haciendo posible lo imposible. la izquierda en el umbral ... - Rebelión
haciendo posible lo imposible. la izquierda en el umbral ... - Rebelión haciendo posible lo imposible. la izquierda en el umbral ... - Rebelión
masividad y de su combatividad estas movilizaciones no lograron destruir el sistema de dominación imperante. 1085. La historia de las revoluciones triunfantes, por el contrario, ratifica en forma porfiada lo que se puede lograr cuando existe una instancia política capaz, en primer lugar, de levantar un programa alternativo de carácter nacional que sirva de instrumento aglutinador de los más diversos sectores populares y, en segundo lugar, de unificar la acción concentrando fuerzas en el eslabón decisivo, esto es, en el eslabón más débil de la cadena enemiga. 1086. Esa instancia política es ‐como decía Trotsky‐ el pistón que comprime al vapor en el momento decisivo y permite que éste no sea desperdiciado y se convierta en fuerza impulsora de la locomotora. 1087. Para que la acción política sea eficaz, para que las actividades de protesta, de resistencia, de lucha del movimiento popular logren sus objetivos antisistémicos, se requiere un sujeto organizador que sea capaz de orientar y unificar los múltiples esfuerzos que espontáneamente surgen, y de promover otros. 1088. La sólida cohesión organizativa no sólo otorga la capacidad objetiva de actuar; a la vez crea un clima interno que hace posible una intervención enérgica en los acontecimientos y un aprovechamiento de las oportunidades que éstos ofrecen. Hay que recordar que en política no sólo hay que tener razón, sino que hay que tenerla a tiempo y contar con la fuerza para materializarla. 1089. Por el contrario, la sensación de no contar con una organización sólida, la inseguridad de poder llevar a la práctica las decisiones adoptadas por falta de disciplina de la militancia, influye negativamente ejerciendo una acción paralizadora. 3. COPIA DEL MODELO BOLCHEVIQUE Y DESVIACIONES A LAS QUE CONDUJO 1090. Reconociendo la importancia de la organización política 881 para conseguir los objetivos de cambio social, la izquierda marxista, sin embargo, ha hecho muy poco por adecuarla a las exigencias de los nuevos tiempos. Durante un largo período esto tuvo mucho que ver con la copia acrítica del modelo bolchevique de partido, ignorando lo que el propio Lenin planteaba al respecto. No es de extrañar que este modelo atrajese tanto a los cuadros políticos marxistas de América Latina: había sido el instrumento eficaz para realizar la primera revolución exitosa de los oprimidos contra el poder de las clases dominantes en el mundo. El cielo parecía haber sido tomado por asalto. 881 . Aquí estoy aludiendo a los partidos políticos, a las organizaciones político‐militares y a los movimientos y frentes políticos. - - 252
1091. Para el reconocido historiador inglés, Eric Hobsbawm, el “nuevo partido” de Lenin [fue] una extraordinaria innovación de la ingeniería social del siglo XX comparable a la innovación de las órdenes monásticas cristianas en la Edad Media, que hacía posible que incluso las organizaciones pequeñas hicieran gala de una extraordinaria eficacia, porque el partido obtenía de sus miembros una gran dosis de entrega y sacrificio, además de una disciplina militar y una concentración total en la tarea de llevar a buen puerto las decisiones del partido a cualquier precio. 882 1092. Pero, por desgracia, esta gran “obra de ingeniería social”, que tuvo una enorme eficacia en realidades como la rusa ‐una sociedad muy atrasada y un régimen político autocrático‐, fue trasladada mecánicamente a la realidad latinoamericana, una realidad muy diferente. Y no sólo eso, sino que al mismo tiempo, se la trasladó en forma simplificada y dogmática. Lo que la mayor parte de la izquierda latinomaericana conoció no fue el pensamiento de Lenin en toda su complejidad, sino la versión simplificada dada por Stalin. 1093. Lenin tenía absolutamente claro que no se trataba de fabricar una fórmula universal. Concibió siempre el partido como el sujeto político por excelencia de la transformación social, como el instrumento para ejercer la conducción política de la lucha de clases ‐lucha que siempre se da en condiciones históricas, políticas y sociales específicas‐ y, por lo mismo, estimaba que su estructura orgánica debía adecuarse a la realidad de cada país y modificarse de acuerdo a las exigencias concretas de la lucha. 