Las Sectas Destructivas y Demoníacas en España - Prolades.com

convencerme psicológicamente; 9- ¿Qué te hicieron hacer, a parte de las
consabidas preguntas?; R- Una vez rellené el test me dijeron que pasara
a otra sala que era de proyecciones. Me dejaron solo otra vez durante
tres cuartos de hora, y con la luz cerrada. La proyección trataba del
Cosmos y la religión, así como del líder de la institución (dicho
testigo no sabía de qué secta se trataba y cuál es su máximo
responsable).
Al terminar la proyección me dijeron que pasara por recepción.
Allí me comentaron que, de acuerdo con unos análisis que habían hecho
del test, podía desarrollar más mis facultades mentales. Yo dije que no
quería, y que lo único que deseaba era irme. Volvieron a insistir para
que realizara un curso de dominio de la mente. Le dije de todo para que
me dejara en paz. Que no tenía dinero para pagarlo, etc. (por cierto,
el curso era muy económico... por ser el primero). Después de conversar
con la chica durante media hora, accedí al curso. Pienso que no sabía
lo que hacía. No era dueño de mí mismo (ERA UNA PERSONA ACORRALADA).
Después de pagar una módica cantidad de dinero, me trasladaron a
una biblioteca muy espaciosa, llena de libros e imágenes religiosas.
Allí efectivamente había alrededor de veinte personas (Chicos/as). Sus
edades estarían entre los 18 y 30 años. Estudiaban en silencio. No hablaban,
parecían hipnotizadas.
Después de que me trasladara a la biblioteca la chica que me captó
en la calle, vino a entregarme los apuntes otra persona femenina cuya
edad rondaría los cuarenta y cinco años.
Miré los apuntes y encendí un cigarrillo. Pero esa mujer me
comunicó que no se podía fumar. Entonces sí que me puse muy nervioso.
Al cabo de una hora y media, y comprobar que nadie venía a mí, fui a
conversar con la persona que me había entregado los apuntes. Le informé
que debía ir a comer. Me dijeron que eso era imposible, que tenía que
terminar el examen. Luego me dieron la opción de que almorzara allí
mismo (tenían miedo a que no volviera por la tarde). Después de
discutir durante quince minutos pude convencerla de que volvería, ya
que me interesaba mucho el curso...
Fui a mi casa y después de comer volví (NO LO SÉ). Aprobé la
primera prueba, que consistía según recuerdo en memorizar definiciones
de palabras cósmico-religiosas. La segunda prueba consistía en
expresarse a través de objetos. La tercera y final, entablar
conversación con una persona desconocida de la calle, -curiosamente me
acompañó en esta prueba la primera chica con la que entablé el primer
contacto-. Por mi mente me vinieron muchas ideas. Le dije a la chica
que si quería tomar algo, para intentar en algún momento escaparme.
Ella fue tajante, sólo quería que pasara la prueba, y no me dejaba que
me separara ni un centímetro. Me agarraba por el cuello, como si
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