros<br />

a mostrar un interés especial<br />

por vuestros sacerdotes. Empleando la<br />

imagen evocada por San Pablo cuando<br />

escribía al joven Timoteo, instadlos a<br />

reavivar el carisma de Dios que está en<br />

ellos por la imposición de las manos<br />

(cf. 2 Tm 1, 6). Sed para ellos padres,<br />

hermanos y amigos como Pablo lo fue<br />

para Timoteo y Tito. Guiadlos con el<br />

ejemplo, enseñándoles cómo imitar a<br />

Cristo Buen Pastor. Como reza la bien<br />

conocida exclamación de San Pablo,<br />

«no vivo yo, sino que es Cristo quien<br />

vive en mí» (Ga 2, 20). Tomad a Cristo<br />

como modelo de toda vuestra vida y<br />

conducta, de forma que vuestros sacerdotes<br />

vean qué es vivir como alter<br />

Christus en medio de vuestro pueblo.<br />

Así, además de impulsarlos a ofrecer<br />

su vida entera «como una víctima viva,<br />

30 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

santa, agradable a Dios» (Rm 12,<br />

1), habrá más jóvenes que aspiren<br />

a esa vida sublime que es el<br />

servicio sacerdotal.<br />

Soy consciente de que en<br />

los territorios por vosotros representados<br />

existen algunas<br />

regiones en las que raramente<br />

se ve a un sacerdote, y otras<br />

cuyos habitantes aún no han<br />

oído el evangelio. También a<br />

ellos les asiste un derecho especial<br />

sobre vuestro desvelo<br />

pastoral y sobre vuestras oraciones.<br />

Y es que, «¿cómo creerán<br />

en aquél a quien no han<br />

oído? ¿Cómo oirán sin que se<br />

les predique?» (Rm 10, 14). De<br />

ahí la importancia añadida que<br />

adquiere la formación de los<br />

laicos para que, mediante una<br />

sólida catequesis, los hijos de<br />

Dios dispersos puedan conocer la esperanza<br />

a la que han sido llamados,<br />

«la riqueza de la gloria otorgada por<br />

él en herencia» (Ef 1, 18). De esta manera<br />

podrán prepararse a recibir al<br />

sacerdote cuando éste llegue a ellos.<br />

Decidle a vuestros catequistas, tanto<br />

laicos como religiosos, que los recuerdo<br />

en mis oraciones y que aprecio<br />

su enorme contribución a la vida<br />

de las comunidades cristianas de<br />

Malasia, Brunéi y Singapur. Gracias a<br />

su labor vital, innumerables hombres,<br />

mujeres y niños tienen la posibilidad<br />

de «conocer el amor de Cristo, que<br />

excede a todo conocimiento», para<br />

irse «llenando hasta la total plenitud<br />

de Dios» (Ef 3, 19).<br />

Queridos hermanos en el episcopado:<br />

Os pido que, al regresar a vuestros<br />

respectivos países, estéis «siempre<br />

alegres», oréis «constantemente» y «en<br />

todo» deis gracias, «pues esto es lo<br />

que Dios, en Cristo Jesús, quiere de<br />

vosotros» (1 Ts 5, 16). Mientras os encomiendo<br />

a todos, junto con vuestros<br />

sacerdotes, religiosos y fieles laicos, a<br />

la intercesión de María, Madre de la<br />

Iglesia, os imparto de todo corazón<br />

mi bendición apostólica como prenda<br />

de paz y de alegría en el Señor. ■<br />

(Original inglés procedente del archivo<br />

informático de la Santa Sede;<br />

traducción de ECCLESIA)<br />

978


Me complace la presente<br />

ocasión de<br />

reunirme con voso-<br />

amor divino: un amor revelado<br />

en Cristo y hecho presente<br />

mediante la acción del<br />

tros al término de la X<br />

Espíritu Santo. Todas las ac-<br />

Asamblea Plenaria del Pontitividades<br />

de la Iglesia deben<br />

ficio Consejo para el Diálo-<br />

rebosar amor (cf. Ad gentes,<br />

go Interreligioso. Vaya mi<br />

n.<br />

cordial saludo a todos los<br />

que participáis en tan significativo<br />

encuentro, con un<br />

agradecimiento especial al<br />

cardenal Jean-Louis Tauran<br />

por sus amables palabras.<br />

«Diálogo in veritate et caritate:<br />

orientaciones pastorales»<br />

es el tema de vuestra<br />

Plenaria. He sabido con<br />

agrado que durante estos<br />

días habéis intentado alcanzar<br />

una comprensión más<br />

profunda del acercamiento de la Iglesia el Papa Pablo VI, la responsabilidad<br />

católica a los fieles de otras tradiciones principal de la Iglesia es el servicio a la<br />

religiosas. Habéis considerado el más verdad: «La verdad acerca de Dios, la<br />

amplio objetivo del diálogo —descubrir verdad acerca del hombre y de su mis-<br />

la verdad— y la motivación que lo susterioso destino, la verdad acerca del<br />

tenta: la caridad, en obediencia a la di- mundo. Verdad difícil que buscamos<br />

vina misión que nuestro Señor Jesu- en la Palabra de Dios» (Evangelii nuncristo<br />

encomendó a la Iglesia.<br />

tiandi, n.º 78: ECCLESIA, núm. 1.774<br />

Al inaugurar mi pontificado, afirmé [1976/I], pág. 116).<br />

que «la Iglesia quiere seguir constru- Los seres humanos buscan resyendo<br />

puentes de amistad con los sepuesta a algunos interrogantes exisguidores<br />

de todas las religiones para tenciales básicos: ¿Cuáles son el ori-<br />

buscar el bien verdadero de todas las gen y el destino del hombre? ¿Qué<br />

personas y de la sociedad entera» (Dis- son el bien y el mal? ¿Qué le aguarda<br />

curso a los representantes de otras con- al hombre al final de su existencia tefesiones<br />

y de otras religiones, 25-4-08: rrenal? Toda persona tiene el deber<br />

ECCLESIA, núm. 3.256 [2005/I], pág. natural y la obligación moral de bus-<br />

716). A través del ministerio del Sucecar la verdad. Y una vez que la conosor<br />

