14.05.2013 Views

Dilemas éticos en odontología - Universidad Autónoma del Estado ...

Dilemas éticos en odontología - Universidad Autónoma del Estado ...

Dilemas éticos en odontología - Universidad Autónoma del Estado ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

ioética, tal como la “fundaron” el Hastings<br />

C<strong>en</strong>ter (1969) y el Instituto K<strong>en</strong>nedy<br />

(1972) era animar al debate y al diálogo interdisciplinar<br />

<strong>en</strong>tre la medicina, la filosofía y<br />

la ética, y supuso una notable r<strong>en</strong>ovación de<br />

la ética médica tradicional.<br />

Por nuestra parte, <strong>en</strong> este trabajo el objetivo<br />

es el de proponer para la discusión el<br />

debatido constructo: <strong>en</strong>fermo terminal. Aplicando<br />

este concepto no solam<strong>en</strong>te a lo que<br />

nosotros hemos llamado “<strong>en</strong>fermo orgánico<br />

terminal 1 ” sino que lo llevaremos más a<strong>del</strong>ante<br />

y lo ext<strong>en</strong>deremos a lo que aquí calificamos<br />

de “<strong>en</strong>fermo m<strong>en</strong>tal terminal”.<br />

Para el caso nos apoyaremos antropológicam<strong>en</strong>te<br />

<strong>en</strong> la visión kantiana de ser humano,<br />

<strong>en</strong>t<strong>en</strong>dido este como un fin <strong>en</strong> sí mismo<br />

y no un medio. Pero no creemos que exista<br />

una contraposición con una visión personalista,<br />

puesto que <strong>en</strong> esta visión, como lo señala<br />

el doctor De la Presa: “La tradición personalista<br />

hunde sus raíces <strong>en</strong> la razón misma<br />

<strong>del</strong> hombre y <strong>en</strong> el corazón de su libertad:<br />

el hombre es persona por ser el único Ser <strong>en</strong><br />

el que la vida se hace capaz de reflexionar<br />

sobre sí misma, de autodeterminarse; es el<br />

único ser vivi<strong>en</strong>te que ti<strong>en</strong>e la capacidad de<br />

captar y descubrir el s<strong>en</strong>tido de las cosas y<br />

de dar s<strong>en</strong>tido pl<strong>en</strong>o a sus expresiones y a su<br />

l<strong>en</strong>guaje consci<strong>en</strong>te”. También hacemos uso,<br />

a manera de herrami<strong>en</strong>tas metodológicas de<br />

los cuatro principios de la bioética médica<br />

sigui<strong>en</strong>tes: 1. autonomía, 2. b<strong>en</strong>efic<strong>en</strong>cia, 3.<br />

no-malefic<strong>en</strong>cia y 4 justicia. 2 Por otra parte,<br />

y debido a nuestra formación también<br />

276 Sección 5 Conocimi<strong>en</strong>to <strong>del</strong> hombre<br />

<strong>en</strong> psicología aceptamos la clasificación <strong>del</strong><br />

manual diagnóstico y estadístico de los trastornos<br />

m<strong>en</strong>tales <strong>en</strong> su cuarta revisión. 3 La que<br />

creemos reúne objetividad y precisión <strong>en</strong> la<br />

compr<strong>en</strong>sión de las <strong>en</strong>fermedades m<strong>en</strong>tales,<br />

así como la sufici<strong>en</strong>te claridad para abordar<br />

este complejo problema. Que, por otra parte,<br />

es la clasificación aceptada internacionalm<strong>en</strong>te<br />

<strong>en</strong> psiquiatría y psicología.<br />

La justificación provisional de este trabajo,<br />

<strong>en</strong>tre seguram<strong>en</strong>te muchas más posibilidades,<br />

es que creemos que el <strong>en</strong>fermo<br />

m<strong>en</strong>tal terminal, si bi<strong>en</strong> es cierto se ha abordado<br />

<strong>en</strong> la literatura bioética contemporánea,<br />

esta no lo hace sin embargo, primero<br />

con ese constructo conceptual y, segundo,<br />

no vemos que se revise <strong>en</strong> forma sufici<strong>en</strong>te<br />

<strong>en</strong> asuntos que apuntan hacia categorías<br />

como: eutanasia, suicidio asistido, donación<br />

de órganos, terapia, <strong>en</strong>tre otros.<br />

Es de suyo obvio que el marco teórico<br />

para este trabajo es <strong>en</strong> consecu<strong>en</strong>cia doble:<br />

Por una parte t<strong>en</strong>emos a la bioética y por la<br />

otra t<strong>en</strong>emos a la psicología. Y, desde estas<br />

dos perspectivas creemos que se conservará<br />

la coher<strong>en</strong>cia interna de nuestra argum<strong>en</strong>tación,<br />

además de corresponderse congru<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te<br />

con la realidad empírica hasta el<br />

mom<strong>en</strong>to percibido <strong>en</strong> estos campos y <strong>en</strong><br />

relación al <strong>en</strong>fermo m<strong>en</strong>tal terminal.<br />

Con estos anteced<strong>en</strong>tes; el problema al<br />

que nos <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tamos es el sigui<strong>en</strong>te: En las<br />

<strong>en</strong>fermedades m<strong>en</strong>tales terminales, al paci<strong>en</strong>te<br />

se “le deja” a que la <strong>en</strong>fermedad siga<br />

su “curso normal”. Es decir, se le da una te-<br />

1 Armando Roa nos dice solam<strong>en</strong>te unas lacónicas frases sobre el <strong>en</strong>fermo terminal, que aquí llamamos nosotros aquí:<br />

m<strong>en</strong>tal terminal: “En las <strong>en</strong>fermedades inmersas <strong>en</strong> la dem<strong>en</strong>cia, la vecindad de la muerte se vuelve invisible para el <strong>en</strong>fermo,<br />

que además de vivir sólo <strong>en</strong> el mero pres<strong>en</strong>te como es lo propio de tales cuadros y por lo tanto aj<strong>en</strong>o al futuro, no<br />

hay atisbo claro de la muerte. La palabra muerte no despierta <strong>en</strong> esa m<strong>en</strong>te resonancia alguna, o si a veces la ti<strong>en</strong>e, es algo<br />

fugaz, que desaparece <strong>en</strong> medio de la apatía, o de las preocupaciones insustanciales <strong>del</strong> instante. Como se compr<strong>en</strong>de de<br />

suyo, el informar al paci<strong>en</strong>te de que su fin es el deterioro psíquico cada vez mayor y la pérdida de la exist<strong>en</strong>cia, caería <strong>en</strong><br />

el vacío y no sería <strong>en</strong>t<strong>en</strong>dido.” Cfr. Roa, Armando. Ética y bioética. Edit. Andrés Bello, Chile, 1998. p. 238.<br />

2 La perspectiva <strong>en</strong> donde surg<strong>en</strong> o son incorporados a la bioética médica estos cuatro principios se conoce como Principalismo,<br />

y se debe a Beuchamp, T. L. y Childress, J. F. Introducidos <strong>en</strong> su obra: Principles of Biomedical Ethics, 4ª edición,<br />

New York: Oxford University Press, 1994.<br />

3 Pichot, Pierre (coordinador g<strong>en</strong>eral), DSM-IV, Manual Diagnóstico y estadístico de los trastornos m<strong>en</strong>tales, Masson, S.A.,<br />

Barcelona, 1998.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!