Evolución Fiesta Brava 10 TOMO I El «Uro», según el cuadro de Augsburgo. El tercio anterior amplio y estrecho el posterior, propio de los vacunos de combate, y la mirada encendida de los toros de casta Navarra. El «Uro», de la Cueva de Altamira, en el que el tercio anterior es impresionante y mínimo el posterior. Entre ambas imágenes hay una distancia de 20.000 años. El PUERTO de SANTA MARÍA
TOMO I Introducción 123456789 S 123456789 123456789 i a lo largo de este Primer 123456789 Tomo –se avisa respetuosa- 123456789 123456789 mente- el 123456789 lector encuentra la 123456789 frase corrida de toros, que 123456789 no haga caso <strong>al</strong>guno, ya que éstas, como espectáculo por excelencia así llamado, no tienen fisonomía propia hasta fines del siglo XVIII, como asevera don José María de Cossío: «Téngase en cuenta, nos dice, que en los siglos anteriores –comenzado en Asia y acabando <strong>al</strong> fin<strong>al</strong> del siglo XV en América en este primer libro-, lo fundament<strong>al</strong> de las fiestas de toros eran las suertes de a cab<strong>al</strong>lo, <strong>al</strong>anceamiento, con lanzas y rejones, o picándolos con vara de detener, y, como acompañamiento de ellas, las suertes pedestres se prodigaban dentro de la más absoluta anarquía, y, en muchos casos, ni aún por toreros profesion<strong>al</strong>es»; que sólo llegaban a obtener el título de matatoros. «Los períodos de la lidia a pie –si es que los hubosi acaso había de morir el toro a estoque, estaban aún muy confusos e indefinidos, y toda clase de invenciones y suertes tenían lugar como entremés o como complemento del toreo a cab<strong>al</strong>lo.» Antes de sumergirnos en el fascinante planeta de los toros, bien merece tomarse en cuenta que nada sería semejante en grandeza para el hombre si lograra hacer un retrato de esa otra super evolución, la del Universo, para tratar de comprender, aunque sólo sea muy resumidamente, cómo se formó -para ubicarse debidamente en nues- El PUERTO de SANTA MARÍA PRIMERA PARTE Evolución Fiesta Brava tra Tierra y sobre ella las especies vivas-, hasta aparecer el hombre y la torería, protagonizada por el toro bravo; porque si nuestra Fiesta tiene un inmenso caud<strong>al</strong> de cultura, más lo es interpretándola en el conjunto del Cosmo; lo que equiv<strong>al</strong>dría a retroceder en el túnel maravilloso del tiempo, y se comprobaría que el proceso de formación apenas se ha iniciado y que se siguen produciendo inmensas explosiones de imponentes masas estelares por todo el infinito Cosmos, de las que nacen incontables estrellas y sistemas solares, con astros tan luminosos como nuestro Sol, e incluso de mayor tamaño que todo nuestro sistema solar; es decir, que lejos de gozar el Universo de una eterna quietud, como <strong>al</strong>gunos piensan, es más bien una eterna explosión, lo cu<strong>al</strong> le otorga <strong>al</strong> enigma del espacio un dimensión fuera del <strong>al</strong>cance de la mente humana. Todas esas infinitas explosiones de estrellas supernovas que acontecen en el cosmos desde hace nadie sabe cuándo, incluyendo por supuesto la gran explosión que dio lugar a la formación de la Vía Láctea, donde está nuestro sistema solar, llenaron todo los inmensos espacios interestelares de las más diversas energías. <strong>De</strong> t<strong>al</strong> suerte que, si los hombres emplean los más diversos carburantes, la energía solar y la eléctrica y hasta la de origen atómico, para desplazar todo tipo de vehículos y máquinas, otros seres provenientes de otros planetas, utilizan sin duda esas inagotables energías que llenan 11