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<strong>HACIA</strong> <strong>UNA</strong> <strong>DOCUMENTACIÓN</strong> <strong>ACÚSTICA</strong> <strong>DEL</strong> <strong>SHAWI</strong><br />

Universidad Nacional Federico Villarreal<br />

Circulo de Estudios Lingüísticos Lambda<br />

Rolando Muñoz Aramburú-VII Ciclo<br />

1. Introducción<br />

Este artículo tiene como principal objetivo exponer los resultados que obtuve tras el<br />

análisis acústico de una base de datos diseñada para el estudio del sistema vocálico de<br />

la lengua shawi. Asimismo, me referiré de forma superficial a la interacción de las vo-<br />

cales con las la consonante oclusiva glotal. Los resultados que muestro son de carácter<br />

preliminar y pretenden ser parte de un registro mayor cuya finalidad es la documenta-<br />

ción los patrones fonológicos y fonéticos de esta lengua.<br />

El shawi es una lengua de la familia cahuapana hablada aproximadamente por 15 000<br />

personas en las regiones de Loreto y San Martín, Perú (Lewis, 2009). Barraza De la<br />

Cruz (2006) señala que existen cuatro grandes variedades: Sillay, Cahuapanas y Para-<br />

napura y Jeberos.<br />

Los trabajos sobre documentación que se han realizado en esta lengua son variados, entre<br />

ellos podemos encontrar algunos vocabularios y diccionarios (Ruth Wise, 1998; Hart<br />

Elton, 1975; Goodall, 1976), estudios de morfología y sintaxis (Wise, 2002), estudios<br />

sobre lingüística histórica (Valenzuela, 2011), sobre fonología (Barraza De la Cruz,<br />

2006; Hart, Helen, & Powlison, 1976), entre otros. Sin embargo, no existe hasta la fecha<br />

un estudio que intente caracterizar acústicamente el comportamiento de los sonidos<br />

en esta lengua. En mi opinión, un trabajo de este tipo podría dar luces con mayor precisión<br />

sobre las bases empíricas en las cuales se han construido las propuestas fonológicas<br />

y fonéticas para esta lengua. Asimismo, podríamos encaminar los resultados en un<br />

estudio tipológico sobre las lenguas amazónicas y contribuir al conocimiento que se tienen<br />

sobre las lenguas del mundo. Es por ello que a través de este artículo intento dar ese<br />

“primer paso” para llenar el vacío que existe en la información.<br />

1


Llegado a este punto, conviene dar una revisión general sobre lo que entendemos por<br />

documentación acústica. Esta es una actividad que constituye una de las formas en las<br />

que se pueden hacer registros de los sonidos de una lengua. En ella, se busca caracteri-<br />

zar los sonidos que forman parte del inventario fonético, así como los procesos fonoló-<br />

gicos, variaciones dialectales o sociolingüísticas, entre otros.<br />

El resultado de esta actividad es útil para diversas áreas en las que se desarrolla el conocimiento<br />

humano. Por citar algunos ejemplos: las personas que tratan patologías del<br />

habla, así como los interesados en desarrollar mecanismos computacionales de síntesis<br />

y reconocimiento de voz, entre otros necesitan, en varios casos, tener conocimientos<br />

sobre los sonidos de la lengua a tratar. De igual modo, podemos orientar los resultados<br />

a aspectos de educación, por ejemplo, el conocimiento de las propiedades sonoras de un<br />

elemento nos da invaluable información sobre el mecanismo de producción de la señal<br />

acústica. Es así que podemos saber que en lenguas como el inglés las palabras que se<br />

escriben con como en “buy” son muy similares a las palabras que en castellano se<br />

escriben con como en “pague” (véase una exposición más detallada en: Elías<br />

Ulloa, 2011, pág. 24; Ladefoged & Johnson, 2010, pp. 57-61). El conocimiento de esta<br />

realidad nos da herramientas para reflexionar y proponer alternativas de enseñanza que<br />

sean más efectivas en el caso del aprendizaje de una segunda lengua por ejemplo.<br />

