OCR Document - Repositorio UASB-Digital - Universidad Andina ...
OCR Document - Repositorio UASB-Digital - Universidad Andina ...
OCR Document - Repositorio UASB-Digital - Universidad Andina ...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
El tiempo, la muerte, la memoria<br />
tiempo, anula el tiempo banal y cotidiano «de los supermercados y los pagarés vencidos<br />
» .<br />
En «Confidencias preliminares » Jara había escrito: Al volver de las Galápagos,<br />
«sobrevino la ruptura del cordón umbilical que me permitía latir al unísono con<br />
el mundo » (...) «A partir de entonces concebí el tiempo como una suerte de pecado<br />
original; como expiación de la conciencia por el extravío de su unidad con el<br />
mundo». No es posible evadirse del tiempo lineal donde «Todo es aniquilación<br />
incesante », pero experiencias radicales como la poesía, la pasión amorosa, la fiesta,<br />
el juego, muestran la experiencia de un instante sin duración ni continuidad que escapa<br />
a la corriente temporal. Sin embargo, ese instante rescatado de la continuidad<br />
se precipita una y otra vez en el siguiente, y en el momento crítico de la caída, el ser<br />
humano se revela como conciencia y desde esa conciencia sabe que está condenado<br />
al tiempo sucesivo; pero sabe también que es posible trascender esa condena, no ya<br />
desde el pensamiento crítico, sino desde la memoria del cuerpo: «detener su flujo<br />
exterminador en la lucidez del instante (...) que permanece como sentimiento de<br />
duración, rescatado de su propia vertiginosidad ». «En esos instantes de privilegio<br />
vuelven a coincidir conciencia y mundo; y la plenitud obtenida en cada una de esas<br />
pulsaciones raudas, confiere sentido definitivo a la vida y a la obra en que lleguemos<br />
a detenerlas y cristalizarlas ».6<br />
Así, la forma de abolir la temporalidad histórica, lineal, sucesiva, es la afirmación<br />
exaltada del instante. La poética del instante no encuentra sustento en el<br />
pensamiento racional, sino en la afirmación de la carnalidad, en la presencia del<br />
cuerpo. El cuerpo como carne es también encarnación del presente.<br />
Sacralidad del eros<br />
A lo largo de las cinco estancias, los espacios entre paréntesis están consagrados<br />
a la celebración del sexo. El erotismo desplegado en «Añoranza » contiene<br />
una ambivalencia: si por una parte es fuerza primordial, oscura, subterránea, que<br />
brota de las esferas más profundas del instinto, por otro lado es la fuerza luminosa<br />
del conocimiento, la reafirmación de lo específicamente humano. En el breve espacio<br />
de un verso, el oxímoron expresa condensadamente esta ambivalencia: «Entrelazados<br />
con delicada ferocidad / hicimos el amor ».<br />
En el primer sentido, el sexo es la fuerza oscura y poderosa de las pulsiones<br />
primigenias: el sexo es «el rugido de las piedras en los desfiladeros del instinto / el<br />
sonido demente del hormiguero pisoteado / lava de medusas de la excitación / cauteloso<br />
y temible avance de la anaconda».<br />
En el segundo sentido, los versos citados más arriba cantan la desnudez de la<br />
amada mediante imágenes de luz (centella, tizón de estrella, resplandor de hacha,<br />
6. «Confidencias preliminares», op. cit.<br />
89