EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

Capítulo 13. Tortura en las detenciones arbitrarias
Tinduf, y en el siguiente testimonio en 2001, en ocasión de las manifestaciones tras la liberación
del preso saharaui más antiguo después de veinticuatro años de prisión Sidi Mohamed
Daddach. Ahmed Salem permaneció en esta segunda ocasión dos años detenido.
Los tipos de tortura eran estos: utilización de electricidad en el cuerpo, los golpes,
el colgamiento, amenazas de muerte, utilización de animales, no puedes imaginar
el daño y el dolor, éramos todavía pequeños, no adultos. Pasamos un año en dicha
situación. Tuvimos los ojos vendados seis meses completos. Mientras que el sufrimiento
de la privación de alimentos, duró todo el año. Ahmed Salem Mohamed
Saleh Hamadi.
Insultos, blasfemias, y nos obligaron a poner nuestras huellas y firmar informes
falsos que indican que teníamos relación con el Frente POLISARIO y que somos
auxiliadores de Sidi Mohamed Daddach. Para hablar de los tipos de torturas,
recuerdo los colgamientos, la utilización de electricidad sobre nuestros cuerpos,
vendajes de ojos… A las 2h de la madrugada nos llevaron a otro lugar llamado
PCCMI, en una bodega, donde nos torturaron mucho. La asfixia por inversión de
agua, golpes, colgamientos, privación de sueño y la mala alimentación. Ahmed
Salem Mohamed Saleh Hamadi.
A pesar de que después de la liberación de numerosos desaparecidos y la firma del Alto el
Fuego entre el régimen marroquí y el Frente POLISARIO en 1991, se presumía que las
cosas para los saharauis tendrían que cambiar, las detenciones arbitrarias, sin orden judicial
y la práctica de torturas y malos tratos contra personas detenidas acusadas de apoyar
al Frente POLISARIO o reivindicar el derecho de autodeterminación, siguieron dándose
de forma muy amplia.
Me vendaron los ojos con un trozo de pantalón que estaba mojado con orines de
persona; me lo pusieron, yo ya sabía que la historia era otra. Nos echaron agua a
los tres, encendieron el ventilador y nos dejaron allí. Nos quedamos allí una hora
más o menos. Nos llevaron en un furgón de la policía. Cuando llegamos ya había
una multitud de policía antidisturbios que nos empezó a pegar por todos lados,
era una oscuridad total, no veíamos nada. Nos pusieron frente a la pared de rodillas
y nos daban por todos lados, sin preguntarnos nada… Constantemente nos
estaban pegando para impedir que durmiéramos. Mrabbih Battah.
La represión fue particularmente directa contra las mujeres que participaron en numerosas
manifestaciones pacíficas en las calles, como en este caso las primeras manifestaciones
en 1992 en el aniversario de la llegada de la MINURSO al Sáhara Occidental.
A las seis entra una persona y pregunta: “¿Dónde está Fatah?”, y me llevó. Me
cogió por el brazo y me llevó a un sitio que no sabía dónde estaba porque no veía
nada, era un sitio abierto, podía ver debajo de la venda un chándal y zapatos de
deporte blanco. Luego me golpeó mucho sin parar, sobre todo el cuerpo, la cabeza,
la espalda, el más fuerte fue el golpe detrás de la cabeza, la parte de ese golpe
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