de Pedro, en el que se incluyen la ce, debe adherirse a ella y ordenar<br />

labor del Pontificio Consejo para el toda su vida en función de sus exi-<br />

Diálogo Interreligioso y los esfuerzos gencias (cf. Nostra ætate, n.º 1; Digni-<br />

de los ordinarios locales y del Pueblo tatis humanæ, n.º 2).<br />

de Dios en todo el mundo, la Iglesia si- Queridos amigos: «Caritas Christi<br />

gue en contacto con los seguidores de urget nos» (2 Co 5, 14). El amor de<br />

distintas religiones. Al hacerlo, expresa Cristo impulsa a la Iglesia a alcanzar a<br />

su deseo de un encuentro y de una co- todo ser humano sin distinción, allenlaboración<br />

en la verdad y en la libertad. de los confines de la Iglesia visible. La<br />

En palabras de mi venerado antecesor fuente de la misión de la Iglesia es el<br />

os 2-5; Evangelii nuntiandi,<br />

n.º 26: ECCLESIA, núm.<br />

1.772 [1976/I], págs. 21-22;<br />

Diálogo y misión, n.º 9). Por<br />

eso el amor apremia a cada<br />

creyente para que escuche<br />

al otro y busque campos de<br />

colaboración y animo a los<br />

interlocutores cristianos, en<br />

Benedicto XVI en un encuentro con representantes del Islam.<br />

su diálogo con los seguidores<br />

de otras religiones, a<br />

proponer —y no imponer—<br />

la fe en Cristo, que es «el camino,<br />

la verdad y la vida» (Jn<br />

14, 16). Como he afirmado en mi reciente<br />

encíclica, la fe cristiana nos ha<br />

enseñado que «verdad, justicia y amor<br />

no son simplemente ideales, sino realidades<br />

de enorme densidad» (Spe<br />

salvi, n.º 29: ECCLESIA, núm. 3.391<br />

[2007/II], pág. 1852). Para la Iglesia, «la<br />

caridad no es una especie de actividad<br />

de asistencia social que también se<br />

podría dejar a otros, sino que pertenece<br />

a su naturaleza y es manifestación<br />

irrenunciable de su propia esencia»<br />

(Deus caritas est, n.º 25: ECCLESIA,<br />

núm. 3.295 [2006/II], pág. 154).<br />

La gran proliferación de encuentros<br />

interreligiosos en el mundo actual exige<br />

discernimiento. A este respecto, me<br />

alegra saber que durante estos días<br />

habéis reflexionado acerca de unas<br />

indicaciones pastorales para el diálogo<br />

interreligioso. A partir del Concilio<br />

Vaticano II, se ha centrado la atención<br />

en los elementos espirituales que las<br />

diferentes tradiciones religiosas comparten,<br />

lo que ha ayudado en muchos<br />

casos a tender puentes de entendimiento<br />

por encima de las fronteras<br />

religiosas. Tengo entendido que en el<br />

979<br />

Documentación<br />

El diálogo interreligioso: un viaje de fe<br />

Discurso de Benedicto XVI<br />

a la Plenaria del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso (7-6-2008)<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 31


