Sementera: 312 litros de grano - citaREA

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ECO 592 — ECO no fomenta los intereses rurales, abriendo escuelas, organizando prácticas y ensayos, construyendo vías de comunicación, elevando los derechos arancelarios, concediendo primas de exportación en atención á la utilidad del agricultor, cultivador ó ganadero, sino atendiendo al bien general, que se funda en la producción abundante, en la difusión de la riqueza, os; p¡ C o -3 ^ o '.SS I Explotación.- Dominio.. 1 Capital • I Trabajo., Estiércol.. y en la circulación rápida y desembarazada. Creemos que lo expuesto basta para que se tenga idea exacta de la índole y extensión de la economía rural. Sin embargo, bueno será precisar sus extensos límites, y para ello figurar en un cuadro sinóptico las múltiples materias que comprende. Este trabajo es debido á M. Molí. agricultor, cultivador; aptitudes morales, intelectuales y físicas; ins­ ¡Agrónomo, trucción; medios de adquirirla. Dueño de la casa. Extensión: Grande, mediana y pequeña labranza. Composición: Importancia relativa de las diversas naturalezas del fundo; riqueza del suelo. Fraccionamiento ó acumulación de la propiedad. Edificios: Dimensiones, estado, situación relativa á las tierras. Localidad: Caminos, población, ventas, impuestos. Estimación: Renta; clasificación económica de las tierras, prados, viñas, etc., etc. Títulos de uso: Posesión, arriendo, asociación, etc. Capitales agrícolas: Capital del fundo, dividido en capital de adquisición, capital de mejoras, crédito territorial. — Capital de explotación, dividido en capital impuesto, muerto y vivo, y capital circulante. — Cantidad de cada uno, consumo y reproducción. Su parte en la producción^ proporción entre el trabajo y las fuerzas naturales: cultivo intensivo y extensivo. ( Temporiles } Suma del trabajo; ventajas Trabajo del hombre.... < Jornaleros > é inconvenientes; ajuste; (Destajistas ) precio del trabajo. i Caballos. Í Ventajase inconvenientes \ Muías. Elección, combinaciones, *, Asnos, precio del trabajo i Bueyes. ' Vacas. Vapor, electricidad. Carácter é importancia; empobrecimiento producido por las cosechas. Por los animales producto­ Producción del estiércol, calculada res. \ Precio á que resulta. 1 Compras. * I Valor comparado de diversos estiércoles. . \ Cantidad necesaria para un cultivo dado; estática agrícola. Períodos culturales. Su destino. i rotación de co- \ scchas Í ( Por los forrajes y camas.

