10.05.2013 Views

EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

EL OASIS DE LA MEMORIA - Publicaciones

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

El oasis de la memoria<br />

Todos los testigos describieron el sobrevuelo de aviones y bombardeo con impacto en<br />

jaimas, coches y edificaciones donde se encontraba población civil.<br />

152<br />

Recuerdo que en el bombardeo había unas mujeres que estaban conmigo debajo<br />

de un árbol que nos servía como cobijo. En la madrugada hemos encendido un<br />

fuego para hacer el té. Yo me encargué de encenderlo y de repente llegó un avión<br />

y bombardeo cerca de donde estábamos. Todas huyeron hacia los árboles para<br />

cobijarse, yo quedé para apagar el fuego. Emprendimos camino hacia Tifariti a<br />

pie y corriendo entre bombardeos, yo llevaba a mi hijo pequeño en los brazos y el<br />

otro colgado en la espalda y corriendo. Nos persiguieron hasta llegar a Birlehlu.<br />

Mi marido Lejlifa Amalin fue herido en el bombardeo de Guelta 114 , no teníamos<br />

ni zapatos ni chanclas, ni vestimenta, ni comida, ni agua. Gbeila Hamdi Abdala.<br />

Después del primer bombardeo, como en otras zonas bombardeadas, la población civil<br />

se escondió en cuevas, bajo árboles o trincheras construidas de maleza para ocultarse de<br />

los aviones.<br />

Cocinábamos de noche. Los niños cuando escuchaban los aviones corrían a esconderse.<br />

Escuchábamos que había fallecidos pero nosotros nunca vimos, cada<br />

uno estaba oculto, no salíamos por miedo. Cuando fue el primer bombardeo,<br />

yo estaba jugando pero corrí y me subí a un árbol. Vi a mi madre con la mano<br />

blanca, porque estaba haciendo pan, corriendo con el niño hacia la montaña yo<br />

me quedé tieso en el árbol. Bachir Lehbib Hachem.<br />

Según los testimonios de los sobrevivientes, la zona de campamento de la población se<br />

encontraba en la ribera del río. En la parte norte de Guelta, a varios kilómetros, estaba el<br />

puesto de administración del ejército español y de Tejados y Cubiertas. Había pequeñas<br />

guardias del Frente POLISARIO repartidas en las montañas en la zona pero, como en<br />

otros lugares, el campamento de la población no tenía guardias ni había presencia militar.<br />

Al día siguiente del bombardeo, yo, mi madre, la niña y el niño que tenía una<br />

semana subimos a la montaña y dormimos allí. Como no hubo bombardeo mi<br />

madre me dijo: baja y suelta las cabras. Tenía un perro que nos cuidaba, solté las<br />

cabras y cuando iba a la mitad de camino hacia la montaña, empecé a oír el ruido<br />

de los aviones que sobrevolaban y salí corriendo hacia el tronco de un árbol. Me<br />

escondí en una piedra con el perro, soltaron unas ráfagas y una bomba cayó, el<br />

perro murió y yo me salvé. Cuando la bomba explotó oí el ruido de metrallas que<br />

al explotar la bomba se desplazaban en el aire. Mi madre pensó que seguramente<br />

estaba muerto, así que mandó a un señor a buscarme hasta que vio el perro muerto,<br />

cuando se acercó al perro yo le grité, me cogió de la mano y me llevó con mi<br />

madre. Bachir Lehbib Hachem.<br />

114 Su marido se encontraba en la entrevista, y pudo apreciarse una cicatriz en la espalda que señala como<br />

consecuencia de las heridas producidas en el bombardeo.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!