12.05.2013 Views

PORTADILLA - Informe sobre Desarrollo Humano en Bolivia - (PNUD).

PORTADILLA - Informe sobre Desarrollo Humano en Bolivia - (PNUD).

PORTADILLA - Informe sobre Desarrollo Humano en Bolivia - (PNUD).

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

26<br />

T<strong>en</strong>sIOnes IRResueLTAs: BOLIvIA, PAsADO y PRes<strong>en</strong>Te<br />

brir el déficit fiscal, con la consigui<strong>en</strong>te derechización, <strong>sobre</strong> todo a partir del<br />

triunfo de Fidel Castro <strong>en</strong> Cuba.<br />

Finalm<strong>en</strong>te, <strong>en</strong> 1964, el MNR cayó por el golpe militar del g<strong>en</strong>eral R<strong>en</strong>é<br />

Barri<strong>en</strong>tos, hasta <strong>en</strong>tonces vicepresid<strong>en</strong>te de la segunda gestión de gobierno de<br />

Paz Est<strong>en</strong>ssoro. Así se inauguró la serie de regím<strong>en</strong>es militares que, sin embargo,<br />

mantuvieron lo fundam<strong>en</strong>tal del Estado del 52. Con relación a nuestro tema, Barri<strong>en</strong>tos<br />

dejó claro desde un principio que mant<strong>en</strong>dría y hasta profundizaría la Reforma<br />

Agraria y consolidó el “pacto militar campesino”, que había firmando si<strong>en</strong>do<br />

vicepresid<strong>en</strong>te del Gobierno del MNR. Desarrolló un <strong>en</strong>foque populista y <strong>en</strong> sus<br />

constantes viajes a las comunidades era aclamado como “líder máximo del campesinado”.<br />

Los sigui<strong>en</strong>tes gobiernos militares no tuvieron ese carisma popular, pero la<br />

mayoría del campesinado los veía como sus aliados y líderes, continuadores de la<br />

liberación que les había “dado” el MNR desde la Reforma Agraria sin cuestionar el<br />

hecho de que habían derrocado al partido de la Revolución Nacional y truncado el<br />

sistema político democrático.<br />

En síntesis, el Estado del 52 y sus bases ideológicas no fueron una simple<br />

reproducción del sistema neocolonial preced<strong>en</strong>te. Se g<strong>en</strong>eralizó por fin, a más de<br />

un siglo de la Indep<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia, el s<strong>en</strong>tido de ser todos parte consci<strong>en</strong>te y deseada del<br />

“Estado-nación boliviano”: ya no bolivianos “<strong>en</strong> sí” ni –para los indíg<strong>en</strong>as– sólo de<br />

una manera subalterna y discriminada, sino todos bolivianos “para sí”.<br />

Pero, aun cuando el nuevo Estado hizo un notable esfuerzo, como nunca<br />

antes, para incorporar a los “indíg<strong>en</strong>as-hechos-campesinos” de una manera más<br />

equitativa y formal, creando incluso <strong>en</strong> ellos un aura de liberación, <strong>en</strong> el fondo<br />

mantuvo la estructura colonial a través de viejas y nuevas vías más sutiles. Esta<br />

estructura se expresó no tanto <strong>en</strong> la exclusión y explotación directa <strong>en</strong> la haci<strong>en</strong>da<br />

sino <strong>en</strong> la persist<strong>en</strong>cia del contraste brutal <strong>en</strong>tre el campo y la ciudad <strong>en</strong> cuanto al<br />

acceso a bi<strong>en</strong>es y servicios comunes; y, <strong>en</strong> el ámbito ideológico, <strong>en</strong> la necesidad de<br />

perder las id<strong>en</strong>tidades originarias como un tributo para lograr la ciudadanía pl<strong>en</strong>a.<br />

El ideal del Estado del 52 era, ciertam<strong>en</strong>te, la construcción de una sociedad más<br />

inclusiva, pero uniformada por una cultura “mestiza”, <strong>en</strong> el s<strong>en</strong>tido de que ya no era<br />

“indíg<strong>en</strong>a” sino una cultura común cada vez más cercana a la de la sociedad blanco-criolla<br />

dominante, d<strong>en</strong>tro de una m<strong>en</strong>talidad “civilizatoria”. El sistema escolar<br />

estatal, que se había expandido hasta los últimos rincones del campo, los sindicatos<br />

campesinos apoyados por los “comandos” del MNR y el servicio militar al que<br />

acudían <strong>sobre</strong> todo los jóv<strong>en</strong>es de orig<strong>en</strong> rural y popular constituían los grandes<br />

instrum<strong>en</strong>tos ideológicos para este propósito.<br />

De esa forma paradójica, lo que inicialm<strong>en</strong>te se había propuesto como un<br />

mecanismo para superar toda discriminación étnica –y, como tal, era aceptado<br />

también por los propios interesados– acabó produci<strong>en</strong>do un efecto boomerang:<br />

otra forma de discriminación cultural. Años después, Juan Condori Uruchi, un jov<strong>en</strong><br />

aymara universitario que no había vivido la situación anterior al Estado del 52,

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!