Documentación<br />

curso de vuestros debates habéis examinado<br />

algunos asuntos de interés<br />

práctico propios de las relaciones interreligiosas:<br />

la identidad de los interlocutores<br />

del diálogo, la educación religiosa<br />

en la escuela, la conversión, el<br />

proselitismo, la reciprocidad, la libertad<br />

religiosa y la función de los líderes<br />

religiosos en el seno de la sociedad.<br />

Se trata de temáticas importantes a las<br />

que los dirigentes religiosos que viven<br />

y operan en sociedades pluralistas deben<br />

prestar gran atención.<br />

Importa subrayar la necesidad de<br />

formación para quienes promueven el<br />

diálogo interreligioso, un diálogo que,<br />

para ser auténtico, debe ser un viaje<br />

de fe. ¡Cuán necesario es que sus promotores<br />

estén bien formados en su<br />

propia creencia y bien informados de<br />

las de los demás! Por eso aliento los<br />

esfuerzos del Pontificio Consejo para<br />

el Diálogo Interreligioso encaminados<br />

a organizar cursos de formación y<br />

programas de diálogo interreligioso<br />

destinados a diferentes grupos cristianos,<br />

particularmente a seminaristas y<br />

a jóvenes que estudian en centros de<br />

enseñanza superior.<br />

La colaboración interreligiosa brinda<br />

la oportunidad de expresar los<br />

más elevados ideales religiosos de<br />

cada tradición religiosa. Ayudar a los<br />

enfermos, socorrer a las víctimas de<br />

catástrofes naturales o de la violencia,<br />

asistir a los ancianos y a los pobres:<br />

he aquí algunas de las áreas en las<br />

que colaboran personas pertenecientes<br />

a diferentes religiones. Y aprovecho<br />

la presente ocasión para animar a<br />

cuantos se ven inspirados por las enseñanzas<br />

de su religión a auxiliar a los<br />

miembros dolientes de la sociedad.<br />

Queridos amigos: Al concluir ya<br />

vuestra Plenaria, os doy las gracias<br />

por la labor realizada. Os ruego que<br />

transmitáis el mensaje de buena voluntad<br />

del Sucesor de Pedro a vuestra<br />

grey cristiana y a todos nuestros hermanos<br />

de otras religiones. Y os imparto<br />

de todo corazón mi bendición<br />

apostólica como prenda de gracia y<br />

de paz en nuestro Señor y Salvador<br />

Jesucristo. ■<br />

(Original inglés procedente del archivo<br />

informático de la Santa Sede;<br />

traducción de ECCLESIA)<br />

Señor cardenal, venerados hermanos<br />

en el episcopado y en el sacerdocio,<br />

ilustres docentes:<br />

Es para mí motivo de profunda<br />

alegría reunirme con vosotros<br />

con ocasión del VI Simposio Europeo<br />

de Docentes Universitarios sobre<br />

el tema: «Ampliar los horizontes<br />

de la racionalidad. Perspectivas para la<br />

filosofía», promovido por los docentes<br />

de las universidades de Roma y organizado<br />

por la Oficina de Pastoral Universitaria<br />

del Vicariato de Roma en<br />

colaboración con las instituciones regionales,<br />

provinciales y municipales<br />

de Roma. Doy las gracias al señor cardenal<br />

Camillo Ruini y al profesor Cesare<br />

Mirabelli, que se han hecho intérpretes<br />

de vuestros sentimientos, y mi<br />

cordial bienvenida a todos los aquí<br />

presentes.<br />

En continuidad con el encuentro<br />

europeo de docentes universitarios<br />

que tuvo lugar el pasado año, vuestro<br />

Simposio afronta un tema de<br />

gran relevancia académica y cultural.<br />

Deseo expresar mi gratitud al Comité<br />

Organizador por su elección, que<br />

permite, entre otras cosas, celebrar<br />

el décimo aniversario de la publicación<br />

de la carta encíclica Fides et ratio<br />

de mi amado antecesor el Papa<br />

Juan Pablo II. Ya en aquella ocasión,<br />

cincuenta docentes de Filosofía de<br />

las universidades de Roma, tanto<br />

públicas como pontificias, manifestaron<br />

su gratitud al Papa con una<br />

declaración en la que se reiteraba la<br />

urgencia de la reactivación del estudio<br />

de la filosofía en universidades e<br />

institutos. Compartiendo dicha preocupación<br />

y alentando una provecho-<br />

32 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

Ampliar los horizontes<br />

de la racionalidad<br />

Discurso de Benedicto XVI a los participantes en el VI<br />

Simposio Europeo de Docentes Universitarios (7-6-2008)<br />

sa colaboración entre docentes de<br />

varias universidades romanas y europeas,<br />

deseo dirigir a los profesores<br />

de Filosofía una invitación especial<br />

a proseguir con confianza en la<br />

investigación filosófica, invirtiendo<br />

nuevas energías e implicando a las<br />

nuevas generaciones en tal empeño.<br />

Los acontecimientos que se han<br />

sucedido durante los diez años transcurridos<br />

desde la publicación de la<br />

encíclica han delineado con mayor<br />

evidencia el escenario histórico y cultural<br />

en el que la investigación filosófica<br />

está destinada a actuar. Y es que<br />

la crisis de la modernidad no es sinónimo<br />

de declive de la filosofía; antes<br />

bien, ésta debe emprender un nuevo<br />

itinerario de búsqueda para comprender<br />

la naturaleza auténtica de dicha<br />

crisis e individuar nuevas metas hacia<br />

las cuales orientarse. La modernidad<br />

bien concebida revela una «cuestión<br />

antropológica» que se presenta de<br />

manera mucho más compleja y articulada<br />

de como lo hiciera en las reflexiones<br />

filosóficas de los últimos siglos,<br />

especialmente en Europa. Sin<br />

ánimo de menoscabar los intentos realizados,<br />

mucho es lo que queda todavía<br />

por investigar y comprender. La<br />

modernidad no es un mero fenómeno<br />

cultural históricamente datado, sino<br />

que implica, en realidad, una nueva<br />

«proyectualidad», una comprensión<br />

más exacta de la naturaleza humana.<br />

No es difícil encontrar en escritos de<br />

autorizados pensadores contemporáneos<br />

una reflexión desapasionada sobre<br />

las dificultades que se oponen a la<br />

solución de tan prolongada crisis. La<br />

apertura de crédito a las religiones y<br />

especialmente al cristianismo pro-<br />

980


puesta por algunos autores constituye<br />