1094. Estas ideas tempranas de Lenin fueron ratificadas en el III Congreso de la Internacional Comunista en 1921. En uno de sus documentos se sostiene que no puede haber una forma de organización inmutable y absolutamente conveniente para todos los partidos comunistas. Las condiciones de la lucha proletaria se transforman incesantemente y, conforme a esas transformaciones, las organizaciones de vanguardia del proletariado deben buscar también constantemente nuevas formas [...]. Las particularidades históricas de cada país determinan, a su vez, formas especiales de organización para los diferentes partidos. 883 1095. Estos planteamientos partían, sin embargo, de dos supuestos: primero, que se trataba de partidos de la clase obrera y, segundo, que para pertenecer a la Internacional Comunista cada uno de estos partidos debía necesariamente adoptar el nombre de Partido Comunista. Dichos supuestos fueron aplicados muy dogmáticamente por la sección de la Internacional encargada de América Latina ‐cuya 882 . Eric Hobsbawm, La historia del siglo XX (19141991), Ed. Crítica, Barcelona, 1995. 883 . "Tesis sobre la estructura, los métodos y la acción de los partidos comunistas". (Internacional Comunista, Los cuatro primeros congresos de la Internacional Comunista, segunda parte, en Cuadernos de Pasado y Presente Nº47, Buenos Aires, 1973, p.66. - - 253
- Page 201 and 202: convertido en desiertos; bosq
- Page 203 and 204: 761. Por otra parte, no s
- Page 205 and 206: Habría que reemplazar la r
- Page 207 and 208: de microondas, para poder s
- Page 209 and 210: ecosocialista, que se basa
- Page 211 and 212: que aproveche ese potencial
- Page 213 and 214: todas, sino por unas fórmu
- Page 215 and 216: sería mejor decir, elaborar
- Page 217 and 218: presentes en muchos de esto
- Page 219 and 220: VIII. CONCLUSIÓN: ¿EL COMIENZO DE
- Page 221 and 222: de Kondratieff. Como vimos
- Page 223 and 224: Unidos, que ha llevado a
- Page 225 and 226: 978. ¿Cuál debe ser enton
- Page 227 and 228: desarrollados; la fragmentació
- Page 229 and 230: obótica, por una parte, y
- Page 231 and 232: producción capitalista: el t
- Page 233 and 234: y que ya disponían de un
- Page 235 and 236: se encaminaba. Marx previó
- Page 237 and 238: profunda y acertada del cap
- Page 239 and 240: 1032. La izquierda debe, se
- Page 241 and 242: de los privilegios, todos q
- Page 243 and 244: 1047. Para la izquierda, la
- Page 245 and 246: gran fuerza; pero cuando mu
- Page 247 and 248: son sino la forma en que
- Page 249 and 250: 1073. Y ésto por una dob
- Page 251: 1081. Esto implica el recha
- Page 255 and 256: 2) VERTICALISMO Y AUTORITARISMO 110
- Page 257 and 258: 1116. Es distinta la visió
- Page 259 and 260: movimiento popular como: la
- Page 261 and 262: 1137. Hoy, el movimiento re
- Page 263 and 264: 1. LA ORGANIZACION HACIA AFUERA 1)
- Page 265 and 266: pretendido emplear para sumar
- Page 267 and 268: 1173. Además de poner en
- Page 269 and 270: 1187. Según Jon Elster, la
- Page 271 and 272: Debe partir de la base de
- Page 273 and 274: 6) ADECUAR SU LENGUAJE A LOS NUEVOS
- Page 275 and 276: 1220. Como es de todos co
- Page 277 and 278: 1229. Y esta lucha tiene
- Page 279 and 280: antidemocrático, porque otorga
- Page 281 and 282: epresentados 928 y, de esa
- Page 283 and 284: economía, con las que tien
- Page 285 and 286: que corresponde a opciones
- Page 287 and 288: 1277. De esto se deduce q
- Page 289 and 290: que incluya la articulación
- Page 291 and 292: VI. GOBIERNOS LOCALES: SEÑALES DE
- Page 293 and 294: fueron humillados y estuviero
- Page 295 and 296: ellos incluyan propuestas de
- Page 297 and 298: que el mismo vehículo tran
- Page 299 and 300: que si es bien atendida e
- Page 301 and 302: con los vicios y los defe
masividad y de su combatividad estas movilizaciones no <strong>lo</strong>graron destruir <strong>el</strong> sistema <br />
de dominación imperante. <br />
1085. La historia de <strong>la</strong>s revoluciones triunfantes, por <strong>el</strong> contrario, ratifica <strong>en</strong> forma <br />
porfiada <strong>lo</strong> que se puede <strong>lo</strong>grar cuando existe una instancia política capaz, <strong>en</strong> primer <br />