Podemos realizar la documentación desde dos niveles: desde la perspectiva segmental<br />

en el cual nos enfocamos en las partes que constituyen la cadena hablada, aquí podemos<br />

referirnos a vocales y consonantes. Del mismo modo, podemos ver el aspecto suprase-<br />

gmental en el cual fenómenos como el alargamiento, acento, tono y entonación tienen<br />

lugar.<br />

Retomando lo anteriormente dicho, este estudio tiene como finalidad brindar una caracterización<br />

superficial a nivel segmental del comportamiento de las vocales en shawi. En<br />

la primera parte, caracterizaré las vocales de la lengua shawi y las compararé con el<br />

shipibo. En un segundo momento propondré y demostraré que las vocales en sílabas<br />

prominentes tienden a manifestar un comportamiento distinto de aquellas que no se sitúan<br />

en este tipo de sílabas, específicamente en el tiempo de duración de las vocales, así<br />

como en la estructura de los formantes, las cuales suelen centralizarse en el F2. De igual<br />

2


forma, hago constatar el cumplimiento de patrones universales en esta lengua, tales co-<br />

mo el de la mayor duración de las vocales bajas frente a las altas, así como la realiza-<br />

ción de las vocales laringalizadas en contacto con oclusivas glotales (Ladefoged &<br />

Maddieson, 1996).<br />

No debo acabar esta sección sin antes reconocer y mencionar que los datos en los que<br />

baso este análisis me fueron proporcionados por la Lic. Karina Sullón Acosta y la Dra.<br />

Pilar Valenzuela. Personas a quienes agradezco por haberme proporcionado la informa-<br />

ción para creación de la data en la cual sustento mi análisis. Por otra parte, para el pú-<br />

blico interesado en estos temas sugiero que revisen el libro publicado por Elías Ulloa<br />

(2010) Una documentación acústica del shipibo, el cual es el primer trabajo completo<br />

de documentación acústica de una lengua.<br />

2. Metodología<br />

2.1. Participantes<br />

Los datos que utilizo fueron recogidos en septiembre del 2011 por la Lic. Karina Sullón<br />

Acosta y en enero del 2012 por la Dra. Pilar Valenzuela. Los colaboradores fueron dos<br />

y eran bilingües shawi-español, hombres. Ambos colaboradores proceden de Balsapuer-<br />

to. Debo aclarar que los resultados se basan en el análisis del segundo colaborador (da-<br />

tos recogidos por la Dra. Pilar Valenzuela), puesto que para la obtención de datos para<br />

el análisis de las vocales preparé dos listados de palabras ad hoc. Los resultados fueron<br />

contrastados por la información obtenida del primer colaborador.<br />

2.2. Las palabras estudiadas<br />

Se hicieron dos listas de palabras, una de ellas estaba orientada a la caracterización de<br />

las vocales y la otra destinada al estudio de la interacción del segmento glotal con la vo-<br />

cal. Se elicitaron un total 50 palabras de tres y cuatro sílabas de las cuales se tomaron en<br />

cuenta todas las vocales con excepción de aquellas ubicadas en sílaba final de palabra.<br />

Es importante señalar que las palabras se grabaron de forma aislada una sola vez. Debi-<br />

do a ello, es probable que en un próximo estudio más riguroso los resultados puedan va-<br />

3


iar. El total de las vocales estudiadas es de 50, todas ellas entre oclusivas sordas para la<br />

primera lista y en contacto con un segmento glotal para la segunda lista.<br />

2.3. El análisis<br />

Para el análisis se utilizó la versión 5.3.1.8 de Praat. Este es un programa de libre distri-<br />

bución creado por Paul Boersma y David Weenink diseñado para el análisis acústico.<br />

