presentación - Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente

ÁREAs MARINAs y COsTERAs
La posición geográfica de la bahía de Cienfuegos,
considerada como la tercera en magnitud de la
isla, la convierte en el receptor final de todo el drenaje,
ya sea natural o no, de cuatro importantes
cuencas hidrográficas de la provincia.
se encuentra localizada en los 22° 09’ latitud
norte y 80° 27’ longitud oeste en la costa sur de
Cuba, su canal de entrada está limitado por dos
puntas, al este por Punta Los Colorados situada a
los 22° 02’ 04” latitud norte y 80° 26’ 29” longitud
oeste, y al oeste por Punta sabanilla ubicada a
los 22° 02’ 28” latitud norte y 80° 27’ 36” longitud
oeste.
Aparecen en su interior catorce cayos, los
más importantes son: Carenas, O’Campo y Alcatraz.
De forma natural está dividida en dos lóbulos
delimitados por el bajo Las Cuevas, que tiene
una profundidad promedio de 1,5 m y ejerce gran
influencia en la circulación de las masas de agua.
Presenta características estuarinas basadas en la
estratificación vertical como resultado del aporte
de los ríos y la baja energía mareal.
La existencia de la bahía no solo es un elemento
de identidad en la ciudad de Cienfuegos,
sino que constituye su principal ecosistema y más
relevante recurso natural con gran incidencia ecológica,
económica, social y cultural. El desarrollo
urbano experimentado sobre una parte del entorno
costero del acuatorio, ha sido la causa principal de
la afectación a su calidad ambiental experimentada
en los últimos siglos, situación que se ha tornado
más compleja a partir de la década iniciada en 1970.
En este período comienza un desarrollo acelerado
de la industria y el crecimiento urbano, carente de
un conocimiento integral del ordenamiento ambiental
dentro de la planificación territorial. A esta
situación se unen las transformaciones al medio
natural generadas por el desarrollo ya existente del
sector azucarero, el incremento en las operaciones
portuarias y el uso de tecnologías pesqueras que
han generado negativas consecuencias sobre la
Fuente: Delegación
Provincial de Recursos
Hidráulicos, 2004.
calidad del acuatorio. También el rápido crecimiento
de la población en la ciudad a partir de esos años
por migración y mejoras en las condiciones de vida,
sin ampliar lo necesario las redes hidráulicas y los
sistemas de tratamiento de las aguas residuales,
contribuyeron a la aceleración del deterioro de este
importante ecosistema, que tuvo como agravante
el insuficiente conocimiento sobre los procesos
ambientales y la fragilidad de los recursos naturales
por parte de las autoridades y de la comunidad en
general, pues durante décadas primaron intereses
de orden económico.
El entorno marino y costero de la bahía
constituye, sin lugar a dudas, el de mayor transversalidad
en la cadena de problemas que en
estas áreas se generan, pues aparecen incluidas
todas las situaciones ambientalmente negativas
que afectan nuestro entorno urbano; de ahí la necesidad
de estudiar detalladamente los diferentes
procesos de carácter natural y antrópico que en
él se manifiestan.
Aguas y sedimentos marinos
contaminados
Monitoreo físico-químico de las aguas
de la bahía
La contaminación de las aguas marinas es multicausal,
pues además de la incidencia de los
focos de origen industrial, agrícola y doméstico,
muchos de los cuales se producen en la línea
costera; se generan otros que son intrínsecos
del transporte marítimo, incluyendo las aguas
de sentinas, así como la ocurrencia de eventos
naturales de gran impacto como las tormentas,
huracanes e intensas lluvias, ya que las características
geográficas insulares tienen una fuerte
repercusión en el medio marino.
De modo general puede plantearse que el
lóbulo norte de la bahía en el que se ubican el
puerto nuevo, las zonas industriales II y III, y la
zona residencial de la ciudad, se encuentra más
afectado por la contaminación, de otra manera se
61