Biologia oral 6-Parte 1 - Facultad de Odontología
Biologia oral 6-Parte 1 - Facultad de Odontología Biologia oral 6-Parte 1 - Facultad de Odontología
Proteínas que carecen de estructura. Dra. Nuria Sánchez sólo una o unas cuantas tienen actividad biológica; estas son las configuraciones nativas. Muchas proteínas no tienen estructuras regulares obvias. Como consecuencia, estas proteínas suelen describirse como poseedoras de largos segmentos de estructura aleatoria. El término aleatorio en realidad es un nombre inapropiado, debido a que la misma estructura aleatoria se encuentra de manera repetitiva en las conformaciones nativas de todas las moléculas de una proteína dada, y esta conformación aleatoria pero perfectamente repetitiva es necesaria para su funcionamiento adecuado” [2]. La descripción anterior nuevamente hace referencia a la relación que hay entre la estructura y la función de las proteínas, sin embargo deja entrever que existen proteínas que contienen segmentos carentes de estructura que son funcionales y más aún, que ese estado desestructurado es su forma nativa. Aunque no ahonda más en el tema, abre la posibilidad a la existencia de proteínas o fragmentos dentro de ellas funcionales que son intrínsecamente desordenados. En las últimas dos décadas se ha acumulado una gran cantidad de evidencia que sugiere la existencia de muchas proteínas que contrario a los dogmas que han dominado el campo de las proteínas, carecen de estructura en su estado nativo y así es como son funcionales. Muchos nombres se han utilizado para describir a este tipo de proteínas: nativamente desestructuradas o desplegadas e intrínsecamente desordenadas. El escrito que se presenta a continuación busca introducir al lector a una parte no tan conocida de las proteínas y que trata sobre las proteínas carentes de estructura, sus 20
Proteínas que carecen de estructura. Dra. Nuria Sánchez características, funciones e importancia. A lo largo del texto nos referiremos a ellas como proteínas intrínsecamente desordenadas. Las proteínas intrínsecamente desordenadas Durante años la idea de que la estructura es un prerrequisito para la función de las proteínas ha dominado el conocimiento en el área de Bioquímica. Sin embargo, en los últimos veinte años, éste paradigma estructura-función ha sido revaluado debido a las múltiples evidencias que sugieren que un gran número de proteínas carecen de estructura en su forma funcional. Éstas proteínas se conocen como proteínas “nativamente desplegadas” o “intrínsicamente desordenadas”. Aproximadamente entre el 40% y el 60% del proteoma de eucariontes contiene tramos carentes de estructura de 40 residuos consecutivos o más. En comparación con las enzimas cuya actividad va de la mano junto con su estructura, las proteínas “intrínsicamente carentes de estructura”, no tienen estructura terciaria en su forma nativa, más sin embargo llevan a cabo funciones tan importantes como el control del ciclo celular, regulación de la transcripción y la traducción, y la modulación y/o ensamblaje de otras proteínas. Por lo que pensar que una proteína es funcional cuando se encuentra plegada y por ende estructurada, es sólo una cara de la moneda. El término “nativamente desnaturalizada” fue introducido en 1994 [3] para enfatizar las diferencias entre la proteína Tau que se comporta anómalamente flexible con las proteínas globulares que contienen estructura terciaria rígidas y que hasta entonces eran consideradas como “normales”. Dos años más tarde surgió el 21
- Page 2 and 3: Este disco compacto contiene la ver
- Page 4 and 5: Inicio Contenido Introducción Pone
- Page 6 and 7: 1 2 3 4 5 6 7 Inicio Contenido Intr
- Page 8 and 9: Odontología y Obesidad. Dr. Javier
- Page 10 and 11: Odontología y Obesidad. Dr. Javier
- Page 12 and 13: Odontología y Obesidad. Dr. Javier
