Ramon Grau
Ramon Grau Ramon Grau
104 Actualmente, la problemática medioambiental justifica la investigación de las formaciones litostratigráficas susceptibles de contener materiales organógenos ricos en ácidos húmicos y fúlvicos, los cuales poseen un gran potencial para absorber metales pesados, según los primeros resultados de los trabajos de investigación que se están desarrollando en nuestro departamento de Ingeniería Minera y Recursos Naturales de la UPC (con las tesis de Ramon Grau y de Baldomer Colldeforns en curso de realización). UNIDADES ESTRATIGRÁFICAS CON UN IMPORTANTE CONTENIDO DE URANIO Aunque se han encontrado lignitos en casi todas las formaciones lacustres y aluviales del sector oriental de la cuenca del Ebro, hasta la actualidad únicamente se consideran como unidades lignitíferas uraniníferas, por la composición y la constancia de los niveles, las Secuencias de les Basses y de Calaf o Aleny. Los términos secuenciales que se pueden establecer en estas sucesiones del Eoceno superior - Oligoceno son los siguientes: a/ Calizas micríticas, b/ Lignitos, c/ Margas organógenas, d/ Lutitas rojas y e/ Areniscas conglomeráticas. La ritmicidad de estos sedimentos ha sido estudiada por Alberto Sáez en su tesis doctoral (1987, UB), pero el modelado sedimentario para la génesis de materiales ricos en ácidos húmicos y fúlvicos es toda una novedad. Es decir, en otras palabras, para una posible explotación de materiales útiles para la absorción de materiales radioactivos y de metales pesados contaminantes es imprescindible la rigurosa definición de Secuencias Elementales en Sedimentos Ricos en Ácidos húmicos y Fúlvicos o SEHF, dentro de las secuencias compuestas o SC (términos B y C); lo cual puede considerarse original dentro de las recientes investigaciones geológicas. INFLUENCIA DE LOS FACTORES TECTÓNICOS EN LA GÉNESIS DE LAS SECUENCIAS LIGNITÍFERAS En las secciones de dirección S-N, de la Depresión Central Catalana, se observa una cierta condensación de los niveles hacia los márgenes de la cuenca, apareciendo algunas fases erosivas. En estos mismos cortes, se observa una mayor potencia de las secuencias lacustres en el centro de los pliegues sinclinales, lo cual sugiere un control tectónico sobre la sedimentación (subsidencia). En este sentido, se han descrito diversas discordancias sintectónicas, tanto en el margen septentrional de la cuenca (Riba et al., 1975; Sáez, 1987), como en el meridional (Colombo, 1980; Anadón et al., 1985), lo que permite definir Unidades Alostratigráficas delimitadas por discontinuidades 104
sedimentarias. 105 Las discordancias intraformacionales que presentan las facies aluviales de la Serralada Costera Catalana han sido estudiadas por diversos autores. En las sierras de St. Miquel de Montclar, la Llena y el Montsant, se presentan importantes conjuntos de discordancias progresivas y angulares sintectónicas comprendidas entre el Eoceno superior y el Oliogoceno (Anadón et al. 1985). LAS CARACTERÍSTICAS PALEOGEOGRÁFICAS Y LOS PROCESOS SEDIMENTARIOS AUTOCÍCLICOS COMO CONDICIONANTES EN LA FORMACIÓN DE NIVELES CON MATERIA ORGÁNICA RICA EN MATERIA FÚLVICA A pesar de la abundante información existente sobre la zona, pensamos que era necesaria una documentación más detallada respecto a las unidades litostratigráficas y las secuencias lacustres definidas previamente (Anadón et al. 1988, Maestro et al 1996), sobre todo de las facies palustres y lacustres marginales, así como su disposición respecto a los sistemas aluviales (distal o marginal) y fluviales (meandros, llanura de inundación, deltaica lacustre, etc). Tradicionalmente, se han estudiado los depósitos de carbón como indicadores paleoclimáticos que han permitido el estudio de los cambios vegetales a lo largo del Fanerozoico, generalmente interpretados como depósitos de períodos más o menos húmedos que han permitido el desarrollo de turberas. Las relaciones que se establecen actualmente entre el lago Makarikari y el río Okavango (Botswana, Africa) constituyen una sedimentación tipo "Inland" o deltas lacustres efímeros (Saneestrit, Mccarty, 1998), que se puede tomar como paradigma de los antiguos sistemas deposicionales lacustres desarrollados en la Depresión Central Catalana