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Opinar Nº 77 - Avisaletras.com - | Rosina Guardia

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OPIN OPINAR OPIN AR<br />

Escándalo mundial<br />

Y la seguridad de los datos?<br />

Lo novedoso y escandaloso de la<br />

información proporcionada al mundo<br />

por Wikileks bajo la responsabilidad<br />

personal de Julian Assange debiera<br />

hacer pensar a las Cancillerías y las<br />

policías secretas de todos los<br />

continentes acerca de cómo se logró<br />

penetrar, acumular y difundir<br />

libremente los millones de<br />

informaciones y datos confidenciales<br />

que se podrán ventilar todavía por<br />

algún tiempo ya que su intención<br />

manifestada es que en breve<br />

aparecerán más documentos<br />

secretos y “ de varios países”<br />

Aún cuando el hecho de asignar a una<br />

sola persona el hecho de la<br />

apropiación indebida de la totalidad<br />

de esos archivos pueda presentarse<br />

<strong>com</strong>o un único elemento causante de<br />

esta debacle teleinformativa , al<br />

periodista le causa extrañeza que en<br />

todos los casos hayan dejado de<br />

funcionar los imprescindibles<br />

elementos de Seguridad<br />

Computacional que deben regir en<br />

estos casos y que se suelen<br />

desarrollar de infinitas maneras por<br />

parte de los profesionales de alto nivel<br />

responsables de los sistemas y redes<br />

de <strong>com</strong>unicación .<br />

Las multinacionales y toda empresa<br />

que maneje informaciones sujetas a<br />

protección poseen sistemas de mayor<br />

o menor <strong>com</strong>plejidad para todos los<br />

casos “secretos” que se requieran y<br />

no conocemos en la industria fiascos<br />

de esta magnitud. Tampoco es<br />

admisible que los responsables de<br />

mantener confidencialidad en<br />

embajadas y consulados de la gran<br />

cantidad de sedes diplomáticas<br />

involucradas en el escándalo hayan<br />

podido en tal cantidad dejarse penetrar<br />

y liberar lo que no debiera ser<br />

divulgado.<br />

Lo novedoso y escandaloso de la<br />

información proporcionada al mundo<br />

por Wikileks bajo la responsabilidad<br />

personal del periodista Julian Assange<br />

debiera hacer pensar a las<br />

Cancillerías y las policías secretas de<br />

todos los continentes acerca de cómo<br />

se logró penetrar , acumular y difundir<br />

libremente los millones de<br />

informaciones y datos confidenciales<br />

que se podrán ventilar todavía por<br />

algún tiempo ya que su intención<br />

manifestada es que en breve<br />

aparecerán más documentos<br />

secretos y “ de varios países”<br />

Las filtraciones hechas por Wikileaks<br />

de los Diarios de la guerra de<br />

Afganistán (Afghanistan War log) y de<br />

los Registros de la Guerra de Iraq (Iraq<br />

War Logs), denunciando delitos<br />

consentidos por el Pentágono, han<br />

supuesto para Assange una rigurosa<br />

presión mediática, diplomática y legal.<br />

Assange, <strong>com</strong>o cabeza visible de<br />

WikiLeaks, se ha convertido en la nueva<br />

imagen del periodista <strong>com</strong>bativo, al<br />

mostrar las infracciones de la guerra<br />

contra el terrorismo emprendida por el<br />

gobierno de los Estados Unidos y sus<br />

aliados. El Pentágono ha dispuesto un<br />

equipo de 120 personas para frenar los<br />

efectos de sus filtraciones<br />

argumentando que las filtraciones de<br />

WikiLeaks ponen en peligro la vida de<br />

muchas personas.<br />

Sin embargo, el periodista que ha<br />

dejado su puesto de principal a su<br />

asistente Kristinn Hrafnsson , se<br />

vanagloria de su proyecto : “ No es algo<br />

para demostrar lo exitosos que somos,<br />

más bien, eso te muestra el alarmante<br />

estado del resto de los medios de<br />

<strong>com</strong>unicación. ¿Cómo es que un<br />

equipo de cinco personas ha llegado a<br />

mostrarle al público la información más<br />

reprimida, a ese nivel, que el resto de<br />

la prensa mundial junta? Es<br />

vergonzoso.”<br />

Igualmente ha dicho que “A diferencia<br />

de Dinamarca y el Reino Unido,<br />

Estados Unidos no ha abierto ni una<br />

sola investigación, en cambio hace una<br />

investigación en forma agresiva contra<br />

nuestra organización con amenazas<br />

públicas y la petición, que no hemos<br />

aceptado, de que destruyamos todos<br />

los documentos que poseemos. Si<br />

quiere ser visto <strong>com</strong>o un país creíble y<br />

respetuoso de las leyes y de los<br />

derechos humanos debe investigar las<br />

posibles violaciones.”<br />

En mi condición de sistematizador, me<br />

hago exactamente la misma pregunta<br />

del <strong>com</strong>ienzo de sus declaraciones. El<br />

tema técnico no parece llamar la<br />

atención. Aun cuando el hecho –<br />

absolutamente hipotético -de asignar a<br />

una sola persona la apropiación<br />

indebida de la totalidad de esos<br />

archivos pueda presentarse <strong>com</strong>o un<br />

único elemento causante de esta<br />

debacle tele informativa, debiera causar<br />

extrañeza que en todos los casos<br />

