10.05.2013 Views

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

[424]<br />

356 <strong>Testimonios</strong> <strong>para</strong> <strong>los</strong> <strong>Ministros</strong><br />

Nuestra vida y todas nuestras facultades le pertenecen a él. El cuida<br />

de nosotros en todo momento; él mantiene la maquinaria viva en<br />

acción; si se nos dejara <strong>para</strong> que nosotros la accionáramos durante un<br />

solo instante, moriríamos. Dependemos de Dios en forma absoluta.<br />

Captamos una gran lección cuando comprendemos nuestra relación<br />

con Dios, y su relación con nosotros. Las palabras: “No sois<br />

vuestros” “porque habéis sido comprados por precio” deben grabarse<br />

en nuestra memoria <strong>para</strong> que siempre reconozcamos el derecho que<br />

Dios tiene a nuestros talentos, nuestra propiedad, nuestra influencia,<br />

nuestro yo individual. Hemos de aprender cómo tratar este don de<br />

Dios en mente, alma y cuerpo <strong>para</strong> que, como posesión comprada<br />

por Cristo, le rindamos un servicio sano y fragante.<br />

Sembrando junto a todas las aguas<br />

Debemos sembrar junto a todas las aguas manteniendo nuestras<br />

almas en el amor de Dios, trabajando mientras es de día y utilizando<br />

<strong>los</strong> medios que el Señor nos ha dado <strong>para</strong> realizar cualquier deber<br />

que nos venga a la mano. Cualquier cosa que nuestras manos hallen<br />

que hacer, hemos de hacerla con alegría; cualquier sacrificio<br />

que seamos llamados a realizar, hemos de hacerlo alegremente. Al<br />

sembrar junto a todas las aguas, nos daremos cuenta de que “el que<br />

siembra generosamente, generosamente también segará”.<br />

“Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni<br />

por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y poderoso es<br />

Dios <strong>para</strong> hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que,<br />

teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis <strong>para</strong><br />

toda buena obra”. No retrocedáis después que el Espíritu Santo ha<br />

sugerido a vuestra mente cuál es vuestro deber. Poned en práctica la<br />

decisión, porque ha sido puesta por el Señor. “Y si retrocediere, no<br />

agradará a mi alma”.<br />

Significa mucho sembrar junto a todas las aguas; significa impartir<br />

constantemente dones y ofrendas. Dios proporcionará facilidades<br />

de manera que el mayordomo fiel de <strong>los</strong> medios que él confió sea<br />

provisto con lo suficiente en todas las cosas y pueda abundar <strong>para</strong><br />

toda buena obra.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!