Para el estudio de la primera lista utilicé scripts y Textgrids que me permitieron semiau-<br />

tomatizar las tareas de medición. De esta forma, se tomó como referencia el 30% del<br />

centro de cada vocal para las mediciones del formante 1 y formante 2 (F1 y F2 de ahora<br />

en adelante). Posteriormente se tomaron el primer y último ciclo de la vocal en cuestión<br />

como punto de referencia para medir su duración.<br />

3. Resultados<br />

3.1. Las vocales<br />

La lengua shawi presenta cuatro fonemas vocálicos, los cuales son /i/, /ɨ/, /ʊ/ y /a/<br />

(Hart, Helen, & Powlison, 1976; Barraza De la Cruz, 2006). Estos se representan en<br />

la ortografía a través de , , y respectivamente.<br />

Se hicieron pruebas con variables que pudieran generar algún proceso regular que<br />

diferencie un mismo segmento vocálico en diferentes posiciones, entre estas: el nú-<br />

mero de sílabas por palabras (bisilábicas o trisilábicas), la posición silábica y la<br />

prominencia de la frecuencia fundamental, duración vocálica e intensidad dentro de<br />

la palabra. De ellas, las diferencias más resaltantes y consistentes fueron las que se<br />

debían al factor de la prominencia. Consideré que una vocal prominente era aquella<br />

que poseía una mayor elevación conjunta o parcial de estas propiedades con refe-<br />

rencia a las otras sílabas dentro de la palabra.<br />

3.2. La estructura de formantes<br />

Los resultados de las mediciones de las características acústicas presentados en la<br />

tabla 1 muestran la estructura de los formantes en esta lengua, la tabla promedia los<br />

valores para las vocales en sílabas prominentes y no prominentes con la finalidad de<br />

crear una medida de referencia ideal. El F1 y F2 son medidas de resonancia de<br />

4


nuestro tracto vocal, estos se correlacionan articulatoriamente con la altura y poste-<br />

rioridad vocálica respectivamente. En las vocales, cuanto más alto sea el F1, más<br />

baja será la vocal. De la misma forma, cuanto más alto sea el valor del F2, la poste-<br />

rioridad será menor.<br />

Tabla 1 Promedio de las frecuencias de formantes en las vocales de shawi<br />

Vocal Formante 1 (Hz) Formante 2 (Hz)<br />

i 284 1860<br />

ɨ 375 1774<br />

ʊ 416 962<br />

a 617 1466<br />

Si revisamos los datos en esta tabla, observaremos que la vocal [ʊ] es ligeramente<br />

más alta que [ɨ] y [i]. De la misma forma [ɨ] es más alta que [i]. Podemos agregar<br />

que la vocal [ɨ] mucho más posterior que [a].<br />

De lo dicho anteriormente, podemos encontrar un cierto parecido con una lengua de<br />

la familia Pano que comparte el mismo inventario fonológico para las vocales, el<br />

shipibo.<br />

“(…) [En shipibo] La vocal [i] es ligeramente más alta que las vocales [ɨ] y [ʊ]<br />

tanto en hombres como en mujeres y que la vocal [ɨ] aparece ligeramente más hacia<br />

al frente que la vocal [a].” (Elías Ulloa, Una documentación acústica de la<br />

lengua shipibo-conibo(pano) (con un bosquejo fonológico), 2011, pág. 33)<br />

La figura 1 muestra de forma visual los datos explicados en la tabla 1. En el eje de<br />

las ordenadas se representa el F1 y en las abscisas se representa el F2.<br />

5


Figura 1 Carta de formantes de los promedios de las frecuencias de las vocales en shawi<br />

