10.05.2013 Views

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

Testimonios para los Ministros (1979) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Métodos, principios y motivos correctos 213<br />

a enorme presión debido al estudio de las ciencias. Esos hombres<br />

derribarán las ideas equivocadas que han prevalecido con respecto al [245]<br />

trabajo manual. Se ejercerá influencia, no por medio de arengas estentóreas,<br />

sino gracias a la verdadera transmisión de ideas. Veremos<br />

agricultores que no serán vulgares, ni toscos ni negligentes, que no<br />

serán descuidados en su vestimenta y en el aspecto de sus casas; por<br />

el contrario, arreglarán con buen gusto sus viviendas campesinas.<br />

Las habitaciones serán asoleadas y atractivas. No veremos cie<strong>los</strong><br />

rasos ennegrecidos, cubiertos de lienzos llenos de polvo y suciedad.<br />

La ciencia, el genio, la inteligencia, se manifestarán en el hogar.<br />

El cultivo de la tierra será considerado elevado y ennoblecedor. Se<br />

manifestará la religión pura y práctica al tratar la tierra como un<br />

tesoro divino. Cuanto más inteligente sea un hombre, tanto más debe<br />

irradiar de él la influencia religiosa. Y el Señor quiere que tratemos<br />

la tierra como un tesoro precioso que se nos ha confiado. *<br />

Menos del yo<br />

Granville, Australia,<br />

13 de septiembre de 1895<br />

Nuestros pastores ciertamente tienen que cambiar. En su corazón<br />

y en su carácter debe haber más de Cristo y menos del yo. Debemos<br />

ser representantes de nuestro Señor. Los que han tenido gran luz y<br />

preciosas oportunidades son responsables ante Dios, quien ha dado a<br />

cada hombre su obra. Nunca han de traicionar el sagrado cometido,<br />

sino que ciertamente han de ser la luz del mundo.<br />

“En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado<br />

a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en<br />

propiciación por nuestros pecados”. Aquí hay una declaración que<br />

define el propósito del Señor hacia un pueblo corrompido e idólatra.<br />

“¿Cómo podré abandonarte, oh Efraín? ¿Te entregaré yo, Israel?<br />

¿Cómo podré hacerte como Adma, o ponerte como a Zeboim? Mi [246]<br />

corazón se conmueve dentro de mí, se inflama toda mi compasión”.<br />

¿Tendrá que abandonar Dios a un pueblo, en favor del cual ha hecho<br />

algo tan grande, a saber, dar a su Hijo unigénito, la expresa imagen<br />

de sí mismo? Dios permite que su Hijo sea entregado por nuestras<br />

* [Estudio adicional: Fundamentals of Christian Education.]

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!