una señal evidente del deseo sincero<br />

de sacar a la reflexión filosófica de su<br />

autosuficiencia.<br />

Ampliar los horizontes<br />

de la racionalidad<br />

Desde el inicio de mi pontificado<br />

he escuchado con atención las demandas<br />

que me llegan de los hombres<br />

y mujeres de nuestro tiempo, y a<br />

la luz de tales expectativas he querido<br />

ofrecer una propuesta de investigación<br />

que creo podrá despertar<br />

el interés por la reactivación de<br />

la filosofía y de su irreemplazable<br />

función en el seno del<br />

mundo académico y cultural.<br />

Dicha propuesta ha sido objeto<br />

de reflexión durante vuestro<br />

Simposio, y estriba en «ampliar<br />

los horizontes de la racionalidad».<br />

Ello me permite tratar de<br />

ella con vosotros como entre<br />

amigos que desean emprender<br />

un itinerario común de búsqueda.<br />

Quisiera partir de una<br />

convicción profunda, que he<br />

expresado en más de una oca-<br />

sión: «La fe cristiana ha elegido<br />

con claridad: contra los dioses<br />

de la religión por el Dios de los<br />

filósofos, es decir, contra el<br />

mito de la mera costumbre por<br />

la verdad del ser» (J. Ratzinger,<br />

Introducción al cristianismo,<br />

cap. III). Semejante afirmación,<br />

que refleja el camino del cristianismo<br />

desde sus albores, resulta<br />

plenamente actual en el contexto histórico-cultural<br />

en que vivimos, ya que<br />

sólo partiendo de dicha premisa, histórica<br />

y teológica a un tiempo, es posible<br />

responder a las nuevas expectativas<br />

de la reflexión filosófica. El peligro<br />

de que la religión —incluso la<br />

cristiana— se vea instrumentalizada<br />

como fenómeno subrepticio sigue<br />

estando hoy muy presente.<br />

Pero el cristianismo, como he recordado<br />

en la encíclica Spe salvi, no<br />

es un mensaje exclusivamente informativo,<br />

sino también «performativo»<br />

(cf. n.º 2: ECCLESIA, núm. 3.391<br />

[2007/II], pág. 1839). Ello significa que<br />

desde siempre la fe cristiana no pue-<br />

981<br />

de verse encerrada en el mundo abstracto<br />

de las teorías, sino que debe<br />

materializarse en una experiencia histórica<br />

concreta que alcance al hombre<br />

en la verdad más profunda de su<br />

existencia. Esta experiencia, condicionada<br />

por las nuevas situaciones culturales<br />

e ideológicas, es el lugar que<br />

la investigación teológica debe valorar<br />

y sobre el que urge entablar un<br />

diálogo fecundo con la filosofía. La<br />

comprensión del cristianismo como<br />

transformación real de la existencia<br />

humana, si por un lado impulsa a la<br />

reflexión filosófica hacia un nuevo<br />

El Papa insta a los docentes universitarios a que impliquen a<br />

las nuevas generaciones en proseguir las investigaciones y<br />

hacerlas inteligibles a la sociedad y a que sigan las huellas<br />

del apóstol San Pablo, en el Año Paulino, para descubrir la<br />

fecundidad histórica del evangelio que predicó.<br />

encuentro con la religión, la anima<br />

por otro a no perder su confianza en<br />

la posibilidad de conocer la realidad.<br />

La propuesta de «ampliar los horizontes<br />

de la racionalidad» no debe<br />

considerarse, por lo tanto, como una<br />

nueva línea de pensamiento teológico<br />

y filosófico que viene a añadirse a las<br />

ya existentes, sino como la demanda<br />

de una nueva apertura hacia esa realidad<br />

a la que el ser humano está llamado<br />

en virtud de su «unitotalidad»,<br />

superando antiguos prejuicios y reduccionismos,<br />

para abrirse así el camino<br />

a una comprensión auténtica de<br />

la modernidad. El deseo de una plenitud<br />

de humanidad no puede verse<br />

frustrado: aguarda propuestas ade-<br />

Documentación<br />

cuadas. La fe cristiana está llamada a<br />

hacerse cargo de esa urgencia histórica,<br />

implicando a todos los hombres<br />

de buena voluntad en semejante empresa.<br />

El nuevo diálogo entre fe y razón<br />

exigido hoy no puede llevarse a<br />

cabo en los términos y modalidades<br />

con los que se desarrolló en el pasado.<br />

Y para no quedar reducido a estéril<br />

ejercicio intelectual debe partir de<br />

la actual situación concreta del hombre<br />

y realizar una reflexión sobre la<br />

misma capaz de captar su verdad ontológico-metafísica.<br />

Queridos amigos: Tenéis ante vosotros<br />

un camino realmente arduo.<br />

Ante todo es preciso fomentar<br />

centros académicos de perfil alto<br />

en los que la filosofía pueda dialogar<br />

con las demás disciplinas,<br />

especialmente con la teología, y<br />

favorecer nuevas síntesis culturales<br />

aptas para orientar el camino<br />

de la sociedad. La dimensión<br />

europea de vuestra venida a<br />

Roma —procedéis, en efecto, de<br />

26 países— puede facilitar una<br />

confrontación y un intercambio<br />

ciertamente productivos. Confío<br />

en que las instituciones académicas<br />

católicas estén dispuestas<br />

a realizar auténticos talleres cul-<br />

turales. Quisiera invitaros también<br />

a animar a los jóvenes para<br />

que se consagren a los estudios<br />

filosóficos, fomentando iniciativas<br />

adecuadas de orientación<br />

universitaria. Estoy seguro de<br />

que las nuevas generaciones,<br />

con su entusiasmo, sabrán responder<br />

generosamente a las expectativas<br />

de la Iglesia y de la sociedad.<br />

Dentro de pocos días tendré la alegría<br />

de inaugurar el Año Paulino, durante<br />

el cual celebraremos al Apóstol<br />

de las Gentes: espero que tan singular<br />

iniciativa constituya para todos vosotros<br />

una ocasión propicia para redescubrir,<br />

siguiendo las huellas de tan<br />

gran apóstol, la fecundidad histórica<br />

del evangelio y sus extraordinarias<br />

potencialidades también para la cultura<br />

contemporánea. Con este deseo,<br />

imparto a todos mi bendición. ■<br />

(Original italiano procedente del archivo<br />

informático de la Santa Sede;<br />

traducción de ECCLESIA)<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 33


Documentación<br />

San Isidoro de Sevilla:<br />

síntesis entre vida activa y contemplativa<br />

