De Harmont a Trujillo - Banco de Reservas
De Harmont a Trujillo - Banco de Reservas De Harmont a Trujillo - Banco de Reservas
César A. Herrera | DE HARTmOnT A TRUJILLO LOS EMpRÉSTITOS DEL GObIERNO MILITAR Los funcionarios del gobierno militar no se iban a contentar con una operación tan mediocre. Emulando a los políticos dominicanos a quienes ellos calificaban en los tonos más acres por la falta de escrúpulos en los asuntos financieros, tratarían con tenacidad de levantar cuantiosos empréstitos con el pretexto de ejecutar diversas obras públicas. Sin pecar de exceso en el juicio, o de animadversión contra esos funcionarios por la odiosa misión que desempeñaban en esta tierra, se puede afirmar que la administración de los funcionarios interventores, en el aspecto financiero, fue un verdadero desastre, como lo fue también en casi todos los asuntos donde pusieron la mano. En 1921 Snowden quería diez millones más para obras públicas, y el Departamento de Estado se mostraba renuente a conceder la autorización que era necesaria, de acuerdo con el Art. 3º de la Convención de 1907, porque el gobierno militar actuaba “en nombre de la República Dominicana”. En ese tiempo el país sufría una de las peores crisis económicas de su historia. El comercio estaba arruinado por la baja súbita en los precios de las grandes existencias de mercaderías acumuladas, y el descenso vertical de los precios de los principales artículos de exportación de la agricultura y la industria nacionales. La política de los bancos extranjeros radicados en el país, complicaba la angustiosa situación nacional. Aquí aparece entonces un personaje interesante, el teniente de marina Arthur H. mayo, a la sazón encargado del Departamento de Hacienda y Comercio, y quien fue designado por Snowden como agente financiero especial de la República Dominicana, para que se trasladara a los Estados Unidos a tratar de cristalizar la jugosa operación. De la muy reconocida habilidad de mayo en asuntos financieros, esperaba su mejor éxito el gobierno militar, para mantener en marcha tan bellos proyectos 198
César A. Herrera | DE HARTmOnT A TRUJILLO en beneficio de la República Dominicana, que tan menesterosa estaba de ellos. Interesado en amparar su conducta con algún voto favorable, Snowden dirigió una circular a todos los Ayuntamientos del país, así como a las Cámaras de Comercio, pidiendo le informaran si deseaban que se continuara la construcción de carreteras y otras obras de interés público. Todas estas instituciones contestaron favorablemente, pero manifestaron que estaban opuestas si para ello era necesaria la contratación de nuevos empréstitos. Esta opinión tan categórica no inmutó lo más mínimo al almirante gobernador, que insistió ante su gobierno invocando que el prestigio nacional de Estados Unidos estaba comprometido en el programa de obras públicas de la República Dominicana. frente a tan rotunda afirmación, el secretario de Estado norteamericano, mr. Charles Evans Hughes, autorizó el 1º de junio de 1921 un empréstito de $2,500,000 únicamente. Esta emisión fue regulada por la Orden Ejecutiva nº 637, del 18 del mismo mes y año. Los bonos se emitirían vencederos en cuatro años, con un 8% de interés anual. Esta emisión fue suscrita por la Equitable Trust Company, de nueva York. GObIERNO DEL CONTRALMIRANTE RObINSON NUEVOS EMpRÉSTITOS Los $2,500,000 obtenidos por Snowden se esfumaron rápidamente. El viejo almirante fue sustituido por el contraalmirante Samuel S. Robinson, más enérgico, y que venía también interesado en el progreso dominicano y especialmente en el desarrollo de sus obras públicas. Sin pérdida de tiempo, el nuevo gobernador militar cargó contra el Departamento de Estado para obtener la autorización necesaria para emitir bonos por la suma de $7,500,000. mr. Hughes, hombre de elevadas condiciones morales y políticas, se manifestó en principio contrario a este nuevo proyecto de empréstito, 199
- Page 148 and 149: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 150 and 151: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 152 and 153: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 154 and 155: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 156 and 157: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 158 and 159: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 160 and 161: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 162 and 163: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 164 and 165: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 166 and 167: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 168 and 169: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 170 and 171: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 172 and 173: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 174 and 