Dilemas éticos en odontología - Universidad Autónoma del Estado ...

Dilemas éticos en odontología - Universidad Autónoma del Estado ... Dilemas éticos en odontología - Universidad Autónoma del Estado ...

14.05.2013 Views

ta para mejorar su salud. En el proceso de donación se involucran aspectos médicos, sociales, psicológicos, éticos y legales. Para que una donación se realice es necesaria la autorización de las personas que toman la decisión: el propio donador, sobre todo en la donación en vida, o de los disponentes, es decir las personas que deciden donar los órganos o tejidos de un familiar que perdió la vida. Proceso del trasplante Trasplantar tejidos y órganos de una persona a otra es un proceso complejo. El sistema inmunitario normalmente ataca y destruye el tejido extraño (un problema conocido como rechazo del injerto). El tejido donado debe tener la máxima afinidad posible con el del receptor para reducir la gravedad de un rechazo. Compatibilidad de los tejidos Para que los tejidos sean compatibles lo máximo posible, el personal médico determinan el tipo de tejido tanto del donante como del receptor. Los antígenos (sustancias capaces de estimular una respuesta inmune) están presentes en la superficie de cada célula del cuerpo; cuando a una persona se le trasplanta un tejido, los antígenos de dicho tejido trasplantado alertan al organismo del receptor de que se trata de tejido extraño. Existen tres antígenos específicos en la superficie de los glóbulos rojos (los antígenos A, B, y Rh) que determinan si una trasfusión de sangre será aceptada o rechazada. Es por este motivo por el que la sangre se divide en distintos tipos según estos tres antígenos. Otros tejidos contienen una gran variedad de antígenos, lo que posibilita una mejor compatibilidad. 226 Sección 4 Dilemas médicos Un grupo de antígenos llamados antígenos leucocitarios humanos (HLA) es de máxima importancia cuando se trasplantan tejidos en lugar de glóbulos rojos. Cuanto mayor sea la compatibilidad de los antígenos HLA, más probabilidades existen que el trasplante tenga éxito. Por lo general, antes de que se trasplante algún órgano, se examinan los tejidos del donante y del receptor para comprobar su tipo de HLA. En los padres y en la mayoría de los hermanos, varios antígenos HLA son los mismos, pero otros difieren. Uno de cada cuatro pares de hermanos comparten antígenos HLA y son compatibles. En personas de familias diferentes, pocos antígenos HLA son iguales. Supresión del sistema inmunitario Aunque los antígenos HLA sean compatibles, los órganos trasplantados suelen ser rechazados a menos que se controle estrictamente el sistema inmunitario del receptor. El rechazo, cuando se produce, suele comenzar poco después del trasplante, pero puede manifestarse semanas o incluso meses más tarde. El rechazo puede ser leve y suprimido fácilmente, o bien puede ser intenso y desarrollarse a pesar del tratamiento. El rechazo no sólo puede destruir el tejido u órgano trasplantado, sino que también puede provocar fiebre, escalofríos, náuseas, fatiga y repentinos cambios en la presión arterial. El descubrimiento de que ciertos fármacos pueden frenar (inhibir, suprimir) el sistema inmunitario ha aumentado en gran medida el índice de éxito de los trasplantes. Pero los fármacos inmunodepresores conllevan ciertos riesgos. Al mismo tiempo que frenan la reacción del sistema inmunitario ante el órgano trasplantado, también evitan que éste combata las infecciones y destruya otro material extraño. La inhibición intensiva del sistema inmunitario suele

