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hacer cumplir las políticas de salud y las normas de
orden público en su jurisdicción territorial.
El gobierno municipal es el responsable de la
administración de los establecimientos de salud y
de las cuentas municipales de salud a través de los
DILOS y de los comités de vigilancia. El DILOS es
la máxima autoridad de salud en toda el área territorial
del municipio. Está conformado por el Alcalde
Municipal o su representante y el representante del
Comité de Vigilancia (Juntas Vecinales o pueblos
campesinos, indígenas u originarios, organizados
según sus usos, costumbres o disposiciones estatutarias).
Entre sus funciones y atribuciones está,
además de la mejora de los servicios de atención
medica, la promoción y prevención de la salud y el
fomento de la activa participación de la comunidad
en todos los establecimientos de salud.
En la práctica existen varios problemas en la articulación
entre los tres niveles del sistema público:
en términos de gestión, la doble dependencia del
Municipio y del SEDES no favorece la coordinación
interna y la eficiencia y eficacia del sistema.
Más aún, a nivel nacional registramos la existencia
de sistemas de seguros y “Cajas” que cubren vastos
sectores de la población y que no se relacionan adecuadamente
con el sistema público
En términos de funcionamiento se puede afirmar,
en general, que el sistema de salud institucional es inequitativo
e ineficiente: no toma en cuenta la diversidad
cultural, social y étnica del país. Los establecimientos
de salud presentan insuficiente capacidad resolutiva,
baja y mala calidad y eficiencia, están desconectados
entre sí, mal distribuidos, deficientemente equipados,
con profesionales desmotivados y poco preparados
para trabajar en la realidad multicultural de Bolivia 6 .
Por su parte, la población tiene una muy baja percepción
de la calidad del servicio y, en algunos casos, fuerte
resistencia al uso del sistema, hecho que se refleja
UNA INTRODUCCIÓN AL TEMA DE LA INTERCULTURALIDAD
(sobre todo en área rural) en bajas tasas de cobertura.
Incluso en los programas y prestaciones cubiertas por
el Seguro Universal Materno Infantil (SUMI) y otros
seguros que benefician a la población.
Sin embargo, el uso de la biomedicina por parte
de la población se difunde en forma paralela a los
fenómenos de aculturación y transformación cultural.
Es más frecuente entre la población criolla y
cercana a los centros urbanos, en tanto que en las
áreas rurales aún persisten barreras que condicionan
su acceso y los doctores son aún llamados kharisiris
7 . El desarrollo de estas barreras está muy vinculado
con las experiencias –positivas o negativas– de
contacto con el sistema de salud institucional. Es
innegable que, en el caso del parto, paulatinamente
las mujeres están empezando a dirigirse al personal
biomédico para dar a luz 8 , incluso en áreas rurales.
Sin embargo, raras veces se animan a largos desplazamientos
hacia establecimientos de salud lejanos.
Y si bien aceptan realizar los controles prenatales,
las parturientas optan por ser atendidas en su casa,
considerando que se trata de un asunto privado que
se tiene que limitar al círculo familiar, en una atmósfera
íntima y cálida. En algunos casos recurren
a un(a) partero(a), pero usualmente la madre, el esposo
u otro miembro de la familia asume este rol.
Sistema médico tradicional
Otro sistema médico que coexiste con el biomédico
es el de la medicina tradicional o de las medicinas
tradicionales. Las categorías de enfermedad observadas
en este sistema se diferencian de la biomedicina:
la enfermedad es percibida como una ruptura en el
orden natural y social. Una persona se enferma porque
ha transgredido alguna norma establecida por la
cultura. La tarea del médico tradicional consiste en
reestablecer el equilibrio –tanto en el orden social
como religioso– a través de rituales de curación.
6 Plan de Desarrollo Sectorial de Salud 2006-2011
7 Literalmente “chupagrasa”. Ver el texto de Ivan Castellón, Abril es tiempo de kharisiris.
8 Habrá que evaluar el efecto que pueda tener el “bono Juana Azurduy” en el acceso a los servicios institucionales de maternidad. Este bono
otorga a la madre un monto financiero para asistir a los controles prenatales y al parto.