“Splendida”… y algo más - Aproin

A p r o i n • 26
palma-marsella (299 millas).
toulon.
la salida de palma a las 12 y media
de la noche, seguidos del Fantastic
(gemelo del Splendida) y del costa
concordia, era un carnaval de luz en
medio de la noche, un espectáculo en
la bahía de palma.
Si la noche fue a través de un mar
absolutamente en calma, el amanecer
ya intuía el maretón posterior con
vientos que al llegar a Marsella alcanzaban
los 60 nudos y fuerte marejada
en la mar, que obligaban a la autoridad
portuaria de la segunda ciudad
francesa a cerrar su puerto, lo que nos
obligó a desviarnos al puerto base de
la marina francesa en el Mediterráneo,
la rada de Toulon, que nos recibió con
el mismo mar y el mismo viento, sin
que ambos hicieran mella alguna en
el equilibrio férreo e impertérrito del
Splendida y sus estabilizadores.
El no poder entrar en Marsella dio
al traste con gran parte del interés del
crucero, pues para los españoles era
quizá el puerto de mayor apetencia,
pero la mar tiene esas cosas y como
contrapunto conocimos Toulon, su
parte vieja, su puerto y sus restaurancitos
donde conocer la gastronomía
francesa mediterránea (regulín).
El problema fue para la organización
del crucero, que tenía previsto
desembarcar en Marsella a casi todos
los franceses, y tuvo que hacerlo de
forma improvisada desde Toulon, un
puerto sin instalaciones para un desembarque
de esa categoría, pero que
fue salvado con la aparición de cerca
de 50 autobuses y las propias instalaciones
del barco, para organizar un
desembarco de emergencia (magnifica
experiencia para la tripulación) y un
hurra por el capitán giuliano Bossi y
su equipo.
Hay que decir que el atraque levantó
en toda la bahía una nube de arena
de fondo removida, que en pocos minutos
cambió un tono azul puro mediterráneo,
en un chocolate con leche de
inmensas dimensiones, pues el calado
de 9 metros del Splendida, poco fondo
tenía bajo su quilla que no removiesen
sus tres hélices de proa en una maniobra
de atraque de sacarse el sobrero,
con viento de proa de cerca de 50 nudos
(el Mediterráneo, cuando quiere,
no es ninguna perita en dulce).
toulon-barCelona (220 millas
aproximaDamente)
Salida de Toulon a las 2300 horas,
con el mar y el viento ya más en calma
para avistar las costas españolas a
primera hora de la mañana y llegar al
puerto de Barcelona cerca de las 10
(una hora de retraso), ya que la distancia
a recorrer era mayor y la salida de
Toulon se retrasó debido a lo complicado
de la operación de desembarco improvisado
de todos los franceses, algo
que incluso complicó el desembarco
en Barcelona, que siempre suele durar
unas tres horas desde la llegada (pasajeros,
personal, maletas, recogida,
organización del trasporte en tierra,
etc.), lo que confundió a muchos pasajeros
que, cortos de experiencia sobre
el particular, tenían billete de vuelta
en avión a media mañana hasta Vigo,
y que irremisiblemente perdieron con
su consiguiente “cabreo”, entendible
pero no demasiado justificado.
barCelona
Nada que decir aquí de Barcelona
ya que ni disponemos de espacio para
ello ni en una tarde se puede pedir
casi nada al respecto. Tiempo habrá.
Evidentemente el viaje del Splendida
comenzaba para nosotros en Vigo
y terminaba en Barcelona, desde donde
regresar de muy distintas maneras.
unos, los más, lo hicieron por avión
(muchos lo perdieron), alguno en
tren, y otros decidimos prolongar el
viaje unos días más, alquilar un coche,
y volver tranquilamente dando un rodeo
que resultó altamente gratificante,
haciendo de ello unas vacaciones, más
variadas, de no más allá de diez días.
como el éxito del Splendida al
parecer se va a repetir por parte de
otras compañías a lo largo de 2010,
trasladaremos aquí la experiencia por
si puede ser de utilidad a alguien en
viajes venideros.