ser necesaria sólo durante las primeras semanas después de un trasplante o cuando el órgano trasplantado parece estar sufriendo un rechazo. Después de ello se administran menores dosis de fármacos, que deben ser tomados de forma indefinida y generalmente suprimen suficientemente el sistema inmunitario como para controlar el rechazo. La realización de los trasplantes de órganos, tiene dos grandes modalidades según el tipo de donante: donantes cadavéricos y donantes vivos. Principios bioéticos • La búsqueda del bien (principios de de beneficencia y no-maleficencia). • El respeto a las personas (principio de autonomía). • La equidad (principio de justicia). En la actualidad, la gran mayoría de los trasplantes se realiza como un acto terapéutico, ya validado por experimentación previa, por tanto, el problema ético pasa a ser el diagnóstico de muerte, la obtención de órganos y la utilización de recursos escasos. En la perspectiva filosófica, el problema es qué es la vida y qué es la muerte siendo la vida humana una vida animal dotada de razonamiento e integralidad de funciones, la muerte se producirá cuando pierdan total e irreversiblemente esas condiciones. Éste es el caso de la muerte cerebral. La donación de órganos también suscita problemas con algunas objeciones que tienen que ver con la dignidad corporal. En relación con los donantes vivos, hay una presunción contra la automutilación, incluso cuando se saque algún bien de ello. Las donaciones de cadáveres, por otro lado, van contra nuestro respeto por la integridad de un cuerpo, y nuestro deseo de honrar a los muertos. La doctrina de la iglesia deja la cuestión de la donación de órganos a cada individuo. En su encíclica Evangelium Vitae, Juan Pablo II habla de una auténtica cultura de la vida que puede ser fundamentada por cada persona. En el No. 86 escribe: “Entre ellos merece especial reconocimiento la donación de órganos, realizada según criterios éticamente aceptables, para ofrecer una posibilidad de curación e incluso de vida, a enfermos tal vez sin esperanzas”. Dejar morir a las personas de una muerte lenta mientras esperan en vano órganos no es una perspectiva atractiva. En la bioética, un aspecto fundamental que debe considerarse es la autonomía, la cual está representada en la voluntad del finado quien en vida y como un acto altruista, dio su consentimiento en donar sus órganos para trasplante. El desarrollo actual y futuro de la ingeniería genética abre un campo absolutamente distinto al tradicional, en el cual los conflictos bioéticos son también totalmente diferentes. Siendo aún materias de experimentación que requieren un control ético sólo por esa razón, los problemas ya observados son: • Uso de embriones donantes. • Definición del estatuto del embrión humano. • Riesgo de los heterotrasplantes trasgénicos. Aun queda un gran camino por recorrer pero nuestro país ha logrado un gran avance en esta materia los controles son cada vez más estrictos lo que dar una mayor certeza de que el origen de cada órgano o tejido es conseguido de mediante la donación de forma altruista sin algún fin de lucro. Por tanto la donación no es otra cosa más que un acto de generosidad humana que permite darle una oportunidad de vida a ser que lo necesita. Capítulo 23 Bioética y trasplantes 227

ta para mejorar su salud. En el proceso de<br />

donación se involucran aspectos médicos,<br />

sociales, psicológicos, <strong>éticos</strong> y legales.<br />

Para que una donación se realice es necesaria<br />

la autorización de las personas que<br />

toman la decisión: el propio donador, sobre<br />

todo <strong>en</strong> la donación <strong>en</strong> vida, o de los dispon<strong>en</strong>tes,<br />

es decir las personas que decid<strong>en</strong><br />

donar los órganos o tejidos de un familiar<br />

que perdió la vida.<br />

Proceso <strong>del</strong> trasplante<br />

Trasplantar tejidos y órganos de una persona<br />

a otra es un proceso complejo. El sistema<br />

inmunitario normalm<strong>en</strong>te ataca y destruye<br />

el tejido extraño (un problema conocido<br />

como rechazo <strong>del</strong> injerto). El tejido donado<br />

debe t<strong>en</strong>er la máxima afinidad posible con<br />

el <strong>del</strong> receptor para reducir la gravedad de<br />

un rechazo.<br />

Compatibilidad de los tejidos<br />

Para que los tejidos sean compatibles lo<br />

máximo posible, el personal médico determinan<br />

el tipo de tejido tanto <strong>del</strong> donante<br />

como <strong>del</strong> receptor. Los antíg<strong>en</strong>os (sustancias<br />

capaces de estimular una respuesta inmune)<br />

están pres<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> la superficie de<br />

cada célula <strong>del</strong> cuerpo; cuando a una persona<br />

se le trasplanta un tejido, los antíg<strong>en</strong>os<br />

de dicho tejido trasplantado alertan al organismo<br />

<strong>del</strong> receptor de que se trata de tejido<br />

extraño. Exist<strong>en</strong> tres antíg<strong>en</strong>os específicos<br />

