INFORME DE SALIDAS Y VIAJES EN MISION _1_ - Mision Rahma ...

viejecita de potencia , por cuanto una ancianita presurosa abre y cierra la reja al paso de
los vehículos.
Hasta que al final, desde una parte alta llegamos a divisar el impresionante cañón del
Parque Nacional Los Cipreses, resguardado por escarpadas y poderosas montañas rojas y
grises. La vista era increíble, realmente conmovía. El cielo estaba limpio sin nubes o
bruma.
En la ruta nos habíamos encontrado con buena parte de los transportes que llevaban a los
participantes del encuentro mundial. Los techos lucían abarrotados de mochilas, tiendas de
campaña, bolsas de dormir, bidones de agua, etc.
Ni bien entramos por el pórtico del Parque, las movilidades se congregaron en los patios del
edificio principal donde funciona la administración del parque y un museo etnológico y de
historia natural de la región. Fue una buena oportunidad como para que la gran mayoría
fuese a los aseos. De allí todavía habríamos de seguir unos diez minutos más con las
movilidades para establecernos en el área designada para nosotros por los guardabosques.
Era una zona nueva, recién adecuada por lo que los baños y servicios estaban operativos
pero inconclusos. Ese lugar era la garantía de soledad y privacidad ya que generalmente la
gente que visita el Parque suele ir a ciertas áreas ya conocidas .
Lo primero que se hizo en el sitio fue designar las ubicaciones para colocar las cosas que
eran bajadas de los autos, y luego hacer una armonización y protección del lugar, para lo
cual se formaron dos grandes círculos con todos los asistentes y empezamos por una
oración o plegaria a los espíritus guardianes de los cuatro rumbos de la tierra y a las siete
direcciones galácticas, extraído de la magnífica enseñanza de un gran profeta moderno
como es José Argüelles del movimiento de Las Trece Lunas. Acto seguido hicimos la
conocida cúpula de protección individual y colectiva. Y a continuación se leyó el programa
y se paso al armado de las tiendas de campaña. A pesar de que no había una sola nube en el
cielo, el reporte meteorológico avisaba de posibles lluvias por lo que precavido, cavé
alrededor de mi carpa y de las más cercanas a mí, un cauce o trinchera que pudiese
desaguar nuestras tiendas en caso de que lloviese y así evitaríamos empaparnos.
Con el transcurso de las horas se hicieron algunas prácticas como meditaciones dirigidas
por Camilo Valdivieso y Nimer Obregón. También, Ana María Camus dirigió una hermosa
dinámica sobre la importancia del perdón en nuestras vidas. Como una dinámica adicional
de integración y relajamiento, aprovechamos entre todos la tarde para construir con las
piedras desperdigadas en el campo, el símbolo del laberinto. Se empezaba por diseñar una
gran cruz de doce pasos por doce pasos, que se va transformando en la medida en que se
construye, pasando de ser una cruz, símbolo de la adición, la suma y lo positivo en una
cruz gamada; luego, al unir los extremos , en una esvástica símbolo del movimiento y la
evolución, formándose en su interior siete senderos que conducen al octavo o centro. El
simbolismo del laberinto tiene que ver con el camino del alma hacia la iluminación, que lo
lleva a enfrentarse con sus miedos sin perderse, como en la historia del Minotauro y Teseo.
Es interesante ver como las personas ingresan directamente al tercer sendero que
corresponde al Ego, en vez de pasar primero por el uno que es el de la supervivencia , por
cuanto uno cuando nace a una nueva existencia lo primero que hace es construirse un ego
por y con todos los factores que lo influyen. Después , en la medida que va creciendo , se
va dejando arrastrar por las pasiones y el sexo (el segundo sendero), de allí llega al primer
sendero, cada vez más lejos del centro; y se da cuenta que solo esta sobreviviendo. Es en
ese momento cuando llega la oportunidad de vislumbrar lo eterno, y se sigue al cuarto
sendero que es el de la intuición y la visión interior. Del cuarto pasamos al séptimo, que es
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