ECO — 593 — ECO II. LA ECONOMÍA RURAL Y I.A PRODUCCIÓN AGRÍCOLA. — Quédese para los expositores y tratadistas de esta ciencia el desenvolver y explicar las diversas materias apuntadas en el cuadro anterior. También se examinan muchas de ellas con más ó menos extensión en este DICCIONARIO en las correspondientes palabras. En lo que resta del presente artículo, para que nuestras consideraciones tengan un sentido práctico, parécenos oportuno sintetizar la doctrina manifestando, aunque sea con gran concisión, lo que vale en el progreso de la agricultura la aplicación de los principios de la economía rural, y las funestas consecuencias de la inobservancia de sus preceptos. ¿Cómo armoniza el agricultor los diversos elementos culturales, á fm de sacar de la hacienda la producción más abundante con el menor gasto posible? Acomodando la índole de la empresa á las circunstancias locales; empleando en la empresa el capital necesario; dando al capital la inversión más acertada; comprendiendo en esa inversión la producción, la transformación industrial de las cosechas, la venta de los productos. Reuniendo para todo esto la práctica á la ciencia, la vigilancia del detalle y la actividad en la iniciativa. Difícil es fijar teóricamente y á priori en cada caso especial, la regla de armonía entre estos diversos elemeutos, pero lo es mucho más poder y saber aplicarla. Difícil es determinar concretamente y con precisión la manera de que el labrador se enriquezca; pero es más difícil que el labrador tenga suficientes medios y recursos de enriquecerse, siendo así que los obstáculos que se oponen á ello están fuera del alcance de su poder, son superiores á su voluntad. ¿Cómo es posible que combine planes de mejora si carece de instrucción; que realice las reformas costosas si carece de capital numerario; que obtenga lucro de los planes mejor concebidos y ejecutados si no es leal y obediente el trabajador, si no le ampara la Administración en el ejercicio de sus derechos ? Por eso decía con razón un orador: «El arte agrícola, considerado bajo el punto de vista de los procedimientos mecánicos, del conocimiento de los terrenos, de las plantas cultivables y de los animales domésticos se halla tan adelantado, que apenas deja que desear. No sucede lo mismo con la economía rural. Esta ciencia tiene por objeto la apreciación de las circunstancias culturales, económicas, comerciales y políticas que deben influir en determinadas posiciones en la elección de los medios de toda clase que es preciso emplear, tales como las plantas de cultivo preferibles, las especies de ganado y razas que conviene criar, la clase de abono más útil, etc. El estudio de los principios generales de la economía rural debe ser la base de la práctica agrícola. Ilumina al labrador y dirige su marcha, preservándolo de contingencias desastrosas, puesto que le da la clave de los resul­ tados posibles. Esta ciencia, eminentemente práctica en el fondo, mas la cual entraña las teorías más trascendentales, es la parte más atrasada de la agronomía. A que se propague y desarrolle deben tender los hombres de ciencia más competentes.» Hacia el desarrollo de esta ciencia tienden efectivamente los esfuerzos de los agrónomos ilustrados, y á que impere la idea económica en el cultivo se dirigen cada día con más empeño los agricultores más progresistas. Por eso donde el individuo no basta para organizar convenientemente una empresa agrícola, se constituye la asociación, y cuando faltan recursos para hacer frente á las necesidades, se crea el crédito territorial. Pero si es cierto que la economía rural no está tan adelantada como fuera de desear respecto á ciertas reglas de aplicación, las cuales pueden ser objeto de debate, y de cuya exactitud no hay otro juez que eí agricultor, no es menos cierto que contiene principios generales de bondad absoluta, y que son como la raíz de que arrancan los adelantos más asombrosos, en cuanto á producción, de la época presente. El economista no puede fijar, á causa de la variedad de accidentes que concurren en las haciendas y en sus dueños, qué proporción, por ejemplo, ha de haber entre el capital inmueble y el móvil; qué regla de proporción se puede establecer en cada caso, en cuanto á utilidad, entre el sistema forestal, el de pasturaje y el labrantío. Tal incertidumbre científica sobre estas cuestiones, y cien más que podemos llamar de relación, causan la desesperación de los agricultores. Cuando alguno, hallándose en situación apurada, desea variar de plan, pregunta al hombre de estudio; el hombre de estudio, que es prudente, evade la contestación, pues los problemas de carácter administrativo y de práctica local sólo pueden ser resueltos por el interesado, residente eu la localidad; y éste, envuelto en las tinieblas de la duda, niega ó maldice la ciencia, que no ilumina su razón ni le salva de la ruina. No; la ciencia económica no es inútil para la producción, por más que no responde siempre de un modo satisfactorio á los deseos del cultivador. Si respondiese, ¿qué papel tocaría desempeñar al criterio de éste? Basta, para apreciar su importancia que su doctrina se apoye en principios de universal aplicación y de exactitud indiscutible. Los sintetizaremos en los siguientes: 1.° El desequilibrio de los elementos constitutivos de la empresa agrícola, clima, tierra, capital, trabajo, dirección inteligente, acarrea indefectiblemente la ruina del empresario. 2.° Cuanto más suban en bondad y en cantidad esos elementos, más se aproximará al máximum la producción. 3.° La utilidad del agricultor consiste en el producto neto; la de la sociedad, en el producto bruto. El poder público, por su deber de atender al bien social, está obligado á pro-

ECO — 593 — ECO<br />

II. LA ECONOMÍA RURAL Y I.A PRODUCCIÓN<br />

AGRÍCOLA. — Qué<strong>de</strong>se para los expositores y<br />

tratadistas <strong>de</strong> esta ciencia el <strong>de</strong>senvolver y<br />

explicar las diversas materias apuntadas en el<br />

cuadro anterior. También se examinan muchas<br />

<strong>de</strong> ellas con más ó menos extensión en<br />

este DICCIONARIO en las correspondientes palabras.<br />

En lo que resta <strong>de</strong>l presente artículo,<br />

para que nuestras consi<strong>de</strong>raciones tengan un<br />

sentido práctico, parécenos oportuno sintetizar<br />

la doctrina manifestando, aunque sea<br />

con gran concisión, lo que vale en el progreso<br />

<strong>de</strong> la agricultura la aplicación <strong>de</strong> los principios<br />