hayan dejado de funcionar los<br />

Rubens ARIZMENDI<br />

Doctor en Sistemas de Información<br />

Periodista<br />

imprescindibles elementos de<br />

Seguridad Computacional que deben<br />

regir en estos casos y que se suelen<br />

desarrollar de infinitas maneras por<br />

parte de los profesionales de alto nivel<br />

y muy bien pagados responsables de<br />

los sistemas y redes de <strong>com</strong>unicación<br />

.<br />

Libertad de prensa y seguridad<br />

nacional<br />

Las multinacionales y toda empresa que<br />

maneje informaciones sujetas a<br />

protección poseen sistemas de mayor<br />

o menor <strong>com</strong>plejidad para todos los<br />

casos “secretos” que se requieran y no<br />

conocemos en la industria fiascos de<br />

esta magnitud. Tampoco es admisible<br />

que los responsables de mantener<br />

confidencialidad en embajadas y<br />

consulados de la gran cantidad de<br />

sedes diplomáticas involucradas en el<br />

escándalo hayan podido en tal cantidad<br />

dejarse penetrar y liberar lo que no<br />

debiera ser divulgado.<br />

Este episodio de filtración de<br />

información clasificada pone sobre la<br />

mesa la difícil cuestión sobre qué debe<br />

prevalecer: ¿la libertad de prensa o la<br />

seguridad nacional?<br />

Diferentes teóricos políticos han<br />

abordado este asunto, entre ellos el ex<br />

decano de la Facultad de Leyes de la<br />

Universidad de Chicago, Geoffrey R.<br />

Stone. En un artículo titulado Freedom<br />

of the press v. National Security , el Dr.<br />

Stone plantea tres categorías de<br />

secretos de un gobierno: en primer lugar<br />

menciona a los «secretos ilegítimos de<br />

gobierno».<br />

Este tipo de secretos tiene que ver con<br />

la in<strong>com</strong>petencia, mala conducta,<br />

corrupción y criminalidad de algunos<br />

gobernantes. Conviene que este tipo de<br />

secretos sean revelados por la prensa<br />

puesto que controlan los desmanes de<br />

quienes ejercen el poder, redundando<br />

así en el bien <strong>com</strong>ún. En segundo lugar<br />

están «los secretos legítimos y de<br />

interés periodístico», esta categoría se<br />

refiere a las cuestiones que pueden<br />

perjudicar la seguridad nacional pero<br />

que, a su vez, pueden ser útiles a la<br />

ciudadanía, de manera que es difícil<br />

escoger si publicarlos o no.<br />

Finalmente, están los «secretos<br />

legítimos sin ningún interés<br />

periodístico». Estos secretos<br />

perjudican la seguridad nacional sin<br />

beneficiar, de manera alguna, a la<br />

ciudadanía.<br />

De los tres tipos de secretos de<br />

gobierno expuestos, los más difíciles<br />

de manejar son «los legítimos y de<br />

interés periodístico», debido a que<br />

ponen sobre la balanza la Seguridad<br />

nacional pero al tiempo el interés de<br />

la ciudadanía. Una pregunta que<br />

puede ayudar a resolver esta situación<br />

es ¿a quién beneficia más la<br />

publicación de documentos secretos<br />

de un gobierno, a la sociedad o al<br />

adversario -sea político o militar-?<br />

La prensa puede hacerle un inmenso<br />

bien a la sociedad, informando,<br />

generando reflexión y haciendo<br />

contrapeso a los poderes políticos y<br />

económicos, pero es cierto también<br />

que una prensa mal orientada puede,<br />

de igual manera, hacer daño por<br />

medio de la desinformación y<br />

manipulación del conocimiento.<br />

Siendo esto así, es cada vez más<br />

necesaria una ética periodística<br />

afinada y con mayor<br />

institucionalización de los contenidos<br />

publicados por los medios. Ahora bien,<br />

¿quién debe institucionalizar? Al ser<br />

los medios de <strong>com</strong>unicación un poder<br />

en la sociedad, debe haber una<br />

institucionalidad que busque que la<br />

información que éstos suministren sea<br />

verídica y beneficiosa para la<br />

<strong>com</strong>unidad y que, además, no ponga<br />

en peligro la existencia del Estado.<br />

Esta regulación de los medios debe<br />

provenir de la sociedad y no del<br />

gobierno, puesto que la libertad de<br />

prensa es un rasgo intrínseco de las<br />

sociedades liberales, su limitación<br />

puede generar más perjuicios que<br />

beneficios debido a que lo que en un<br />

principio puede ser limitado arguyendo<br />

la seguridad nacional, puede<br />

eventualmente escalar y resultar en<br />

la censura.<br />

Casos de filtración de información<br />

<strong>com</strong>o lo sucedido con Wikileaks son<br />

atípicos. Posiblemente el ejército<br />

americano sufra las consecuencias de<br />

estas filtraciones, no obstante la<br />

sanción de las consecuencias de esta<br />

publicación deben provenir de la<br />

sociedad y no del gobierno.<br />

Aunque ésta no es la situación más<br />

deseada, es mejor elegir el menor de<br />

dos males y, por lo tanto, conservar<br />

los principios democráticos y, a su<br />

vez, la libertad de prensa.<br />

OPINAR «La fuerza de las ideas» <strong>Nº</strong> <strong>77</strong>- 16 de diciembre de 2010 EDICION EDICION DIGIT DIGITAL DIGIT DIGIT AL OPINAR

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