12.05.2013 Views

PDF - Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento ...

PDF - Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento ...

PDF - Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

el empleo <strong>de</strong> la categoría «herencia» es totalmente válido; en el dominio ético-espiritual<br />

su aplicación es completamente ilegítima. Pese a este reconocimiento, el danés no <strong>de</strong>ja<br />

<strong>de</strong> expresar sus reservas ante los griegos. Las mismas se aclaran por el hecho <strong>de</strong> que,<br />

para él, el helenismo fue incapaz <strong>de</strong> pensar radical y conscientemente la distinción entre<br />

lo sensible y lo moral.<br />

Las razones para esta comprensión <strong>de</strong> lo griego como un mo<strong>de</strong>lo insuficiente se asientan<br />

sobre un supuesto ampliamente tematizado por Kierkegaard: no todos los hombres<br />

poseen un yo auténtico 1 . Ser un miembro particular <strong>de</strong> la especie hombre –lo que se<br />

<strong>de</strong>nomina individualidad inmediata– es condición necesaria pero no suficiente para ser<br />

una particularidad autoconsciente –lo que se <strong>de</strong>nomina individualidad reflexiva 2<br />

. El pasaje<br />

<strong>de</strong> la individualidad material a la singularidad existencial es equiparable al pasaje <strong>de</strong> una<br />

humanidad impropia a una humanidad propia. El elemento que garantiza esta<br />

imprescindible transición es el «espíritu» (Aand). Para explicar <strong>de</strong> qué modo entien<strong>de</strong><br />

Kierkegaard la función antropológica <strong>de</strong>l principio pneumático optaré por una metáfora<br />

espacial. El espíritu es una fuerza que establece una fisura en el propio ser <strong>de</strong>l hombre<br />

posibilitando que éste difiera consigo mismo. El espíritu abre el espacio vacío que permite<br />

que el «en-si» <strong>de</strong>venga «para-si». A partir <strong>de</strong> la presencia <strong>de</strong>l espíritu, la relación <strong>de</strong>l yo<br />

con su realidad anímico-corporal <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> ser instintiva e inconsciente para ser libre y<br />

consciente.<br />

Ahora bien, este principio que trae aparejadas consecuencias antropológicas<br />

fundamentales, el espíritu, no estaba en el mundo sino que fue introducido por el<br />

3<br />

cristianismo en un <strong>de</strong>terminado momento histórico . Este es, en última instancia, el motivo<br />

por el cual el helenismo permaneció inmerso en el seno <strong>de</strong> un universo existencial que<br />

impedía la constitución <strong>de</strong> una subjetividad singular en su máxima plenitud y este es, al<br />

mismo tiempo, el motivo por el cual la sociedad mo<strong>de</strong>rna perdió aquella unidad inmediata<br />

entre el individuo y la comunidad que caracterizó a los tiempos antiguos.<br />

III. La reconfiguración <strong>de</strong> lo político a partir <strong>de</strong>l espiritualismo cristiano<br />

Exactamente ocho meses más tar<strong>de</strong> <strong>de</strong> la publicación <strong>de</strong> O lo uno o lo otro, todavía en el<br />

año 1843, Kierkegaard edita Temor y Temblor. La inmensa fama alcanzada por este libro<br />

se <strong>de</strong>be a dos elementos que atraviesan sus páginas: (i) la poética reconstrucción <strong>de</strong>l<br />

sacrificio no consumado <strong>de</strong> Isaac a manos <strong>de</strong> su padre Abraham y (ii) la <strong>de</strong>scripción<br />

fenomenológica <strong>de</strong>l acto <strong>de</strong> fe caracterizado como una apuesta infinita por el absurdo que<br />

acompaña, en todo momento, a la narración <strong>de</strong> dicho relato bíblico. Indudablemente<br />

Temor y Temor contiene una «teoría <strong>de</strong> la singularidad» y así se lo ha leído. No obstante,<br />

nuestra intención es traer a un primer plano el presupuesto que subyace a dicha teoría y<br />

las consecuencias <strong>de</strong> este presupuesto.<br />

La paradoja <strong>de</strong> la fe consiste en que el Singular se encuentra como tal por encima <strong>de</strong> su<br />

comunidad y, por lo tanto, por encima <strong>de</strong> las disposiciones normativas <strong>de</strong> la misma 4<br />

. Con<br />

todo, Kierkegaard es esfuerza por aclarar que el título <strong>de</strong> caballero <strong>de</strong> la fe es legítimo<br />

1<br />

Cfr. SKS 4, p.383: CA, p. 108.<br />

2<br />

En La Enfermedad Mortal (1849), Kierkegaard complejizará su posición: la autenticidad <strong>de</strong>l yo<br />

precisa <strong>de</strong> la autoconciencia pero también que esta autoconciencia se refiera positivamente a Dios,<br />

es <strong>de</strong>cir, al po<strong>de</strong>r que la ha constituido (cfr. SKS 11, p. 194: EM, pp. 121 - 122).<br />

3<br />

Cfr. SKS 2, p. 68: ESK 2, p. 85.<br />

4<br />

Cfr. SKS 4, p. 149: TT, p. 46.<br />

40

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!