EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

Capítulo 14. La Intifada de 2005
omoplato, ya que estaba en el piso y me pusieron una inyección que no sé lo que
era, sentí mareos y me enviaron al hospital. Allí me pusieron inyecciones, oxígeno
y la receta médica se la dieron a mi madre. Un familiar que trabaja en el hospital
avisó a mi familia. Tenía la puerta vigilada por un guardia. Abdelaziz Day.
Durante la Intifada y en movilizaciones posteriores, se han producido numerosas agresiones
contra manifestaciones pacíficas 284 , con un uso excesivo de la fuerza, sin ninguna
consideración por la vida o la salud de los manifestantes, así como asaltos o allanamientos
de casas saharauis sin orden judicial alrededor de dichas movilizaciones, y hostigamientos
a personas detenidas en otras ocasiones, consideradas por el régimen marroquí como
sospechosas de estar detrás de las movilizaciones.
Había policías civiles pero como no los conocía seguí gritando. De repente me cogen
por el pelo y empezaron a darme golpes por todas las partes y al riñón y, como
me había operado el riñón en el año 2005, a raíz de las palizas que me dieron se
me infectó. Estuve muchos meses enferma, sin poder hacer nada, y tuvieron que
llevarme a Agadir y operarme. Me extirparon el riñón porque estaba muy dañado,
ahora estoy con un solo un riñón y tengo hacer un control cada seis meses. Dahba
El Joumani.
El siguiente caso es de una persona que fue detenida por cuarta vez en 2005 en su casa
y en compañía de su hermano menor, que resultó muy afectado psicológicamente por la
detención y por la tortura física, según refiere.
En el 2005, cuando se inició la Intifada por la independencia, fui detenido una
vez más en la ciudad de Dajla ocupada. Tras irrumpir en mi casa y torturarme
de la peor forma posible, tanto física como psicológicamente, detuvieron también
a mi hermano pequeño, Jalihena Awlad Cheij. Tuvieron muchas dificultades para
detenerlo debido a su gran fortaleza y tamaño. Tuvieron que llamar a refuerzos de
policías, fuerzas de intervención y gendarmería. Y todo por su participación en las
manifestaciones pacíficas en la ciudad de Dajla. Cuando consiguieron reducirle y
golpearlo mucho, lo llevaron al hospital. Fuimos a verle al hospital y le encontramos
inconsciente. Después de tres meses empezó a pronunciar palabras sin sentido
y ahora está como loco del todo. Ha perdido la razón. Toma muchos medicamentos
de los que no puede prescindir y que alivian su sufrimiento. Mahjub Awlad Cheij.
284 Por ejemplo, Hammadi Ezaibour fue golpeado con porras por fuerzas policiales el día 25 de mayo en una
sentada pacífica entre la Avda. de Smara y la de Mezouar del Aaiún, en el marco de la Intifada de 2005,
quedando inconsciente. Presentó una fractura de su rótula derecha. Hospitalizado hasta superar el coma
traumático, padece desde entonces con una epilepsia residual con crisis convulsivas muy frecuentes que le
impiden realizar una vida laboral y social llevadera. Hammadi mostró en su testimonio varios documentos
que mostraban el impacto. Certificado de confirmación de un ingreso hospitalario, el 26 de mayo de 2005
donde se establece que padecía traumatismo craneal, traumatismo de rodilla derecha, fractura de rótula, herida
en la frente. Certificado emitido por médico de prisiones del Aaiún de mayo de 2008 sobre el detenido
con número de inscripción en prisión 30291 donde establece relación entre el traumatismo de 2005 con la
epilepsia que padece. MARTÍNEZ, A. e HIDALGO, M.A. (2012), op cit.
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