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manantiales granada_uno.qxp 08/05/2006 21:13 PÆgina 94
GUIA MANANTIALES GRANADA
❖ Baños de la Malahá. ❖ Sala de baño de época romana.
Otra forma de acercarnos a La Malahá es
desde las proximidades del Suspiro del Moro,
en la autovía Granada-Motril, donde podemos
tomar la nueva carretera.
Partiendo desde la comarca del Llano de
Zafarraya y Alhama de Granada nos encontramos
con La Malahá, pocos kilómetros
antes de alcanzar Granada capital, por medio
de la carretera que va uniendo los pueblos
de Agrón y Ventas de Huelma.
Referencias históricas
Diversos hallazgos arqueológicos en las
proximidades de estos Baños atestiguan el
poblamiento prehistórico del lugar, que pudiera
remontarse al Neolítico medio y posterior
presencia de los períodos del Cobre,
Bronce e Íbérico, si bien, se desconoce la
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relación de estos yacimientos con el posible
uso de los baños termales.
Cuenta la leyenda que, hacia el año 480 a.
C., el hijo de un jefe cartaginés, encontrándose
enfermo de la piel, cayó fortuitamente
a unas pozas de agua caliente de La Malahá
teniendo como resultado su cura. Desde entonces
se inicia la historia de uno de los Baños
termales con más tradición de Granada.
Los griegos se establecieron en el lugar
en un asentamiento al que denominaron
“Malka”, que quiere decir “suave o apacible”,
resultando difícil imaginar otro atractivo
en el terreno que no fuera el relacionado
con los nacimientos de agua termal.
El mundo romano se refiere a La Malahá
como “Misarza”, “valle templado o alivio de
dolientes”, iniciándose con su cultura un
período de gran posperidad para La Malahá,
que alcanzó la cifra de 5000 pobladores en
una villa gobernada por cuatro dirigentes y
por el hijo del Senador Eucipio, y donde las
actividades principales serían las relacionadas
con las salinas y los baños. De este
tiempo se conserva una gran aljibe en muy
buen estado. Se cuenta como los ejércitos
de Cornelio Escipión y de Niomes tomaron
la ciudad, que fué regalada por éste último
a uno de sus nietos, quien dirigió la villa en
el transcurso del período de mayor esplendor
de La Malahá.
Modernas investigaciones arqueológicas
relacionan el uso de los Baños con la
presencia en las inmediaciones de la vega
granadina de importantes ciudades históricas
como Ilurco (Cerro de Los Infantes,
Pinos Puente), Iliberris (Albaicín, Granada),
Calecula (Íllora) y Castella (Sierra Elvira,
Atarfe).
A lo largo del siglo V llegan a La Malahá,
Suevos, Vándalos, Alanos, Silingos, y por último
los Godos, quienes tuvieron la oportunidad
de aprovechar las propiedades de las
aguas de la “Fuente de Mizarza”, en tiem-
Baños de la Malahá
La Malahá fue referida
por los romanos como
Misarza el valle templado
o alivio de dolientes
pos en los que Leovigildo convierte la villa
en un importante núcleo comercial.
Desde el siglo VIII las aguas de los Baños
de Malahá son aprovechadas por los árabes,
siendo en el siglo X cuando en La Malahá
se produce un importante avance basado
en la explotación de sus minas, la
agricultura, el inicio de la explotación salinera
y la utilización de los baños termales
con fines terapéuticos.
Durante el período musulmán, dos son las
personas relevantes que según las referencias
históricas encontradas, mejor hacen honor
a La Malahá y sus Baños termales. En el
siglo XII, durante el gobierno de Almanzor, el
sabio Mohamed Ben Abdel Waed Algaphiki
menciona los Baños de La Malahá en su
obra “Los Hombres Ilustres de la Comarca
de Elvira”, pero, sobre todo, para este pueblo
tiene una especial significación el hecho
de ver nacer y morir a uno de los más cultos
historiadores del reino de Granada: Abul-Qasim
Muhammad Ibn Add al-Walid al-Malahi. El
topónimo “Malaha” es de procedencia árabe
siendo su denominación original “Al-mallaha”,
que significa Las Salinas.
El 24 de junio de 1483 el pueblo sufre
una estruenda batalla entre árabes y cristianos,
que culmina con la entrega a estos
últimos de la villa, a excepción de las salinas
que permanecen en propiedad del príncipe
Abdullah y el rey Boabdill, según se recoge
en el tratado de entrega de Granada
de 1492. Un año más tarde el rey D. Fernando
se apodera de toda la villa, entre-
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