10.05.2013 Views

Universidad Católica San Antonio CAPELLANÍA ORACIONAL Libro ...

Universidad Católica San Antonio CAPELLANÍA ORACIONAL Libro ...

Universidad Católica San Antonio CAPELLANÍA ORACIONAL Libro ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Os ruego por la misericordia de Dios. Introduce un nuevo<br />

tipo de petición. ¿Por qué no por la virtud?, ¿por qué no por<br />

la majestad ni por la gloria de Dios, sino por su<br />

misericordia? Porque sólo por ella Pablo se alejó del crimen de<br />

perseguidor y alcanzó la dignidad de tan gran apostolado, como él<br />

mismo confiesa diciendo: Yo, que antes fui blasfemo, perseguidor<br />

y opresor, sin embargo alcancé misericordia de Dios (1 Tim<br />

1, 13). Y de nuevo: verdad es cierta y digna de todo<br />

acatamiento que Jesucristo vino a este mundo para salvar a los<br />

pecadores, de los cuales el primero soy yo. Mas por eso<br />

conseguí misericordia, a fin de que Jesucristo mostrase en mí el<br />

primero su extremada paciencia, para ejemplo y confianza de los<br />

que han de creer en Él, para alcanzar la vida eterna (1 Tim 1, 15-<br />

16).<br />

Os ruego por la misericordia de Dios. Ruega Pablo,<br />

mejor dicho, por medio de Pablo ruega Dios, que prefiere ser<br />

amado a ser temido. Ruega Dios, porque no quiere tanto ser<br />

señor cuanto padre. Ruega Dios con su misericordia para no<br />

castigar con rigor. Escucha al Señor mientras ruega: todo el día<br />

extendí mis manos (Is 65, 2). Y quien extiende sus manos, ¿acaso<br />

no muestra que está rogando? Extendí mis manos. ¿A quién?<br />

Al pueblo. ¿A qué pueblo? No sólo al que no cree, sino al que<br />

se le opone. Extendí mis manos. Distiende los miembros, dilata<br />

sus vísceras, saca el pecho, ofrece el seno, abre su regazo,<br />

para mostrarse como padre con el afecto de tan gran petición.<br />

Escucha también a Dios que ruega en otro lugar: pueblo<br />

mío, ¿qué te he hecho o en qué te he contristado? (Mic 6,<br />

3). ¿Acaso no dice: si la divinidad es desconocida, sea al<br />

menos conocida la humanidad? Ved, ved en mí vuestro<br />

cuerpo, vuestros miembros, vuestras entrañas, vuestros<br />

huesos, vuestra sangre. Y si teméis lo divino, ¿por qué no amáis<br />

al menos lo humano? Si huís del Señor, ¿por qué no<br />

acudís corriendo al padre? Pero quizá os confunde la grandeza de<br />

la Pasión que me hicisteis. No temáis. Esta cruz no es mi<br />

patíbulo, sino patíbulo de la muerte. Esos clavos no me infunden<br />

71

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!