Audiencia general de Benedicto XVI del miércoles 18 de junio de 2008<br />

Hoy quisiera hablar de<br />

San Isidoro de Sevilla:<br />

era hermano menor de<br />

Leandro, obispo de Sevilla, y<br />

gran amigo del Papa Gregorio<br />

Magno. Esta observación<br />

es importante, pues constituye<br />

un elemento cultural y espiritual<br />

indispensable para<br />

comprender la personalidad<br />

de Isidoro. En efecto, le debe<br />

mucho a Leandro, persona<br />

muy exigente, estudiosa y<br />

austera, que había creado en<br />

torno a su hermano menor<br />

un contexto familiar caracterizado<br />

por las exigencias ascéticas<br />

propias de un monje<br />

y por los ritmos de trabajo<br />

exigidos por una seria entrega<br />

al estudio. Además, Leandro<br />

se había preocupado por<br />

disponer lo necesario para<br />

afrontar la situación políticosocial<br />

del momento: en<br />

aquellas décadas los visigodos,<br />

bárbaros y arrianos, habían<br />

invadido la península<br />

ibérica y se habían adueñado<br />

de los territorios que pertenecían<br />

al Imperio Romano.<br />

Era necesario conquistarlos a<br />

la romanidad y al catolicismo.<br />

La casa de Leandro y de Isidoro<br />

contaba con una biblioteca<br />

sumamente rica de<br />

obras clásicas, paganas y<br />

cristianas. Isidoro, que sentía<br />

la atracción tanto de unas<br />

como de otras, aprendió bajo<br />

la responsabilidad de su hermano<br />

mayor una disciplina<br />

férrea para dedicarse a su estudio,<br />

con discernimiento.<br />

En la sede episcopal de<br />

Sevilla se vivía, por tanto, en<br />

un clima sereno y abierto. Lo<br />

podemos deducir a partir de<br />

los intereses culturales y espirituales<br />

de Isidoro, tal y<br />

como emergen de sus<br />

mismas obras, que comprenden<br />

un conocimiento<br />

enciclopédico de la<br />

cultura clásica pagana y<br />

un conocimiento profundo<br />

de la cultura cristiana.<br />

De este modo se<br />

explica el eclecticismo<br />

que caracteriza la producción<br />

literaria de Isidoro,<br />

el cual pasa con<br />

suma facilidad de Marcial<br />

a Agustín, de Cicerón<br />

a Gregorio Magno. La<br />

lucha interior que tuvo<br />

que afrontar el joven Isidoro,<br />

que se convirtió en<br />

sucesor del hermano Leandro<br />

en la cátedra episcopal<br />

de Sevilla, en el año<br />

599, no fue ni mucho menos<br />

fácil. Quizá se debe a esta lucha<br />

constante consigo mismo<br />

la impresión de un exceso<br />

de voluntarismo que se<br />

percibe leyendo las obras de<br />

este gran autor, considerado<br />

como el último de los padres<br />

cristianos de la antigüedad.<br />

Pocos años después de su<br />

muerte, que tuvo lugar en el<br />

año 636, el Concilio de Toledo<br />

(653) le definió: «Ilustre<br />

maestro de nuestra época, y<br />

gloria de la Iglesia católica».<br />

Isidoro fue, sin duda, un<br />

hombre de contraposiciones<br />

dialécticas acentuadas. E incluso,<br />

en su vida personal,<br />

experimentó un conflicto interior<br />

permanente, sumamente<br />

parecido al que ya<br />

habían vivido San Gregorio<br />

Magno y San Agustín, entre<br />

el deseo de soledad, para<br />

dedicarse únicamente a la<br />

meditación de la Palabra de<br />

Dios, y las exigencias de la<br />

caridad hacia los hermanos<br />

34 Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

de cuya salvación se sentía<br />

encargado, como obispo.<br />

Por ejemplo, sobre los responsables<br />

de la Iglesia escribe:<br />

«El responsable de una<br />

Iglesia (vir ecclesiasticus) por<br />

una parte tiene que dejarse<br />

crucificar al mundo con la<br />

mortificación de la carne, y<br />

por otra, tiene que aceptar la<br />

decisión del orden eclesiástico,<br />

cuando procede de la<br />

voluntad de Dios, de dedicarse<br />

al gobierno con humildad,<br />

aunque no quisiera hacerlo»<br />

(Libro de las Sentencias<br />

III, 33, 1: PL 83, col. 705 B).<br />

Y añade un párrafo después:<br />

«Los hombres de Dios<br />

(sancti viri) no desean ni mucho<br />

menos dedicarse a las<br />

cosas seculares y gimen<br />

cuando, por un misterioso<br />

designio divino, se les encargan<br />

ciertas responsabilidades…<br />

Hacen todo lo posible<br />

para evitarlas, pero aceptan<br />

aquello que no quisieran y<br />

hacen lo que habrían querido<br />

evitar. Entran así en el se-<br />

creto del corazón y allí,<br />

adentro, tratan de comprender<br />

qué es lo que<br />

les pide la misteriosa<br />

voluntad de Dios. Y<br />

cuando se dan cuenta<br />

de que tienen que someterse<br />

a los designios<br />

de Dios, agachan la cabeza<br />

del corazón bajo<br />

el yugo de la decisión<br />

divina» (Libro de las<br />

Sentencias III, 33, 3: PL<br />

83, col. 705-706).<br />

Para comprender<br />

mejor a Isidoro es necesario<br />

recordar, ante<br />

todo, la complejidad de<br />

las situaciones políticas<br />

de su tiempo, que antes<br />

mencionaba: durante los<br />

años de la niñez había tenido<br />

que experimentar la<br />

amargura del exilio. A pesar<br />

de ello, estaba lleno de entusiasmo:<br />

experimentaba la<br />

pasión de contribuir a la formación<br />

de un pueblo que<br />

encontraba finalmente su<br />

unidad, tanto a nivel político<br />

como religioso, con la conversión<br />

providencial del heredero<br />

al trono, el visigodo<br />

Ermenegildo, del arrianismo<br />

a la fe católica.<br />

Sin embargo, no hay que<br />

minusvalorar la enorme dificultad<br />

que supone afrontar de<br />

manera adecuada los problemas<br />

sumamente graves, como<br />

los de las relaciones con los<br />

herejes y con los judíos. Toda<br />

una serie de problemas que<br />

resultan también hoy muy<br />

concretos, si pensamos en lo<br />

que sucede en algunas regiones<br />

donde parecen replantearse<br />

situaciones muy parecidas<br />

a las de la península ibérica<br />

del siglo VI. La riqueza de<br />

982


los conocimientos culturales<br />

de que disponía Isidoro le<br />

permitía confrontar continuamente<br />

la novedad cristiana<br />

con la herencia clásica grecorromana.<br />

Más que el don precioso<br />

