“MADRES PORTADORAS DE SIMIENTE DE DIOS.” - XFATBoY
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REVERENDO WILLIAM SOTO SANTIAGO<br />
Ya Erica comenzó guiando y enseñando al bebé, ya estando<br />
en su vientre, desde el primer mes ya estaba instruyéndolo en<br />
el Camino de Dios; y qué mejor que madres creyentes para<br />
traer a materialización en carne humana almas de Dios<br />
escritas en el Cielo, en el Libro de la Vida del Cordero; o sea,<br />
que es una bendición grande.<br />
Y cuando los presentamos a Cristo, ahí quedan dentro del<br />
Nuevo Pacto, dentro del Pacto Divino. Pero, ¿y qué antes de<br />
presentarlos a Cristo cuando están en el vientre? Bueno están<br />
en usted y usted está dentro del Pacto Divino. Así que, no hay<br />
ningún problema.<br />
Y si ocurre la transformación y el Rapto, ¿qué será de<br />
nuestros hijos? Pues serán unos jovencitos al lado de nosotros<br />
que también seremos jovencitos; porque ellos van a ser<br />
transformados también, y van a recibir aun siendo niñitos o<br />
bebés, van a recibir el cuerpo glorificado, que viene en un<br />
cuerpo jovencito; o sea, que a nosotros nos ha tomado para<br />
obtener el cuerpo, hasta los... digamos hasta los 18 años (nos<br />
tomó 18 años), y ellos, aunque sean un bebé de un mes o de<br />
menos, les tomará ese tiempo nada más en el tiempo que toma<br />
de nacer al recibir el cuerpo glorificado, le tomará un mes si<br />
ocurre la resurrección cuando ya tenga un mes; y si ocurre<br />
cuando tenga un día, pues le tomará un día o dos, de bebé a<br />
joven.<br />
Y si está en el vientre, pues no se preocupe por eso: Dios le<br />
dará el cuerpo nuevo, y del vientre, pues vendrá a ser un<br />
jovencito. ¿Cómo ocurrirá eso? Espere que ocurra las que<br />
estén embarazadas. Por lo tanto, no se preocupen porque si en<br />
usted están dos personas: usted y el bebé; pues Dios, así como<br />
tiene un cuerpo físico ahí en su vientre para su bebé, pues<br />
Cristo tendrá un cuerpo glorificado para su bebé.<br />
Así que, ése es el más rápido que obtiene; obtiene el cuerpo<br />
glorificado, sin todavía haber nacido en la Tierra, pero ya está<br />
COMPENDIO: MADRES <strong>PORTADORAS</strong> <strong>DE</strong> <strong>SIMIENTE</strong> . . . 27<br />
tiene.<br />
Debe tener, debe recibir esa Palabra creadora, el Mensaje<br />
que corresponde para ese tiempo. Eso es lo más grande que en<br />
el Programa Divino se lleva a cabo. Y así es como se nace en<br />
el Reino de Dios, y así es como se es heredero; porque para<br />
ser heredero tiene la persona que nacer en esa familia; y por<br />
los genes de la Palabra de Dios, nacen los hijos de Dios en el<br />
Reino de Dios.<br />
Ahora, en este día de las madres, felicidades nuevamente a<br />
todas las madres; y a la Madre Celestial, a la Madre que trae<br />
hijos del Señor Jesucristo; y uno de los hijos, una de las cosas<br />
prometidas para esa Madre, es dar a luz la Segunda Venida<br />
del Hijo del Hombre: el privilegio más grande que esa Madre<br />
tiene prometido para el tiempo final.<br />
La Jerusalén Celestial tiene la promesa de dar a luz la<br />
Segunda Venida del Hijo del Hombre; con razón es<br />
bienaventurada y es llamada la Esposa del Cordero.<br />
¡Felicidades! A la Jerusalén Celestial, la Madre de todos<br />
nosotros. Y eso sí que es un descubrimiento grande, y un<br />
privilegio grande; que usted, aunque cada uno de ustedes<br />
tiene su propia madre terrenal, a la cual uno no le puede decir,<br />
uno no le puede decir a la mamá de otro: “Madre,<strong>”</strong> porque<br />
tiene su propia madre.<br />
Pero sin embargo, todos juntos y aún nuestras madres,<br />
todos, y los hijos, y todos podemos decirle a una, le podemos<br />
decir: “¡Madre mía que Dios te bendiga, que Dios te prospere<br />
en todo; me has alimentado con el Alimento Espiritual, que<br />
mi Padre ha traído a la Casa, para alimentar a todos Sus hijos,<br />
y no me has negado ese Alimento Espiritual. Ya no me estás<br />
dando una botella de leche, porque ya no estamos para leche,<br />
sino para comer comida dura, para comer el Maná escondido,<br />
para comer el Mensaje de gran Voz de Trompeta, la Trompeta<br />
final. ‘Porque no solamente de pan vivirá el hombre, sino de