12.05.2013 Views

A horcajadas en el Tiempo

A horcajadas en el Tiempo

A horcajadas en el Tiempo

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

La Dinámica de Newton<br />

Hasta aquí hemos explicado de como opera la gravedad tanto fr<strong>en</strong>te a los f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os de los ci<strong>el</strong>os como los de<br />

nuestro mar, pero todavía no hemos asignado la causa de este poder. Es evid<strong>en</strong>te que debe proceder de una causa que<br />

p<strong>en</strong>etra hasta los mismos c<strong>en</strong>tros d<strong>el</strong> Sol y planetas, sin sufrir la más mínima disminución de su fuerza; que actúa no de<br />

acuerdo al tamaño de las superficies de las partículas sobre las cuales opera (como lo acostumbran hacer las causas<br />

mecánicas), sino de acuerdo a la cantidad de materia sólida que conti<strong>en</strong><strong>en</strong>, y propaga su poder <strong>en</strong> todas direcciones a<br />

inm<strong>en</strong>sas distancias, decreci<strong>en</strong>do siempre <strong>en</strong> proporción duplicada de las distancias. La gravitación hacia <strong>el</strong> Sol está<br />

compuesta de las gravitaciones hacia las difer<strong>en</strong>tes partículas que constituy<strong>en</strong> <strong>el</strong> cuerpo d<strong>el</strong> Sol; y al alejarse d<strong>el</strong> Sol<br />

disminuye exactam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> proporción duplicada de las distancias hasta llegar incluso al círculo de Saturno, tal como se<br />

hace evid<strong>en</strong>te por la quietud d<strong>el</strong> af<strong>el</strong>io de los planetas; aún más, incluso hasta los remotos af<strong>el</strong>ios de los cometas, si<br />

esos af<strong>el</strong>ios también están quietos. Pero hasta ahora no he sido capaz de descubrir la causa de esas propiedades de la<br />

gravedad a partir de los f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>os, y no formulo ninguna hipótesis.<br />

En lo refer<strong>en</strong>te a las estr<strong>el</strong>las fijas, la pequeñez de sus paralajes anuales demuestra que están a distancias<br />

inm<strong>en</strong>sas d<strong>el</strong> sistema de los planetas: que esta paralaje es m<strong>en</strong>or que un minuto es por demás seguro, y de ahí se<br />

sigue que la distancia a las estr<strong>el</strong>las fijas es más de 360 veces mayor que la distancia de Saturno al Sol. Considerar la<br />

Tierra como uno de los planetas, y <strong>el</strong> Sol como una de las estr<strong>el</strong>las fijas, puede alejar las estr<strong>el</strong>las fijas a distancias aun<br />

mayores por los sigui<strong>en</strong>tes argum<strong>en</strong>tos: por <strong>el</strong> movimi<strong>en</strong>to anual de la Tierra se produciría una trasposición apar<strong>en</strong>te de<br />

las estr<strong>el</strong>las fijas, una con respecto de la otra, casi igual al doble de su paralaje; pero hasta ahora no se ha observado<br />

que las estr<strong>el</strong>las más grandes y más cercanas t<strong>en</strong>gan <strong>el</strong> m<strong>en</strong>or movimi<strong>en</strong>to con respecto a las más remotas, que sólo se<br />

v<strong>en</strong> con t<strong>el</strong>escopios. Si suponemos que ese movimi<strong>en</strong>to sea inferior solam<strong>en</strong>te a 20", la distancia de las estr<strong>el</strong>las fijas<br />

más cercanas excedería la distancia media de Saturno <strong>en</strong> unas 2.000 veces.<br />

Con respecto a los cometas. Las colas de los cometas se originan <strong>en</strong> sus cabezas y ti<strong>en</strong>d<strong>en</strong> hacia las partes<br />

opuestas al Sol, cuestión además confirmada por las leyes que observan las colas; pues, estando <strong>en</strong> los planos de las<br />

órbitas de los cometas que pasan por <strong>el</strong> Sol, <strong>el</strong>las se desvían constantem<strong>en</strong>te de la posición opuesta al Sol hacia las<br />

partes que las cabezas de los cometas han dejado atrás <strong>en</strong> su progreso a lo largo de esas órbitas; y para un espectador<br />

colocado <strong>en</strong> esos planos <strong>el</strong>las aparec<strong>en</strong> <strong>en</strong> las partes directam<strong>en</strong>te opuestas al Sol; pero a medida que <strong>el</strong> espectador se<br />

aleja de esos planos, su desviación comi<strong>en</strong>za a aparecer y diariam<strong>en</strong>te se hace mayor.<br />