durante el tránsito Eoceno superior - Oligoceno, mientras que algunos de los sistemas límnicos del Paleoceno, Eoceno inferior y medio presentarían características más o menos parálicas, al estar conectados lateralmente con medios marinos. En el presente trabajo se propone una nueva interpretación paleoambiental y paleogeográfica de los sistemas lacustres endorreicos con una dicotomía entre características climáticas de zonas húmedas y semiáridas. Se plantea la siguiente hipótesis de trabajo: los depósitos organógenos también se pueden originar en dominios climáticos que no sean húmedos, es decir, las facies lignitíferas se pueden sedimentar por la entrada de un sistema fluvial perenne en una zona con condiciones climáticas de semiaridez. En el Rift Africano, anualmente se establece un equilibrio entre los sistemas lacustre y fluvial situados al N del desierto del Kalahari, que actualmente presenta un clima árido con microclimas húmedos. Durante el Pleistoceno, una falla bloqueó el curso del río y las aguas formaron un estanque en la zona más deprimida del Makarikari. Progresivamente, se produjo un 105
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Las discordancias intraformacionales que presentan las facies aluviales<br />
de la Serralada Costera Catalana han sido estudiadas por diversos autores. En<br />
las sierras de St. Miquel de Montclar, la Llena y el Montsant, se presentan<br />
importantes conjuntos de discordancias progresivas y angulares sintectónicas<br />
comprendidas entre el Eoceno superior y el Oliogoceno (Anadón et al. 1985).<br />
LAS CARACTERÍSTICAS PALEOGEOGRÁFICAS Y LOS<br />
PROCESOS SEDIMENTARIOS AUTOCÍCLICOS COMO<br />
CONDICIONANTES EN LA FORMACIÓN DE NIVELES CON<br />
MATERIA ORGÁNICA RICA EN MATERIA FÚLVICA<br />
A pesar de la abundante información existente sobre la zona, pensamos<br />
que era necesaria una documentación más detallada respecto a las unidades<br />
litostratigráficas y las secuencias lacustres definidas previamente (Anadón et al.<br />
1988, Maestro et al 1996), sobre todo de las facies palustres y lacustres<br />
marginales, así como su disposición respecto a los sistemas aluviales (distal o<br />
marginal) y fluviales (meandros, llanura de inundación, deltaica lacustre, etc).<br />
Tradicionalmente, se han estudiado los depósitos de carbón como<br />
indicadores paleoclimáticos que han permitido el estudio de los cambios<br />
vegetales a lo largo del Fanerozoico, generalmente interpretados como<br />
depósitos de períodos más o menos húmedos que han permitido el desarrollo de<br />
turberas.<br />
Las relaciones que se establecen actualmente entre el lago Makarikari y<br />
el río Okavango (Botswana, Africa) constituyen una sedimentación tipo "Inland" o<br />
deltas lacustres efímeros (Saneestrit, Mccarty, 1998), que se puede tomar como<br />
paradigma de los antiguos sistemas deposicionales lacustres desarrollados en la<br />
Depresión Central Catalana durante el tránsito Eoceno superior - Oligoceno,<br />
mientras que algunos de los sistemas límnicos del Paleoceno, Eoceno inferior y<br />
medio presentarían características más o menos parálicas, al estar conectados<br />
lateralmente con medios marinos. En el presente trabajo se propone una nueva<br />
interpretación paleoambiental y paleogeográfica de los sistemas lacustres<br />
endorreicos con una dicotomía entre características climáticas de zonas<br />
húmedas y semiáridas. Se plantea la siguiente hipótesis de trabajo: los<br />
depósitos organógenos también se pueden originar en dominios climáticos que<br />
no sean húmedos, es decir, las facies lignitíferas se pueden sedimentar por la<br />
entrada de un sistema fluvial perenne en una zona con condiciones climáticas de<br />
semiaridez.<br />
En el Rift Africano, anualmente se establece un equilibrio entre los<br />
sistemas lacustre y fluvial situados al N del desierto del Kalahari, que<br />
actualmente presenta un clima árido con microclimas húmedos. Durante el<br />
Pleistoceno, una falla bloqueó el curso del río y las aguas formaron un estanque<br />
en la zona más deprimida del Makarikari. Progresivamente, se produjo un<br />
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