El arte poética, Aristóteles, traducción de José Goya y Muniain (ed ...
El arte poética, Aristóteles, traducción de José Goya y Muniain (ed ...
El arte poética, Aristóteles, traducción de José Goya y Muniain (ed ...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
ARISTÓTELES<br />
al paso que la Ilíada y la Odisea la tienen con las trag<strong>ed</strong>ias. Trazadas<br />
que fueron la com<strong>ed</strong>ia y la trag<strong>ed</strong>ia, <strong>de</strong> allí a<strong>de</strong>lante los aficionados a<br />
entrambas poesías, la seria y la jocosa, según su natural inclinación,<br />
unos, en lugar <strong>de</strong> hacer yambos, se hicieron autores <strong>de</strong> com<strong>ed</strong>ias;<br />
otros, en lugar <strong>de</strong> versos heroicos compusieron trag<strong>ed</strong>ias, por ser más<br />
sublimes y más nobles estos asuntos 6 que aquéllos; el averiguar empero<br />
si la trag<strong>ed</strong>ia tiene ya o no lo que basta para su perfección, ora sea consi<strong>de</strong>rada<br />
en sí misma, ora sea respecto <strong>de</strong>l teatro, eso es otro punto 7 .<br />
3. Por lo <strong>de</strong>más, haciéndose al principio sin <strong>arte</strong> así ésta como la com<strong>ed</strong>ia<br />
(la trag<strong>ed</strong>ia por los corifeos <strong>de</strong> la farsa ditirámbica, la com<strong>ed</strong>ia<br />
por los <strong>de</strong>l coro fálico 8 , cuyas mojigangas duran todavía en muchas<br />
ciuda<strong>de</strong>s recibidas por ley), poco a poco fue tomando cuerpo, promoviéndolas<br />
los dichos, hasta <strong>de</strong>scubrirse tal cual forma <strong>de</strong> ellas. Con eso<br />
la trag<strong>ed</strong>ia, probadas 9 muchas mutaciones, hizo punto, ya que adquirió<br />
su ser natural. Entonces Esquilo dividió 10 la compañía <strong>de</strong> los farsantes<br />
<strong>de</strong> una en dos, minoró las personas <strong>de</strong>l coro y dispuso el papel<br />
<strong>de</strong>l primer actor. Mas Sófocles introdujo tres personas y la variación<br />
<strong>de</strong> la escena. A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> esto, aunque tar<strong>de</strong>, al fin <strong>de</strong>jadas las fábulas<br />
ruines y la dicción burlesca, dando <strong>de</strong> mano al estilo satírico, la gran<strong>de</strong>za<br />
<strong>de</strong> las acciones 11 se representó dignamente. Al mismo tiempo se<br />
mudó el verso <strong>de</strong> ocho pies en yámbico; bien que al principio usaban<br />
el metro <strong>de</strong> ocho pies, por ser la poesía <strong>de</strong> sátiros 12 y más acomodada<br />
para bailar; pero trabándose 13 conversación, la misma naturaleza dictó<br />
el metro propio, porque <strong>de</strong> todos los metros el yambo es el más obvio<br />
en las pláticas, y así es que proferimos muchísimos yambos en nuestras<br />
conversaciones, pero hexámetros pocos, y eso traspasando los límites<br />
<strong>de</strong>l familiar estilo. Por último, se dice haberse añadido muchos episodios<br />
y adornado las <strong>de</strong>más cosas con la <strong>de</strong>cencia conveniente; sobre las<br />
cuales ya no hablaremos más, pues sería tal vez obra larga recorrerlas<br />
todas por menudo.<br />
4. La com<strong>ed</strong>ia es, como se dijo, retrato <strong>de</strong> los peores, sí; mas no según<br />
todos los aspectos <strong>de</strong>l vicio, sino sólo por alguna tacha 14 vergonzosa<br />
que sea risible; por cuanto lo risible es cierto <strong>de</strong>fecto y mengua<br />
sin pesar ni daño ajeno, como a primera ojeada es risible una cosa fea<br />
y disforme sin darnos pena. En or<strong>de</strong>n a las mutaciones <strong>de</strong> la trag<strong>ed</strong>ia<br />
y por quién se hicieron, ya se sabe; pero <strong>de</strong> la com<strong>ed</strong>ia, por no curarse<br />
<strong>de</strong> ella al principio, se ignora, y aun bien tar<strong>de</strong> fue cuando el príncipe 15<br />
19