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EL GÉNERO LUZULA EN ESPAÑA 439
de su ecología en las tablas próximas a pp. 216, 208, 226, 268 y 276. En los
herbarios BCF se encuentran muchas plantas de Andorra y Nuria. En BC, uno
de Aixens, Vallferrera, pr. Areo, prados secos a 2.500 m., F. Q., 22-VII-1912
(BC 63199). Valles de Bohi, in rupestribus montis «de Llacss dicta, supra Bohi,
ad 2.100 m., F. Q., 26-VH-1944 (BC 95648), y muchos pliegos de Nuria.
5. Luzula silvatica (Huds.) Gaud. (1811) Agrost. helv. 2 : 240.
/uncus silvaticus Hudson (1762), Fl. angL, ed. 1. a : 151. L. maxima DC. (1805),
Fl. Fr., 3: 160. /. maximus Reich. (1778). BUCHENAU (1906): 54, núm. 14.
Extraordinariamente variable en España, donde se presenta en poblaciones aisladas
desde tiempo muy antiguo, con formas especiales en cada colonia regional
o local. Es difícil dar una descripción que comprenda todas las formas observadas.
Distingo tres Subespecies que parecen bastante claras, pero la variabilidad
regional obliga a estudiar una inmensa cantidad de material. Seguramente el estudio
de la variabilidad regional será muy fructífero en nuestra Península, particularmente
en el campo de los estudios filogenéticos; L. silvatica parece la más próxima
al arquetipo genérico y probablemente el conocimiento de su variabilidad actual
orientará los estudios dedicados a conocer la diferenciación morfológica del género
en épocas pretéritas. Me parece interesantísimo el estudio de sus relaciones con
L. nutans y especies afines; en España se encuentran formas que a primera vista
podrían considerarse intermedias y son completamente fértiles, no pareciendo híbridos
interespecíficos. La ssp. sieberi (Tausch) Buchen., de los Alpes Marítimos,
junto con mi ssp. cantabrica, pertenecen al grupo de las estirpes que aproximan
algo las dos especies, ambas producidas por adaptación al orofitismo (1.200-2.200 m.).
Estudios citogenéticos acaso podrían aclarar algo el proceso cariológico seguido;
es probable la alopoliploidía, acaso con L. nutans o especie afín. Mis conocimientos
actuales permitirían suponer procesos de adaptación paralelos; unos, antiguos, originarían
L. nutans y L. caespitosa; otros, más recientes (cuaternarios), las ssp. sieberi
y ssp. cantabrica.
Planta provista de un grueso rizoma rastrero, cubierto
por restos de hojas de los años anteriores. Junto al tallo florífero en
primavera se desarrolla una roseta, raramente más, que originará el
tallo florífero del siguiente año. Su talla (25) 40-60 (90) cm., en Galicia
hasta un metro (P. MERINO 1909 : 67). Numerosas hojas básales
muy pilosas en primavera, algo glabras en verano, anchamente
linear-oblongas, largas (10) 25-30 (45) cm. y anchas (4)
7-10 (16) mm., paulatinamente atenuadas, con acumen subcalloso
y mucronulado (en ssp. cantabrica el mucrón termina
en forma de punta de sable). Hojas caulinares bracteifor-