de la síntesis, parece<br />

que tenía el de la collatio, es<br />

decir, la recopilación, que se<br />

expresaba en una extraordinaria<br />

erudición personal, no<br />

siempre tan ordenada como<br />

se hubiera podido desear.<br />

En todo caso, hay que admirar<br />

su preocupación por<br />

no dejar de lado nada de lo<br />

que la experiencia humana<br />

produjo en la historia de su<br />

patria y del mundo. No hubiera<br />

querido perder nada de<br />

lo que el ser humano aprendió<br />

en las épocas antiguas,<br />

ya fueran estas paganas, judías<br />

o cristianas. Por tanto,<br />

no debe sorprender el que, al<br />

perseguir este objetivo, no<br />

lograra transmitir adecuadamente,<br />

como él hubiera querido,<br />

los conocimientos que<br />

poseía, a través de las aguas<br />

purificadoras de la fe cristiana.<br />

Sin embargo, según las<br />

intenciones de Isidoro, las<br />

propuestas que presenta<br />

siempre están en sintonía<br />

con la fe católica, defendida<br />

por él con firmeza. Percibe la<br />

complejidad en la discusión<br />

de los problemas teológicos<br />

y propone a menudo, con<br />

agudeza, soluciones que recogen<br />

y expresan la verdad<br />

cristiana completa. Esto ha<br />

permitido a creyentes a través<br />

de los siglos hasta nuestros<br />

días servirse con gratitud<br />

de sus definiciones.<br />

Un ejemplo significativo en<br />

este sentido es la enseñanza<br />

de Isidoro sobre las relaciones<br />

entre vida activa y vida<br />

contemplativa. Escribe: «Quienes<br />

tratan de lograr el descanso<br />

de la contemplación<br />

tienen que entrenarse antes<br />

en el estadio de la vida activa;<br />

de este modo, liberados de<br />

los residuos del pecado, serán<br />

capaces de presentar ese<br />

corazón puro que permite ver<br />

a Dios» (Diferencias II, 34, 133:<br />

PL 83, col 91A).<br />

983<br />

Documentación<br />

El realismo de auténtico<br />

pastor le convence del riesgo<br />

que corren los fieles de vivir<br />

una vida reducida a una sola<br />

dimensión. Por este motivo,<br />

añade: «El camino intermedio,<br />

compuesto por una y otra<br />

forma de vida, resulta normalmente<br />

el más útil para resolver<br />

esas cuestiones, que con<br />

frecuencia se agudizan con la<br />

opción por un sólo tipo de<br />

vida; sin embargo, son mejor<br />

moderadas por una alternancia<br />

de las dos formas» (o. c.,<br />

134: ivi, col 91B).<br />

Isidoro busca la confirmación<br />

definitiva de una orientación<br />

adecuada de vida en el<br />

ejemplo de Cristo y dice: «El<br />

Salvador Jesús nos ofreció el<br />

ejemplo de la vida activa,<br />

cuando durante el día se dedicaba<br />

a ofrecer signos y milagros<br />

en la ciudad, pero<br />

mostró la vida contemplativa<br />

cuando se retiraba a la montaña<br />

y pasaba la noche dedicado<br />

a la oración» (o. c. 134:<br />

ivi). A la luz de este ejemplo<br />

del divino Maestro, Isidoro<br />

ofrece esta precisa enseñanza<br />

moral: «Por este motivo, el<br />

siervo de Dios, imitando a<br />

Cristo, debe dedicarse a la<br />

contemplación, sin negarse a<br />

la vida activa. Comportarse<br />

de otra manera no sería justo.<br />

De hecho, así como hay<br />

que amar a Dios con la contemplación,<br />

también hay que<br />

amar al prójimo con la acción.<br />

Es imposible, por tanto,<br />

vivir sin una ni otra forma de<br />

vida, ni es posible amar si no<br />

se hace la experiencia tanto<br />

de una como de otra» (o. c.,<br />

135: ivi, col 91C).<br />

Considero que esta es la<br />

síntesis de una vida que<br />

busca la contemplación de<br />

Dios, el diálogo con Dios en<br />

la oración y en la lectura de<br />

la Sagrada Escritura, así<br />

como la acción al servicio de<br />

la comunidad humana y del<br />

prójimo. Esta síntesis es la<br />

lección que nos deja el gran<br />

obispo de Sevilla a los cristianos<br />

de hoy, llamados a<br />

testimoniar a Cristo al inicio<br />

del nuevo milenio. ■<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008 35


36<br />

Colaboración<br />

Pablo de Tarso: fuerza de Dios<br />

Manuel Pérez Tendero<br />

Profesor de Sagrada Escritura en el Seminario de Ciudad Real<br />

Al pasar de perseguidor<br />

a apóstol, Saulo<br />

de Tarso no perdió<br />

su celo y su ímpetu. Cambió<br />

la dirección de su pasión<br />

desde la Ley hacia Jesucristo,<br />

pero siguió siendo<br />

un hombre con fuerza y<br />

arrojo, con entrega apasionada<br />

por aquello en que<br />

creía. Por eso, su conversión<br />

fue también una experiencia<br />

de fuerza: la fuerza<br />

del Resucitado que lo derribó<br />

para que pudiera comprender<br />

el poder de la cruz<br />

y de la verdad más honda<br />

de Dios.<br />

Saulo de Tarso, San Pablo,<br />

fue un hombre de pasión<br />

y fuerza. Pero no lo fue<br />

solamente desde su talante<br />

más humano: fue también<br />

testigo de la fuerza de Dios<br />

que se revela en el evangelio<br />

de Cristo. Lo dice en el<br />

texto más importante de<br />

sus escritos: la carta a los<br />

Romanos. Esta epístola está<br />

estructurada según los modelos<br />

de la retórica antigua.<br />

La tesis principal, o propositio,<br />

está en los versículos<br />

dieciséis y diecisiete del capítulo<br />

primero. Ahí, en la<br />

tesis principal de su carta<br />

más importante, San Pablo<br />

define el evangelio como<br />

«fuerza de Dios para la salvación<br />

de todos». Eso es lo<br />

que él intentó vivir y extender<br />

durante toda su vida: la<br />

fuerza de Dios que salva.<br />

Su evangelio no era palabra<br />

vacía, ni información teológica<br />

sobre Cristo, ni discusión<br />

de escuela frente a<br />

otras sensibilidades creyentes:<br />

el evangelio es la presencia<br />

real de la fuerza de<br />

Dios que salva. Predicar no<br />

es transmitir conocimientos<br />

ni ofrecer caminos éticos:<br />

Benedicto XVI ha proclamado un Año<br />

Paulino desde la fiesta de San Pablo<br />

de 2008 hasta la de 2009.<br />

es hacer presente la salvación<br />

de Dios. En la Buena<br />

Nueva de Jesucristo resucitado<br />

aparece de forma definitiva<br />

la fuerza de la palabra,<br />

