Las Sectas Destructivas y Demoníacas en España - Prolades.com

En la época de la inquisición al examinar 300 casos de brujas procesadas
por un solo tribunal alemán, se demostró que cada una había
dado 20 nombres,produciendo así una lista de 6000 personas que fueron
condenadas en menos de 10 años. Inglaterra fue la primera en abolir
éstos procesos en 1681 y la última Polonia, en 1793. España dejó de
matar brujas en 1781. Nunca se sabrá exactamente el número de víctimas
de aquellos años, pero se habla de muchos cientos de miles.
Los ungüentos usados por brujas y sectas satánicas son capaces de
producir los mismos efectos alucinógenos que el éter o el LSD y de provocar
la sensación de "viajar". Todos ellos compuestos a base de opio,
belladona, cicuta, beleño, mandrágora, mixturas de hachís, de flores de
adormidera y de raíces de éboro.
En la Demonología de Marchiaro se recoge el siguiente conjuro al
Diablo: “Te conjuro, Oh Espíritu Maléfico, en nombre del gran Dios viviente
que ha creado el cielo y la tierra y todas las criaturas que la
habitan y por méritos del cielo altísimo, a que te me aparezcas al instante
y si detenerte en tu reino. Con figura agradable y sin estruendo
y sin daño de mi persona y a hacer todo lo que te mande. Te conjuro el,
ehomme, etrha, ejel, aser, ejech, adonay, iah, tetragrammaton,
sotherischiros, athanatos, Amén”.
18. LA IGLESIA Y EL SATANISMO.
La historia de la Iglesia está jalonada por la aparición de herejías
de las que en algunos casos, derivaban grupos adoradores del
Diablo en cualquiera de sus denominaciones y especialidades:
-Los Ofitas o Nashianos, adoradores de la serpiente que “fue el
libertador que enseñó al hombre la rebelión contra Dios”.
-Los Cainitas, adoradores de todos los grandes rebeldes contra
Dios: Caín, Esaú, Cré y Judas.
-Los Luciferanos, grupos clandestinos entre los bogomilas, cátaros
y albigenses, adoradores de Satanaël o de Sammael.
-Los Patarinos, que celebraban obscenas reuniones nocturnas en
honor a Satán.
-La Secta de Los Brujos, muy numerosa en Lombardía en el siglo
XVI; sus sacerdotes apostataban de la fe pisando la cruz, abusando de
los sacramentos, reconociendo el demonio como su señor y cometiendo
toda clase de crímenes en su honor. Adriano IV libró una bula contra
ellos.
Algunas de estas sectas han sido actualizadas hoy.
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