13.05.2013 Views

Horror 7- Stephen King y otros

Horror 7- Stephen King y otros

Horror 7- Stephen King y otros

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

<strong>Stephen</strong> <strong>King</strong> y Otros <strong>Horror</strong> 7<br />

de hacer nada. Y el viejo le ha pillado el ritmo y no para, un golpe, coge aire, otro golpe...<br />

–¡Venga, viejo de mierda, pégame otra vez, anda!<br />

–¿Quieres más? ¡ Toma otra, desgraciado! ¡Toma, que hay más!<br />

–¡Anda, pégame! Te gusta, ¿no? ¡Te sientes bien pegándome!<br />

–Claro que me gusta. ¡A ver si te gusta a ti!<br />

RECUERDOS:<br />

(Mis) fallos y mis cagadas. En quinto curso de primaria me castigaron con permanencias después<br />

de la hora de salida. «Ha sido Johnny Forrester. Me ha quitado el dinero para el bocadillo.» En<br />

octavo, le pedí a Darlene Woodman que me acompañara al baile de graduación. Me dijo que no<br />

podía. Fui hasta su casa y le tiré huevos, entonces Mike y Dallas, sus hermanos mayores, me agarraron<br />

y me dieron una paliza que me dejaron tieso. A la semana siguiente, le destrocé las ruedas al<br />

Ford de Dallas. Llego al instituto y desde el principio no hago más que catear. Biología, por ejemplo.<br />

Había que diseccionar una rana para verle las tripas. Yo voy y la dejo hecha una birria. O<br />

inglés, no tengo ni idea del significado de la mitad de las palabras de los libros que se supone que<br />

tenemos que leer. O las clases de mecánica automotor, por favor, si hasta los más burros aprueban<br />

las clases de mecánica automotor, pero yo... por lo único que logro distinguir un filtro de aire de mi<br />

culo es que mi culo tiene dos partes. Quizá todo se deba a que no tengo a nadie que se sienta orgulloso<br />

de mí si logro hacer algo como es debido, o quizá sea porque he nacido para cagarlo todo y se<br />

acabó.<br />

Hubo una ocasión en la que creí que tal vez, sólo tal vez...<br />

Tenía dieciséis años y me apunté a uno de esos cursos de dibujo por correspondencia (trabajé de<br />

ayudante en un supermercado para reunir el dinero con que pagármelo). Siempre me había gustado<br />

dibujar; en el instituto no pude apuntarme a las clases de dibujo, porque no eran para «los alumnos<br />

pertenecientes a los grupos de rendimiento inferior». Pero aquí estaba yo, sentado ante la mesa de la<br />

cocina, trabajando en la primera lección, horizontes y perspectiva, cuando el viejo se me acercó.<br />

–¿Qué es esa mierda? Yo, ni caso.<br />

–Te he preguntado que qué es esa mierda. Pero claro, entonces ya no puedes hacerte el sordo, o<br />

sea que le contestas. Y el tío venga a partirse el pecho de risa<br />

–Cuando tú seas dibujante, yo seré emperador de Etiopía. Entonces es cuando le dices que lo<br />

odias, que no puedes ni verle, y él se sonríe, con los puños preparados<br />

–No más de lo que yo te odio a ti<br />

entonces le sacudes con toda el alma<br />

pero el viejo continúa siendo fuerte, o bien está tan borracho que ya no siente nada; te agarra del<br />

cuello y te estampa contra la mesa y te atiza un puñetazo tras otro en el rostro, y caes de rodillas al<br />

suelo y el viejo te destroza el bosquejo y el libro de Aprenda dibujo por correspondencia y se ríe<br />

como un loco<br />

–Emperador de Etiopía...<br />

UN RECUERDO:<br />

Mamá murió. Algo en su cerebro le hizo paf y se acabó. Entonces quedaron el viejo y él.<br />

UN RECUERDO:<br />

Hasta que tuvo la edad precisa para alistarse en el Ejército. El viejo le dijo:<br />

–Vaya, el soldadito que defenderá el país; a partir de ahora, todos podremos dormir tranqui-<br />

97

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!