175: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 176 and 177: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 178 and 179: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 180 and 181: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 182 and 183: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 184 and 185: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 186 and 187: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 188 and 189: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 190 and 191: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 192 and 193: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 194 and 195: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 196 and 197: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 200 and 201: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 202 and 203: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 204 and 205: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 206 and 207: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 208 and 209: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 211 and 212: CAPíTULO xI Era de Trujillo LA ERA
- Page 213 and 214: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 215 and 216: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 217 and 218: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 219 and 220: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 221 and 222: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 223 and 224: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 225 and 226: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 227 and 228: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 229: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 232 and 233: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 234 and 235: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 236 and 237: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 238 and 239: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 240 and 241: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 242 and 243: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
- Page 245 and 246: DOCUMENTO Nº 1 Empréstito Erlange
- Page 247 and 248: César A. Herrera | DE HARTmOnT A T
César A. Herrera | DE HARTmOnT A TRUJILLO<br />
en beneficio <strong>de</strong> la República Dominicana, que tan menesterosa<br />
estaba <strong>de</strong> ellos.<br />
Interesado en amparar su conducta con algún voto favorable,<br />
Snow<strong>de</strong>n dirigió una circular a todos los Ayuntamientos <strong>de</strong>l país,<br />
así como a las Cámaras <strong>de</strong> Comercio, pidiendo le informaran si<br />
<strong>de</strong>seaban que se continuara la construcción <strong>de</strong> carreteras y otras<br />
obras <strong>de</strong> interés público. Todas estas instituciones contestaron favorablemente,<br />
pero manifestaron que estaban opuestas si para ello<br />
era necesaria la contratación <strong>de</strong> nuevos empréstitos.<br />
Esta opinión tan categórica no inmutó lo más mínimo al almirante<br />
gobernador, que insistió ante su gobierno invocando que el<br />
prestigio nacional <strong>de</strong> Estados Unidos estaba comprometido en el<br />
programa <strong>de</strong> obras públicas <strong>de</strong> la República Dominicana. frente<br />
a tan rotunda afirmación, el secretario <strong>de</strong> Estado norteamericano,<br />
mr. Charles Evans Hughes, autorizó el 1º <strong>de</strong> junio <strong>de</strong> 1921 un<br />
empréstito <strong>de</strong> $2,500,000 únicamente. Esta emisión fue regulada<br />
por la Or<strong>de</strong>n Ejecutiva nº 637, <strong>de</strong>l 18 <strong>de</strong>l mismo mes y año. Los<br />
bonos se emitirían vence<strong>de</strong>ros en cuatro años, con un 8% <strong>de</strong> interés<br />
anual. Esta emisión fue suscrita por la Equitable Trust Company,<br />
<strong>de</strong> nueva York.<br />
GObIERNO DEL CONTRALMIRANTE RObINSON<br />
NUEVOS EMpRÉSTITOS<br />
Los $2,500,000 obtenidos por Snow<strong>de</strong>n se esfumaron rápidamente.<br />
El viejo almirante fue sustituido por el contraalmirante<br />
Samuel S. Robinson, más enérgico, y que venía también interesado<br />
en el progreso dominicano y especialmente en el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> sus<br />
obras públicas. Sin pérdida <strong>de</strong> tiempo, el nuevo gobernador militar<br />
cargó contra el <strong>De</strong>partamento <strong>de</strong> Estado para obtener la autorización<br />
necesaria para emitir bonos por la suma <strong>de</strong> $7,500,000. mr.<br />
Hughes, hombre <strong>de</strong> elevadas condiciones morales y políticas, se manifestó<br />
en principio contrario a este nuevo proyecto <strong>de</strong> empréstito,<br />
199