lugar, de levantar un programa alternativo de carácter nacional que sirva de <br />
instrum<strong>en</strong>to aglutinador de <strong>lo</strong>s más diversos sectores popu<strong>la</strong>res y, <strong>en</strong> segundo lugar, <br />
de unificar <strong>la</strong> acción conc<strong>en</strong>trando fuerzas <strong>en</strong> <strong>el</strong> es<strong>la</strong>bón decisivo, esto es, <strong>en</strong> <strong>el</strong> es<strong>la</strong>bón <br />
más débil de <strong>la</strong> cad<strong>en</strong>a <strong>en</strong>emiga. <br />
1086. Esa instancia política es ‐como decía Trotsky‐ <strong>el</strong> pistón que comprime al vapor <br />
<strong>en</strong> <strong>el</strong> mom<strong>en</strong>to decisivo y permite que éste no sea desperdiciado y se convierta <strong>en</strong> <br />
fuerza impulsora de <strong>la</strong> <strong>lo</strong>comotora. <br />
1087. Para que <strong>la</strong> acción política sea eficaz, para que <strong>la</strong>s actividades de protesta, de <br />
resist<strong>en</strong>cia, de lucha d<strong>el</strong> movimi<strong>en</strong>to popu<strong>la</strong>r <strong>lo</strong>gr<strong>en</strong> sus objetivos antisistémicos, se <br />
requiere un sujeto organizador que sea capaz de ori<strong>en</strong>tar y unificar <strong>lo</strong>s múltiples <br />
esfuerzos que espontáneam<strong>en</strong>te surg<strong>en</strong>, y de promover otros. <br />
1088. La sólida cohesión organizativa no só<strong>lo</strong> otorga <strong>la</strong> capacidad objetiva de actuar; a <br />
<strong>la</strong> vez crea un clima interno que hace <strong>posible</strong> una interv<strong>en</strong>ción <strong>en</strong>érgica <strong>en</strong> <strong>lo</strong>s <br />
acontecimi<strong>en</strong>tos y un aprovechami<strong>en</strong>to de <strong>la</strong>s oportunidades que éstos ofrec<strong>en</strong>. Hay <br />
que recordar que <strong>en</strong> política no só<strong>lo</strong> hay que t<strong>en</strong>er razón, sino que hay que t<strong>en</strong>er<strong>la</strong> <br />
a tiempo y contar con <strong>la</strong> fuerza para materializar<strong>la</strong>. <br />
1089. Por <strong>el</strong> contrario, <strong>la</strong> s<strong>en</strong>sación de no contar con una organización sólida, <strong>la</strong> <br />
inseguridad de poder llevar a <strong>la</strong> práctica <strong>la</strong>s decisiones adoptadas por falta de <br />
disciplina de <strong>la</strong> militancia, influye negativam<strong>en</strong>te ejerci<strong>en</strong>do una acción paralizadora. <br />
3. COPIA DEL MODELO BOLCHEVIQUE Y DESVIACIONES A LAS QUE CONDUJO<br />
1090. Reconoci<strong>en</strong>do <strong>la</strong> importancia de <strong>la</strong> organización política 881 para conseguir <strong>lo</strong>s <br />
objetivos de cambio social, <strong>la</strong> <strong>izquierda</strong> marxista, sin embargo, ha hecho muy poco por <br />
adecuar<strong>la</strong> a <strong>la</strong>s exig<strong>en</strong>cias de <strong>lo</strong>s nuevos tiempos. Durante un <strong>la</strong>rgo período esto tuvo <br />
mucho que ver con <strong>la</strong> copia acrítica d<strong>el</strong> mode<strong>lo</strong> bolchevique de partido, ignorando <br />
<strong>lo</strong> que <strong>el</strong> propio L<strong>en</strong>in p<strong>la</strong>nteaba al respecto. No es de extrañar que este mode<strong>lo</strong> <br />
atrajese tanto a <strong>lo</strong>s cuadros políticos marxistas de América Latina: había sido <strong>el</strong> <br />
instrum<strong>en</strong>to eficaz para realizar <strong>la</strong> primera revolución exitosa de <strong>lo</strong>s oprimidos <br />
contra <strong>el</strong> poder de <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>ses dominantes <strong>en</strong> <strong>el</strong> mundo. El cie<strong>lo</strong> parecía haber sido <br />
tomado por asalto. <br />
<br />
881 . Aquí estoy aludi<strong>en</strong>do a <strong>lo</strong>s partidos políticos, a <strong>la</strong>s organizaciones político‐militares y a <strong>lo</strong>s movimi<strong>en</strong>tos y <br />
fr<strong>en</strong>tes políticos. <br />
- - 252