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Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

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Apéndice 443<br />

cuando se escribieron estas fuertes declaraciones y otras más en<br />

1895.<br />

Página 366. Una especie de esclavitud: Véase el Marco Histórico<br />

<strong>para</strong> tener idea de la situación que existía en Battle Creek hacia<br />

mediados de la década de 1890. [530]<br />

Página 373. El Señor está a punto de trastornar las instituciones:<br />

Tal como lo explicamos en el Marco Histórico, algunas instituciones<br />

de Battle Creek estaban administradas por hombres que habían<br />

perdido su consagración. Se envió una amonestación tras otra con el<br />

fin de que cambiaran <strong>los</strong> procedimientos que se seguían. Algunos<br />

miembros de la junta trataron de introducir algunos cambios, sin<br />

mayores resultados. Tampoco hubo una respuesta favorable a la<br />

invitación extendida por la Hna. <strong>White</strong> en ocasión del congreso de<br />

la Asociación General de 1901. Hacia fines de ese año aparecieron<br />

solemnes amonestaciones en un mensaje dirigido a <strong>los</strong> administradores<br />

de la Review and Herald que fue leído en ocasión de la junta<br />

celebrada en noviembre de 1901. Elena G. de <strong>White</strong> escribió:<br />

“Siento terror en el alma al ver hasta qué punto ha llegado nuestra<br />

casa editora”.—Testimonies for the Church 8:91.<br />

En la misma página declara: “Casi he tenido miedo de abrir la<br />

Review, por temor de enterarme de que Dios ha purificado la casa<br />

editora por medio del fuego”.<br />

Trece meses después, el 30 de diciembre de 1902, la editorial<br />

fue destruida por el fuego. Nunca se pudo descubrir la causa, pero<br />

<strong>los</strong> testigos oculares informaron que todo el edificio pareció explotar<br />

en llamas casi instantáneamente. Al enterarse de ese desastre, Elena<br />

G. de <strong>White</strong> escribió: “No me sorprendieron esas tristes noticias,<br />

porque en visiones de la noche vi a un ángel de pie con una espada,<br />

que parecía de fuego, extendida sobre Battle Creek”.—Testimonies<br />

for the Church 8:97.<br />

Página 374. Se acepta el consejo de <strong>los</strong> hombres como si fuera<br />

la voz de Dios: Vea el Marco Histórico <strong>para</strong> informarse acerca de<br />

las circunstancias que prevalecían en Battle Creek hacia mediados<br />

de la década de 1890, cuando <strong>los</strong> hombres buscaban el consejo de<br />

sus semejantes en lugar de procurar el de Dios.<br />

Página 397. El corazón de la obra debilitado por mala administración:<br />

Véase el Marco Histórico <strong>para</strong> evaluar la situación descrita<br />

aquí.

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