S U M A R I O - Llano de Bureba

Asociación Cultural “AMIGOS DE LLANO” página 29
the saints go marchin´in” que posteriormente pasaron a convertirse en grandes
clásicos del jazz en las versiones realizadas por el genial Louis Armstrong.
El estilo de Nueva Orleans se formo por esa combinación de múltiples y
diversos grupos raciales y musicales. Se caracteriza por tres líneas melódicas
que en general son tocada por l corneta (o trompeta), el clarinete y el trombón.
La dirección de los tres corre a cargo del brillante sonido de la corneta apoyada
por los sonidos graves y pesados del trombón. El clarinete teje alrededor de
estos dos sus notas melódicas. Frente a estos tres instrumentos melódicos se
encuentran instrumentos rítmicos como el contrabajo, la tuba, la batería, el
banjo o la guitarra y a veces también el piano.
El ritmo original de Nueva
Orleans todavía se parece mucho a
los ritmos de las marchas europeas.
Todavía no existe en el ritmo
peculiar y “flotante” del jazz, que se
debe a que en cada compás se
acentúa el segundo y el cuarto de
los tiempos, si bien el primero y el
tercero siguen siendo las partes
fuertes.
Como vemos los acentos caen, igual que en la música de marcha, sobre el
primero y el tercer tiempo. Estas antiguas bandas de Nueva Orleans se parecían
a las orquestas y bandas de circo de alrededor de 1900. Su instrumentación y su
función social se remontan directamente a ellas.
En la música de Nueva Orleans se da lo que se conoce con el nombre de
“hot”, que podríamos traducirlo como “caliente”, y es característico de este
estilo un calor en la expresión llevada a su extremo.
La formación de sonidos, la articulación, la entonación, el vibrato, tienen
una gran importancia. Se “toca” el instrumento mas de lo que se “habla” en el
se expresa lo que se siente y lo que es distinto de aquello que siente cualquier
otro.
Hacia 1905 se había hecho famoso en Nueva Orleans el conjunto de Buddy
Bolden, trompetista cuya banda comprendía además del clarinete, el trombón,
guitarra, contrabajo y batería.
Muy próximo en el tiempo adquirió fama la “Céole Jazz Band” dirigida
por el músico de color King Oliver, uno de cuyos integrantes con tan solo 17
años se llamaba Louis Armstrong.
Este estilo, al difundirse como forma musical exitosa, fue cultivada
también por músicos blancos, a partir de la modalidad de “dixie” y luego
continuada por las ciudades de Chicago y Nueva York y posteriormente en
California, de la que daremos cuenta en el capitulo siguiente.