13.05.2013 Views

PARQUE JURÁSICO - Fieras, alimañas y sabandijas

PARQUE JURÁSICO - Fieras, alimañas y sabandijas

PARQUE JURÁSICO - Fieras, alimañas y sabandijas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

sería bonito, montar a Ralph.<br />

Tim le dijo a Grant:<br />

—¿Recuerda cuando estábamos con el estegosaurio? ¿Anoche?<br />

—Sí.<br />

—¿Cómo es que usted les preguntó lo del ADN de rana?<br />

—Por de la procreación. No se pueden explicar por qué los dinosaurios están procreando,<br />

ya que los someten a irradiación, y dado que todos son hembras.<br />

—Exacto.<br />

—Bueno, la irradiación es tristemente célebre por no ser de fiar, y probablemente no<br />

funciona. Creo que eso, con el tiempo, se demostrará aquí. Pero todavía queda el problema de<br />

que los dinosaurios son hembras: ¿cómo se pueden reproducir cuando todas son hembras?<br />

—Eso es —asintió Tim.<br />

—Bueno, pues por todo el reino animal la reproducción sexual existe con extraordinaria<br />

diversidad.<br />

—Tim está muy interesado por el sexo —dijo Lex.<br />

Ambos pasaron por alto ese comentario.<br />

—Por ejemplo —prosiguió Grant—, muchos animales tienen reproducción sexual sin<br />

siquiera mantener lo que llamaríamos relaciones sexuales: el macho libera un espermatóforo,<br />

que contiene el esperma, y la hembra lo recoge más tarde. Esta clase de intercambio no<br />

requiere que haya tanta diferenciación física entre macho y hembra como solemos creer con<br />

frecuencia. Los machos y las hembras son más parecidos en algunos animales que en los<br />

seres humanos.<br />

—¿Pero qué pasa con las ranas?<br />

Grant oyó chillidos repentinos que venían de las ramas que tenían por encima, cuando los<br />

microceratópsidos salieron corriendo en todas direcciones, alarmados, sacudiendo las ramas.<br />

La cabezota del dinosaurio asomó de repente a través del follaje, desde la izquierda; las<br />

mandíbulas tirando dentelladas a la balsa. Lex aulló de terror, y Grant remó hacia la ribera<br />

opuesta, pero en esa parte el río sólo tenía tres metros de ancho. El tiranosaurio se había<br />

atascado en la densa vegetación. Empujaba con la cabeza hacia delante, la torcía, y rugía.<br />

Después, la zafó echándose atrás.<br />

A través de los árboles que tapizaban la ribera del río, vieron la enorme forma oscura del<br />

tiranosaurio que se desplazaba hacia el Norte, en busca de un hueco entre los árboles que<br />

cubrían las orillas. Todos los microceratópsidos habían pasado a la ribera opuesta, donde<br />

chillaban, correteaban y saltaban arriba y abajo. En la balsa, Grant, Tim y Lex contemplaban,<br />

indefensos, cómo el tiranosaurio intentaba irrumpir otra vez entre la vegetación. Pero ésta era<br />

demasiado densa a lo largo de las riberas del río. Una vez más, el tiranosaurio se desplazó<br />

aguas abajo, adelantándose a la balsa, y volvió a intentarlo, sacudiendo las ramas con furia.<br />

Pero, una vez más, fracasó.<br />

Después se alejó, dirigiéndose aguas abajo, pero más lejos.<br />

—Lo odio —dijo Lex.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!