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“MADRES PORTADORAS DE SIMIENTE DE DIOS.” - XFATBoY

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12<br />

REVERENDO WILLIAM SOTO SANTIAGO<br />

planeta Tierra allá en el Edén, pero Dios dice que no halló<br />

ayuda idónea para el hombre. Todos los animales del campo<br />

tenían su compañera, y cuando vio a Adán, lo vio sólo.<br />

Adán era la única persona, el único ser humano que vivía en<br />

este planeta Tierra, aunque entre los animales del campo hubo<br />

una especie que se parecía mucho al hombre, al ser humano;<br />

y era tan parecido al ser humano que solamente le faltaba una<br />

sola cosa para ser un ser humano: le faltaba el alma.<br />

Y esa especie fue cortada, eliminada. Y hoy en día la ciencia<br />

está buscando esa especie. La ciencia le llama: “El eslabón<br />

perdido,<strong>”</strong> el cual la ciencia coloca entre el hombre y el<br />

chimpancé; o sea, entre el hombre y el animal, el chimpancé.<br />

La ciencia dice que la creación va hacia arriba, comienza en<br />

cierta forma y sigue hasta que llega al chimpancé, y luego de<br />

ahí salta al hombre, pero que entre el chimpancé y el hombre<br />

hay un eslabón perdido, y ese eslabón perdido en la Biblia se<br />

conoce como la serpiente, la cual caminaba erecta, hablaba,<br />

razonaba, y era el animal más inteligente y más astuto de<br />

todos los animales. Y no es raro que la serpiente hablara en<br />

aquel tiempo, porque aún las cotorras hablan en este tiempo.<br />

Así que vea usted, entre las aves hay loros, cotorras que<br />

hablan; y en los animales hubo uno que hablaba, que<br />

razonaba, y que fue el instrumento del enemigo, para<br />

ocasionarles problemas a la raza humana; por lo cual recibió<br />

la maldición divina, despareció esa especie. Ése es el eslabón<br />

perdido que la ciencia está buscando.<br />

Ahora, podemos ver que Dios cuando creó al hombre y<br />

vivía en este planeta Tierra, el hombre en ese cuerpo terrenal,<br />

no tenía una compañera. Y Dios dijo: “No es bueno que el<br />

hombre esté sólo.<strong>”</strong> Y Dios colocó sueño sobre Adán, tomó de<br />

su costado e hizo una compañera para Adán.<br />

Luego en el Programa Divino estaba para Adán y Eva, la<br />

formación de la raza humana a imagen y semejanza divina.<br />

EXTRACTOS<br />

TOMADOS<br />

<strong>DE</strong> DIFERENTES MENSAJES<br />

JESÚS, EL HIJO <strong>DE</strong> <strong>DIOS</strong><br />

13 de Noviembre de 1991 - San José, Costa Rica<br />

Ahora, Juan dice: “Yo no le conocía.<strong>”</strong> ¿No le conocía<br />

cómo? No le conocía como el Cristo, como el Mesías, aunque<br />

fueran primos. Porque algunas veces es muy sorprendente que<br />

uno sabe que es un hijo de Dios, pero no sabemos de nuestra<br />

familia cuántos son hijos de Dios; y de momento se<br />

manifiesta alguna persona de la familia nuestra, como un<br />

creyente en la Palabra, y uno dice: “Yo no lo conocía como<br />

un hijo de Dios, y ahora veo que es un hijo de Dios también.<strong>”</strong><br />

Y eso es algo muy bonito, muy hermoso, ver que en la<br />

familia de uno hay muchos hijos de Dios. Y es un privilegio<br />

muy grande para toda madre tener hijos de Dios aquí en la<br />

Tierra. Nadie quiere tener un hijo del diablo, como lo tuvo la<br />

madre de Judas Iscariote. Toda dama desea tener hijos de<br />

Dios. Por eso deben orar: Primero cuando se enamoran, para<br />

que se enamoren de hijos de Dios; y pedirle a Dios que envíe<br />

en el seno de su hogar, hijos de Dios a nacer en ese hogar.<br />

Vean ustedes, Zacarías y Elisabet oraron, y Dios les envió<br />

un profeta poderoso que le preparó el camino al Señor. Y así<br />

muchas personas han orado, y Dios les ha enviado un hijo de<br />

Dios, en muchos casos un Profeta.<br />

EL ÉXODO HACIA EL REINO MILENIAL<br />

30 de Mayo de 1993 - Cayey, Puerto Rico<br />

Tomo 23, página 130. Vean ustedes, Moisés, ya siendo un<br />

príncipe en el reino del Faraón, en el reino de ese Faraón de<br />

Egipto, con todo y eso Moisés comprendía que él era el<br />

hombre señalado por Dios para el éxodo hacia la tierra

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