3.3. Duración y desplazamiento vocálico<br />

En las tablas 2 y 3 podemos observar el resultado de clasificar a las vocales según su<br />

prominencia en la sílaba. Los parámetros que se tomaron en cuenta fueron el F1, F2 y la<br />

duración del segmento.<br />

Tabla 2 Vocales orales en posición de sílaba prominente<br />

Vocal Formante 1 (Hz) Formante 2 (Hz) Duración (ms)<br />

i 324 (23)<br />

1913 (32)<br />

48 (1)<br />

ɨ 381 (10) 1797 (77)<br />

79 (4)<br />

ʊ 351 (11)<br />

934 (22)<br />

95 (4)<br />

a 588 (84)<br />

1540 (103)<br />

84 (7)<br />

Tabla 3 Vocales orales en posición de sílaba no prominente<br />

Vocal Formante 1 (Hz) Formante 2 (Hz) Duración (ms)<br />

i 307 (21)<br />

1807 (148)<br />

40 (25)<br />

ɨ 368 (4)<br />

1751 (127)<br />

72 (4)<br />

ʊ 481 (19)<br />

990 (94)<br />

70 (15)<br />

a 646 (53)<br />

1393 (95)<br />

78 (26)<br />

Dentro del análisis de duración de las vocales, podemos hacer dos observaciones: La<br />

primera es que si comparamos entre los dos grupos de vocales expuestos, podemos observar<br />

que las vocales con mayor prominencia presentan mayor duración con respecto a<br />

las no prominentes.<br />

Por otra parte, se puede notar una tendencia en la vocal /a/ a tener una mayor duración<br />

que las vocales altas. Este hecho se relaciona con un fenómeno de la fisiología del habla<br />

6


en cuya base reside la afirmación de que las vocales bajas tienden a producirse con una<br />

mayor duración que las vocales altas. (Boersma, Escudero, & Chládková, 2011). Ejemplos<br />

de este tipo son recurrentes en castellano limeño, ibérico, así como en shipibo (Elías<br />

Ulloa, 2011, págs. 40-44; Boersma, Escudero, & Chládková, 2011, pág. 421). Pese a<br />

ello, es posible advertir que en este análisis la vocal alta /ʊ/ en posición silábica promi-<br />

nente es mayor al fonema /a/ en 11 ms. No obstante, debido a las limitaciones metodológicas,<br />

no me es posible llegar a una conclusión contundente sobre este aspecto en shawi.<br />

Para tener un mejor apoyo visual sobre el análisis de los formantes 1 y 2, nos ubicaremos<br />

en la figura 4. En ella vemos un cuadro llamado “Carta de formantes” en el cual se<br />

representan las vocales acentuadas (rojo) e inacentuadas (azul) en el eje vertical al F1 y<br />

en el eje horizontal al F2 de la tabla 2 y 3. Las elipses que aparecen incluyen información<br />

estadística sobre la desviación estándar multiplicada por dos.<br />

Figura 4 Carta de formantes: las vocales acentuadas son rojas y las inacentuadas son las azules<br />

i<br />

En esta figura es posible ver que el espacio acústico de la vocal / ʊ/ y /a/ prominente es<br />

más alto que de su contraria. Sin embargo el caso se invierte en las vocales [i] e [ɨ].<br />

Asimismo, podemos notar que existe una tendencia de las vocales a posteriorizarse, con<br />

excepción de la vocal redondeada, la cual se anterioriza. Todo ello, lleva a suponer que<br />

existe una tendencia de las vocales no prominentes a centralizarse.<br />

7


Pese a la evidencia demostrada, para hallar un patrón característico en las vocales rela-<br />

cionado con la sílaba más prominente y no prominente es necesario realizar más pruebas<br />

que recojan una mayor cantidad de datos en otros contextos como un marco por ejemplo.<br />