una fuerza que ya intuyeron<br />

los literatos de todos<br />

los tiempos y que los profetas<br />

de Israel pudieron experimentar<br />

también en su<br />

propia carne.<br />

San Pablo supo aprender<br />

que esta fuerza de Dios se<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

realizaba en la debilidad. Lo<br />

aprendió de Cristo mismo,<br />

la Palabra encarnada: es en<br />

su cruz, en su derrota, donde<br />

aparece la omnipotencia<br />

de Dios. Frente a la sabiduría<br />

pretenciosa de los<br />

griegos o el deseo de<br />

signos deslumbrantes<br />

en los hijos de Israel,<br />

Cristo había muerto en<br />

la cruz para revelar la<br />

sabiduría de Dios y vencer<br />

a los enemigos de la<br />

vida. Es la paradoja que<br />

Pablo mismo persiguió,<br />

pero de la que se convirtió<br />

en apóstol cuando<br />

se encontró cara a cara<br />

con ella, cuando pudo<br />

ver con sus ojos al Hijo<br />

crucificado que vivía<br />

para siempre y que gritaba<br />

su debilidad con<br />

las palabras de sus discípulos.<br />

Mirando a Jesucristo,<br />

San Pablo comprendió<br />

para siempre los caminos<br />

de Dios. El Hijo se<br />

ha hecho Siervo, el que<br />

es rico se ha hecho pobre<br />

para enriquecernos<br />

con su pobreza, el Santo<br />

se ha hecho pecado para<br />

rescatarnos del castigo, el<br />

Sabio se manifiesta en la<br />

aparente necedad para<br />

mostrarnos el camino de la<br />

verdadera sabiduría.<br />

Este evangelio de la fuerza<br />

de Dios que se hace pequeña<br />

para vencer, esta verdad<br />

que resplandece en el<br />

rostro del Crucificado, ha de<br />

transmitirse también desde<br />

la debilidad y la pequeñez.<br />

Pablo fue impetuoso,<br />

pero también débil. Quiso<br />

librarse de su debilidad<br />

para servir mejor al evangelio,<br />

pero el Señor le manifestó<br />

que la debilidad es<br />

necesaria para traslucir la<br />

gracia en medio de la predicación.<br />

En Corinto y en<br />

todas las ciudades, no se<br />

presentaba lleno de sabiduría<br />

humana y de signos<br />

maravillosos: se presentaba<br />

débil, tímido y tembloroso,<br />

con palabras que se<br />

apoyaban en el poder de<br />

Dios, en la fuerza invisible<br />

del Espíritu. Porque no es<br />

la palabra de Pablo la que<br />

salva, no es su convicción<br />

la que convence, no es su<br />

autoridad la que sostiene<br />

la fe de los creyentes: es la<br />

fuerza de Dios que resplandece<br />

en su debilidad,<br />

como un tesoro que se<br />

transmite en vasijas de barro<br />

para que aparezca en<br />

toda su belleza.<br />

Toda la fuerza de Pablo<br />

se puso al servicio de los<br />

débiles, porque encontró<br />

en la debilidad de Cristo la<br />

verdad más honda de la<br />

fuerza de Dios: ahí reside<br />

nuestra posibilidad de salvación.<br />

Una salvación cierta,<br />

porque se apoya en el<br />

misterio del amor de Dios.<br />

Pablo supo muy bien que<br />

nada podrá apartarnos de<br />

ese amor de Dios manifestado<br />

en Cristo Jesús, porque<br />

se encontró con él en<br />

el camino de Damasco y<br />

cambió el rumbo de su pasión.<br />

■<br />

984


985<br />

DOMINGO XIV<br />

DEL TIEMPO<br />

ORDINARIO<br />

(6 julio 2008)<br />

Primera lectura: Zac 9, 9-10.<br />

(Mira a tu rey que viene a ti<br />

modesto).<br />

Salmo responsorial: 144.<br />

(Bendeciré tu nombre por<br />

siempre, Dios mío, mi rey).<br />

Segunda lectura: Rom 8, 9.11-<br />

13. (Si con el Espíritu dais<br />

muerte a las obras del cuerpo,<br />

viviréis).<br />

Evangelio: Mt 11, 25-30.<br />

(Soy manso y humilde de<br />

corazón).<br />

«Venid a mí todos los que<br />

estáis cansados y agobiados y<br />

yo os aliviaré. Cargad con mi<br />

yugo y aprended de mí, que<br />

soy manso y humilde de<br />

corazón, y encontraréis<br />

vuestro descanso. Porque mi<br />

yugo es llevadero y mi carga<br />

ligera».<br />

6 de julio:<br />

JORNADA DE<br />

RESPONSABILIDAD<br />

DEL TRAFICO<br />

El domingo,<br />

pan de la palabra<br />

Una oración<br />

El evangelio de Mateo<br />

nos muestra<br />

una de las oraciones<br />

de Jesús. Es ésta, en<br />

concreto, una emotiva<br />

oración de acción de<br />

gracias dirigida al<br />

«Abba», como todas las<br />

de Jesús, y surgida desde<br />

el espíritu de las bienaventuranzas.<br />

Situada<br />

en su contexto, podemos<br />

decir que es ése un<br />

momento crucial en la<br />

vida del Maestro. Unos<br />

versículos antes Mateo<br />

cuenta la tristeza que<br />

siente Jesús por el escaso eco que ha<br />

provocado su predicación en Corozaín,<br />

en Betsaida y en el mismo Cafarnaúm.<br />

Este sentimiento de fracaso, que provoca<br />

un profundo sinsabor en el ánimo de<br />

Jesús, se transforma, sin embargo, en<br />

una sentida acción de gracias porque, a<br />

pesar de todo, el mensaje del Reino puede<br />

ser comprendido y aceptado por<br />

quienes parecen contar poco a nivel social:<br />

«Te doy gracias, Padre, Señor de cielo<br />

y tierra, porque has escondido estas<br />

cosas a los sabios y entendidos y las has<br />

revelado a la gente sencilla». El eco de<br />

esta oración lo podemos encontrar, convertido<br />

en argumento, en Pablo cuando,<br />

en la Primera Carta a los Corintios, dice:<br />

«Mirad nuestra asamblea no hay en ella<br />

muchos sabios según los criterios del<br />

mundo, ni muchos poderosos, ni muchos<br />

nobles». Pablo hace esta observación<br />

para alentar a la pequeña comunidad<br />

de Corinto, demasiado preocupada<br />

por los predicadores y sus formas, y hacerles<br />

comprender que no es en la sabiduría<br />

y el conocimiento donde el creyente<br />

se encuentra con Dios sino que éste<br />

muestra su fortaleza eligiendo lo que<br />

parece menospreciable. Y eso parece<br />

querer decir la oración de Jesús cuando<br />

añade: «Sí, Padre, así te ha parecido mejor».<br />

Dios se complace en la debilidad.<br />

Número 3.420 ■ 28 de junio de 2008<br />

Dice Joachin Jeremías<br />

que esta nueva manera<br />

de orar «rompe los moldes<br />

de la costumbre ritual.<br />

No se contenta con<br />

el piadoso hábito de hacer<br />