- Page 14 and 15: Odontología y Obesidad. Dr. Javier
- Page 16 and 17: Odontología y Obesidad. Dr. Javier
- Page 18 and 19: BIBLIOGRAFÍA. Odontología y Obesi
- Page 20 and 21: Inicio Contenido Introducción Pone
- Page 24 and 25: Proteínas que carecen de estructur
- Page 26 and 27: Proteínas que carecen de estructur
- Page 28 and 29: Proteínas que carecen de estructur
- Page 30 and 31: Proteínas que carecen de estructur
- Page 32 and 33: Proteínas que carecen de estructur
- Page 34 and 35: Proteínas que carecen de estructur
- Page 36 and 37: Proteínas que carecen de estructur
- Page 38 and 39: Proteínas que carecen de estructur
- Page 40 and 41: Proteínas que carecen de estructur
- Page 42 and 43: Proteínas que carecen de estructur
- Page 44 and 45: Proteínas que carecen de estructur
- Page 46 and 47: Proteínas que carecen de estructur
- Page 48 and 49: Proteínas que carecen de estructur
- Page 50 and 51: Proteínas que carecen de estructur
- Page 52 and 53: Proteínas que carecen de estructur
- Page 54 and 55: Proteínas que carecen de estructur
- Page 56 and 57: Resumen Adhesión e integridad del
- Page 58 and 59: Adhesión e integridad del esmalte
- Page 61 and 62: Adhesión e integridad del esmalte
- Page 63 and 64: Adhesión e integridad del esmalte
- Page 65 and 66: Adhesión e integridad del esmalte
- Page 67 and 68: Adhesión e integridad del esmalte
- Page 69 and 70: Conclusiones Adhesión e integridad
- Page 71 and 72: Adhesión e integridad del esmalte
Proteínas que carecen <strong>de</strong> estructura. Dra. Nuria Sánchez<br />
características, funciones e importancia. A lo largo <strong>de</strong>l texto nos referiremos a ellas<br />
como proteínas intrínsecamente <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nadas.<br />
Las proteínas intrínsecamente <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nadas<br />
Durante años la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que la estructura es un prerrequisito para la función<br />
<strong>de</strong> las proteínas ha dominado el conocimiento en el área <strong>de</strong> Bioquímica. Sin<br />
embargo, en los últimos veinte años, éste paradigma estructura-función ha sido<br />
revaluado <strong>de</strong>bido a las múltiples evi<strong>de</strong>ncias que sugieren que un gran número <strong>de</strong><br />
proteínas carecen <strong>de</strong> estructura en su forma funcional. Éstas proteínas se conocen<br />
como proteínas “nativamente <strong>de</strong>splegadas” o “intrínsicamente <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>nadas”.<br />
Aproximadamente entre el 40% y el 60% <strong>de</strong>l proteoma <strong>de</strong> eucariontes contiene<br />
tramos carentes <strong>de</strong> estructura <strong>de</strong> 40 residuos consecutivos o más. En comparación<br />
con las enzimas cuya actividad va <strong>de</strong> la mano junto con su estructura, las proteínas<br />
“intrínsicamente carentes <strong>de</strong> estructura”, no tienen estructura terciaria en su forma<br />
nativa, más sin embargo llevan a cabo funciones tan importantes como el control<br />
<strong>de</strong>l ciclo celular, regulación <strong>de</strong> la transcripción y la traducción, y la modulación y/o<br />
ensamblaje <strong>de</strong> otras proteínas. Por lo que pensar que una proteína es funcional<br />
cuando se encuentra plegada y por en<strong>de</strong> estructurada, es sólo una cara <strong>de</strong> la<br />
moneda.<br />
El término “nativamente <strong>de</strong>snaturalizada” fue introducido en 1994 [3] para<br />
enfatizar las diferencias entre la proteína Tau que se comporta anómalamente<br />
flexible con las proteínas globulares que contienen estructura terciaria rígidas y que<br />
hasta entonces eran consi<strong>de</strong>radas como “normales”. Dos años más tar<strong>de</strong> surgió el<br />
21