En este sentido, las propuestas que carácter temporal.<br />

3.4. Interacción de las vocales y del segmento oclusivo glotal [ʔ]<br />

En el shawi es posible encontrar el fenómeno de coalescencia cuando las vocales y las<br />

oclusivas glotales están en contacto. De la misma forma, existe evidencia sobre el<br />

comportamiento contrario. En la figura 5 se observan estos dos patrones en las pala-<br />

bras ta’awatan a la izquierda y a’inorin a la derecha (el apóstrofo es el signo para re-<br />

presentar la oclusiva glotal).<br />

Figura 5 Espectrogramas de dos casos de interacción entre vocales y la oclusiva glotal 1<br />

La imagen del lado izquierdo se visualiza el fenómeno de coalescencia, en el cual la<br />

flecha roja muestra la vocal [a] laringalizada. La laringalización se caracteriza por las<br />

estrías verticales en el espectrograma, las cuales muestran que los pulsos glotales ocu-<br />

rren a una velocidad más lenta y aperiódica. Esto lo podemos constatar comparando la<br />

flecha roja con la fecha de color azul en el mismo cuadro, la cual muestra la misma vocal<br />

en su versión no laringalizada.<br />

Al lado derecho, en el cuadro “b”, podemos observar un caso contrario en el que la<br />

oclusiva glotal muestra un comportamiento distinto al del cuadro “a”. En esta imagen,<br />

podemos ver que la sobreposición no es tan notable como en el ejemplo anterior.<br />

Todavía no me ha sido posible llegar a una conclusión en este aspecto, la información<br />

fonológica y los datos que tengo son hasta la fecha insuficientes. Sin embargo, existe<br />

evidencia de otras lenguas como el shipibo y cahuapana en el que estos fenómenos es-<br />

1 Debido a limitaciones tipográfica, en el cuadro “a” debería decir [a̰] en lugar de [aʔ]<br />

8


tán íntimamente relacionados con el rol de la prominencia en las posiciones prosódicas<br />

(Elías Ulloa).<br />

4. Conclusiones<br />

El estudio que he presentado pretende ser una aproximación sobre las propiedades acús-<br />

ticas de las vocales y la interacción de estas con la consonante oclusiva glotal. Existen<br />

varias limitaciones en el plano metodológico que impiden hacer afirmaciones culmina-<br />

tivas. Sin embargo se rescata que en shawi las vocales del mismo tipo tienen una dife-<br />

rente estructura acústica de acuerdo a la prominencia de la sílaba en que se encuentren,<br />

produciéndose de esta manera un proceso de centralización en las sílabas no prominen-<br />

tes. Igualmente, el shawi cumple con una tendencia universal en la cual las vocales altas<br />

tienen menor duración que las vocales bajas. Por otra parte, se pudo verificar que aunque<br />

el shipibo y el shawi tengan el mismo inventario vocálico fonológico, estos difieren<br />

en ligeramente en la sus estructuras fonéticas; a pesar de ello, las proporciones de altura<br />

y posterioridad entre vocales eran casi las mismas.<br />

Finalmente, existe evidencia sobre la coalescencia del segmento laríngeo [ʔ] en las vocales,<br />

lo cual es común en las lenguas del mundo. También pudimos observar que exis-<br />

tían casos en donde este fenómeno no era tan prominente.<br />

Quisiera concluir dejando saber que existe todavía un largo camino por recorrer en la docu-<br />

mentación acústica de esta lengua y que este proceso aún tiene que superar varios obstáculos.<br />

Peter Ladefoged (2003) afirmaba que para registrar la fonética de una lengua era indispensa-<br />

ble conocer la fonología de esta y viceversa. Así, fonética y fonología son dos elementos que<br />

se deben trabajar al mismo tiempo. Transpolando esto a los estudios de shawi, los trabajos fo-<br />

nológicos han dado mayor énfasis al aspecto segmental. Uno de los retos es justamente en-<br />

contrar el patrón acentual de esta lengua, pienso que sería un gran acierto y contribución en la<br />

documentación del shawi puesto que se ha demostrado en otras lenguas que existen una di-<br />

versidad de fenómenos que ocurren debido a esta variable.<br />

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rolando.muar@gmail.com<br />

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