EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

Capítulo 17. Modus operandi
Desde el inicio del conflicto y la ocupación marroquí del Sáhara Occidental, las violaciones
de derechos humanos cometidas contra la población saharaui han seguido diferentes
patrones de actuación. En ellos puede verse el modus operandi de régimen, especialmente
de sus fuerzas militares y policiales, con el objetivo de controlar el territorio y la población
saharaui considerada como enemigo o que reivindica la autodeterminación.
Un patrón se define por la continuidad y similitud de un conjunto de acciones que tienen
un objetivo o finalidad determinado, y para los que se disponen los medios necesarios
para llevarlos a cabo. Un patrón señala también que existe una cadena de mando y de
responsabilidad de las autoridades, y que las violaciones no obedecen a acciones aisladas
o actitudes de algunos perpetradores. En este capítulo se analizan estas tendencias y los
mecanismos que han hecho posible, a gran escala, las violaciones de derechos humanos
en el Sáhara Occidental.
Las formas de la violencia contra la población civil saharaui
Las diferentes formas de actuación se caracterizaron por el uso extensivo del terror y la
militarización, como los operativos en el desierto y bombardeos contra la población civil
en los primeros meses y en la práctica de la desaparición forzada durante los primeros
dieciséis años.
Sembraron el terror dentro de las familias y en la sociedad en general. En ese
periodo no se podía hablar, ni siquiera levantar el ojo hacia un policía en la calle
o un colono. Baschir Azman Hussein.
Desde la misma época de la ocupación hasta la actualidad, uno de los mecanismos de
control de la situación en el Sáhara Occidental ha sido imponer una representación de la
realidad acorde a los intereses del régimen. En este sentido, la negación de la existencia
de violaciones de derechos humanos masivas como las desapariciones forzadas, caracterizó
al régimen de Hassan II. Posteriormente, las autoridades marroquíes han tratado
también de controlar dicha representación de la realidad, imponiendo el lenguaje en el
que se puede hablar. Desde 1975 hasta la actualidad, esta imposición de su versión de
la historia ha caracterizado la política nacional o internacional de Marruecos respecto al
Sáhara Occidental, pero también los mensajes y coacciones en el contexto de detenciones
arbitrarias o torturas.
Me preguntaron “por qué dices en tu carta el Sáhara ocupado, no tienes que decir
eso”, yo dije “sí es ocupado”. Me llevaron a comisaría, eso fue el día después de
acabar con Gdeim Izik. Cuando estaba en la comisaría trajeron muchos saharauis,
entraron a otras celdas ¿Por qué me cogieron, si yo solo tenía una hoja?
Leili Salka.
En todas estas décadas, las detenciones de población civil se han dado en general con el
mismo motivo, el interrogatorio sobre los mismos temas, y criminalizando a los detenidos
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