$ 1.200 - Revista Pentecostés

36
PENTECOSTÉS • N° 233
Te he mandado hacer pantalones nuevos
Les quiero contar que gracias
a Dios, terminé bien el semestre.
Soy estudiante de Auditoria en la
Universidad Andrés Bello. Estoy
cursando el último año y tengo
37 años. La razón por la cual no
he podido sacar el título es debido
a una vivencia que tuve cuando
tenía seis meses de embarazo,
situación que el Señor me lo
sanó en los Retiros de Sanación
en P. Hurtado.
El año 2009, me fue muy
bien en la universidad y me eximí
de casi todos los ramos. Sin
embargo, en este año que termina,
todo fue distinto. En el
primer semestre del año 2010,
había estudiado mucho y aunque
puse mucho de mi esfuerzo
me empecé a sacar sólo notas
rojas. Por otra parte, sentía una
gran presión por parte de mis
padres. Estas presiones más to-
TESTIMONIOS PARA LA GLORIA DE DIOS
dos mis esfuerzos infructíferos
por sacarme buenas calificaciones
hicieron que tuviera mucha
presión interior. Ansiedad, sin
un título y sin experiencia en mi
área, razones que me hicieron
imaginar un futuro negro económicamente.
Veía todos mis
proyectos futuros desmoronarse
por no tener mi título de Contador
Auditor. Me imaginaba que
me iban a echar de la casa y que
no tendría como sobrevivir en el
mundo. Las presiones fueron tan
fuertes que llegaban a ser insoportables
tanto así, que una vez
regresando de la universidad en
la noche crucé la Av. Las Condes
justo en el momento en que iban
pasando raudamente dos autos.
Me paré en medio de la avenida
y me dije “atropéllenme”. Fue
un lapso que en segundos grité
“¡No!” y crucé rápidamente la
avenida. Las presiones eran tan
grandes que me afectaban el estómago.
Al final de ese semestre,
me había echado tres ramos de
cuatro. La verdad es que no entendía
nada. En años anteriores
me hicieron test de inteligencia
con un psicólogo y los resultados
fueron que tenía inteligencia superior,
que podía sacar cualquier