<strong>en</strong> la superficie de los glóbulos rojos (los antíg<strong>en</strong>os<br />

A, B, y Rh) que determinan si una<br />

trasfusión de sangre será aceptada o rechazada.<br />

Es por este motivo por el que la sangre<br />

se divide <strong>en</strong> distintos tipos según estos tres<br />

antíg<strong>en</strong>os. Otros tejidos conti<strong>en</strong><strong>en</strong> una gran<br />

variedad de antíg<strong>en</strong>os, lo que posibilita una<br />

mejor compatibilidad.<br />

226 Sección 4 <strong>Dilemas</strong> médicos<br />

Un grupo de antíg<strong>en</strong>os llamados antíg<strong>en</strong>os<br />

leucocitarios humanos (HLA) es de<br />

máxima importancia cuando se trasplantan<br />

tejidos <strong>en</strong> lugar de glóbulos rojos. Cuanto<br />

mayor sea la compatibilidad de los antíg<strong>en</strong>os<br />

HLA, más probabilidades exist<strong>en</strong> que<br />

el trasplante t<strong>en</strong>ga éxito. Por lo g<strong>en</strong>eral,<br />

antes de que se trasplante algún órgano, se<br />

examinan los tejidos <strong>del</strong> donante y <strong>del</strong> receptor<br />

para comprobar su tipo de HLA. En<br />

los padres y <strong>en</strong> la mayoría de los hermanos,<br />

varios antíg<strong>en</strong>os HLA son los mismos, pero<br />

otros difier<strong>en</strong>. Uno de cada cuatro pares de<br />

hermanos compart<strong>en</strong> antíg<strong>en</strong>os HLA y son<br />

compatibles. En personas de familias difer<strong>en</strong>tes,<br />

pocos antíg<strong>en</strong>os HLA son iguales.<br />

Supresión <strong>del</strong> sistema inmunitario<br />

Aunque los antíg<strong>en</strong>os HLA sean compatibles,<br />

los órganos trasplantados suel<strong>en</strong> ser<br />

rechazados a m<strong>en</strong>os que se controle estrictam<strong>en</strong>te<br />

el sistema inmunitario <strong>del</strong> receptor.<br />

El rechazo, cuando se produce, suele<br />

com<strong>en</strong>zar poco después <strong>del</strong> trasplante, pero<br />

puede manifestarse semanas o incluso meses<br />

más tarde. El rechazo puede ser leve y suprimido<br />

fácilm<strong>en</strong>te, o bi<strong>en</strong> puede ser int<strong>en</strong>so y<br />

desarrollarse a pesar <strong>del</strong> tratami<strong>en</strong>to. El rechazo<br />

no sólo puede destruir el tejido u órgano<br />

trasplantado, sino que también puede<br />

provocar fiebre, escalofríos, náuseas, fatiga<br />

y rep<strong>en</strong>tinos cambios <strong>en</strong> la presión arterial.<br />

El descubrimi<strong>en</strong>to de que ciertos fármacos<br />

pued<strong>en</strong> fr<strong>en</strong>ar (inhibir, suprimir) el<br />

sistema inmunitario ha aum<strong>en</strong>tado <strong>en</strong> gran<br />

medida el índice de éxito de los trasplantes.<br />

Pero los fármacos inmunodepresores<br />

conllevan ciertos riesgos. Al mismo tiempo<br />

que fr<strong>en</strong>an la reacción <strong>del</strong> sistema inmunitario<br />

ante el órgano trasplantado, también<br />

evitan que éste combata las infecciones y<br />

destruya otro material extraño. La inhibición<br />

int<strong>en</strong>siva <strong>del</strong> sistema inmunitario suele

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!