Calculando el nivel de confianza: - Euskararen Jatorria
Calculando el nivel de confianza: - Euskararen Jatorria
Calculando el nivel de confianza: - Euskararen Jatorria
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
R. M. Frank ARSE 45: 17-64 (2011) 23<br />
complicado. Es <strong>de</strong>cir, es posible que <strong>el</strong> paulatino proceso <strong>de</strong> transformación fuera<br />
motivada por varios factores operando sinérgicamente, o sea, que <strong>el</strong> cambio resultante se<br />
<strong>de</strong>be a la acción conjunta <strong>de</strong> <strong>el</strong>los; que todos estaban implicados <strong>de</strong> alguna manera en los<br />
procesos cognitivos que con <strong>el</strong> tiempo dieron lugar al formante <strong>de</strong> -garri.<br />
Uno <strong>de</strong> los factores a tener en cuenta es <strong>el</strong> hecho <strong>de</strong> que los procesos <strong>de</strong> cambio<br />
semántico pue<strong>de</strong>n ser afectados por analogía: que otros vocablos cuyo significado o<br />
forma son parecidos al d<strong>el</strong> vocablo en cuestión pue<strong>de</strong>n funcionar como ‘atractores’<br />
(attractors) y contribuir al resultado final. En <strong>el</strong> caso d<strong>el</strong> <strong>de</strong>sarrollo que se propone <strong>de</strong> *gaile<br />
> -garri es posible que estos atractores hayan sido <strong>el</strong>ementos léxicos terminados en<br />
la secuencia fonológica <strong>de</strong> -arri y que estos hayan ejercido una influencia por analogía<br />
sobre *gai-le, teniendo en cuenta la alta frecuencia <strong>de</strong> morfemas verbales como jarri,<br />
ekarri / erakarri, igarri / iragarri, itzarri / iratzarri y hasta otras formas como larri,<br />
sarri, barri / berri, comparada con la baja frecuencia <strong>de</strong> secuencias en -aile que por tanto<br />
es más inusual. Es <strong>de</strong>cir, posiblemente la ten<strong>de</strong>ncia a pronunciar -garri en vez <strong>de</strong> *-gaile<br />
fue motivada por una combinación <strong>de</strong> varios factores y que la progresiva erosión d<strong>el</strong><br />
significado d<strong>el</strong> compuesto fuera acompañada por la progresiva confusión o<br />
contaminación fonética <strong>de</strong> parte <strong>de</strong> ciertos hablantes quienes por alguna razón empezaban<br />
a pronunciar <strong>el</strong> compuesto como -garri en vez <strong>de</strong> *-gaile. De todas maneras, es difícil si<br />
no imposible <strong>de</strong>terminar cuál <strong>de</strong> estos dos pasos cognitivos fuera <strong>el</strong> que puso en<br />
movimiento la serie <strong>de</strong> cambios que al final dieron lugar a la gramaticalización <strong>de</strong> *-gaile<br />
en -garri. Y no es sorpren<strong>de</strong>nte encontrar este niv<strong>el</strong> <strong>de</strong> incertidumbre al intentar<br />
reconstruir con <strong>de</strong>talle los procesos cognitivos pretéritos que a través d<strong>el</strong> tiempo han<br />
contribuido –conjuntamente– a producir la gramaticalización; es más bien que este tipo<br />
<strong>de</strong> incógnitas se da a menudo en indagaciones llevadas a cabo en trabajos enmarcados<br />
<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> mod<strong>el</strong>os que parten <strong>de</strong> la premisa <strong>de</strong> que <strong>el</strong> lenguaje es un sistema dinámico,<br />
abierto y no-lineal.<br />
También es <strong>de</strong> notar que las tres variantes representan significados que se han<br />
diversificado a partir d<strong>el</strong> significado semántico <strong>de</strong> base <strong>de</strong> *-gai-le propuesto aquí. Dicho<br />
<strong>de</strong> otra manera, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>el</strong> punto <strong>de</strong> vista diacrónico los tres ocupan espacios semánticos no<br />
solo colindantes sino solapados –en menor o mayor medida compartidos– <strong>de</strong>ntro d<strong>el</strong><br />
campo morfo-semántico proyectado por <strong>el</strong> sufijo compuesto <strong>de</strong> *-gai-le y por tanto, se<br />
alega que las tres se estructuran en base a dos <strong>el</strong>ementos hoy en día reconocibles e<br />
in<strong>de</strong>pendientes: gai y le. No obstante, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> <strong>el</strong> punto <strong>de</strong> vista sincrónico, cuando <strong>el</strong><br />
hablante emplea una <strong>de</strong> las tres variantes, los alomorfemas <strong>de</strong> -gailu, -gale y -garri, no es<br />
consciente <strong>de</strong> los lazos que las vinculan. Más bien enten<strong>de</strong>ría las tres variantes como<br />
<strong>el</strong>ementos in<strong>de</strong>pendientes, aislados y perfectamente diferenciados. Tampoco los<br />
asociaría, por lo menos conscientemente, con un compuesto en *-gail-le. Pero la gran<br />
ventaja que tenemos al <strong>el</strong>aborar esta etimología, es ésta: los hablantes d<strong>el</strong> euskera<br />
conocen perfectamente <strong>el</strong> significado <strong>de</strong> los dos <strong>el</strong>ementos que parecen estructurar la<br />
evolución <strong>de</strong> los tres sufijos.<br />
Antes <strong>de</strong> concluir esta exploración, siempre tentativa, d<strong>el</strong> <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> *-gaile vale la<br />
pena preguntarnos sobre los procesos cognitivos que hubiesen motivado la escisión <strong>de</strong> <strong>el</strong><br />
sufijo compuesto *-gai-le o sea <strong>el</strong> morfema representado por *-gaile, en tres variantes<br />
ligeramente diferenciadas. El problema pue<strong>de</strong> formularse <strong>de</strong> esta manera. Los dos<br />
morfemas que componen <strong>el</strong> sufijo han sobrevivido. Ambos son perfectamente