El método del camello - IMB Resource Catalog

obrando en el corazón de alguien para prepararle a escuchar y recibir la verdad. Dios
ya ha obrado entre los musulmanes de su área, preparando corazones para que escuchen
y crean en Jesús. Él está preparando una cosecha entre los musulmanes y nos está
diciendo: “Es abundante la cosecha” (Lucas 10:2, NVI).
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. Jesús estaba comprometido a unirse al Padre dondequiera que
Él estuviese obrando.
“y yo trabajo”
Jesús les explicó a sus discípulos que Él había venido al mundo para unirse al trabajo
que Dios el Padre estaba haciendo de buscar a los perdidos. “Porque el Hijo del Hombre
ha venido a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lucas 19:10). No solo el Padre
estaba obrando, sino también Jesús estaba obrando igualmente con Él. Jesús estaba
comprometido al cien por ciento con el trabajo del Padre, aun al punto de muerte. Lo
que el Padre le mostraba, Él hacía. No había limitaciones en obedecer al Padre. No
importaba lo que la gente dijese, ni el peligro, ni el costo a pagar. Jesús estaba comprometido
a trabajar con el Padre y unírsele dondequiera que Él estuviese trabajando
(Juan 6:38). Así que Jesús siempre seguía completamente la voluntad de Dios Padre.
Lea Juan 7:17 ¿Cómo puede saber con certeza que ha entendido la voluntad de Dios?
Muchos fallan en la búsqueda de la voluntad de Dios porque no están dispuestos a
unirse a Dios dondequiera que Él esté obrando. Existen límites en el dónde y cómo
seguir a Jesús. Nuestra inclinación natural es querer conocer cuál es la voluntad de
Dios y luego decidimos si hacerla o no. Pero a menos que su corazón esté comprometido
a hacer la voluntad de Dios, sin importar lo que Él le pida hacer, realmente nunca
la conocerá. No podrá unirse a Dios en su obra pues no podrá ver dónde Él ya está
trabajando.
¿Está usted sometido a la voluntad de Dios, de tal manera que está dispuesto a unirse
a Dios dondequiera que Él esté obrando? Si la respuesta es sí, entonces Él le hará ver
claramente dónde Él está obrando.
3
. Jesús sabía que separado del Padre, Él no podía hacer nada.
“El Hijo no puede hacer nada por sí mismo”.
Lea Juan 15:4-5. Si usted no está permaneciendo en una relación cercana con Jesús,
¿qué tanto puede hacer por Dios?
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