09.05.2013 Views

Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932

Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932

Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

de sobremanera <strong>en</strong> los sectores intelectuales de la Universidad de ese <strong>en</strong>tonces; no<br />

extraña el efecto ejercido por este tipo de discursos <strong>en</strong> la m<strong>en</strong>talidad no solo de<br />

médicos, sino además de juristas.<br />

<strong>El</strong> sector gubernam<strong>en</strong>tal se adscribió a esta interpretación, pues se ajustó a<br />

sus pret<strong>en</strong>siones de hegemonía. Los saberes médico y jurídico funcionaron creando<br />

los criterios legitimadores de lo anterior; así, las figuras del delincu<strong>en</strong>te y el criminal<br />

parecieran haber sido construidas, de tal manera que como expresiones de la<br />

viol<strong>en</strong>cia <strong>social</strong>, se insertaron como verdaderas am<strong>en</strong>azas al ord<strong>en</strong> y la paz <strong>social</strong>,<br />

pero al marg<strong>en</strong> del contexto de una sociedad marginada y empobrecida. La<br />

concepción del delito fue reformulada d<strong>en</strong>tro de una visión biologicista: no era solo<br />

el delincu<strong>en</strong>te sino los oríg<strong>en</strong>es del mismo, que al ser mostrados por la nueva<br />

ci<strong>en</strong>cia, definieron también los mecanismos para <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tarlo. 383<br />

4.3. La concepción del delincu<strong>en</strong>te a partir del modelo de la ci<strong>en</strong>cia<br />

médica de la época.<br />

Los avances <strong>en</strong> microbiología y patología fueron asimilados a fin de<br />

interpretar este f<strong>en</strong>óm<strong>en</strong>o <strong>social</strong>. Tanto el delincu<strong>en</strong>te como el criminal fueron<br />

considerados parte de una <strong>en</strong>fermedad <strong>social</strong>, la cual había que eliminar. 384 Esta<br />

"La sociedad <strong>en</strong>ferma: Higi<strong>en</strong>e y moral <strong>en</strong> España <strong>en</strong> la segunda mitad del siglo XIX y principios<br />

del XX", p. 1097.<br />

383 «Ninguna clase de hombres se halla más a cubierto que está; y ninguna, sin embargo, es más<br />

terrible para la moral pública. Su imperio señala la proximidad de una crisis política, <strong>social</strong> o<br />

financiera.» Ver: La Universidad, Serie V. San <strong>Salvador</strong>, mayo de 1895, NUMERO 9, ―Biología y<br />

criminología‖, p. 386.<br />

384 ―Teoría celular. Desde los trabajos de Virchow, la teoría celular, fundada <strong>en</strong> hechos que la<br />

observación pone de manifiesto, ha llegado a ser una de las principales verdades fundam<strong>en</strong>tales de<br />

la ci<strong>en</strong>cia biológica… La célula puede considerarse como el individuo <strong>social</strong>… La sociedad celular<br />

se regula por leyes, por principios a los que debe su estabilidad, su armonía y su progreso‖. En:<br />

Darío González, Principios de Filosofía Positiva. Lecciones arregladas para los alumnos del Instituto nacional<br />

c<strong>en</strong>tral de Guatemala, pp. 280-282. <strong>El</strong> imaginario de la higi<strong>en</strong>e <strong>en</strong> el contexto de la misión de los<br />

cuerpos policiales se <strong>en</strong>lazaron de manera estratégica, como se ve <strong>en</strong> este texto de la época: ―La<br />

policía es para el cuerpo <strong>social</strong> lo que la higi<strong>en</strong>e para el hombre: evitar la propagación de los vicios<br />

y la comisión de los delitos es su más elevada consigna‖. En: Diario Oficial. NÚM. 222 Año 1, ―Los<br />

Ladrones‖, San <strong>Salvador</strong>, 5 de Octubre, 1875, p. 1. Las políticas del Estado fueron interpretadas<br />

desde el modelo de la salud, como bi<strong>en</strong> se ve <strong>en</strong> este texto: ―Los pueblos no pued<strong>en</strong> ser gobernados<br />

<strong>en</strong> tiempo de trastorno como <strong>en</strong> pl<strong>en</strong>a paz, del mismo modo que el hombre <strong>en</strong>fermo debe<br />

someterse a un régim<strong>en</strong> distinto del usado <strong>en</strong> estado de perfecta salud‖. Ver: Diario Oficial, NÚM. 234-<br />

Año 1, ―Estado de Sitio‖, San <strong>Salvador</strong>, 19 de Octubre de 1875, p. 2. Nota: <strong>en</strong> cursiva es mía.<br />

204

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!