Revista Aduanas #22, Gracia navideña - DGA

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de las actividades de la aduana,
particularmente como resultado
de la adecuación a los acuerdos
de libre comercio y el impulso
de la autoridad central, como
motor político fundamental de
los cambios.
Es así como la aduana, en estos
momentos, está en situación
mucho más favorable que en el
pasado. El viento está, políticamente
en buena dirección, el
Congreso Nacional presenta una
correlación de fuerzas propicia
al proceso de modernización de
la aduana y a la reforma de su
estructura jurídica. Por eso, debe
aprovecharse esta coyuntura
para avanzar en las reformas
legales necesarias, sobre la base
de ideas concordantes con la
realidad nacional, y las experiencias
provenientes de los organismos
internacionales.
El impulso de las autoridades
mantiene el mismo dinamismo
reformador, por encima de las dificultades
circunstanciales, y en
el mismo sentido de los compromisos
multilaterales o bilaterales
que constituyen obligaciones para
modernizar y cambiar todo lo
arcaico en la institución.
Por eso, es evidente la necesidad
de trabajar para cambiar la
imagen del comercio exterior de
la República Dominicana, pero
especialmente partiendo de la
base jurídica de la aduana, para
en esa vía, diseminar reformas
en otras áreas de la institución.
EL ANTEPROYECTO DE LEY
Los intentos de elaborar una
nueva ley han tenido varias etapas
en la historia reciente de la
aduana. Antes del 2000 fueron
discutidas varias versiones del
anteproyecto de ley de aduana,
sin que las discusiones de aquellas
ideas tuvieran el éxito final.
En la actualidad existe un anteproyecto,
fruto de discusiones
recientes.
En estas circunstancias, el
debate de ideas resulta favorable.
No importa como trascienda
al documento final del anteproyecto
existente, lo relevante
sería estudiar con profundidad y
con criterio técnico las distintas
ideas, teniendo en cuenta los
compromisos internacionales y
la realidad nacional.
En la ley de aduana son numerosos
los temas para examinar.
Muchos están contemplados,
desde hace tiempo en el
Anteproyecto de Ley de aduanas.
Otros constituyen tan sólo
complementos a ideas debatidas
en oportunidades anteriores. De
cualquier manera debe enten-
derse que mencionar temas
(quiero decir recordarlo en este
texto) para incorporar en el anteproyecto
de la Ley de Aduanas
de la República Dominicana debe
ser percibido como una contribución
para superar retrasos
reales del proceso de reforma de
la institución.
Tan sólo sugerir una idea
conviene mover a reflexión.
Porque si la idea está presentada
en el Anteproyecto, entonces
tiene que evaluarse los matices
como está presentada. No solamente
el estilo jurídico de la expresión,
por tratarse de una ley;
sino el alcance y el acento de
cada texto. Una cosa es sugerir
una idea y otra muy distinta es
darle la forma jurídica adecuada.
SUGERENCIAS PARA
EL ANTEPROYECTO DE LEY
Algunos cuestionamientos
importantes serían los siguientes:
1) Definir responsabilidad
y autoridad en cada instancia del
servicio aduanero. Descentralizar
las decisiones del servicio
aduanero.
2) Establecer procedimientos
en la nueva ley para permitir
el retiro de mercancías sin que
todas las formalidades del despacho
hayan sido completadas,
siempre que los indicadores de
análisis de riesgo así lo permitan.
3) Incorporación en la nueva
ley de procedimientos especiales
y simplificados para empresas
o personas autorizadas
(operadores económicos autorizados).
4) Establecer en el anteproyecto
de ley el compromiso
de aplicación plena del Código
de Valoración en Aduana de la