la oración litúrgica<br />

tres veces al día, sino que<br />

Jesús pasa horas enteras<br />

en oración». Jesús saca la<br />

oración del ámbito litúrgico<br />

para ponerla en medio<br />

de la vida.<br />

Si la oración comienza<br />

como una acción<br />

de gracias dirigida<br />

al Padre, se transforma<br />

después en un grito dirigido a los hombres<br />

de todos los tiempos a quienes las<br />

cadenas de la opresión –sean del pecado<br />

o del sistema social– tienen maniatados.<br />

Es un grito que invita a mirarlo<br />

como al Hijo del «Abba», como aquel<br />

que revela el rostro cercano del Dios Padre,<br />

como aquel que comprende la hondura<br />

del sufrimiento, como aquel que es<br />

voz autorizada para acercar al Dios de lo<br />

Alto y aliviar las pesadillas y sinsabores<br />

de la vida de los seres humanos. Por eso<br />

resuena el grito de Jesús a lo largo de la<br />

historia, porque es el grito de quien se<br />

ofrece como esperanza y consuelo para<br />

aquellos a quienes el camino de la vida<br />

se lo ha negado. En esta oración, por<br />

tanto, el «venid a mí los que estáis cansados<br />

y agobiados y yo os aliviaré» y el<br />

«cargad con mi yugo y aprende de mí»<br />

son, ante todo, una invitación a aceptar<br />

a Jesús como el Señor de la historia que,<br />

intemporal, acoge los gemidos y cansancios<br />

de la humanidad para darles un<br />

sentido liberador. La actitud orante de<br />

Jesús abre expectativas y puertas donde<br />

parecen estar cerradas, ensancha horizontes<br />

y otorga a los discípulos recursos<br />

para acoger toda dolencia y presentarla<br />

ante el Dios de la misericordia. ■<br />

Jesús Francisco Riaza<br />

37


Lourdes Azorín Ortega<br />

Médico psicoterapeuta<br />

Yo soy una mujer preocupada, y<br />

ocupada, por la igualdad de todas<br />

las personas y, en concreto,<br />

la que falta en muchas ocasiones entre<br />

hombres y mujeres. A lo largo de<br />

mi vida he tenido ocasión de ayudar a<br />

afrontar situaciones de malos tratos,<br />

violaciones y abusos sufridos por mujeres.<br />

En todos los casos en los que<br />

intervine por motivos profesionales,<br />

esta violencia la sufrieron las mujeres<br />

a manos de sus parejas o de sus padres<br />

o de sus parientes.<br />

Lenguaje e ideología<br />

Creo que el lenguaje es importante,<br />

muy importante para trasmitir la ideología,<br />

las creencias. Es cierto que en<br />

las expresiones se plasma lo que se<br />

piensa de las cosas y se trasmiten valoraciones,<br />

con expresiones vulgares.<br />

El tinte valorativo que está asociado a<br />

esas palabras está directamente relacionado<br />

con la importancia y la valoración,<br />

la exhibición o el ocultamiento<br />

de los órganos sexuales de los hombres<br />

y de las mujeres que se dan en la<br />

cultura. Esto forma parte de toda la<br />

trama que configura los roles sexuales,<br />

la idea y la imagen, las creencias<br />

que tenemos sobre lo que es y cómo<br />

es un hombre y una mujer.<br />

Trivializar las cosas serias<br />

Las diferencias de los géneros sexuales<br />

son muy importantes y deter-<br />

minadas concepciones de los mismos,<br />

en muchos casos, dan cuenta de la<br />

violencia de género, de los golpes y<br />

de las muertes, del miedo y de la anulación<br />

de muchas mujeres. Pero me<br />

parece que confundir el género como<br />

diferencia sexual con el género<br />

gramatical es trivializar y hacer risible<br />

una cuestión<br />

muy seria y en<br />

la que va la<br />

vida de muchas<br />

mujeres y muchos<br />

hombres<br />

y familias.<br />

Las declaraciones<br />

de la ministra<br />

del asunto<br />

con los miembros<br />

y las miembras,<br />

me han<br />

indignado y<br />

creo que le hacen<br />

un flaco<br />

favor a la necesaria lucha por cambiar<br />

concepciones machistas que<br />

instrumentalizan a la mujer y la convierten<br />

en un objeto poseído para<br />

algunos hombres que no toleran<br />

perder esa posesión o que a esta le<br />

crezcan las ideas, la voluntad y la<br />

autoestima ¡Vaya una entrada en la<br />

escena pública de la ministra de<br />

Igualdad!<br />

Promover la verdadera<br />

igualdad<br />

En ocasiones he creído necesaria la<br />

discriminación positiva para promover<br />

una verdadera igualdad y proteger a<br />

mujeres en determinadas situaciones.<br />

Pero esta batalla absurda que parte de<br />

confundir el género sexual con el gramatical,<br />

creo que es perjudicial y estúpida.<br />

Yo soy médico y no digo médica<br />

y desde luego no me siento en menos<br />

38 Número 3.420 ■ 27 de junio de 2007<br />

Las miembras<br />

y los miembros<br />

ni atentando contra mi dignidad de<br />

mujer.<br />

Eso de jueza, los y las y de la @<br />

para que supuestamente ser más inclusiva<br />

y no discriminar me parece ridículo.<br />

Me gusta usar indistintamente<br />

hombre, personas, ser humano, insisto<br />

que indistintamente y me subleva<br />

esa dictadura<br />

progre y necia,<br />

esnob y fascista<br />

de tener<br />

que hacer desaparecerhombre<br />

como sinónimo<br />

de persona<br />

porque esa<br />

palabra entienden<br />

algunos, en<br />

el colmo del machismo,<br />

que sólo<br />

hace referencia<br />

a los varones.<br />

Solución en la sociedad, no<br />

en el Ministerio<br />

No soporto esos escritos que constantemente<br />

señalan los/as o ponen<br />

niñ@s y convierten un texto en algo<br />

farragoso, como una carrera de obstáculos,<br />

me voy tropezando en cada<br />

una de esas notas progres y tan inclusivas<br />

que me hinchan y me revientan.<br />

Espero que el Ministerio de Igualdad<br />

sirva para algo, pero mucho me<br />

temo que no será sino otro fiasco.<br />

Crear un Ministerio, hacer una ley<br />

para intentar solucionar una cuestión<br />

cultural y arraigada en el inconsciente<br />

colectivo es sólo y no siempre una<br />

aportación a la solución. Pero la solución<br />

está mucho más en la mano de<br />

la sociedad y de sus movimientos y<br />

organizaciones que en el Gobierno de<br />

turno y gracias a Dios por ello. ■<br />

986

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