12.05.2013 Views

A horcajadas en el Tiempo

A horcajadas en el Tiempo

A horcajadas en el Tiempo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

La Era Hadrónica<br />

los quarks.<br />

Los hadrones son las partículas cuánticas asociadas con la fuerza subatómica fuerte que manti<strong>en</strong>e unido e integrado <strong>el</strong> núcleo atómico.<br />

Los primeros hadrones que descubrieron los físicos fueron los nucleones: <strong>el</strong> protón y <strong>el</strong> neutrón. Luego vinieron los piones (partículas de espín<br />

cero, de vida mucho más corta que <strong>el</strong> neutrón y con una masa próxima a un séptimo de la d<strong>el</strong> <strong>el</strong>ectrón) y luego se hallaron muchísimos otros<br />

hadrones similares. Hoy se considera a todos estos hadrones detectados experim<strong>en</strong>talm<strong>en</strong>te corno sistemas de quarks unidos de modo<br />

perman<strong>en</strong>te.<br />

A las <strong>el</strong>evadas temperaturas de la era hadrónica, los fotones y, otras partículas d<strong>el</strong> gas de partículas cuánticas ti<strong>en</strong><strong>en</strong> <strong>en</strong>ergía sufici<strong>en</strong>te<br />

para producir pares hadrón-antihadrón. Estas partículas compart<strong>en</strong> con las demás partículas la <strong>en</strong>ergía total disponible. Debido a <strong>el</strong>lo, aunque<br />

salgan a esc<strong>en</strong>a nuevas partículas, <strong>el</strong> número total de <strong>el</strong>las, que es proporcional a la <strong>en</strong>tropía, se manti<strong>en</strong>e constante. Dado que las diversas<br />

partículas, incluidos todos los hadrones, compart<strong>en</strong> la <strong>en</strong>ergía disponible a una temperatura dada, esto significa que hay un número<br />

aproximadam<strong>en</strong>te igual de cada tipo distinto de partículas.<br />

Por ejemplo, cuando al iniciarse la era hadrónica, la temperatura es sufici<strong>en</strong>te para crear piones, hay aproximadam<strong>en</strong>te tantos piones<br />

como fotones, <strong>el</strong>ectrones, positrones, muones, etc. Cuando la temperatura es sufici<strong>en</strong>te para crear nucleones (unos 10 13 °K), llegamos a la<br />

conclusión de que <strong>el</strong> número de nucleones y antinucleones es aproximadam<strong>en</strong>te <strong>el</strong> mismo que <strong>el</strong> de cada una de las demás partículas; <strong>en</strong><br />

particular, <strong>el</strong> número de nucleones es aproximadam<strong>en</strong>te igual al número de fotones. Esto es realm<strong>en</strong>te notable, si t<strong>en</strong>ernos <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta que los<br />

fotones superan hoy <strong>en</strong> número a los nucleones <strong>en</strong> una proporción aproximada de 400 millones a uno. Por tanto, al final de la era hadrónica,<br />

todos aqu<strong>el</strong>los nucleones «extra» se aniquilaron con antinucleones, dejando sólo una pequeña fracción de protones y neutrones supervivi<strong>en</strong>tes,<br />

que han perdurado hasta hoy. ¿Por qué sobrevivieron?<br />

El mod<strong>el</strong>o estándar ti<strong>en</strong>e una ley de conservación d<strong>el</strong> número bariónico rigurosa, según la cual <strong>en</strong> cualquier interacción de partículas <strong>el</strong><br />

número de bariones m<strong>en</strong>os <strong>el</strong> de antibariones es constante. Dado que los nucleones, <strong>el</strong> protón y <strong>el</strong> neutrón, son los bariones más ligeros, todos<br />

los demás bariones pued<strong>en</strong> desintegrarse convirtiéndose <strong>en</strong> <strong>el</strong>los, transmiti<strong>en</strong>do su número de carga bariónico. El neutrón puede descomponerse<br />

luego <strong>en</strong> un protón y pasarle su número bariónico. Pero este proceso de desintegración d<strong>el</strong> neutrón dura unos mil segundos, período prolongado<br />

si se compara con la duración total de la era hadrónica. Eso se debe a que <strong>el</strong> neutrón es prácticam<strong>en</strong>te estable durante este período.<br />

La ley de conservación exacta d<strong>el</strong> número bariónico exige, pues, que si terminamos la era hadrónica con un pequeño exceso de<br />

bariones sobre antibariones, esa difer<strong>en</strong>cia haya t<strong>en</strong>ido que existir desde un principio, desde mucho antes de la era hadrónica. Este pequeño<br />

exceso se refleja hoy <strong>en</strong> la gran <strong>en</strong>tropía específica d<strong>el</strong> universo: <strong>el</strong> exceso d<strong>el</strong> número de fotones sobre <strong>el</strong> de nucleones. La exist<strong>en</strong>cia de<br />

nucleones, la materia visible de las estr<strong>el</strong>las y de la galaxia, parece un accid<strong>en</strong>te, un residuo afortunado de una era anterior d<strong>el</strong> universo.<br />