<strong>de</strong> la economía rural, y las funestas<br />

consecuencias <strong>de</strong> la inobservancia <strong>de</strong> sus preceptos.<br />

¿Cómo armoniza el agricultor los diversos<br />

elementos culturales, á fm <strong>de</strong> sacar <strong>de</strong> la hacienda<br />

la producción más abundante con el<br />

menor gasto posible? Acomodando la índole <strong>de</strong><br />

la empresa á las circunstancias locales; empleando<br />

en la empresa el capital necesario;<br />

dando al capital la inversión más acertada;<br />

comprendiendo en esa inversión la producción,<br />

la transformación industrial <strong>de</strong> las cosechas,<br />

la venta <strong>de</strong> los productos. Reuniendo para<br />

todo esto la práctica á la ciencia, la vigilancia<br />

<strong>de</strong>l <strong>de</strong>talle y la actividad en la iniciativa.<br />

Difícil es fijar teóricamente y á priori en<br />

cada caso especial, la regla <strong>de</strong> armonía entre<br />

estos diversos elemeutos, pero lo es mucho<br />

más po<strong>de</strong>r y saber aplicarla. Difícil es <strong>de</strong>terminar<br />

concretamente y con precisión la manera<br />

<strong>de</strong> que el labrador se enriquezca; pero es<br />

más difícil que el labrador tenga suficientes<br />

medios y recursos <strong>de</strong> enriquecerse, siendo<br />

así que los obstáculos que se oponen á ello<br />

están fuera <strong>de</strong>l alcance <strong>de</strong> su po<strong>de</strong>r, son superiores<br />

á su voluntad. ¿Cómo es posible que<br />

combine planes <strong>de</strong> mejora si carece <strong>de</strong> instrucción;<br />

que realice las reformas costosas si<br />

carece <strong>de</strong> capital numerario; que obtenga lucro<br />

<strong>de</strong> los planes mejor concebidos y ejecutados<br />

si no es leal y obediente el trabajador,<br />

si no le ampara la Administración en el ejercicio<br />

<strong>de</strong> sus <strong>de</strong>rechos ?<br />

Por eso <strong>de</strong>cía con razón un orador: «El arte<br />

agrícola, consi<strong>de</strong>rado bajo el punto <strong>de</strong> vista<br />

<strong>de</strong> los procedimientos mecánicos, <strong>de</strong>l conocimiento<br />

<strong>de</strong> los terrenos, <strong>de</strong> las plantas cultivables<br />

y <strong>de</strong> los animales domésticos se halla<br />

tan a<strong>de</strong>lantado, que apenas <strong>de</strong>ja que <strong>de</strong>sear.<br />

No suce<strong>de</strong> lo mismo con la economía rural.<br />

Esta ciencia tiene por objeto la apreciación<br />

<strong>de</strong> las circunstancias culturales, económicas,<br />

comerciales y políticas que <strong>de</strong>ben influir en<br />

<strong>de</strong>terminadas posiciones en la elección <strong>de</strong> los<br />

medios <strong>de</strong> toda clase que es preciso emplear,<br />

tales como las plantas <strong>de</strong> cultivo preferibles,<br />

las especies <strong>de</strong> ganado y razas que conviene<br />

criar, la clase <strong>de</strong> abono más útil, etc. El<br />

estudio <strong>de</strong> los principios generales <strong>de</strong> la economía<br />

rural <strong>de</strong>be ser la base <strong>de</strong> la práctica<br />

agrícola. Ilumina al labrador y dirige su marcha,<br />

preservándolo <strong>de</strong> contingencias <strong>de</strong>sastrosas,<br />

puesto que le da la clave <strong>de</strong> los resul­<br />

tados posibles. Esta ciencia, eminentemente<br />

práctica en el fondo, mas la cual entraña las<br />

teorías más trascen<strong>de</strong>ntales, es la parte más<br />

atrasada <strong>de</strong> la agronomía. A que se propague<br />

y <strong>de</strong>sarrolle <strong>de</strong>ben ten<strong>de</strong>r los hombres <strong>de</strong><br />

