10.05.2013 Views

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

La iglesia de Cristo 33<br />

Jesús ve a su verdadera iglesia en la tierra, cuya mayor ambición<br />

consiste en cooperar con él en la grandiosa obra de salvar almas. Oye<br />

sus oraciones presentadas con contrición y poder, y la Omnipotencia<br />

no puede resistir sus ruegos por la salvación de cualquier miembro<br />

probado y tentado del cuerpo de Cristo. “Por tanto, teniendo un<br />

gran sumo sacerdote que traspasó <strong>los</strong> cie<strong>los</strong>, Jesús el Hijo de Dios, [20]<br />

retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote<br />

que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno<br />

que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.<br />

Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, <strong>para</strong> alcanzar<br />

misericordia y hallar gracia <strong>para</strong> el oportuno socorro”. Jesús<br />

vive siempre <strong>para</strong> interceder por nosotros. Por medio de nuestro<br />

Redentor, ¿qué bendiciones no recibirá el verdadero creyente? La<br />

iglesia, que está por entrar en su más severo conflicto, será el objeto<br />

más querido en la tierra <strong>para</strong> Dios. La confederación del mal será<br />

impulsada por un poder de abajo, y Satanás arrojará todo vituperio<br />

posible sobre <strong>los</strong> escogidos, a quienes no puede engañar y alucinar<br />

con sus invenciones y falsedades satánicas. Pero exaltado “por<br />

Príncipe y Salvador, <strong>para</strong> dar a Israel arrepentimiento y perdón de<br />

pecados”, Cristo, nuestro representante y nuestra cabeza, ¿cerrará<br />

su corazón, o retirará su mano, o dejará de cumplir su promesa? No;<br />

nunca, nunca.<br />

Identificado con su iglesia<br />

Dios tiene una iglesia, un pueblo escogido; y si todos pudieran<br />

ver como yo he visto cuán estrechamente Cristo se identifica con su<br />

iglesia, no se oiría un mensaje tal como el que acusa a la iglesia de<br />

ser Babilonia. Dios tiene un pueblo cuyos miembros son colaboradores<br />

con él, y el<strong>los</strong> han avanzado hacia adelante, teniendo la gloria<br />

del Señor en vista. Escuchad la oración de nuestro representante<br />

en el cielo: “Padre, aquel<strong>los</strong> que me has dado, quiero que donde<br />

yo estoy, también el<strong>los</strong> estén conmigo, <strong>para</strong> que vean mi gloria<br />

que me has dado”. ¡Oh, cómo anhelaba la divina Cabeza tener a<br />

su iglesia consigo! Sus hijos tuvieron compañerismo con él en sus<br />

sufrimientos y humillación, y es su mayor gozo tener<strong>los</strong> consigo [21]<br />

<strong>para</strong> que sean participantes de su gloria. Cristo reclama el privilegio<br />

de tener a su iglesia consigo. “Aquel<strong>los</strong> que me has dado, quiero

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!