Simplificando lo que hemos querido explicar, es más que aceptable considerar que durante la era hadrónica se fija <strong>el</strong> cont<strong>en</strong>ido bariónico<br />

y la preponderancia de la materia sobre la antimateria. Claro, que también se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran pres<strong>en</strong>te la exist<strong>en</strong>cia de una serie de otros <strong>en</strong>igmas<br />

que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> su respuesta <strong>en</strong> los ev<strong>en</strong>tos de esa era, incluy<strong>en</strong>do las causas de la homog<strong>en</strong>eidad e isotropía, la causa y naturaleza de la constante<br />

cosmológica (si no es nula), y aún, <strong>el</strong> orig<strong>en</strong> de las semillas para la formación de las galaxias que se desarrollan más tarde.<br />

Pero, pese a int<strong>en</strong>to simplificador que quisimos otorgarle al cont<strong>en</strong>ido d<strong>el</strong> párrafo anterior, siempre nos queda <strong>en</strong> <strong>el</strong> aire <strong>el</strong> por qué d<strong>el</strong><br />

pequeño exceso de materia nuclear sobre la antimateria que justam<strong>en</strong>te debió producirse <strong>en</strong> esa época d<strong>el</strong> universo. Los físicos <strong>en</strong> sus<br />

t<strong>en</strong>tativas de compr<strong>en</strong>der <strong>el</strong> cosmos, g<strong>en</strong>eralm<strong>en</strong>te part<strong>en</strong> d<strong>el</strong> supuesto de que éste com<strong>en</strong>zó <strong>en</strong> un estado simétrico, <strong>en</strong> <strong>el</strong> que <strong>el</strong> número<br />

bariónico era, <strong>en</strong> realidad, cero. Pero si <strong>el</strong> mod<strong>el</strong>o estándar es correcto y <strong>el</strong> número bariónico se conserva, éste sería hoy también cero: un<br />

desastre, porque <strong>en</strong>tonces no habría <strong>en</strong> <strong>el</strong> universo materia visible. ¿Qué se ha hecho? Bu<strong>en</strong>o, ap<strong>el</strong>ar a la GTU que va más allá d<strong>el</strong> mod<strong>el</strong>o<br />

estándar y que parte d<strong>el</strong> supuesto de que <strong>el</strong> número bariónico no se conserva. Una consecu<strong>en</strong>cia de las GTU es que <strong>el</strong> fotón puede<br />

desintegrarse... y si puede desintegrarse es que también puede crearse. Otra consecu<strong>en</strong>cia, apuntada por <strong>el</strong> físico ruso Andrei Sajarov, antes<br />

incluso de que se inv<strong>en</strong>tas<strong>en</strong> las GTU, es que <strong>el</strong> pequeño exceso de bariones puede crearse realm<strong>en</strong>te a partir de un universo de número<br />

bariónico cero, siempre que <strong>el</strong> gas de partículas cuánticas interactuantes t<strong>en</strong>ga propiedades especiales. Estas ideas nos llevan bastante más allá<br />

d<strong>el</strong> mod<strong>el</strong>o estándar. Volveremos a <strong>el</strong>las <strong>en</strong> una sección de otro capítulo.<br />

En mi opinión, para poder dilucidar <strong>el</strong> problema que repres<strong>en</strong>ta lo expuesto preced<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te, los físicos no ti<strong>en</strong><strong>en</strong>, por ahora, más que<br />

hacerse de mucha paci<strong>en</strong>cia, ya que las <strong>en</strong>ergías o temperaturas <strong>en</strong>vu<strong>el</strong>tas <strong>en</strong> los procesos de esta era hadrónica, los conocimi<strong>en</strong>tos de <strong>el</strong>los<br />

dep<strong>en</strong>d<strong>en</strong> <strong>en</strong> gran medida de los progresos realizados <strong>en</strong> física de las partículas <strong>el</strong>em<strong>en</strong>tales y, para alcanzar mayores logros, las inversiones de<br />

capital son altísimas. La capacidad instalada mundial de ac<strong>el</strong>eradores de partículas, incluido <strong>el</strong> R<strong>el</strong>ativistic Heavy Ion Collider o <strong>el</strong> proyectado<br />

para <strong>el</strong> año 2005, llamado Large Hadron Collider, no cu<strong>en</strong>tan con la pot<strong>en</strong>cia de investigar <strong>en</strong>ergías como las que se debieron dar <strong>en</strong> esta era. Es<br />

por lo anterior, que no corresponde más que invertir <strong>el</strong> proceso. Hoy muchos físicos de partículas se interesan <strong>en</strong> los procesos cosmológicos<br />

para int<strong>en</strong>tar confirmar las predicciones de las teorías propuestas sobre las partículas, como veremos más ad<strong>el</strong>ante. Así, <strong>el</strong> universo primitivo se<br />

ha transformado <strong>en</strong> un verdadero laboratorio de partículas, <strong>en</strong> <strong>el</strong> cual conviv<strong>en</strong> la teoría de lo más pequeño, la cuántica, y la teoría de lo más<br />

grande, la de la r<strong>el</strong>atividad g<strong>en</strong>eral. La conexión necesaria con <strong>el</strong> estado actual d<strong>el</strong> universo radica, por un lado, <strong>en</strong> conseguir las condiciones que<br />

llevan a la nucleosíntesis con los resultados conocidos (que veremos <strong>en</strong> una próxima sección) y, por otro, a la gran homog<strong>en</strong>eidad e isotropía<br />

que <strong>el</strong> universo ti<strong>en</strong>e <strong>en</strong> la época de recombinación y posterior formación de estructuras.<br />

http://www.astrocosmo.cl/h-foton/h-foton-06_23.htm (3 of 4)29/12/2004 23:31:45

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!