Cuando Newton <strong>el</strong>aboró sus famosas leyes, sus p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>tos flotaron más allá de la Tierra y de la Luna, al espacio interplanetario e<br />

interest<strong>el</strong>ar. Los mismos principios que explican por qué las manzanas ca<strong>en</strong> al su<strong>el</strong>o y por qué la Luna orbita la Tierra deberían explicar también<br />

por qué la Tierra y todos los demás planetas orbitan alrededor d<strong>el</strong> Sol. La gravedad ti<strong>en</strong>e que ser una fuerza ubicua que actúa <strong>en</strong>tre dos cuerpos<br />

cualesquiera d<strong>el</strong> universo.<br />

Newton llegó a esta conclusión a través de un proceso conocido hoy como «experim<strong>en</strong>to de p<strong>en</strong>sami<strong>en</strong>to»: utilizar un esc<strong>en</strong>ario para<br />

iluminar las reglas que gobiernan <strong>el</strong> mundo real. Se trata de un procedimi<strong>en</strong>to que juega <strong>el</strong> rol de herrami<strong>en</strong>ta indisp<strong>en</strong>sable para los ci<strong>en</strong>tíficos<br />

<strong>en</strong> todos los campos, pero <strong>en</strong> especial para los cosmólogos, cuyas teorías son a m<strong>en</strong>udo imposibles de comprobar. Sin embargo, Newton t<strong>en</strong>ía a<br />

su disposición una poderoso medio de comprobación: las matemáticas. Podía ir muy lejos hacia confirmar sus hipótesis calculando sus<br />

consecu<strong>en</strong>cias y luego comprobando sus resultados con las observaciones y experim<strong>en</strong>tos.<br />

DEBILIDADES DE LA TEORÍA<br />

Los principios fundam<strong>en</strong>tales de Newton son tan satisfactorios desde <strong>el</strong> punto de vista lógico que aparece como un requisito necesario<br />

para revisarlos la necesidad de contar con estímulos que sólo pued<strong>en</strong> ser gatillados desde hechos empíricos. Antes de proseguir, considero<br />

pertin<strong>en</strong>te que es necesario consignar que Newton estaba consci<strong>en</strong>te de las limitaciones de su edificio int<strong>el</strong>ectual mejor que las g<strong>en</strong>eraciones de<br />

ci<strong>en</strong>tíficos que lo siguieron. Él siempre admitió las debilidades que comportaba su teoría. "Explicar toda la naturaleza es una tarea demasiado<br />

difícil para un hombre o incluso para una época", reconoció. Tuvo problemas <strong>en</strong> particular <strong>en</strong> int<strong>en</strong>tar compr<strong>en</strong>der la naturaleza real de la<br />

gravedad y d<strong>el</strong> espacio. Aunque su teoría predice los efectos de la gravedad <strong>en</strong> forma muy práctica, no dice nada sobre los mecanismos a través<br />

d<strong>el</strong> cual actúa esa gravedad.<br />

En sus trabajos, Newton muestra evid<strong>en</strong>tes esfuerzos por repres<strong>en</strong>tar sus sistemas como rigurosam<strong>en</strong>te consecu<strong>en</strong>tes por la<br />

experi<strong>en</strong>cia y por introducir <strong>el</strong> m<strong>en</strong>or número posible de conceptos no directam<strong>en</strong>te referidos a objetos empíricos. Pese a <strong>el</strong>lo, establecería los<br />

conceptos de «espacio absoluto» y «tiempo absoluto», cuestión por la cual a m<strong>en</strong>udo se le criticó. Pero <strong>en</strong> <strong>el</strong>lo, Newton es particularm<strong>en</strong>te<br />

consist<strong>en</strong>te. Había compr<strong>en</strong>dido que las cantidades geométricas observables (distancias <strong>en</strong>tre puntos materiales) y su curso <strong>en</strong> <strong>el</strong> tiempo no<br />

caracterizan por completo <strong>el</strong> movimi<strong>en</strong>to <strong>en</strong> sus aspectos físicos, tal como demostró con su famoso experim<strong>en</strong>to d<strong>el</strong> cubo de agua rotatorio. Por<br />

<strong>el</strong>lo, además de las masas y sus distancias, debe existir algo más que determina <strong>el</strong> movimi<strong>en</strong>to. Newton consideró que ese "algo" debía ser la<br />

r<strong>el</strong>ación con <strong>el</strong> «espacio absoluto»; sabía que <strong>el</strong> espacio debe poseer una especie de realidad física si sus leyes d<strong>el</strong> movimi<strong>en</strong>to pose<strong>en</strong> algún<br />

http://www.astrocosmo.cl/h-foton/h-foton-04_02.htm (7 of 9)29/12/2004 23:25:05

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!