EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

El oasis de la memoria
y desapariciones temporales fue el desnudo forzado en al menos una de cada cuatro personas
detenidas (26,79%), práctica que se ha utilizado tanto en las detenciones de mujeres
como de hombres.
Modalidades de utilización de la tortura
La tortura se aplicó en los casos de detenciones arbitrarias y detenidos desaparecidos de
cuatro maneras diferentes: a) una tortura inicial destinada a producir “ablandamiento”, que
en numerosas ocasiones comenzaba al momento de la captura, b) la tortura utilizada durante
los interrogatorios, c) la tortura como parte del maltrato habitual durante todo el periodo
de captura y custodia en condiciones clandestinas, d) además, cada una de estas formas de
tortura fue acompañada de otras maneras de maltrato físico y psicológico basadas en la aplicación
de condiciones infrahumanas y degradantes durante todo el periodo de detención.
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A nuestra llegada, otra vez más la sesión de tortura para aterrorizar a la gente,
como si fuera un desayuno de bienvenida. Pero por lo menos allí, el patio era más
amplio y las celdas eran más grandes. Trasladaron con nosotros al grupo de Casablanca
pero nunca les vimos, hablábamos con ellos a través de los muros, pero
no nos vimos hasta cinco años después. Brahim Ballagh.
a) La tortura orientada a producir una ruptura de las defensas psicológicas y la creación
de un estado de dolor e indefensión
La mayor parte de los testimonios de personas detenidas desaparecidas, incluyen
distintas formas de maltrato desde el mismo momento de la captura. Antes de
buscar algún tipo de información, y como una forma de poner a la persona en una
situación de total indefensión, la mayor parte de las personas detenidas recibieron
golpes en distintas partes del cuerpo, eran vendados, esposados, insultados, y sus
ropas quitadas como una forma de entrar en un nuevo mundo de sufrimiento y
control por parte de sus captores.
Para el traslado a Kalaat M’gouna nos entregaron a un capitán de las fuerzas
auxiliares. Fue en el verano de 1982. Fue terrible. Comenzaron como si
fuéramos un ganado de vacas, nos comenzaron a pegar con cuerdas y con los
fusiles, nos pegaban en la cabeza, en el tórax y en las piernas, nos insultaban y
humillaban, nos quitaron la ropa y nos dieron otra vieja que olía muy mal. Nos
ataron en las sillas de un camión, teníamos que agachar la cabeza, y si algunos
se quejaban de algún golpe los golpeaban más. Entre el aeropuerto de Taurir
a Kalaat M’gouna fueron cinco horas de camino. Subimos muy alto, era una
montaña. Nos metieron en una habitación de 4 x 4, hasta que un día vino el jefe
de esa gente, nos comenzó a pegar y a interrogarnos. Nos dijo que aquí el único
derecho que tienen es la muerte. Naama Eluali.
Una situación de impotencia y subordinación total, en la que cabía imaginar cualquier
destino, y sus captores hacían exhibición de su capacidad de producir dolor y desprecio.