Enero 2013 - El Barrio Villa Pueyrredón

Por Gabriel Morini
La novela del traspaso del
subte tuvo todos los condimentos
del suspenso político, e incluso
un epilogo inesperado,
preanuncio de que el final es
tan abierto como incierto. Luego
de numerosas idas y venidas,
y tras una dura negociación,
la Legislatura porteña
aprobó un paquete de medidas
contenidas en el proyecto de
ley de traspaso en la última
sesión del año.
Acto seguido, se filtró la noticia
de que el alcalde porteño
Mauricio Macri había tomado
la determinación de cerrar la
línea A, en todo su recorrido,
durante el verano. El anuncio
oficial lo confirmó días después:
la traza de la línea que
está al borde de cumplir los
100 años estará paralizada
desde el 12 de enero, hasta el
8 de marzo inclusive.
La tarifa también sufriría modificaciones
para pasar a costar
más de 3,5 pesos por viaje,
cifra algo menor que los 6
pesos con los que alarmó el
jefe de gobierno porteño en
caso de que decida no subsidiar
el pasaje.
El lunes la legisladora del
Frente para la Victoria, María
José Lubertino presentó ante
la Justicia una ampliación de
un recurso de amparo para
que el gobierno de la Ciudad
garantice la continuidad de la
Línea A de subterráneos. En
un comunicado, Lubertino
Página 14 - El Barrio Villa Pueyrredón
El subte ahora sí es porteño
Se aprobó por ley la transferencia de las seis líneas y el Premetro. Macri ordenó el cierre hasta marzo de la línea A para
cambiar los centenarios vagones y disparó la polémica. Posible aumento de tarifa y atribuciones especiales al Ejecutivo
por dos años dentro del paquete que aprobó la Legislatura. Auditoría integral sobre el cumplimiento de Metrovías
abre un signo de interrogación sobre su continuidad. Luces y sombras de un traspaso que duró 365 días de negociación.
manifestó que “con el cierre de
la línea A por tiempo indefinido
se está causando grave
perjuicio a los derechos de los
usuarios de subtes, ello sin
garantizar mínimamente una
prestación supletoria que permita
movilizarse sin que ello
implique un colapso del transporte
público terrestre”. En ese
marco, sostuvo que “distintos
expertos entre ellos directivos
de Metrovías, el ingeniero Raúl
Ávila -Inspector de Higiene e
Ingeniero Civil de SBASE-, Miguel
Bonilla Ruiz - auditor catalán
-, Alejandro Nazar Anchorena
y Edgardo Kutner - ex
presidentes de SBASE - han
manifestado que en ningún
caso es necesario suspender
completamente el servicio de
la línea A”.
Los consultados afirmaron
que el plazo para cambiar la
flota de 55 coches belgas Le
Brugeoise - que datan de 1913
- por formaciones de origen
chino, “sería de unos pocos
días”.
En rigor, se trata de un hecho
inédito que en 99 años de
funcionamiento de la línea no
registra antecedentes. La
judicialización de este aspecto
del traspaso y el costo a futuro
del boleto son dos aspectos
que preanuncian un final
abierto de la saga que comenzó
el 31 de diciembre de 2011,
cuando Macri decidió aceptar
el servicio bajo la órbita porteña,
luego aumentó la tarifa y
al final rechazó que continuara
el proceso de traspaso por
los constantes chispazos con
el gobierno nacional.
Detalles del traspaso.
El proyecto aprobado luego
de febriles negociaciones que
parecían no llegar a buen puerto
hasta el momento mismo de
la sesión, a grandes rasgos
abrió la puerta para la declaración
de “emergencia” del servicio,
y la realización de una
auditoría sobre el cumplimiento
de la concesión actual.
También se conformó un fondo
de financiamiento y un fideicomiso
y se autorizó al Ejecutivo
a contraer deuda por
hasta 300 millones de dólares
para su financiamiento.
Además quedó por escrito
que en caso de huelga el
prestador deberá garantizar
servicios mínimos acordados
entre las partes, con previo aviso
de los trabajadores, con lo
que en definitiva marcó el fin
de los paros sorpresivos.
Se aprobó con 46 votos favorables,
importante cifra que
contó con los apoyos de los
bloques PRO, Nuevo Encuentro,
Frente para la Victoria,
Frente Popular Progresista,
Confianza Pública, UCR, Sindical
Peronista y Bases para
la Unión. Por la negativa, se inclinaron
13 legisladores de los
bloques Buenos Aires para Todos,
Proyecto Sur, MST en
Proyecto Sur y Coalición Cívica.
Pasadas las 4:30 de la ma-
Nuevo coche para la línea ‘‘A’’ de subterráneos fabricado por
la empresa china Shanghai Alstom Transport Corporation
drugada, terminó la votación
en particular.
La ley se propone reestructurar
el sistema de Transporte
Ferroviario de Pasajeros de
Superficie y Subterráneo en la
Ciudad, teniendo como objetivo
“la prestación idónea, eficiente
y de calidad del servicio
público, la puesta en valor
de las líneas ferroviarias de superficie
y subterráneas existentes,
el desarrollo de la infraestructura
ferroviaria así
como la seguridad operativa
en la prestación del servicio
público”.
Esto significa que también se
desechó la primera idea del
macrismo de declararlo “servicio
esencial”, rechazada por trabajadores
y opositores por vulnerar
derechos laborales y por
estar a contra mano de las disposiciones
de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT).
La autoridad de aplicación
bajo quien quedarán las 6 líneas
de subte y el Premetro
será Subterráneos de Buenos
Aires Sociedad de Estado
(SBASE), que tendrá a su cargo
el desarrollo y la administración
del sistema de infraestructura,
su mantenimiento y la gestión
de los sistemas de control
de la operación del servicio.
A su vez, se aclaró que para
fijar las tarifas y los cuadros
tarifarios se deberá convocar
previamente a audiencia pública,
aunque este punto quedó
difuso con la declaración
de emergencia que deja muchas
atribuciones en manos
del Ejecutivo.