CAPÍTULOS - El CRISTO, Instructor de humanidades
CAPÍTULOS - El CRISTO, Instructor de humanidades
CAPÍTULOS - El CRISTO, Instructor de humanidades
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Calvario3<br />
fatigosamente. A los pies lloraban su madre y Thirza su hermana.<br />
La alcoba <strong>de</strong>l moribundo se había inundado <strong>de</strong> claridad y la frase habitual <strong>de</strong>l Maestro había<br />
caído sobre todas las almas como una música divina:<br />
-"¡La paz sea con vosotros!".<br />
Todos corrieron hacia el lecho <strong>de</strong> Judá encima <strong>de</strong>l cual flotaba la visión amada como la luz<br />
rosada <strong>de</strong>l amanecer.<br />
-Más que me amasteis vosotros os he amado yo <strong>de</strong>s<strong>de</strong> inmensas eda<strong>de</strong>s. ¿Por qué langui<strong>de</strong>ce<br />
vuestra fe y se marchita vuestra esperanza, como si en el sepulcro terminase la carrera eterna<br />
<strong>de</strong>l espíritu?.<br />
"Levantad vuestros corazones al que es Eterno Dador <strong>de</strong> toda vida, y recordad mis palabras:<br />
"Vuelvo a mi Padre <strong>de</strong> don<strong>de</strong> salí, pero no os <strong>de</strong>jo huérfanos ni solos en este mundo".<br />
"Madre, amigos, hermanos... ben<strong>de</strong>cid a Dios todos los momentos <strong>de</strong> vuestra vida, y que ningún<br />
dolor os haga olvidar mis promesas eternas, y mi amor más fuerte que la muerte".<br />
Judá se incorporó <strong>de</strong> pronto sobre el lecho y tendiendo sus brazos a la visión amada le dijo:<br />
-¡Jhasua!... . ¡Vienes a llevarme contigo a tu Reino, mi Rey <strong>de</strong> Israel!<br />
-¡Aún no es llegada la hora <strong>de</strong> tu libertad!. ¡Vive, Judá, amigo mío, y serás el brazo fuerte que<br />
proteja a mis primeros sembradores <strong>de</strong> la fraternidad humana!".<br />
La visión se esfumó tan sutilmente como había aparecido, por más que todas las miradas<br />
hubieran querido retenerla estampada en la retina igual que en el fondo <strong>de</strong>l alma.<br />
Los ancianos y las mujeres recitaban llorando el salmo <strong>de</strong>l Aleluya, símbolo bellísimo <strong>de</strong> las más<br />
puras alegrías <strong>de</strong>l alma humana prosternada ante la gran<strong>de</strong>za Divina.<br />
Iguales apariciones <strong>de</strong>l Divino Maestro tuvieron el mismo día y sólo con diferencia <strong>de</strong> hora, los<br />
amigos <strong>de</strong> Bethania, en la casa <strong>de</strong> la viuda Lía, don<strong>de</strong> se alojaban los <strong>de</strong> Betlehem, y en el<br />
cenáculo <strong>de</strong> José <strong>de</strong> Arimathea, don<strong>de</strong> cerca al medio día se encontraban reunidos los cuatro<br />
doctores amigos <strong>de</strong> Jhasua, más Rubén <strong>de</strong> Engedí esposo <strong>de</strong> Verónica, el príncipe Jesuá, Sallum<br />
<strong>de</strong> Lohes y los familiares <strong>de</strong> ellos.<br />
<strong>El</strong> Ungido <strong>de</strong>l Amor Eterno no olvidó a ninguno <strong>de</strong> cuantos le amaron hasta el fin.<br />
Vercia la Drui<strong>de</strong>sa gala, le vio aparecer en su fuego sagrado <strong>de</strong> la media noche <strong>de</strong>l domingo, y la<br />
voz sin ruido <strong>de</strong> la aparición le dijo:<br />
http://elcristoes.net/calvario3.htm (6 <strong>de</strong> 14) [14/04/2004 21:29:12]