Esfera, Pez y Hexagrama: - Fundación Pablo Neruda
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[ 6 ] NERUDIANA – nº 3 – 2007<br />
para la cultura hebrea. Aparte la shakra del<br />
corazón, también la encontramos en el escudo<br />
de Goethe, y es de gran importancia<br />
en la símbología masónica.<br />
Esta estrella resulta de una suerte de<br />
diálogo entre dos triángulos, uno femenino<br />
y otro masculino. Ahora bien, resulta<br />
fácil descubrir la presencia de dos triángulos<br />
en el logo de <strong>Neruda</strong>, que se hacen visibles<br />
al unir en triángulo las tres letras vocales<br />
por un lado, y las tres consonantes<br />
por otro. Los dos triángulos forman, engarzados,<br />
una perfecta estrella de seis pun-<br />
(fig. 14)<br />
tas (fig. 14). Es pues, posible ver un<br />
hexagrama en el logo nerudiano que, a la<br />
luz del Kundalini, alcanzaría un significado<br />
equivalente o afín al de la shakra del<br />
corazón. El pintor chileno Víctor Ramírez<br />
nos hace notar —desde Barcelona, donde<br />
vive— que <strong>Neruda</strong> residenció en la tierra,<br />
frente al mar de su casa en Isla Negra, un<br />
<strong>Hexagrama</strong> cuya alma son seis campanas.<br />
Ese macrocósmico <strong>Hexagrama</strong> al aire libre<br />
—el campanario del poeta— no necesita<br />
otro círculo limítrofe que el del universo<br />
(fig. 15).<br />
En el Shivah-Shakti, sistema dual del<br />
Kundalini-Yoga, el engarce de los triángulos<br />
simboliza el diálogo entre dos ideas.<br />
El del vértice superior (triángulo de las consonantes)<br />
simboliza la idea fundamental de<br />
la masculinidad. Y el del vértice inferior<br />
(triángulo de las vocales), la de la femineidad.<br />
(fig. 15)<br />
En el logo nerudiano, ese diálogo está<br />
reiterado por la presencia del <strong>Pez</strong> y del<br />
Yoni. El Yoni —en occidente: Mándorla—<br />
es la almendrada estilización de la<br />
vulva, que obviamente remite al principio<br />
de femineidad, así como el <strong>Pez</strong> (= falo)<br />
remite al de masculinidad. Más aún: el pez<br />
del logo podría ser Vishnu, divinidad representada<br />
a veces como un pez (o saliendo<br />
de las fauces de un pez) y encargada de<br />
que los principios Shivah y Shakti se renueven<br />
y mantengan. Lo que correspondería<br />
a la fórmula para nacer he nacido,<br />
y a esa suerte de Shivah-Shakti que actúa<br />
como principio original, fundante y<br />
desencadenante de la obra nerudiana: «por<br />
una parte el bosque, cóncavo y negro, que<br />
representa a la tierra, la madre, la hembra;<br />
y por otro, el mar, el principio activo, masculino»<br />
(Loyola).<br />
Quizás Juan Larrea no andaba descaminado<br />
al afirmar que una de las inclinaciones<br />
polares de <strong>Neruda</strong> fue la India. En<br />
1919, la misma vía de curiosidad que llevó<br />
al quinceañero Neftalí hasta Kundalini<br />
lo hizo topar también, muy probablemente,<br />
con el término Niruddha (¿talvez<br />
transcrito Niruda?) que nombra al quinto<br />
estado de conciencia, el máximo o supremo<br />
a que puede aspirar el iniciado en la<br />
práctica del Yoga. No es temerario suponer<br />
que una casual resonancia de ese término<br />
reforzará un año más tarde, en octubre<br />
de 1920, la elección del apellido que<br />
Neftalí buscaba para el ya elegido nombre<br />
<strong>Pablo</strong> [Detalles al respecto en Robertson<br />
1999 y en Loyola 2006: 409-410] .<br />
Volvamos al <strong>Hexagrama</strong>, que para la<br />
Alquimia medieval simbolizaba la materia<br />
prima, la que incluye en sí a todos los<br />
elementos. Y recordemos el arduo conflicto<br />
(uno de tantos) que con la Iglesia tuvo<br />
el sabio Girólamo Cardano —de azarosa<br />
y novelesca vida— por su osado sostener<br />
que la hexagrámica materia prima tenía<br />
alma. A punto estuvo de acabar en la hoguera<br />
por decir tal herejía. Se dice que el<br />
mismísimo Papa tuvo que intervenir para<br />
salvarlo.<br />
Por histórica afinidad, en los siglos<br />
sucesivos habrá sellos masónicos que en<br />
el centro de un hexagrama llevan una escuadra<br />
y un compás, o bien un triángulo y<br />
un ojo. Son los más conocidos. Pero hay<br />
un diseño de Goethe, masón célebre, que<br />
pareciendo un sello masónico no lo es; o<br />
talvez sí. Es el círculo cromático con que<br />
ilustró su Teoría de los Colores —teoría<br />
que se consideró insostenible frente a la<br />
de Newton, pero que Goethe defendió<br />
como si se tratase de un dogma religioso.<br />
Su ilustración se parece mucho al dibujo<br />
de la shakra del corazón.<br />
Aunque <strong>Neruda</strong> —que sepamos—<br />
nunca fue miembro de logia masónica alguna,<br />
sí tuvo muchos amigos en la cofradía,<br />
a comenzar por personajes de su infancia<br />
como Rudecindo Ortega Masson<br />
(hijo de la tía Telésfora y más tarde dirigente<br />
de la FECH, abogado, joven diputado,<br />
ministro durante la presidencia de<br />
Aguirre Cerda, senador del Partido Radical)<br />
y Alejandro Serani, compañero de liceo<br />
en Temuco, que con los años llegó a<br />
ser Gran Maestre. Otros amigos lo eran<br />
también, como Acario Cotapos y Julio<br />
Ortiz de Zárate, del grupo de Los Diez de<br />
Pedro Prado y Magallanes Moure. A lo<br />
largo de su existencia <strong>Neruda</strong> tuvo innumerables<br />
oportunidades de contactar con<br />
masones, de Chile y de otros países, en<br />
especial con los de España. Muchos fueron<br />
los militantes de la Unión Republicana,<br />
el partido de Diego Martínez Barrio<br />
(dos veces presidente de la República<br />
y grado 33 de la Masonería), que hubieron<br />
de marchar al destierro para no ser