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48 PRIMERA PARTE.
Las hojas de las moreras silvestres presentan el inconveniente
de secarse fácilmente atendida su poca consistencia;
no obstante que los gusanos la comen dejando menos
residuos en sus lechos y excrementos.
La opinion generalmente admitida es la de hacer la
multiplicación de las moreras por medio de plantíos de
estacas de las madres plantas ingertadas, las cuales no
necesitarían esta aplicación, cuyo resultado es más breve
é inmediato con su pronta producción.
Los ingertos deben proceder de plantas robustas, de
partes del año anterior, y de las mejores especies que
quieran reproducirse.
Como hemos dicho, el ingerto comunica sus modificaciones
á la parte superior, debido á la savia ascendente
que trasforma en igual propiedad á las ramas por donde
circula, y les da la vida.
Los ingertos se verifican en nuestros climas en Marzo
al despertarse la circulación en las plantas, ó en Setiembre
cuando se adormece. Los que se efectúan en la primera
época ofrecen la ventaja de obtenerse el desarrollo
de la planta con los resultados consiguientes dentro de
un mes ó dos, mientras que los que se ejecutan en la
segunda no pueden notarse hasta la primavera próxima.
Algunas veces los ingertos por no estar bien aplicados
no producen sus efectos, así es que es necesario repetirlos.
El modo de efectuar los ingertos varía según las circunstancias
de los individuos; pero los más esenciales son
por aproximación, por escudete, por corona y por púa ó
hendidura.
El ingerto por aproximación se consigue haciendo una
sección ó corte en el tronco ó rama de ambas plantas
que se encuentran plantadas á corta distancia, que per-