ciencia más competentes.»<br />

Hacia el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> esta ciencia tien<strong>de</strong>n<br />

efectivamente los esfuerzos <strong>de</strong> los agrónomos<br />

ilustrados, y á que impere la i<strong>de</strong>a económica<br />

en el cultivo se dirigen cada día con más empeño<br />

los agricultores más progresistas. Por<br />

eso don<strong>de</strong> el individuo no basta para organizar<br />

convenientemente una empresa agrícola,<br />

se constituye la asociación, y cuando faltan<br />

recursos para hacer frente á las necesida<strong>de</strong>s,<br />

se crea el crédito territorial.<br />

Pero si es cierto que la economía rural no<br />

está tan a<strong>de</strong>lantada como fuera <strong>de</strong> <strong>de</strong>sear respecto<br />

á ciertas reglas <strong>de</strong> aplicación, las cuales<br />

pue<strong>de</strong>n ser objeto <strong>de</strong> <strong>de</strong>bate, y <strong>de</strong> cuya<br />

exactitud no hay otro juez que eí agricultor,<br />

no es menos cierto que contiene principios<br />

generales <strong>de</strong> bondad absoluta, y que son<br />

como la raíz <strong>de</strong> que arrancan los a<strong>de</strong>lantos<br />

más asombrosos, en cuanto á producción, <strong>de</strong> la<br />

época presente. El economista no pue<strong>de</strong> fijar,<br />

á causa <strong>de</strong> la variedad <strong>de</strong> acci<strong>de</strong>ntes que concurren<br />

en las haciendas y en sus dueños, qué<br />

proporción, por ejemplo, ha <strong>de</strong> haber entre<br />

el capital inmueble y el móvil; qué regla <strong>de</strong><br />

proporción se pue<strong>de</strong> establecer en cada caso,<br />

en cuanto á utilidad, entre el sistema forestal,<br />

el <strong>de</strong> pasturaje y el labrantío. Tal incertidumbre<br />

científica sobre estas cuestiones, y<br />

cien más que po<strong>de</strong>mos llamar <strong>de</strong> relación, causan<br />

la <strong>de</strong>sesperación <strong>de</strong> los agricultores. Cuando<br />

alguno, hallándose en situación apurada,<br />

<strong>de</strong>sea variar <strong>de</strong> plan, pregunta al hombre <strong>de</strong><br />

estudio; el hombre <strong>de</strong> estudio, que es pru<strong>de</strong>nte,<br />

eva<strong>de</strong> la contestación, pues los problemas<br />

<strong>de</strong> carácter administrativo y <strong>de</strong> práctica<br />

local sólo pue<strong>de</strong>n ser resueltos por el interesado,<br />

resi<strong>de</strong>nte eu la localidad; y éste, envuelto<br />

en las tinieblas <strong>de</strong> la duda, niega ó maldice<br />

la ciencia, que no ilumina su razón ni le<br />

salva <strong>de</strong> la ruina.<br />

No; la ciencia económica no es inútil para<br />

la producción, por más que no respon<strong>de</strong> siempre<br />

<strong>de</strong> un modo satisfactorio á los <strong>de</strong>seos <strong>de</strong>l<br />

cultivador. Si respondiese, ¿qué papel tocaría<br />

<strong>de</strong>sempeñar al criterio <strong>de</strong> éste? Basta, para<br />

apreciar su importancia que su doctrina se<br />

apoye en principios <strong>de</strong> universal aplicación<br />

y <strong>de</strong> exactitud indiscutible. Los sintetizaremos<br />

en los siguientes:<br />

1.° El <strong>de</strong>sequilibrio <strong>de</strong> los elementos constitutivos<br />

<strong>de</strong> la empresa agrícola, clima, tierra,<br />

capital, trabajo, dirección inteligente, acarrea<br />

in<strong>de</strong>fectiblemente la ruina <strong>de</strong>l empresario.<br />

2.° Cuanto más suban en bondad y en cantidad<br />

esos elementos, más se aproximará al<br />

máximum la producción.<br />

3.° La utilidad <strong>de</strong>l agricultor consiste en<br />

el producto neto; la <strong>de</strong> la sociedad, en el producto<br />

bruto. El po<strong>de</strong>r público, por su <strong>de</strong>ber<br />

<strong>de</strong> aten<strong>de</strong>r al bien social, está obligado á pro-

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